Déjame decirte que aún recuerdo la primera vez que te vi, la primera sonrisa que me diste y mi primera hora entera hablando contigo. Que lo recuerdo todo. Y no se va de mi cabeza.

Nunca.

Cuando intento dormir recuerdos de ti y de tus palabras aparecen y no me dejan descansar, me atormenta hasta el pasar un segundo sin ti, sin hablarte, sin tocarte...

Déjame decirte que has sido y me temo que serás mi primer todo.

Déjame decirte que te necesito tanto como necesito el aire, que un día sin ti y sin tu risa es un día perdido.

Déjame decirte que odio cuando no te quieres, pero más cuando me apartas, que amo todas tus imperfecciones y cicatrices porque son lo que han hecho de ti lo que eres hoy. Una gran persona, alguien a quien observo y solo siento felicidad y orgullo.

Déjame decirte que quiero gritar a los cuatro vientos cuanto te quiero y no me va a importar que te sonrojes, que nos miren o que nos juzguen. Porque lo hago.

Te quiero.