Charlotte Morningart era conocida por ser una de las alfas más dulces y casi perfecta de la escuela Hazbin pero sobre todo era conocida por tener al padre más jodidamente caliente de toda la ciudad, Lucifer Morningart, dueño de la mayor parte de la ciudad Infernó, específicamente de los siete círculos más concurridos de la turística ciudad.

Lucifer era un omega dominante que irradiaba belleza, todos podrian asegurar que era la creación más perfecta de su padre, Goodynes Morningart; anteriormente casado con la famosa modelo y mundialmente famosa compositora, interprete y maestra vocal, Lilith Bitech. El omega era el hombre que cualquiera desearía, incluso si eras Alfa, beta u omega, nadie se resistía al rey de la ciudad Infernó.

- Charlie ¡dile a tu papá que me la meta!

Para la reluciente, carismática y siempre amable Charlie, era parte de su día a día el escuchar cosas de índole sexual dirigidas a su dulce padre, era ya casi una tradición regresar a casa con nuevos mensajes sugerentes que nunca le daría al patriarca de la casa.

- Oh querida, al señor Morningart no le gustan las jovencitas de 13 años pero de todo corazón le daré tu mensaje de tan exquisito vocablo.

Y al igual que los mensajes a las partes íntimas de su padre también estaban las ingeniosas respuestas que su mejor amigo intercambiaba con las personas que soñaban con algún día conocer la entrepierna de su papá.

Una chica de voluptuosa figura miró con el rostro apenado al, ahora presente, moreno. Alastor caminaba como si minutos antes no le hubiera dicho en pocas palabras "no mames mija, ni te topa" a una avergonzada muchacha frente a la mitad de su facultad, Charlie sonrió complacida caminando los pocos pasos que le faltaban al más alto para llegar a ella.

- ¿Vamos a mi casa a comer panqueques y de paso le pedimos permiso a papá para ir a la fiesta de Valentino? - salto poquito sonriendo en grande mientras avanzaba con el mas alto, dejando al resto de los alumnos detrás.

- Ya te dije que no iré.

Lucifer no era el mejor padre, sinceramente, después de su divorcio con la hermosa Alfa que tuvo su alma, cuerpo y corazon entregados solo para ella, su vida personal se fue en declive, sin contar la depresión que lo consumía lentamente por dentro - así como su lazo roto hacia con su cuerpo, estaba seguro que ya no irradiaba la belleza que en sus años de juventud - y la idea de no ser el omega perfecto que todos decían, por eso Lilith lo dejo, ¿no? para regresar con su ex después de que el se divorciara de su segunda esposa.

La entendía, claro que sí.

Adam era un Alfa pero eso no evitaba que su amada esposa lo amara más que a un simple, sumiso, mimoso, caprichoso e infantil omega que no era nada al lado del otro hombre. Los alfas eran mejores.

Su vida estaba en un espiral de penumbra que se oscurecía mientras más pasaba el tiempo... hasta que nació su hija, su pequeña Charlie que había iluminado el fondo oscuro que le consumía, la bebe que llevo en su vientre siempre lo acompaño dentro de el y entre sus brazos: desde el declive de su relación, la infidelidad de su esposa, el divorcio, la necesidad de tener a su Alfa y la cirugía para quitar la marca, todo, para Lucifer su hija era la luz más grande y su más amada adoración.

Debía ser un buen padre.

Realmente lo intento, de verdad que lo hizo pero nunca pudo llegar temprano a los eventos de su hija, no estuvo en la mitad de sus cumpleaños, no podía pasar tanto tiempo con su princesa por las demandas de su trabajo.

La relación padre e hija iba a través de una cuerda floja antes de que tomara la mejor decisión de su vida, después de tener a su hija por supuesto.

Lucifer siempre quiso lo más costoso, de mejor calidad y lo más aclamado para su pequeña, solo lo mejor para su manzanita, aunque casi siempre salía mal como esa fiesta de cumpleaños en una playa, - ese día habia tormenta - o esa otra ocasión en la que descubrió que su pequeña era alérgica al maní de la peor forma, - un día antes de viajar a Disney - el rey de la ciudad no era el gran, perfecto y siempre correcto soberano que todos conocían, era inseguro, asustadizo y sensible, (y autista) tan sensible como un flan que se derretía en llanto cuando rompía más la relación con su bebé.

Pero la escuela Hazbin había salvado su relación.

Lilith y Lucifer se conocieron en la siempre famosa escuela del barrio Pentagram, lugar de prestigio, hogar del orden y la disciplina y cuna de grandes mentes que habían levantado el país, como el hombre que invento la mantequilla de mani; el lugar perfecto para que estudiará su dulce princesa.

- 5 dólares por una mamada pero por ti guapo - guiño - te doy el paquete completo por un dolar más. - Pero la escuela Hazbin no era lo que recordaba.

¿Ese era el lugar donde se enamoro en el club de botánica y donde dio su primer y tímido beso con la lider del club de música? ¿Ese era el lugar en el que aprendió de economía? ¿Ese es el lugar donde casi lo expulsan por mascar goma de fresa en clase?

El lugar era horrible - Es horrible - el rostro de la rubia era un poema escrito y retratado en su rostro por el más artístico Picasso.

Charlotte no espero que la lujosa, limpia e increíble escuela en la que estudiaron sus padres fuera la misma que tenía en frente, parecida que un barrio mexicano había pasado sus exquisitas obras de arte a cada pared de la institución para que eventualmente el lugar se hubiera independizado como país y hubiera aprobado la prostitución, el asesinato y el narcomenudeo creando su propia capital de los ingresos de los estudiantes más bulleados que trabajaban cociendo ropa en el sótano de su escuela para venderla en línea a través de Unholly-Chein.

- Se que no parece lo que te dije pero mírale el lado positivo, tiene personalidad - sus labios se estimaron forzosamente, uno de sus ojos tembló intentando contener la frustración en su sistema cuando una explosión le hizo alejarse de la ventana donde se veía el lugar, gritos histéricos y risas se escucharon antes de que una manada de chicos salieran corriendo y una voluptuosa rubia saltará de un auto en llamas mientras seguía riendo - Mierda, ¿¡¡de donde saco esa bomba!!? - giro asustado encontrando la mueca de su hija desfigurada de forma extraña - Charlie, te juro que yo-

- Me- ¡¡ENCANTA!! - la princesa de la ciudad exploto, - como el auto - sus ojos brillaban más que el sol que quemaba fuera y su sonrisa llegaba casi a sus cejas, tenía la expresión más feliz de todas - Me trajiste aquí para que lleve a todos por el buen camino ¿no papá? Así como mamá dijo en la ONU, que los jóvenes deben brillar para un futuro mejor.

Charlie era una Alfa demasiado dulce y buena para ese mundo cruel.

- Claro que si mi manzanita.

Y Lucifer solo quería ser un buen padre.

- ¡Ya llegue! - el grito de la adolescente resonó en las blancas paredes de la hogareña mansión y como si fuera arte de magia una cabellera rubia acompañada de otros tres pelajes salió de la cocina#3 para recibirla con afecto, un abrazo rompe huesos.

- Chaaaaaaar~ - su padre corrió hasta tener entre sus brazos el menudo cuerpo, embarrando su limpio uniforme con manchas de lo que sería su comida en unas horas.

Un esponjoso gato se enredo entre sus piernas cuando el hombre la regreso al suelo y dos colas se movieron animadas berreando por atención, su gato Keekee y sus dos corderos Razzle y Dazzle, que salvo del matadero a los dies años cuando exigió en lágrimas que no mataran a sus amigos que iban a ser su comida en Navidad a manos de su abuela, claramente Lucifer nunca le daría un no a los mandatos de su adorada creación.

Mientras la muchacha saludaba a sus mascotas los ojos ipnoticamente azules del hombre chocaron con los marrones y afilados del acompañante de su hija, creando una atmósfera que ignoraba por completó la rubia.

- Alastor, es bueno tenerte de visita.

- Gracias señor Morningart, será un gusto quedarme a comer con la familia.

- Oh, ya te e dicho que me digas Luci sin molestias.

- No podría hacer eso, mi madre me enseñó a ser todo un caballero con los otros géneros, "Nadie quiere a un Alfa que solo es guapo" - cito, palabras que su adorada madre solía decirle desde que tenía memoria, para educarlo.

- Y no lo eres cielo, definitivamente no lo eres.

La bienvenida y el camino a la cocina se acompaño de las voces de las tres personas, los alfas esperaron a la comida pacientemente y disfrutaron aún más de esta en compañía del omega, Charlie disfrutaba de ver a su padre charlando de cosas de su época con su mejor amigo que era fanático de los años añejos; separada de la conversación sacó su celular para confirmar su asistencia y la del moreno a la fiesta que se daría en casa del ex-novio/novio/amigo/amante/enemigo de su segundo mejor amigo, Anthony de renombre Angel Dust.

-

-Papá, yo y Al iremos a una fiesta con Angel, ya le e confirmado ¿nos dejaras ir?

- Claro manzanita, puedes ir a divertirte.

- ¿Y yo porque necesito permiso de tu papá? Y ya te dije que no iré.

Hola a las 3 personas que leen esto, se supone que este capítulo lo subiría hace una semana pero cuando me acordé ya me había puesto la pijama, así que aquí doble capítulo... pero tampoco es como que se puedan quejar, a mi me dieron instrucciones de que publicara cada mes, les estoy haciendo un favor.

También me tomé la molestia de hacerles los mensajes como si fuera la red social real, así que me merezco un helado ohh pero eso sí, ignoren las letras pequeñas.

Pero bueno, aquí les dejo un meme del capitulo:

♧K&S•