Pareja a tratar: MadaTobi [Senju]

Personajes que la conforman: Madara Uchiha y Tobirama Senju.

Categoría: Yaoi ( chico x chico )

Advertencias: Lenguaje altisonante.

Localización: UN ( Universo Naruto )

Nombre del capitulo: El primero.

Situación:

🔥

||El primero.||

Una ligera elevación de voz en conjunción con el ceño fruncido de Hashirama bastaron para callar a ambos shinobis. Era difícil acabar con su paciencia pero cuando se lo proponían el shodaime podía ser bastante intimidante.

-¡Es imposible tratar nada con ustedes! ¡Siempre peleando!

-Pero...

-Silencio ototou y ni una palabra Madara. Estoy harto. - las bifurcaciones de madera desaparecieron, dejando libres a los ninjas que aun así no se atrevieron a moverse por respeto o decencia. Los orbes serenos del castaño se enfocaron en los rostros frente a el con autoridad, al tiempo que los observaba de manera alternada.

-Voy a salir y para cuando vuelva no quiero escuchar ninguna discusión ¿Entendido?

-¡¿Me dejaras con este?! - gruñeron ambos con indignación antes de escuchar un portazo furioso.

-¡Ninguno saldrá de ahí hasta que arreglen sus problemas! - la entonación de esa última orden les dejo claro que iba en serio, mucho mas que una trampa de madera o un regaño. -; Volveré en un rato, por favor, inténtenlo.

Un absoluto e incomodo silencio lleno la oficina luego de que los pasos del Senju mayor dejaran de resonar por el pasillo hasta ser roto por quejas.

-Aniya tonto.

-Maldito Hashirama.

Se miraron unos segundos, suspirando. Sentían deseos de arrancarse la cabeza sin embargo no parecía conveniente luego de semejante advertencia.

Transcurrido un cuarto de hora cada quien estaba en lo suyo, digase leer papeles archivados, sin cruzar palabra. El Uchiha se levanto, abriendo las ventanas bajo la atenta mirada carmesí.

-Solo tengo calor, no voy a escaparme.- aclaro con cierta molestia, sacándose el calor con movimientos oscilantes en su prenda superior, usando el cuello alto para abanicarse.

-No me importa lo que hagas o dejes de hacer.- musito regresando la vista a su lectura.

-Lo que digas.- rodó los ojos, amarrando en una coleta su largo cabello rebelde y mirando con sorna las expresiones tranquilas del menor.

-¿Se te perdió algo? - pregunto el albino harto de sentir sobre si la completa atención, casi asfixiante.

-No, nada.- el hombre llevo sus manos al escritorio para recargarse, inclinando su cuerpo con burla hacia la cara del otro quien bajo el pergamino para fruncir el ceño.- solo que eres bastante gruñón. Ahora comprendo por que Hashirama me prefiere.

-¿Disculpa, imbécil? - el siseo salio de su boca como si se tratase de veneno, regulada unicamente por la obediencia a su preciado hermano.

-Que no tiene ningún chiste que compitas conmigo, yo siempre he sido el mejor y ambos sabemos que terminare convenciendo a Hashirama.

-Por si no lo notaste esto no es una competencia y, para que lo sepas, el me prefiere a mi porque soy su familia no como cierto loco obsesivo que se quedara sin lengua si sigue hablando de mi nii san.

-¿Y yo soy el loco obsesivo? Bueno, eso es problema tuyo. El punto aquí es que no quiero perder mi tiempo cuando llegue, así que solo se un buen chico y déjame hablar, rata albina.

-Tu no me das ordenes, Uchiha.- gruño levantándose para encararlo, ya con las manos listas para atacar.

-¿Quieres verlo Senju?

"Voy a salir y para cuando vuelva no quiero escuchar ninguna discusión ¿Entendido?"

-Tsk.

Sin querer romper la orden se separaron a unos metros de distancia, refunfuñando para volver a mirarse con odio.

-Rata albina.

-Cabeza de puercoespín.

-Intento de hombre.

-Afeminado.

-Aburrido.

-Loco.

-Secundario.

-¿Qué significa eso?- el peliblanco encarno una ceja sin entender el insulto, haciendo sonreír al personaje frente suyo.

-Es tu lugar, Senju. - Madara jugueteo con su mirada por la oficina, caminando en círculos al perímetro.-; Puede que seas el consejero pero siempre que hay un problema nuestro adorable hokage corre conmigo. Siempre ha sido y sera así, yo soy el primero.

-Que te de prioridad por la alianza no significa nada.- los brazos del más joven se cruzaron en su pecho, completando su semblante impasible.-; tus provocaciones estúpidas no conseguirán afectarme, Uchiha.

-Oh, no. No son provocaciones. Son pruebas Senju.- aclaro decidido, arrastrando intencionalmente la pronunciación del apellido en cuestión.- pruebas de lo que hablo. En pelea, en el campo, incluso con el tonto Shodaime yo siempre estaré primero, por que yo soy mejor que tu.

-¿Y tus afirmaciones sin sentido me deberían importar porque..?

-Por que cualquier cosa que tu hagas estará por debajo de mi.

-Uhm.- una pequeña risa burlona acompaño el monosílabo del Senju, que sonrió sin pizca de felicidad para no soltarle un golpe o explotar.- ¿Tan seguro estas?

-Lo afirmo. Cualquier cosa.- inspecciono un poco antes de encararlo de nueva cuenta.

-Bien.- Tobirama camino hasta la ventana, apuntando afuera.- Ve y dicelo a alguien a quien le importe.

-¿Te ardió Senju? Hagamos algo, veamos que hacen los aldeanos por los cristales, luego lo imitaremos, así te demostrare que lo hago mejor.

- Ja, ya quisieras. Trato.

Los adultos se pegaron lo necesario para poder asomarse por el marco de la ventana hasta ver una persona. Para su mala suerte, o no tan mala, lo único que lograron enfocar fue la imagen de una pareja de novios besándose furiosamente bajo la sombra de un árbol. Sus rostros se tornaron en una mueca de asco, devolviéndose al interior.

-Malditos mocosos de hormonas alborotadas.

-Si, ya no saben lo que es un motel.

-Mira que comerse así en plena calle...

Tres segundos después, sus rostros perdieron color, mirándose mutuamente. Habian hecho un trato.

-Senju...

-Ni loco voy a hacer eso contigo, Uchiha.

-¿Tienes miedo de que lo haga mejor? - pico sin pudor, sacandole ventaja a ese incidente.

-¿Estas orate?

-Puedo besar mejor que tu y lo sabes. Ah, pero no es sorpresa, debes ser pésimo.

-Pues Tari no dice lo mismo.

El Uchiha lo miro al escuchar el nombre de su novia o,mejor dicho,su ahora ex.Maldito Senju -; Pero que cabrón.

-Tu empezaste, ademas no sabia que estaban juntos hasta hoy.

-Da igual, supongo. ¿Y ahora que?

-¿Sobre...esto? Dejemoslo así.

-Un Uchiha no rompe su palabra.

-Un Senju menos.

-Pues entonces que sea rápido, no volveré a abrir la bocota.

-Más te vale.

El pelilargo se acerco ignorando la mueca de asco del albino que cerro los ojos, todo por su hombría y demostrar que era el mejor. Inclino el rostro, apenas rozando sus labios por unos segundos en que el otro se quedo estético. Al separarse de aquella cosa de nada,la risa del menor lo hizo enojar.

-¡¿De que carajos te ríes?!

-¿A eso le llamas beso? Pff, vaya "mejor".

-Por lo menos yo no quede quieto como piedra, ni siquiera sabes besar.

-Claro que lo se.

-Mentira, creo que con esto quedo claro que yo soy el mej- antes de que terminara, fue callado por la boca del otro que, contrario a su caricia fugaz, se torno en un acto salvaje casi instantaneamente.

Era un buen beso, debía admitirlo, pero Madara Uchiha no se dejaría ganar tan fácil, de modo que correspondió, empujando al menor hasta hacerlo golpearse contra el escritorio y que soltase un quejido. Metió su lengua por la cavidad del caucásico, encontrándose con la sorpresa de que este también sabia pelear una batalla por controlar en un beso francés.

Los movimientos se intensificaron, obligando a Tobirama a recargarse en el mueble trasero con una mano sin perder campo contra la boca invasora sobre la suya, que parecía querer devorarlo. El Uchiha presionaba excesivamente, sin embargo el tenia una mayor intervención puesto que este tipo de enlace era su especialidad con las parejas pasadas que estuvieron en su vida.

"Te tengo, Uchiha."

Las manos del pelilargo lo acercaron sujetando sus costados, casi al mismo tiempo que el llevaba su muñeca libre de actividad hasta la cabellera oscura para tirar con fuerza, rompiendo el amarre que su usuario hizo anteriormente y dejándolo caer con un gruñido de queja.

En venganza, supuso el, Madara dejo que cayera sobre el todo su peso, casi tirándolo de no ser por que se sujeto gracias a sus reflejos, apretando los hombros anchos del líder del clan rival, todo sin romper el beso con tintes húmedos, favorecidos por la temperatura de la habitación que parecía ir en aumento.

Ambos eran veloces, pese a esto, pronto el ojinegro se dio cuenta de que se estaban quedando cortos y llevo las manos en descendencia por el cuerpo del Senju menor. Si, era un idiota aburrido pero tenia una fisonomía tentadora y al parecer, también un gran conocimiento del arte óscular porque besaba con una técnica tremenda.

"Punto para ti, rata albina.Pero veamos quien gana cuando gimas bajo mi pecho."

El de ojos rojos aumento el ritmo con que respiraba al sentir como las palmas del azabache recorrían sus costados hasta tamborilear los dedos tentadoramente en sus muslos, ganándose un manotazo grosero.

-Mhg.- se quejo entre el beso un prendido Uchiha, subiendo el tacto para continuar luego explorando, conducido a someter a su presa. Si algo caracterizaba a su clan era ser pasionales y algo de rudeza no iba a detenerlo.

Tobirama enrojeció tan solo un poco, dando un semisalto al sentir las manos maestras del otro estrujar sin cuidado su trasero al levantarlo en brazos, manteniendo posiciones, algo que el rompió al enterarse conscientemente de la situación que se estaba cocinando.

-Madara

-Guárdate eso hasta que grites por más.- decreto superior, susurrandole antes de volver a tomar sus labios.- Puede que pelees un beso, pero te demostrare que tan versado se puede estar en el mundo sexual.

-Ni loco. Quítate.- exigió, rompiendo el contacto y forzando para alejarse, recibiendo un agarre mayor en los glúteos que servían de apoyo para que el mayor lo cargara.

-Callado, ratita albina. - fue lo único que dijo, colocandolo contra la pared para besarlo sin dejar sus iniciativas.

El Senju, ya con la cabeza fría, aplico fuerza contra los brazos de su acompañante para evitar que se moviera de más o las dirigiese a otro lado, dígase su pantalón, sin ver mayor problema con seguir el beso.

Todo iba bien hasta que el refinado oído del albino detecto un sonido amenazante y conocido; la voz de su hermano por el pasillo.

-¡¿Como se me ocurrió dejarlos asi?! Soy un tonto, soy un tonto, ¡Soy un tonto! - versaba Hashirama desesperado,corriendo hacia su oficina hecho un manojo de nervios, esperando que las dos personas más importantes de su vida no se hubieran degollado en el lapso que los dejo juntos.

-Madara.- llamó siendo ignorado el de rubíes brillantes, sudando del terror que le causaba escuchar a su aniya cada vez más cerca.- Imbécil, viene mi hermano. Muévete.

-Que venga...¡Ouch! - exclamo llevándose la mano a la quijada, donde un bonito puñetazo remplazo la boca de Tobirama quien, en un intento extremo de sacárselo de encima no se le ocurrió otra cosa que golpearlo, y no se arrepentía, por que de no haberlo hecho la escena que ahora veía su hermano seria terrible.

-¡¿Que te ocurre Senju?! - grito molesto al separarse, entendiendo luego de una sutil señal del otro que no estaban solos y comprobándolo al escuchar un chillido de alivio.

-¿Están bien? - se apresuro a decir el castaño, revisándolos.-; ¡Cielos! No debí dejarlos juntos, están todos rojos y despeinados, debieron revolcarse por el piso, ¡Lo siento!

Ambos se tensaron, arreglandose la ropa sin mirarse como si hace un segundo no se estuviesen comiendo. El primero en hablar fue Tobirama, aprovechando su astucia para salir rápido de todo.

-El idiota salvaje de tu amigo.

-Fue tu culpa, estúpido Senju provocador.- siguió la escena cómplice Madara, siendo estrujado en un largo abrazo por el más grande de los hermanos que tomo aquello con una inocencia típica de el.

-Los amo, con todo y sus peleas. No planeo dejarlos solos otra vez.

La gran sonrisa de Hashirama acompaño una mirada fija de los dos restantes, que agradecían esa afirmación.

"Si vuelven a dejarnos solos, no quiero imaginarme que podría pasar. Estupido Uchiha..."

"Después le enseñare quien manda. Estupido Senju..."

Bendito Hashirama.

MadaTobi [Senju]

A mi me parece una conjunción atrayente, ambos tan imponentes en su forma de ser, demasiado rudos e inteligentes, además de que son polos opuestos.

Me gusta la fuerza que se maneja y la tensión que podemos percibir. Para mi esta pareja es interesante por lo que me fue entretenido escribir sobre ella.

Ni que decir del atractivo visual, con dos de los personajes mayormente agraciados de los tiempos primarios en Naruto, esta pareja tiene de todo.

Bien, hasta aquí el primer one shot de esta historia. Creo que quedo un poco largo, um, tratare de corregir en los siguientes.

Aun así, no es un mal comienzo ¿Verdad?

Si os gusto, regalenme una estrella y déjenme su comentario.

Nos leemos ;)

~Shuyaneko~
❤

6 de Junio del 2018