Cap. 34

Rafa camina por las calles junto con Lean -No debiste hablarle así a Amelia. -le dice su amigo.

-Me aloque un poco, después me disculparé. -contesta mientras lo sigue.

-Okey ¿Como encontraremos a el híbrido? -dice cambiando de tema.

-No lo sé, separemonos, así cubriremos más terreno. -propone Rafa.

Lean asiente y continúa sólo por las calles, decide tomar una cerveza para relajarse, entra a un bar y pide una bebida.

En ese momento, unos tipos comienzan una pelea en el bar y es arrojado a fuera.

-¡Maldita sea! -Dice dando un golpe en el suelo. Se levanta y sacude su ropa -Voy a golpearlos tanto que quedarán irreconocibles. -gruñe pero luego respira hondo para calmarse.

-No vale la pena. -niega molesto, se propone a regresar a su búsqueda pero sus pies no se mueven y cae de cara en la calle. Se levanta y comienza de nuevo.

-Jajaja. -escucha una risa cerca de él, mira atrás y no hay nadie.

Siente un golpe en su estómago, cae arrodillado y luego mira su sombra.

-No hay luces, no puedo tener sombra. -murmura al darse cuenta que es de noche y luego esa cosa lo golpea en el rostro haciendolo caer de espaldas.

-Si tienes una sombra, soy yo. - escucha una voz, Lean levanta la mirada y su sombra no se ha movido, entonces de ella sale una chica, lleva un vestido al cuerpo con medias, no usa zapatos y lleva unos guantes negros sin dedos, su cabello es largo y alborotado también negro.

Lean se pone de pie mientras está alerta -¿Quien eres?

-Skyler. -contesta sonriendo de costado.

-Un demonio ¿Cierto? -supone él, ella hace un sonido con la garganta en respuesta -Aja.

Lean arquea una ceja y voltea dándole las espalda a la muchacha.

-¡E-Espera! -dice ella al ver que él sigue con su camino.

-No, tengo una misión y no pienso perder mi tiempo contigo. -contesta Lean sin mirar atras, la noche continua y él aún sigue buscándo a Eithan pero no ha dado con él. Pero si siente otra clase de presencia.

-¡Deja de seguirme!- le dice a Skyler quien ha caminado tras él desde que se conocieron.

-No. -niega.

Lean voltea para seguir gritándole pero un auto un arrolla, la parte delantera de la camioneta quedó echa trizas mientras que la mujer mayor que conducía quedó desmayada con su cara contra el airbag.

-Nadie resultó herido. -suspira Lean y se acerca a Skyler molesto.

-Siempre debes mirar ambos lados antes de cruzar la calle. -habla riendo, burlándose de él.

-¡¿Por qué estás siguiendome?!

-Porque siempre lo he hecho. -responde con su mirada neutral. Leandro queda sin palabras ante esto -¿Qué? Te estoy diciendo que te he seguido desde siempre y no dices nada. -agrega ella acercándose.

-No te acerques asqueroso demonio. -le advierte Lean serio.

Skyler agacha la mirada y comienza a sollozar haciendo que él abra grande los ojos.

-¿Ahora que te pasa?

-M-Me dijiste "asqueroso demonio" -dice y comienza a llorar con más fuerza.

Él roda los ojos y se acerca un poco a ella, según las reglas de los ángeles, ellos no deben relacionarse ni siquiera acercarse a los demonios -Deja de llorar, no tengo tiempo para esto. -habla con cuidado.

Ella lo mira con unos ojitos tiernos y hace un puchero -Ya basta. -entonces la muchacha corta la distancia que los separaba para abrazarlo.

-¡¿Qué rayos estoy haciendo?! -se dice así mismo al darse cuenta de que él correspondió el abrazo. No sabe por qué lo hizo, sintió que debía hacerlo.

Skyler sonríe y levanta la mirada -Ley de los Ángeles, ayudar a los que lo necesitan. -habla y luego las alas de Lean salen a la vista sin su concentimiento.

-Otra vez no. -cierra con fuerza los ojos al sentir un fuerte dolor en sus alas. Su rostro se golpe contra el suelo y luego ella se sienta sobre su espalda.

-Pobrecito Leandro, siempre te dan una paliza, primero Kea, luego Renata y ahora yo. -comenta soltando una risita.

-¿C-Cómo sabes... eso? -pregunta él adolorido.

-Estoy contigo desde hace tiempo. -ella acerca su boca al oído del ángel y agrega -Aprendí muchas cosas estando a tu lado como tu sombra, incluso el secreto de Renata para hacer que sus alas aparezcan. -Skyler toca las alas de Lean pero no para arrancarlas sino que las acaricia con cuidado, admirando el hermoso plumaje blanco.

-¡Suéltame ahora! -le ordena él pero la muchacha de cabello negro niega -No dijiste "Por favor". Te voy a decir lo que voy a hacer. -comienza y toma ambas alas del ángel -No te arrancaré tus alas con una condición.

-¿Una condición?

-Si, quiero que demos un paseo. Quiero volar. -sonríe como una niña haciendo una travesura.

-¡¿Volar?! ¡Estás loca! -exclama negando.

-Despídete de tus alas entonces, yo creo que no quieres volver a ser un exiliado ¿O si? -contesta ella haciendo un puchero.

Lean mira a un lado en silencio, está pensando en lo que hará y si es correcto.

-Lean... me estoy impacientando. -lo presiona Skyler.

-¡Está bien, está bien! Tú ganas, vas a volar. -acepta de mala gana.

-¡Genial! -ella da un salto y toma su mano para levantarlo rápidamente -¿Cómo funciona? ¿Debo subir a tu espalda o...? -pregunta ella estando realmente emocionada.

Leandro arquea una ceja y agita sus alas para alejarse volando de esa demonio.

-Al fin... -suspira aliviado -Un minuto más y me volvía loco.

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