En los últimos días nuestros héroes habían tenido una agenda demasiado apretada. Entre las tareas diarias, las largas sesiones de estudio y el tema recurrente de las residencias, nuestros héroes apenas tenían tiempo para ellos mismos. Incluso nuestro peliverde preferido se sentía algo agobiado por todos los deberes que se les asignaba en clase.

En la habitación del peliverde (7:00 pm)

Izuku: A ver... (El peliverde tenía una montaña de libros sobre su escritorio) "Halla la ecuación de la elipse que pasa por el punto (2,1) y que es tangente a la recta 2x-3y+12=0" (Dijo el peliverde analizando el problema) Rayos... esto sí que va a ser largo... (Dijo el peliverde suspirando cansado) Suerte que apenas es sábado...

El chico estaba perdido en sus pensamientos hasta que el tono de su celular lo sacó del trance en el que estaba inmerso. El peliverde tomó su celular y notó que el contacto era el de su madre, el pecoso se apresuró a contestar.

En la llamada

Izuku: Hola Mamá. ¿Cómo has estado? (Preguntó el peliverde alegre)

Inko: Hola, hijo. Muy bien, cariño, gracias por preguntar. Disculpa que te haya hablado a esta hora, espero no estar interrumpiéndote

Izuku: Para nada, mamá, estoy libre. Dime que puedo hacer por ti, mamá. (Dijo con un tono amable)

Inko: Tan solo quería preguntarte si crees que tus maestros te darían permiso de salir el día de mañana, Izuku. Estaba pensando en hornear un pastel de chocolate, tu favorito, por ser un día especial. (Dijo la mujer con una sonrisa)

Izuku: ¿Día especial? (Preguntó algo confundido)

Inko: Vamos, Izuku, no estés jugando. ¿No sabes qué fecha es mañana? (Preguntó incrédula)

Izuku: Déjame ver... (El chico volteó hacia su calendario colgado en la pared) Estamos a 14 de Julio... (El peliverde se quedó pensando unos instantes) ¡Mañana es mi cumpleaños! (Dijo el pecoso con algo de sorpresa) Que rápido pasó el tiempo...

*Nota: ¿A ustedes les ha pasado igual? A mí me pasó cuando cumplí años el mes pasado, fue como: "¿Ya solo falta una semana para que cumpla años?" :0

Inko: Ay, Izuku. No puedo creer que estés hablando en serio. Igual de despistado que tu padre (Dijo soltando una pequeña risa)

Izuku: Lo siento, mamá, estos días he tenido tantas cosas en la cabeza que se me había olvidado por completo (Dijo mientras se estiraba un poco) Pero ten por seguro que mañana estaré en casa, no pienso perderme mi preciado pastel de chocolate (Soltando una pequeña risa)

Inko: Perfecto (Dijo la peliverde con un tono alegre) Entonces tendré todo listo para cuando llegues. No quiero quitarte más tu tiempo, así que te dejo en paz, Izuku. Cuídate, cariño, te quiero

Izuku: Muchas gracias, mamá. Yo también te quiero mucho (Dijo el chico mientras esbozaba una sonrisa)

Fin de la llamada

Izuku: Será una larga noche... (Viendo la cantidad de trabajo que tenía por hacer)

El peliverde se pasó las siguientes 4 horas realizando sus deberes pendientes, fue cansado, pero por lo menos tendría el domingo libre para pasarlo con su madre. Era casi media noche por lo que el pecoso se fue a acostar y se quedó dormido enseguida debido al cansancio.

Al día siguiente (Cerca de las 8:00 am)

Un nuevo día había llegado para el país del Sol Naciente. Los primeros rayos de luz del día adornaban al firmamento con bellos tonos color bermellón. El clima era fresco y los pajarillos con su canto llenaban el apacible silencio de la mañana. Una ruidosa alarma empezó a sonar en bucle, señal de que era hora de levantarse.

Izuku: Voy... (El peliverde despertó y apagó la alarma con algo de pesadez) Bueno... manos a la obra.

El chico se levantó de un salto para comenzar su día. Después de una serie de calentamientos y estiramientos, el peliverde se dispuso a realizar su rutina matutina. Después de terminar de ejercitarse, el pecoso fue al baño a darse una ducha para quitarse el mal olor, después procedió a vestirse. Era temprano, pero Izuku llevaba tiempo de no visitar a su madre, por lo que quería estar el máximo tiempo posible con ella. Un pantalón de mezclilla color azul marino, una camisa polo color rojo vino y gris con detalles en blanco en las mangas y sus clásicas zapatillas rojas fue el outfit escogido por Izuku.

Izuku: No está mal... (Dijo mientras se veía en el espejo)

El peliverde se perdió en sus pensamientos un momento. El día de hoy cumplía 16 años, estaba en la escuela en la que siempre quiso estar, conoció a buenos amigos, pero, ¿dónde estaba hace un año? Si le hubieran dicho hace un año todo lo que pasaría en U.A., que conocería a All Might y que este último lo reconocería como su sucesor, probablemente le hubiese parecido demasiado fantasioso.

Izuku: Que año más ajetreado. (El peliverde tan solo esbozó una sonrisa) Bueno, es hora de irse (Saliendo de su habitación)

El pecoso llegó a la sala en común, pudo notar como no estaba nadie despierto, era normal. El día anterior toda la clase se había quedado despierta hasta tarde viendo un maratón de películas de terror para aprovechar su noche de sábado. El peliverde no perdió su tiempo y fue directamente a la oficina de Aizawa para explicarle su situación.

En la oficina de Aizawa

Izuku: Y es por eso que quería saber si era posible que me diera permiso de salir el día de hoy, Aizawa-sensei. (Terminando su explicación) Sé que usted nos ha dicho que intentemos evitar cualquier distracción para centrarnos en el tema de las residencias, pero solo será por esta vez. Prometo regresar antes de que oscurezca. (Dijo el peliverde suplicante)

Aizawa: Ciertamente les había dicho que intentaran no salir de la academia si no era por algo de suma importancia... (El pelinegro lo pensó unos momentos) Es una fecha especial así que no hay nada que hacer... Bien, tienes mi autorización. Solo procura no llegar después de las 9:00 pm, mañana tenemos clases. (Con su tono de siempre)

Izuku: ¡Si, muchas gracias, Aizawa-sensei! (Dijo el peliverde animado) ¡Con su permiso! (Encaminándose a la salida)

Aizawa: ¡Ey, Midoriya! (Llamando la atención de su alumno) Muchas felicidades, que disfrutes del día.

Izuku: ¡Si, gracias! (Mientras sonreía ampliamente)

El chico fijó rumbo hacia su casa en Musutafu. No tenía prisa así que su paso era calmado. Después de tomar el metro, bajarse en la estación correspondiente y caminar por unos minutos, el chico ya estaba a un par de calles del apartamento.

Inko: ¿Huh? (La peliverde pudo escuchar desde la sala como alguien tocaba su puerta) ¡Voy, un segundo por favor! (La mujer se levantó y fue a abrir la puerta) ¿Si?...

Izuku: Hola, mamá. (Dijo el chico con una sonrisa en el rostro)

Inko: ¡Izuku! (La mujer se alegró de ver a su hijo y se apresuró a abrazarlo) Me hace tan feliz que te hayan dado permiso de venir.

Izuku: También me alegra poder estar aquí, mamá. (Dijo el peliverde correspondiendo el abrazo) Espero que este año haya muchos regalos para mí, me los merezco (Dijo el peliverde bromeando)

Inko: Claro, Izuku (Dijo soltando una pequeña risa) Te compraré la última colección de muñequitos de All Might.

Izuku: ¡Mamá no son muñequitos!... Son figuras de acción.

Inko: Si, claro (Dijo la mujer con una sonrisa en el rostro)

Ambos entraron a la casa e Izuku tomó asiento en el sofá de la sala, ya había pasado algo de tiempo desde que el pecoso se mudó a los dormitorios de U.A., pero en su casa todo se encontraba igual como el día que se fue.

Inko: Aquí tienes, cariño (Mientras le daba una taza con té verde)

Izuku: Muchas gracias, mamá (Tomando el té con cuidado de no quemarse)

Inko: Me sorprendió que llegaras tan temprano, Izuku. Aún no he preparado nada (Dijo mientras se dirigía a la cocina)

Izuku: Lo siento si llegue de improviso, solo que hace mucho que no venía y quería pasar el máximo tiempo posible aquí. (Mientras le daba un sorbo a su bebida)

Inko: Ya veo (Dijo la mujer sin perder la sonrisa en el rostro) Y dime, ¿tus amigos te felicitaron en la mañana? (Mientras sacaba un par de sartenes y cacerolas.

Izuku: Cuando salí de mi habitación no vi a nadie despierto, supongo que están cansados por haberse desvelado ayer. La verdad no creo que nadie se acuerde que hoy era mi cumpleaños, quiero decir, ni yo lo recordaba (Dijo soltando una pequeña risa nerviosa)

Inko: Tal vez más tarde te envíen un mensaje de felicitación, cariño. No creo que sean tan despistados como tú, Izuku.

Izuku: Puede ser (Dijo el peliverde sonriendo)

Las siguientes horas el peliverde siguió conversando con su madre, en adición a eso, la ayudaba en lo que podía en la cocina. Su madre prepararía Katsudon, su platillo favorito, por ser su día especial, además de hornear el pastel de chocolate que le había prometido a su hijo. Después de un tiempo, por fin estaba todo listo.

Inko: Bueno, espero que te guste, provecho, Izuku (Mientras le servía un gran plato al pecoso)

Izuku: Muchas gracias, mamá. (El chico no se lo pensó un segundo y probó el platillo) ¡Está delicioso! Es mejor de cómo lo recordaba (Dijo el peliverde mientras devoraba su plato)

Inko: Al parecer no he perdido el toque (Dijo la mujer con una sonrisa)

En ese momento el celular del peliverde, que estaba en su bolsillo, vibró, señal de que un nuevo mensaje había llegado. El peliverde se tomó un momento para ver de qué se trataba.

Inko: Izuku, ¿qué te he dicho de usar el celular en la mesa? (Dijo la mujer dándole a su hijo una mirada de molestia)

Izuku: Lo siento, mamá, es que me llegó un mensaje. Solo será un segundo (La peliverde aceptó mientras soltaba un suspiro)

El peliverde vio el mensaje: "Muchas felicidades, Midoriya-san. Espero que disfrutes de este día con tus seres queridos y que cumplas muchos años más. Eres una persona increíble, Nunca cambies" Era corto, pero por alguna razón se alegró mucho al leerlo. Aunque él tenía muy claro "la razón". El remitente.

Izuku: Yaoyorozu-san... (El peliverde esbozó una sonrisa de forma inconsciente y contestó con un rápido mensaje de agradecimiento) Listo (Mientras guardaba su teléfono en el bolsillo)

Inko: ¿Quién era, Izuku? (Preguntó la mujer con curiosidad)

Izuku: Era un mensaje de felicitaciones. Una amiga se acordó que hoy era mi cumpleaños (Dijo el peliverde alegre)

Inko: Te lo dije, una madre siempre tiene razón, Izuku (Dijo orgullosa) Aunque... ¿seguro que se trata de una amiga? Desde que leíste ese mensaje no has dejado de sonreír. De haber sabido que ya tenías novia te hubiera dicho que podías invitarla, Izuku

Izuku: ¡Mamá, no c-confundas las cosas, solo es una amiga! (Dijo el peliverde nervioso)

Inko: Mmm... Te creeré. Solo por ahora (Dijo mientras reía)

Ambos peliverdes siguieron con su comida con tranquilidad. El peliverde le contaba a su madre todo lo que pasaba en U.A. y como era su vida en los dormitorios. Le platicó sobre sus amigos y le prometió que un día los llevaría a casa para que pudiera conocerlos. El peliverde se sentía muy cómodo de estar con su madre, sin duda extrañaba el estar en casa. Antes de que se diera cuenta la tarde/noche había llegado.

Inko: Cariño, ¿a qué hora tienes que irte? (Mientras veía el reloj colgado en la pared)

Izuku: Aizawa-sensei me dio autorización hasta las 9:00 pm. Así que tengo unos... (Viendo la hora en su teléfono celular) 30 minutos para que salga el último tren (Eran cerca de las 8:00 pm)

Inko: Me encantaría que te quedaras más tiempo, cariño, pero no quiero que tengas problemas con tus profesores. Creo que lo mejor es que regreses a U.A. Izuku.

Izuku: Está bien, mamá. (El peliverde aceptó sin quejas)

Inko: Bien (Mientras le regalaba una sonrisa a su hijo) Pero antes de que te vayas... (La mujer se retiró un momento de la sala y fue a su habitación) El cumpleañero no puede quedarse sin su obsequio (La peliverde traía en sus manos una caja envuelta en papel de regalo)

Izuku: Mamá, no tenías que hacerlo (El peliverde tomó el presente)

Inko: Anda, ábrelo, Izuku. (Dijo la mujer sin dejar de sonreír)

El peliverde procedió a quitar el papel que envolvía la caja con cuidado de no hacer mucho desorden y cuando abrió el paquete pudo ver una linda chaqueta de cuero de color café.

Izuku: ¡Mamá, está genial! (El pecoso se apresuró y se la probó) ¡Y me queda perfecto!

Inko: Me alegra que te haya gustado, Izuku. Sé que no es mucho, pero es un regalo que te doy con mucho cariño. (Dijo la mujer con una sonrisa)

Izuku: Me encantó, mamá. Muchas gracias (El peliverde se acercó a su madre y la abrazó, dicho gesto fue correspondido por la mujer)

Inko acompañó a Izuku hasta la puerta para despedirlo como era debido

Izuku: Tengo que irme, pero prometo que vendré a verte más seguido, mamá. (Esto último le sacó una sonrisa a su madre) Muchas gracias por todo, ¡Nos vemos, mamá! (El peliverde empezó a caminar hacia la estación de tren más cercana mientras se despedía de su madre con la mano)

Inko: ¡Mucho cuidado en el camino, Izuku! (Exclamó su madre)

El peliverde empezó a alejarse y su silueta empezó a hacerse cada vez más pequeña. Inko veía esto y no pudo evitar que un par de lágrimas brotaran de sus ojos.

Inko: Míralo, Hisashi... Nuestro pequeño ya es todo un hombre... Que rápido crecen, ¿verdad? (Dijo con una sonrisa nostálgica) Tu chaqueta le quedó perfecta, de tal palo tal astilla, ¿no?...

El peliverde llegó a la estación y tomó el tren que lo levaría a U.A., ya estaba cerca de los dormitorios y aún faltaban unos 20 minutos para las 9:00 pm por lo que no tendría problemas con Aizawa.

Izuku: Fue un buen día. Me divertí mucho (Dijo el peliverde alegre) Aunque... (El peliverde perdió su sonrisa por un momento)

Algo que tenía a Izuku un poco triste fue el hecho de que solo un par de personas se había acordado de felicitarlo: Yaoyorozu y All Might. Este último le había enviado un mensaje en la tarde y le prometió que pronto saldrían a festejarlo como era debido. Pero fuera de eso, ninguno de sus amigos parecía haberse molestado en hacerlo.

Izuku: ¿Huh? (El peliverde llegó a los dormitorios, pero le llamó la atención que todas las luces dentro del edificio se encontraban apagadas) ¿Habrán salido? (Se preguntó internamente el chico)

El pecoso caminó hacia la puerta de la entrada principal, cuando la abrió todo estaba completamente oscuro, parecía que en verdad no había nadie en el lugar.

Izuku: Veamos... (El peliverde creó una pequeña llama en su dedo índice para alumbrar un poco su vista) ¿Dónde está el interruptor?...

Cuando el peliverde por fin pudo encontrar el apagador y lo presionó para que la luz se hiciera presente....

Clase A: ¡SORPRESA! (Exclamaron todos al mismo tiempo)

El peliverde se asustó un poco al ver cómo es que todos sus amigos siempre estuvieron ahí, esperando el momento preciso para salir de su escondite. El peliverde observó con un poco más de detenimiento el lugar: Sobreritos de fiesta, algunos bocadillos en una mesa, con un pastel incluido, y una gran pancarta colgada que decía:

Izuku: "Feliz Cumpleaños Izuku Midoriya" (El pecoso se había quedado sin palabras) Chicos... no lo olvidaron.

Jiro: Pero claro que no lo olvidamos. ¿De verdad creías que lo habíamos hecho? (La peli-violeta se acercó con el peliverde) ¿Quién crees que somos? (Dándole un pequeño golpe en el hombro) Todo estaba fríamente calculado

Iida: ¡Si, teníamos planeado esto desde hace un par de días! (Dijo el chico de anteojos con una sonrisa)

Kirishima: ¡No podíamos dejar pasar tu cumpleaños hermano! (Dijo mientras rodeaba el cuello del peliverde con su brazo izquierdo)

Izuku: Muchas gracias... (El peliverde se alegró demasiado al oír todas estas palabras)

Mina: ¡Un abrazo al cumpleañero!

Todos, menos Bakugo obviamente, se acercaron hacia el peliverde y le dieron un cálido abrazo grupal para felicitarlo. El pecoso no cabía en sí mismo de la felicidad, de verdad tenía grandes amigos que lo querían.

Izuku: Espero que no nos metamos en problemas con Aizawa-sensei (Dijo el peliverde algo preocupado mientras comía una rebanada de pastel)

Jiro: Tranquilo, Izuku. La vice-presidenta utilizó sus influencias para que Aizawa-sensei nos diera permiso de hacer esta fiesta.

Yaoyorozu: Bueno, en realidad se trata de una "pequeña reunión", mientras no hagamos nada alocado no tendremos problemas. (Dijo la azabache mientras comía su respectiva rebanada de pastel)

Izuku: Así que tú fuiste la que hizo que esta fiesta sorpresa fuera posible, Yaoyorozu-san (Dijo el pecoso con una sonrisa)

Yaoyorozu: Bueno, no hice todo yo, todos ayudaron mucho. (Dijo la azabache también con una sonrisa)

Jiro: Ella fue la que organizó todo esto, debiste haberla visto: "No podemos dejar que Midoriya-san pase su cumpleaños sin que tenga la fiesta que se merece", "¿Cuál crees que sea el mejor que le podemos dar a Midoriya-san" (Imitando a Yaoyorozu) Fue un calvario

Yaoyorozu: ¡Jiro! (La chica ahora se encontraba muy avergonzada y con un sonrojo en el rostro)

Izuku: Y-ya veo. Muchas gracias, Yaoyorozu-san (Dijo el peliverde con una gran sonrisa)

Yaoyorozu: N-no tienes que agradecer, Midoriya-san (Correspondiendo la sonrisa con un ligero rubor en las mejillas)

Kaminari: Oye, Midoriya, no te había visto con esa chaqueta antes. Se ve genial, ¿dónde la compraste? (Preguntó el rubio que se había acercado al peliverde)

Izuku: ¿Esto? Fue el regalo de cumpleaños que me dio mi mamá. (Dijo el peliverde con una sonrisa)

Jiro: Tu madre tiene buen gusto, Izuku.

Kirishima: Hablando de regalos... ¡Chicos, vengan, es hora de dárselo!

Izuku estaba algo confundido, no entendía muy bien el porqué, pero todos sus amigos se empezaron a juntar y se dirigieron hacia él.

Uraraka: Es obvio que una fiesta de cumpleaños no está completa si no hay regalos, así que entre todos cooperamos para poder comparte algo que te gustara, Izuku-kun. Así que... ¡Sorpresa!

La castaña sacó una caja algo grande, que estaba envuelta en papel de regalo, de quien sabe dónde y se la entregó al peliverde. Era el obsequio que toda la clase A le daba a su amigo.

Izuku: Chicos, no tenían que hacerlo. Lamento haberlos hecho gastar por esto. (Dijo el chico algo apenado)

Kirishima: ¡No digas eso, hermano, anda ábrelo! (Dijo el pelirrojo animado)

Izuku: Bien, veamos... (El pecoso procedió a quitar el papel que envolvía su regalo) Esto es... ¡La figura de All Might de la nueva colección en la versión Jumbo! (Dijo el peliverde mientras sus ojos brillaban de emoción) ¡Está increíble! Chicos, de verdad muchas gracias, son los mejores (Dijo sonriendo)

(*Es el funko Pop de 10 pulgadas de All Might*)

Jiro: Sabíamos que te gustaría. Sin embargo, eso no es todo. (La peli-violeta sorprendió a Izuku con estas palabras)

La chica se retiró un momento de la sala ante la mirada de confusión de los presentes, la peli-violeta regresó casi enseguida, pero no venía con las manos vacías.

Jiro: Aún falta mi regalo. Feliz cumpleaños, Izuku (Dijo la chica mientras le acercaba el presente al peliverde)

Izuku: J-Jiro-san, esta es...

Jiro: Necesitas una para poder practicar cuando no tengamos clase. Es de buena calidad así que tendrás guitarra para rato.

Izuku: Pero, Jiro-san, esta guitarra acústica es tu favorita, no puedo aceptarla, es demasiado. (Dijo el peliverde algo preocupado)

Jiro: Izuku, en Japón hay miles de este modelo, pero... en el mundo solo tengo un mejor amigo. (Sonriendo)

Izuku: Jiro-san... Gracias (El peliverde sonrió ampliamente)

Jiro: No tienes que decirlo, sé que soy la mejor. Pronto debemos que tener una clase para que puedas estrenarla

Izuku: Claro que si, Jiro-san.

Sero: Con ese regalo siento que el nuestro no es tan bueno... (Dijo el chico algo deprimido)

Kaminari: Tienes razón... Me siento humillado. (Todos rieron un poco al oír esto)

Jiro: Pero aún falta uno (Dijo la chica sorprendiendo a todos)

Izuku: ¿Uno más? ¿Compraste algo más, Jiro-san? (Preguntó el peliverde con curiosidad)

Jiro: Yo no. (La chica solo volteó a ver a cierta azabache)

Yaoyorozu: Bueno, es verdad que todos cooperamos para comprar la figura de All Might, pero Jiro y yo quisimos darte algo más. Así que... (La chica sacó una caja que tenía oculta desde el inicio Sorpresa. (Dijo la azabache con una hermosa sonrisa en el rostro)

El peliverde tomó la caja, al igual que todos los obsequios que había recibido en el día, estaba envuelta en papel de regalo. Era una caja rectangular, el chico levantó la tapa de la misma y ahí yacía su regalo.

Yaoyorozu: Pensé que sería bueno darte algo que puedas usar todos los días. Espero que te guste el diseño, elegí ese color porque creí que te quedarían muy bien. Pero si no te gustan puedes devolvérmelas y las cambiaré.

Izuku: ¡Yaoyorozu-san, están increíbles! (Este comentario hizo que la azabache se alegrara mucho) Pero, ¿no gastaste mucho por ellos? (De nuevo el peliverde se preocupó un poco pues no quería molestar a sus amigos)

Yaoyorozu: Para nada, Midoriya-san. Espero vértelos puestos algún día (Dijo la chica sin dejar de sonreír)

Izuku: ¡Si, de verdad muchas gracias, Yaoyorozu-san! (El peliverde estaba muy contento con sus obsequios)

Los chicos querían seguir festejando un poco más de tiempo, pero ya era algo tarde y debían asistir a clases al día siguiente. Los chicos recogieron todo y tiraron la basura para no dejar rastro de "su pequeña reunión". El peliverde tenía ahora en sus manos muchos obsequios y no podía con todos ellos, por lo que Yaoyorozu se ofreció a ayudarlo para llevar todo a su habitación.

Izuku: Nunca me esperé una sorpresa así, lo ocultaron demasiado bien (Mientras caminaba hacia su habitación con su guitarra y su figura gigante de All Might, una en cada brazo)

Yaoyorozu: Me declaro culpable de eso, les dije a todos que lo mejor era hacer algo inesperado. Por suerte nunca nos descubriste (Dijo soltando una pequeña risa) Midoriya-san... ¿Te divertiste?

Izuku: Demasiado. (Respondió el chico al instante) Fue uno de los mejores cumpleaños que he tenido. De verdad muchas gracias por haber hecho esto para mí, Yaoyorozu-san (El peliverde volteó a ver a la azabache directamente a los ojos y le regaló una sonrisa)

Yaoyorozu: N-no tienes que agradecer, Midoriya-san. (La chica se había puesto algo nerviosa a la par que un pequeño sonrojo se hacía presente en su rostro) Estoy muy feliz de que te haya gustado la sorpresa (Dijo la azabache mientras esbozaba una hermosa sonrisa)

Izuku: S-si. (Ahora fue turno del peliverde de ponerse rojo) P-por cierto, perdón que te haya molestado en pedirte ayuda con las cosas (Los chicos ya estaban delante de la puerta del peliverde)

Yaoyorozu: No tienes que preocuparte, lo hago con gusto. Además, me queda de paso a mi habitación. (Respondió con un tono amable)

El peliverde abrió la puerta y dejo la figura de All Might sobre su escritorio y la guitarra sobre la cama. La azabache se quedó en la puerta esperándolo para poder darle sus zapatillas.

Izuku: Muchas gracias, Yaoyorozu-san (Tomando la caja que sostenía la azabache)

Yaoyorozu: De nada, Midoriya-san.

Izuku: Espero que mañana Aizawa-sensei no tenga planeado hacernos sufrir en clase con nuevos temas de cálculo, no sé si pueda poner caso con el sueño que tengo (Dijo el peliverde bostezando). Aunque valió la pena haberse quedado despierto hasta tarde hoy (Dijo el peliverde con una gran sonrisa)

Yaoyorozu: Si, tienes razón (Dijo la azabache con una sonrisa igual de grande) Oye, Midoriya-san...

Izuku: ¿Si?

Yaoyorozu: Creo que aún faltan un par de minutos antes de que sean las 12:00 am, así que... aún estamos en tu cumpleaños, ¿verdad? (La chica estaba viendo hacia el suelo)

Izuku: Supongo que si... ¿por qué lo dices, Yaoyorozu-san? (El peliverde estaba algo confundido)

Yaoyorozu: Eso quiere decir que aún tengo tiempo para darte un último regalo sorpresa...

Izuku: ¿Regalo sorpresa? (El chico estaba sorprendido, tal parecía que nunca iban a terminar los obsequios) Pero, Yaoyorozu-san, ya es demasiado, no tienes que gastar más en mí (Dijo el peliverde que se sentía mal de "aprovecharse" de sus amigos)

Yaoyorozu: Este obsequio es pequeño, prometo que no es para nada costoso. (Dijo la chica para calmar al pecoso)

Izuku: E-está bien...

Yaoyorozu: Pero tienes que cerrar los ojos, sino no sería un regalo sorpresa (Dijo la azabache mientras miraba hacia ambos lados)

Izuku: Supongo que no puedo argumentar nada contra esa lógica. ¿Así está bien? (El peliverde hizo caso y cerró los ojos)

Yaoyorozu: Si, solo que no puedes abrirlos hasta que te lo dé, ¿entendido? (El peliverde tan solo asintió) Bien, ahora extiende las manos...

Izuku: ¿Así? (El pecoso siguió haciendo caso a las indicaciones de la azabache) Yaoyorozu-san, ¿de verdad no es mejor que abra los...

El peliverde sintió de la nada como es que algo húmedo tocaba su rostro, Izuku abrió los ojos enseguida, los labios de Yaoyorozu posaban sobre su mejilla derecha. El peliverde estaba intentando asimilar lo que estaba ocurriendo, el pecoso se puso rojo como un tomate, sin embargo, no era el único, la azabache estaba igual de sonrojada. Después de un par de segundos, que se hicieron eternos, la chica se apartó. Ninguno quería ver a los ojos al otro por la vergüenza

Yaoyorozu: Y-yo... ¡Nos vemos mañana, Midoriya-san! (La chica salió corriendo del lugar, de los nervios la azabache había creado inconscientemente algunas muñecas Matrioshkas, estas estaban tiradas por el suelo)

El peliverde se quedó quieto con un gran sonrojo y realmente confundido, sin embargo, no podía negar que aquello lo había puesto realmente feliz, el chico ahora se encontraba parado en el marco de su puerta con una sonrisa de oreja a oreja.

Izuku: Realmente este fue uno de los mejores cumpleaños... 

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Hola chicos, ¿cómo se encuentran? Espero que de lo mejor posible :D Muchas gracias si llegaste hasta esta parte. Aquí les traigo el siguiente capitulo del fan fic, esta vez tarde un poco más que las veces anteriores. La Uni me ha exigido la mayoría de mi tiempo y no he tenido casi nada de tiempo para hacer otra cosa que no sea estudiar o hacer tareas pendientes :(  Lamentablemente Creo que esta dinámica de no poder subir capitulos seguido seguirá por un tiempo más. Estoy en el último mes para acabar mi 1° semestre en la Universidad y creo que no tendré tiempo para hacer otra cosa que no sea centrarme en mis estudios, así que tal vez no los vea en un buen rato, intentaré traerles un capitulo en un par de semanas, pero no les puedo prometer nada, lo lamento. 

Este capitulo lo saqué porque pensé que sería una buena idea debido a que los tiempos parecían encajar con la fecha del cumpleaños de Izuku (Es en Julio, se supone que es su segundo semestre así que deben estar por dicha fecha) Y además porque no quería irme sin poder dejarles un "pequeño" capitulo para que pudieran leer : ) Este lo hice en pequeños descansos que tenía y cuando la maestra no se conectaba a clases xD, puede que parezca algo apresurado, sin embargo, espero que les guste el resultado. 

No tengo nada más que decirles y ustedes no están aquí para oír mis lloriqueos, así que yo los dejo y espero verlos en la próxima. Cualquier voto o comentario se agradece.  Que tengan un gran día y cuidense ustedes y sus familias. Saludos! :D