Advertencia1: Es un intento propio de +18, sin ayuda, así que perdonen si es horrible.

Advertencia 2: Capitulo más corto de lo normal y con posibles fallas linguisticas.

Pov. Izuku:

- Shouto. Tengo algo de frío, ¿Me das calor?- Le pregunté con suavidad, mientras acomodaba mis brazos en su cuello.

-Puedo encender una pequeña llama si quieres o aumentar un poco mi temp...- Cuando estaba escuchando su propuesta lo besé para interrumpirlo, yo necesitaba de otro tipo de calor. (Aunque me diera vergüenza admitirlo directamente). Mientras lo besaba, afloje su corbata y empece a desabotonar su camisa.- Izuku estamos en el patio-.

-Pero...pero- Baje mis orejas instintivamente y mis ojos de cristalizaron sin notarlo; esto de ser un conejo me hacia más sensible de lo normal y su rechazo había dolido. Pero en breves segundos, Todoroki empezó a acariciar suavemente mi rostro, llevando sus fríos dedos a mis labios. Sentí como mi cuerpo se estremecía y entre abrí mi boca para llamarlo a seguir, quería sentir su piel, su suavidad y convertirlo en rudeza.

Mis instintos me habían llamado a morder sus dedos, que traviesamente ingresaban en mi boca. Solté una suave risa y empecé a lamerlos con lentitud, queriendo provocar a mi novio, queriendo que se descontrole.-Midoriya, no me controlare-.

-Tengo frío Shoto- Y dí un suave saltito en mi posición.

Mi cabeza estaba en colapso, mi parte racional estaba gritandome, pidiéndome que me detuviera; pero la adrenalina y el instinto me impedían prestarle atención. Necesitaba que me tocara, que me besará, que me hiciera suyo tantas veces como él quisiera-Por fav...Ahhh-

Solté un fuerte jadeo, Todoroki estaba acariciando mi colita, mientras sus manos empezaban una caricia secreta sobre mi piel. La temperatura estaba subiendo rápidamente y no creo que Todoroki este usando su quirk.
-Vamonos- Escuche embobado su voz y sentí como sus brazos se aferraban en mi cuerpo. Coloque mis brazos alrededor de su cuello y me deje llevar.

POV. Onmisciente: 

Ambos chicos habían llegado rápidamente al cuarto del más bajo, insinuándose entre besos y miradas, entre roces suaves y susurros llenos de amor. 

Todoroki acostó con sumo cuidado a su novio sobre la cama, mirando sus mejillas sonrojadas, esas bellas y suaves orejas, y esas tiernas pecas que adornaban el dulce rostro como estrellas a la noche.-Te quiero tanto-

El corazón de Midoriya latió con más fuerza, dejando que una sonrisa se formara en su rostro y que sus manos acariciaran el rostro de su pareja-También yo, te quiero mucho Todorki-.Tras eso, iniciaron los besos y caricias tentadoras.

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El calor y la humedad invadían el ambiente de aquel cuarto. Las sábanas estaban hechas un revoltijo y las almohadas, junto con los uniformes, estaban desparramadas a los costados de la cama, donde dos jóvenes se amaban nuevamente.

-Sho...shoto- Los labios del bicolor pausaron su camino de besos para sonreír sobre la piel de su novio. Amaba escuchar su nombre con esa maravillosa voz, era como si un ángel lo bendiciera y así era, su héroe, su ángel, lo salvaba cada vez que lo miraba, cada vez que lo llamaba y cada vez que lo amaba; por eso y más,estaba dispuesto a complacer cada petición del pecoso.-Más...quiero más-

Todorki siguió besando los músculos de su amado, acariciando las cicatrices y memorizando nuevamente el orden de estas.  Fue bajando, tentando al otro con su lengua, que debes en cuando lamia algunas zonas, haciéndole creer que llegaría más abajo y aunque eso fuera algo contradictorio a lo ya pensado, el quería darle placer, hacer que disfrute y que sea lo más largo posible. Con ello en mente, subió nuevamente para empezar un juego de mordiscos en los pezones del otro, sintiendo como unas manos acariciaban su cabello y lo atraían más cerca del cuerpo contrario, como si aún quedara distancia entre ellos.

Continuo jugueteando con aquellos botones de color caramelo*, pero ahora una de sus manos se dirigió a la entrepierna del otro, masturbando con suavidad y lentitud, sintiendo el cuerpo contrario estremecerse, apegándose aún más el.-No..juegues conmigo-

-Pero conejito...estamos recién iniciando- Y con cuidado metió un dedo dentro de la cavidad de Midoriya, quien soltó un gemido y se aferro a la espalda del más alto.-Otro...otro por favor-

-Como ordene- Y otro dedo entro, pero con mas brusquedad, causando un grito lívido a los oídos del heterocromatico. Los movía con dentro y fuera, intercalando de vez en cuando un movimiento en tijeras. Todo aquello era muy placentero, pero Izuku quería más, quería que por una vez Todoroki olvidara los morales, que lo tomará sin piedad y que le hiciera el amor tantas veces que olvidarían hasta sus nombres.

Por ello, poco después de venirse por la masturbación en su punto G, intercambio las posiciones y era él quien estaba sobre el otro en esos momentos.

-Dejamé complacerte tambien- Se acercó a su boca y lo beso, jugueteando con su lengua y dando unos suaves mordiscos en los labios del otro, todo aquello con sus manos acariciando la blanca piel del otro. -Izuku...-Cuanto amaba escuchar los jadeos del otro. Midoriya tras ese suave sonido, empezó a bajar por el torso del menor*, dejando mordidas en el cuello, clavícula, pectoral y pelvis del contrario.-Veo que estás impaciente- Comenta

De inmediato empezó su labor, con una de sus manos toma la erección de Shoto y con calma acerca su lengua, rozando suavemente la punta, tentando al contrario. Continuo jugando con el falo, esta vez con su mano bajando y acariciando el vello de la entrepierna, la cual al igual que el cabello de su novio, era bicolor.

-Midoriya, por favor- Izuku rió internamente y de golpe metió todo el falo en su boca. Todoroki se sentía desfallecer, la lengua de su novio se movía con más seguridad y sentir la fricción de los dientes del otro en su delgada piel, le causaba un extraño cosquilleo- Me vendre...Izuku quita..-

-Mhmh - Izuku tenía la boca llena con la esencia del de doble quirk, y había salido tanta que sin querer dejaba escurrir  algunas hileras desde su boca. Como no sabia que hacer en ese momento, simplemente se lo trago- Sabe extraño, Shoto-

El nombrado estaba algo anonadado por lo hecho por su novio, no era la primera vez que le hacia un oral pero si la primera en la cual recibía su semen en su boca, y más encima tragandoselo.-¿Quieres probarte?- Y sin más recibió aquel beso. Realmente el sabor es raro.

El beso rápidamente subió de intensidad, acompañado de caricias lujuriosas, pero llenas de amor. Una extraña, pero bella mezcla. 

-Ya no aguanto más...Todo...-Y sin dejarlo terminar el heterocromatico introdujo dos dedos en la entrada del menor, moviendo los en círculos, escarbando, buscando aquel dichoso punto que volvió loco a su novio. Supo que lo había encontrado cuando este, lo beso entre un gemido. Continuo moviendo los, mientras besaba el cuello del contrario y de vez en cuanto mordía suavemente esas orejas, que se movían atraiéndolo.

Introdujo un tercer dedo, escuchando el grito del peliverde y aprovechadose de aquello, introdujo su lengua a la cavidad del mayor*, besándolo con demencia, sin quitar sus ojos de los bellos jades que le rogaban por más. Continuaron con aquello hasta que el bicolor noto la entrada del contrario estaba lo suficientemente dilatada para no causar algún daño.

 Las palabras en aquel momento sobraron, solo basto mirarse para que cada uno tomará la posición que tendrían en esa oportunidad.

De una estocada metió todo su miembro al interior de su novio, escuchando la melodiosa y excitante voz de este. Viendo como unas rebeldes lagrimas escapaban del pecoso, a las cuales beso con cuidado mientras su pareja se acostumbraba. Al sentir un pequeño empujón en su pelvis, sonrió.

Sus cuerpos chocaban entre ellos, sus pieles ardían sin necesidad del fuego, no era necesario decirse cuanto se amaban cuando sus ojos se declaraban una y otra vez. Habían vuelto a unirse, y no se detendrían hasta estar satisfechos.

Mientras sus pieles se rozaban y de sus bocas solo salia el nombre del otro y/o frases entrecortadas por los gemidos del placer. Las uñas de Midoriya se clavaban en la espalda del hijo del segundo gran héroe, dejando marcas en ella. Pero no bastaba, Midoriya necesitaba dejar en claro que el hombre frente a el era suyo, solo de el. Por lo que los rasguños continuaron más fuertes sabiendo que excitaban al bicolor, y sus dientes empezaban dejar mordidas esparcidas por la blanca piel. 

-Izuku, creo que-

-Dentro, hazlo dentro- Y así lo hizo, el liquido viscoso y caliente se esparció por el interior del peliverde, causando espasmos y sensaciones dulces en su cuerpo. Cuando se vio algo más calmado tomo el rostro de su novio y lo besó, suave delicado, era un beso amoroso nada más. Cuando terminaron de besarse sonrieron para el otro.

Izuku anonadado por esa bella sonrisa, levanto una de sus orejas por alegría ,pero rápidamente tenso las dos, al sentir la fría mano de su amante tocar esa esponjosa cola que aún tenía.

Izuku rió para si, al entender aquel pequeño gesto y con una sonrisa traviesa, lamió los labios del contrario, para luego bajar al cuello de este y morder con fuerza, esperando dejar algún moretón o marca que durase por mucho tiempo.-Creo que no soy el unció que aún tiene ganas-

-Izuku, hagamos el amor otra vez-

-Cuantas veces quieras, Shoto- Y nuevamente se besaron, para continuar con la siguiente ronda.

El único problema era que Shoto no sabía de lo insaciables que eran los conejos en celo y lo muy territoriales que podrían llegar a ser. Solo conocía la resistencia de su pareja, pero al estar con los instintos de un animal, esta resistencia podría acabar con el de doble quirk.

Por algo al día siguiente casi ni se movía, sus piernas ardían por el trabajo muscular, su espalda lo hacia por los constates rasguños, su cuello y pecho estaban llenos de mordidas. Pero al contrario Izuku, estaba bien, no parecía cansado, no caminaba extraño, lo único "normal" era sus sonrojos al verse en el espejo y ver todas esas marcas en su piel. 

-Tendré que colocarme algunas vendas-

-Déjame ayudarte- Y así fue, Todoroki a pesar de estar agotado, quiso ayudar a su pareja, viendo las pequeñas ojeras asomarse y apreciando sus instintos primitivos tallados en la piel de su héroe.-Espero que nadie se de cuenta, daría mucha vergüenza-

-A mi no me importa-Midoriya lo miro con los ojos muy abiertos- Así saben que eres mio y yo soy tuyo-

El sonrojo del peliverde aumento rápidamente, y su boca se lleno de murmullos continuos y a gran velocidad. Pero estos se calmaron, al ser abrazado por la tibieza de su novio y por el cantar desenfrenado que lograba escuchar del pecho de este.- Tienes razón, que sepan que nos pertenecemos, y ambos juntaron sus bocas en un beso tierno y puro.

-Vamos a clase, Iida se pondrá histérico si no llegamos- Midoriya estiro su mano hacia Todoroki y este la tomo con firmeza; para dirigirse a su salón.

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