Cap. 30
Lauren no puede creer lo que está pasando, Kearrents no la recuerda, al parecer perdió la memoria por completo.
-Exijo una explicación ¿Por qué Kea está así? -dice mirando a Amelia y a Rafael quienes rascan su nuca al mismo tiempo al estar nerviosos.
-Eh... creo que fue mi culpa. -habla la castaña suspirando.
-No, es mi culpa por dejar que Renata me corrompa al igual que todos. -corrige Rafa agachando la mirada.
Lauren los mira sin entender lo que está pasando, pero el que menos entiende las cosas es Kea, mientras que "la rubia de lindos ojos" habla con "el chico de la gorra" y con "la chica de cabello ruloso", él decide entrar a la mansión donde hay muchas personas y música.
-Wua... entonces esto es lo que llaman "fiesta". -se dice mirando con asombro a su alrededor.
En ese momento, él choca contra alguien y rápidamente pide disculpas -Lo siento, no vi por donde iba. -Dice y es cuando reconoce a su mejor amigo -Ariel ¿Qué haces aquí? -pregunta emocionado.
-¿Tú que haces aquí? Se supone que estabas de viaje por todo el mundo con Amelia y tu familia. -habla el rubio estando un poco sorprendido de volver a verlo.
-¿Familia? -repite Kea confundido.
-Sí, tu madre y Ricky ¿Dónde está Rafael? -habla Ariel mirando de un lado al otro.
-Debes referirte a "el chico de la gorra", está afuera. -comenta Kea sonriendo. Pero luego su sonrisa de borra -¿Dijiste que tengo una madre? ¿Y un hermano?
En ese momento Ariel se da cuenta del estado de su amigo, rápidamente hacen que corten la música y le ordena a todos que se larguen. Los invitados abandonan la mansión de mala gana y Dylan se despide de Lauren, para entonces ella ya había escuchado la mitad de la historia que ocurrió en Venecia pero se altera al ver que todos se van y que Ariel es el responsable.
-¡¿Quien te crees que eres para echar a todos de mi mansión?! -ella lo empuja pero ni siquiera lo mueve un poco.
-Esto es más importante que una fiesta. -contesta el frunciendo el ceño.
-¡¿Qué cosa es más importante?! Dejaste entrar a Renata aquí y casi perdiste tus alas, luego Zariam está tan furiosa que casi me golpea y ahora Kea perdió la memoria no se como. -dice rápidamente y luego respira con dificultad.
-Ese es el problema, Kea está aquí conmigo. -contesta Ariel.
-Escuchen. -Amelia y Rafael también están presentes y escucharán lo que Ariel tiene para decir -Kea perdió la memoria, no toda ya que me recuerda a mí pero temo que si olvidó a su familia, y a ustedes. -habla serio.
-Entonces... volvemos a empezar ¿No? -murmura Amelia preocupada, Kea no la recuerda y eso la tiene angustiada.
-Podemos hacer que recuerde todo lo sucedido de una sola vez con algo muy fuerte. -propone pensativo.
-¿Como un golpe? Yo puedo dárselo. -se ofrece Rafa haciendo que Amelia lo mire mal.
-Ya hablamos de esto, no puedes golpearlo. -lo regaña.
-Pero me molesta cuando se acerca tanto a ti. -contesta en su defensa.
-Alto, alto. -Dice Lauren agitando sus brazos -¿A caso le estás haciendo una escena de celos? -cuestiona mirando a Rafael con las manos en la cintura.
-¿Celos? Nada de eso. -niega él -Si es necesario la intentaría en un convento. -agrega cruzandose de brazos.
-Si como no, hablas como si fueras su pad... -Lauren deja de hablar al ver que Amelia asiente y Rafa sonríe.
-¡¿Qué, qué?! -exclama Ariel espantado.
-Resulta que Rafael es mi padre, él había creído que estaba muerta pero Gabriel era quien me cuidó hasta encontrar una buena familia para mí. -Amelia le resume todo a ambos.
Ariel queda boquiabierta al igual que Lauren al escuchar esto -¿Gabriel? Rompió las reglas. -murmura tomándose la cabeza con las manos.
-¿Por qué te sorprendes tanto Ariel? Creí que lo sabías. -habla Rafa saqueando una ceja.
-No, no lo sabía, creí que sólo la amabas como Kea o Lean. -contesta el rubio.
-¿Qué no ves el futuro? -cuestiona el otro.
-¿Es tu padre? ¡¿Un ángel?! -dice Lauren haciendo que Kea abra grande los ojos.
-¿Cómo es que sabes de eso? -le pregunta a Lauren.
-Tú me lo dijiste angelito. -contesta ella rodando los ojos.
-Eso es imposible porque Ariel me regañaría hasta cansarse. -sonríe pero agacha la mirada cuando su amigo lo mira con seriedad.
-Así lo hice pero nunca me haces caso. -lo regaña de nuevo y le da un golpe en la cabeza.
-Lo siento.- Se disculpa con mal humor.
-Ya se como hacer que Kea recupere la memoria. -Amelia sonríe y se acerca a él para darle un beso.
Rafa contiene las ganas de golpearlo en ese momento, cuando termina ella se aleja lentamente y le sonríe.
-¿Ya recuerdas algo Kea? -le pregunta esperanzada. El muchacho parpadea un par de veces y niega -No lo siento.
Amelia agacha la mirada, esto puede que cambie las cosas y ella teme perderlo.
-Lauren ¿Por qué no llevas a Kea a ver la mansión? -le dice Ariel y la rubia asiente.
Cuando ellos se alejan, Amelia se sienta al pie de las escaleras y agacha la mirada, Rafa se acerca a ella y la abraza.
-Es mi culpa, sabía que Renata era peligrosa pero aún así deje que Kea fuera con ella. -murmura mientras llora.
-Shh... tú le salvaste la vida. -La consuela Rafael mientras acaricia su cabello.
-Ay no... -Ariel comienza a caminar de un lado al otro -Kea perdió la memoria, sólo me recuerda a mi, no tiene idea de que es un híbrido y tampoco puede sentir. -piensa un poco y luego tiene una idea.
-Ya se lo que podemos hacer, Amelia hará que él recuerde con un beso pero antes de eso necesitamos la ayuda de Kira. -habla dirigiéndose a ambos.
-Eso no es correcto ¿Romperas las reglas por Kea? -cuestiona Rafael arqueando una ceja.
-No sería su amigo si no lo hiciera. -contesta negando.
-¡Kira! -exclama Ariel llamándola, para unos minutos y no aparece -¿Qué extraño? -murmura pensativo.
-¡Seba quiere verte! -agrega haciendo que la muchacha aparezca frente a ellos.
-¿En serio? ¿Dónde esta? -pregunta ella sonriendo mientras acomoda sus cabellos rojos a los lados.
-Bueno no. Necesitamos que le lanzes una flecha a Kea. -Dice Ariel serio.
-¿Por qué? Él ya está enamorado de Amelia. -arquea una ceja.
-Kira, esto es serio, Kea perdió la memoria y no puede sentir. Debes hacer que sienta para que Amelia pueda hacer que recuerde ¿Entiendes? -le explica Ariel con cuidado.
-Lo entiendo pero... saben que tengo pésima puntería, además si llego a flecharlo puede enamorarse de alguien más. -habla frotándose su brazo.
-Es mejor darle un tiempo a Kea, recordará de apoco. -le aconseja Amelia pero Ariel no la escucha.
-No me arriesgaré a que cometa más errores en este estado. -niega Ariel con los brazos cruzados.
-De acuerdo. -asiente Kira suspirando.
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