Era invierno y en la casa de los Horan reinaba el silencio.

Eran las 11:35 de la noche y los señores de la casa habían salido para su aniversario de veinticinco años de casados dejando a su hijo menor al "cuidado" de su hijo mayor de apenas veintitrés años.

-Bien, Nialler-hablo el mayor de los hermanos-, me voy, Zayn vendrá a cuidarte-dijo tomando su chaqueta y revolviendo el pelo de su hermano menor de trece años.

-Mami dijo que te quedarías conmigo todo el fin de semana-dijo el chiquillo viendo a su hermano.

-Mami dijo que no debes de jugar con las tazas de té que nuestra abuela nos regaló-dijo el mayor con una sonrisa y un tono de inocencia fingido riendo por la cara de su hermano.

-¡Adiós, hermano!-se despidió el menor con una sonrisa.

El mayor río y salio de su casa en el momento en el que su medio primo llegaba.

Zayn Malik era el hijo del segundo matrimonio de uno de los hermanos del señor Horan.

Y también era el primo que más experiencia tenia cuidando a niños con tan sólo dieciocho años.

-Hey, Zee-saludo Greg a su primo-. Niall esta haya dentro, nos vemos el domingo-y con una so.risa camino a su auto y se subió a el.

El moreno asintió y camino a la casa.

No era la primera vez que cuidaba a Niall.

Tocando la puerta tres veces una cabellera rubia y revuelta le dio la bienvenida junto con un alegre chillido.

-¡Zaynie!-chillo el más chico abrazando la cintura del moreno.

No era ningún secreto que Niall amaba ser cuidado por Zayn, ya que el mayor le permitía comer galletas con leche a chocolatada.

-Hola, Ni-beso la coronilla del más chico antes de pasar a la casa aun con el pequeño aferrado a su cintura.

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-¿Podemos ver una película?-preguntó el rubio sentándose sobre el moreno.

-Pon la película, yo voy por las palomitas-dijo el moreno palmando una pierna del rubio para que saliera de en cima y poder ir por las palomitas.

Mientras el moreno buscaba los paquetes de palomitas, el menor buscaba una película que le resultará interesante, hasta que recordó que uno de sus mejores amigos, Louis Tomlinson, había dejado en su casa diciéndole: "Vela cuando estés aburrido y solo, pequeño Niall", el niño no estaba solo, pero si aburrido y además estaba con su primo favorito ¿Qué podría estar mal?

Subió a su cuarto rápidamente y busco entre los cajones de su cómoda el estuche de una película.

El mismo estuche no tenia portada o algo parecido con el que podías ver el título de la película. Solo un estuche negro con un disco plateado dentro.

Niall salio de su cuarto y volvió a bajar justo cuando la campaña del microondas sonaba indicando que se había terminado su ciclo.

Tirándose de rodillas frente al televisor prendió su DVD y saco el disco del estuche para colocarlo dentro del mismo.

Zayn llego cuando Niall comenzaba a prender la televisión y colocaba el canal para reproducir la película.

-Con mantequilla-le entrego un bol verde al pequeño rubio-. Naturales-sonrio abrazando un bol amarillo contra su pecho.

-Vamos a sentarnos, Zaynie-pidio el niño caminando al sofá y sentándose con las piernas cruzadas.

Zayn apago las luces y se sentó al lado del rubio cuando comenzaba a presionar el botón de 'play'

La escena se iluminó mostrando a dos chicos en una habitacion.

El más alto comenzaba a besar al más bajo mientras bajaba una de sus manos por su espalda hasta su trasero liberando un gemido demasiado alto del más pequeño.

Zayn se removió incomodo en su lugar al comenzar a sentir los efectos que esa escena le estaba provocando.

-¿Q-quién te dio eso, Ni?-pregunto volteando a ver al pequeño rubio a su lado.

Los ojos azules de Niall seguían aun en la pantalla viendo como el castaño más pequeño disfrutaba de como el más alto besaba y manoseaba a su antojo.

-¿Por qué se quejo, Zaynie?-le pregunto a su primo sin apartar los ojos de la pantalla.

El moreno volvió a mirar la pantalla viendo como el más chico caía de rodillas frente al más alto y comenzaba a desabrochado el botón del pantalón.

-Porque le gusta-contesto simple volviendo a ver a su primo.

-¿A ti te gusta que chupen tu cosita?-pregunto ladeando la cabeza hacia la escena que reproducía la pantalla.

-A-algo-contesto el moreno tragando saliva por lo nervioso e incomodo.

-¿Puedo probar, Zaynie?-pregunto el rubio apartando por primera vez los ojos de la pantalla hacia su primo.

-¿Q-qué?-preguntó el moreno acomodándose en su asiento-. No.

-Por favor-pidio el rubio juntando sus manos y haciendo un puchero-. Solo dejame probar, Zaynie.

El moreno no supo como, pero ya tenía la bonita cabellera rubia entre sus piernas, de rodillas frente a él y las pálidas manos sobre su pantalón negro.

-N-ni..-susurro el mayor viendo como la manita del más chico se adentraba a sus pantalones.

Dejando escapar un suspiro recargo su cabeza contra el respaldo del sofá.

-Esta caliente, Zaynie-dijo el menor jalando con su mano libre los pantalones del mayor.

-Oh...-solto el mayor cuando por error el rubio apretó levemente cerca de la punta.

-Te quejaste como ellos-dijo el rubio viendo por encima de su hombro hacia la pantalla viendo como el castaño más chico metía la punta del mayor en su boca.

Girando se hacía su primo, tomo con ambas manos el elástico del bóxer negro de licra y comenzó a bajarlo con ayuda de su primo, quien se quitó la estorbosa playera.

-Chupa, bebé-dijo el mayor tomando su pene y guiando lo hacía la rosada boquita del menor.

El rubio impulsado por una extraña sensación, los gemido que aún salían de la pantalla y la orden de su primo se relacionan los labios antes de acercarse y dar una lámina a la punta roja del pene.

El sabor salado inundó sus papilas gustativas y miro a su primo con una sonrisa.

-Sabe bien, Zaynie-rio el menor metiendo la punta a su boca ganándose un gemido del mayor el cual solto su pene para tomar la rubia cabellera entre sus manos.

-Oh, bebé-dijo el mayor ayudando en los movimientos de la cabeza del menor.

Subiendo y bajando, llenando todo el largo pene de saliva.

-Ven aquí, bebé-pidio el mayor jalando lejos la cabeza del pequeño rubio que parecía no quería dejar de chupar.

-Zaynie, yo quiero-chillo con los labios hinchados y rojos con una ligera capa de saliva sobre ellos y su barbilla.

El moreno nos se resistió y labio su labio inferior.

-Arrodillate a mi lado, bebé-pidio el mayor volviendo a su posición y viendo como su rubio primo hacia lo pedido-. Chupa-ordeno y el rubio gustoso lo hizo volviendo el vaiven de ida y vuelta.

El moreno entre gemidos, alcanzó a desabrochar los pantalones del menor bajando los hasta las rodillas siendo seguidos por sus boxers.

-Ve la pantalla, Ni-pidio el moreno-¿Quieres que el primo Zayn te haga eso?

En la pantalla, el mayor de ellos introducía tres de sus dedos en la rosada entrada del más chico el cual solo podía gemido y retorcerse del placer.

El rubio vio la imagen y solto un gemido cuando sintió la caliente mano de su primo sobre eso pene, el cual, desde hace un tiempo, pedía atención.

-¿Si mi bonito, bebé?-pregunto Zayn soltando el duro pene y llevando su mano al pálido trasero-¿Quieres que el primo Zayn te la meta?-volvio a preguntar tomando hebras del rubio cabello con su mano libre y llevando su otra mano hacia la boca del menor-Chupa mis dedos, bebé-pido el mayor separando la cabeza del rubio de su entrepierna.

El niño de ojos azules obedeció y comenzó a chupar tres dedos sin apartar la vista de los ojos de su primo.

-Bien hecho, bebé-felicito el mayor sacando sus dedos de la caliente boca para tomar los rojizos labios entre los suyos en un baboso beso.

Los dedos húmedos viajaron al pálido trasero y comenzaron a hacerce paso entre los dos glúteos.

-Sientate encima de mi-pidio el mayor tentando la apretada entra mientras sea menor se movía para estar sobre el regalo del moreno sin despegar sus labios del mismo-. Ahora viene lo mejor, bebé-afirmo el mayor mordiendo el labio inferior del rubio y metiendo al mismo tiempo el dedo corazón en la apretada entrada.

-¡Ah!-chillo el rubio alzándose levemente del regazo del mayor-Z-Zaynie-se quejo el menor.

El moreno comenzó a sacar y meter su dedo dentro del rubio escuchando los gemidos de la pantalla y de la dulce boca del más pequeño.

Un dedo se sumó al otro hasta que el rubio se empataba a mi mismo rozando su pene con la punta y el abdomen del mayor.

El mayor quitó la playera del menor y beso una de las rojizas tetillas.

El rubio brindaba con fervor sobre ellos dedos del más grande el cual no se molestaba en subir el rito de la penetracion.

-Ya estás listo, bebé-dijo el mayor sacando sus dedos, escuchando el gemido lastimero de su bebé, el cual cambio cuando el moreno introdujo su pene sin ninguna barrera entre ellos.

Ambos gimieron con fuerza.

El rubio comenzó a brincar sobre el pene del mayor cuando se acostumbro y soltaba gemido tras gemido disfrutando totalmente lo que sea que estuviera teniendo con su adorado primo.

El moreno tomo con fuerza las aceras del mejor y comenzó a penetrar con más fuerza sintiéndose punto del colapso con la pequeñas uñitas del rubio clavando se en sus hombros.

-¡Zaynie!-chillaba el rubio frotándose contra el abdomen del mayor sin dejar de dar bronquitis sobre el mismo.

Pasaron unos momentos y el rubio sintió como una descarga eléctrica traspasaba su columna en el momento en el que su primo toco su punto dulce con la. Abeja de su pene con fuerza.

El líquido blanco comenzó a salir en múltiples tiras que marcharon el pálido y moreno pecho.

Mientras que el moreno sentí como las paredes internas del rubio se cerraban con fuerza mientras estaba en pleno orgasmo, alcanzó también el suyo.

Ambos respiraban pesadamente mientras que se oía la nada misma.

-Zaynie-llamo el menor con un susurro si entiendo como o los fuentes brazos del moreno lo rodeaban.

-¿Qué pasa, bebé?-pregunto el mayor besando el pálido cuello.

-Quiero volver a probarlo-dijo el rubio con un leve sonrojo en sus mejillas y sin separar su cabeza del hombro del moreno.

El mayor río y apretó a un más al rubio contra su pecho:-Oh, cariño. Aun quedan mucha se películas porno para este fin de semana.

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