Lisa y Jungkook parecian como hermanos enojados. Se hablaban, pero las charlas eran distantes. Estaban juntos, pero no era muy cómodo y ameno.

Jungkook odiaba estar asi con ella, por eso una tarde tranquila, se acercó y le propuso lo siguiente:

--Deberiamos salir a tomar aire fresco. ¿no crees?

Lisa ese día se sentia agobiada. Y tambien creyó que el aire fresco le vendría bien a sus huesos por mucho que no le agradara estar con jungkook.

--Muy bien.--dijo para la sorpresa de ambos. Se levantó del sofa en el que jugaba con un cubo de rubik y salio como si nada.

Lisa y Jungkook ese día salieron a la calle, alrededor de las 8 de la noche. No habia gente porque el dia estaba feo y nublado, perfecto para que salieran solos sin ser vistos por los demas.

Lisa sentia el incomodo momento. Jungkook no la miraba a pesar de que caminaban juntos. Asi que entonces, decidió hablar primero.

--Siento haberme negado a comer estos días. Tu madre me hizo comida especial y yo decidí comer. Ya no tienes que preocuparte por mi.

--Preocuparme por ti es inevitable. Jamas dejaré de hacerlo.

Lisa sonrio negando con la cabeza.

--Estas perdiendo el tiempo, Jungkook. Soy un caso perdido.

--Detente.--pidió Jungkook enojado. Lisa se sorprendió. --no eres un caso perdido. Deja de decirlo.

--Pero Iungkook...

Unos segundos de completo silencio pasaron.

Lisa entonces, comenzó a llorar.

Iungkook se asustó de inmediato, asi que la tomo de los hombros intentando preguntarle que sucedia.

Lisa de pronto se sentia frustrada con la situación. Se alejo de los brazos de Jungkook y se sento en el pasto de un pequeño parque, aún llorando como una niña pequeña.

--E-estoy harta de todo, Jungkook.--sollozó perdidamente. Jungkook sintió su alma quebrantarse.

Las lagrimas de Lisa no dejaban de salir de sus ojos empezando a hacer que se enrojeciera su nariz.

--¿De qué estas cansada, Lisa?

--De mi madre, de mi vida, de mi misma...

--Yo puedo ayudarte. Todos podemos ayudarte.

Lisa comenzo a sentirse nerviosa entre la neblina de sus lagrimas.
Comenzó a arañarse los brazos en un acto de desesperación, y de pronto comenzó a mirar un punto perdido en el suelo mientras respiraba fuerte y comenzaba a lastimar la carne de sus brazos.

--Lisa, detente. Para de lastimarte. Te dolerá mas tarde.

Jungkook para ese punto ya tenia paciencia contra sus ataques. Pero Lisa estaba negada a escucharlo. Y solo empeoraba conforme los segundos pasaban.

--Deberias dejarme en paz e irte.--Lisa dijo, sonando casi enojada.

--Lisa...

--¡Basta! ¡DIJE QUE PARES!

De pronto se incorporó alejandose todo lo posible de Jungkook. Corriendo.

Lisa comenzó a golpear su cabeza contra el arbol mas cercano asustando a Jungkook.

Sus ojos parecían idos. Sus uñas intentaban marcar el arbol en vano, lastimandose a ella misma. Su cabeza una y otra vez pegando contra la madera natural provocando que jungkook quedara atonito y aterrorizado al ver que una línea fina de sangre salia de ella.

--¡LISA! ¿¡QUE CARAJO TE PASA!?

Jungkook la agarro de los hombros y la empujó bruscamente al suelo.

Lisa nisiquiera pudo gemir del dolor gracias a la cantidad de sensaciones fisicas y emocionales que sentia.

--No siento mi cuerpo, no siento mis órganos, no tengo corazón. --dijo de pronto mirando a la nada, se veia el terror en su mirada, se veia el vacío y la oscuridad absoluta que proyectaban sus ojos.-- estoy muerta, estoy muerta, estoy...

Jungkook se subio a horcadas de ella apresando sus brazos para que dejara de lastimarse.

--¡AYUDA!