— Mar, ya me voy a trabajar. No te olvides de la comida de Coco, por favor— estaba terminando de guardar mis cosas en el bolso mientras Mar iba saliendo de la cocina.

— Descuida cariño, este pequeño comerá en unos segundos.

— Nos vemos más tarde, cuídate y no olvides tomar tu remedio para la presión— me acerqué con prisa a Margot, le di pequeño beso en la mejilla y luego salí de la casa porque hoy tenía que llegar temprano a la compañía. Mi secretaria había podido obtener algunos documentos que servirán para hundir a Giovanni. Y esa era la razón por la cual debía de llegar temprano, esos papeles tienen que estar en mis manos.

Casi media hora después ya me encontraba dentro la oficina hablando con Mariana, mi secretaria. Ella me tendió los papeles dentro de un sobre y me ha dicho que Giovanni regresa hoy de ese encuentro de negocios al cual había ido. No eran pruebas precisas pero al menos ya teníamos indicios de sus manejos, aquí.

— Muchas gracias Mariana, esto en verdad me ayudará bastante. El abogado podrá entender mejor cada detalle.

— Si, por cualquier cosa, ya hice una copia y se los envié hace unos minutos.

— Perfecto, gracias por todo Mariana.

— De nada, estaré en mi escritorio por si me necesitas. Hoy no tienes ninguna reunión marcada, ni pendientes.

— Eres increíble, en verdad no sé qué haría sin ti. Estuve a punto de dar marcha atrás y no seguir con los planes pero... Con este paso, con estos papeles que encontraste, me siento algo más segura para poder seguir— Mariana no sabía con exactitud todo lo que había pasado pero si sabía por el abogado que todo esto debía de llevarse a cabo bajo estricta cautela y discreción. Y ella creía que era para vengarme de mi ex esposo que me había engañado, maltratado y robado mi dinero. Por mi, eso estaba bien pues no quería andar contando toda mi historia, no cuando aún no puedo confiar de nuevo en alguien más que no sea Margot o yo misma. Aunque debo decir que nuestra relación se ha afianzado un poco más y nos tratamos como amigas. Mariana ha sabido cumplir con sus obligaciones y a pesar de trabajar para mí, en ocasiones, solemos charlar sobre su vida. No fueron muchas las veces que lo hemos hecho pero por lo poco que la conozco, podría decir que es una buena persona.

— No es nada, solo cumplo con mi trabajo. Bueno, estaré afuera por si me necesitas.

— De acuerdo. ¡Oh! Si en verdad ya no hay nada de pendientes, pues des retirarte temprano. No olvido que hoy tienes la cita con tu novio, eh... — sonreí guiñándole un ojo porque ella me había comentado que tal vez su novio le pida matrimonio en esa cena— Disfrútalo.

— ¡Gracias! Te tomaré la palabra, así me arreglaré especialmente para la cena. Muchísimas gracias— Mariana salió de mi oficina y de nuevo me concentré únicamente en los documentos que tenía a mano.

***Un par de horas más tarde ***

— Disculpa ¿puedo pasar?— alcé la vista fijándome en la puerta abierta y Noah frente a mi— Lo siento... No vi a nadie allí afuera y...

— Noah... ¿Qu-Qué haces aquí?— me levanté del asiento acercándome a él totalmente sorprendida. Ante mi pregunta él también quedó un poco sorprendido, no quería sonar borde e inmediatamente me corregí— Pasa, disculpa, mi secretaria tuvo que retirarse temprano pero pasa. ¿Margot esta bien?— ante la duda de su presencia aquí en la compañía lo primero que se me había pasado por la cabeza era Margot.

— Si, digo, no estoy aquí por ella. He venido por mi cuenta. Discúlpame a mi por esta sorpresa pero quise venir a verte. Mejor dicho, tenía que -

— Disculpen ¿interrumpo algo?— Giovanni ingresó a mi oficina observándonos a Noah y a mí con mucha cautela. Cuando dirigí mi vista a Noah pude notar que se había puesto tenso, no quería que nada malo ocurriese así que lo único que se me ocurrió en el instante fue presentarlos a ambos.

— Noah, él es el señor Princigalli, socio de la compañía. Señor Princigalli, le presento a Noah, él es —estaba por decir que era policía pero Noah se adelantó sorprendiéndome con su respuesta.

— Soy su prometido, mucho gusto— le pasó la mano como si no lo conociera, sin embargo podía darme cuenta perfectamente de que Noah estaba a punto de explotar. Sus hombros estabas cuadrados, tensos, sus labios en línea recta y una vena se notaba en el cuello como queriendo salir de golpe. Nunca lo había visto de este modo y era la primera vez desde que vi Giovanni, que no tenía miedo de tenerlo en frente. No con Noah a mi lado.

— Igualmente, sólo venía a hablar con la señorita Sampedro— le devolvió el saludo y al dirigir su mirada en mi, a pesar de mis nervios, intenté ser lo más clara posible.

— Que yo recuerde, usted y yo no tenemos nada de que hablar. Y ya le había pedido encarecidamente que cualquier asunto o pendiente con la compañía, se comunique con mi secretaria— Noah se acercó a mi colocándose de lado y llevando unos sus brazos a mi cintura. Como si quisiera mostrarle a Giovanni que no tenía absolutamente nada que hacer aquí.

— Si, lo recuerdo. Pero creo que tampoco existe alguna regla aquí en la compañía, que prohiba que uno sea amable con los socios ¿no? Digo, aún te estás adaptando a todo el manejo aquí, un poco de ayuda de alguien que conoce bien esta compañía, ¿no estaría mal? ¿O si?

— Señor Princigalli... ¿no? — Noah le dirigió la palabra aún sin despegarse de mi lado como si no recordara su nombre pero estaba segura que apenas podía mencionarlo— si mi prometida necesitara ayuda, o quisiera pedírsela a alguien, creo que ella misma lo dirá. Y cómo veo, no sé lo ha pedido a usted. Así que... tal vez sea mejor que se retire y deje de insistir con su ayuda— esto último lo dijo en tono distinto para que Giovanni comprenda que no tenía nada que hacer aquí— Y esta vez se lo estoy diciendo yo. Porque no habrá una próxima vez, no soy de los que repiten las cosas que dicen.

Giovanni lo miro con desprecio ladeando una sonrisa amarga, sin intimidarse ante las palabras de Noah. O al menos demostró que no le causó absolutamente nada. Lo único que hacía yo, era aferrar aún más mi brazo a la cintura de Noah, haciendo un nudo de su camisa por el puño formado por mi mano. No quería que Noah tuviera problemas por mi culpa, ni mucho menos que se enfrentara a la basura de Giovanni. No valía la pena, podía arriesgar su trabajo y únicamente sería mi culpa.

— Pues créame, con una vez me basta. Pero si yo quiero algo, lo busco hasta encontrarlo. No amedrenta las consecuencias, no me detienen los obstáculos. Sé cómo deshacerme de las polillas. Si me disculpan— Giovanni dejó de observar a Noah para ahora mirarme nuevamente y retirarse de mi oficina— que tengas una buena jornada Sandra— salió de mi oficina y apenas al cerrar la puerta por inercia abracé completamente a Noah llevando mi cabeza a su hombro, sin querer despegarme de él. Me correspondió pero aún podía sentirlo tenso y nervioso. Nos sentamos en el living mientras el acariciaba suavemente mi espalda.

— Estás temblando, ya no estás sola, Dimi. Te prometo que esa basura pagará por todo lo que te hizo— ni siquiera me había dado cuenta de que estaba temblando por culpa de ese infeliz, hasta que Noah se separó un poco de mí y llevo una de sus manos a mi rostro— por eso es que te pusiste mal aquella vez ¿por culpa de esa rata?— no podía mirarlo, me sentía estúpida, aún seguía poniéndome mal al verlo pero no porque sintiera amor por Giovanni, al contrario, era odio, asco y sólo quería verlo pagar por todo.

— Yo... lo siento, no quiero causarte ningún problema. No quiero que por mi culpa tengas que- — Noah colocó su mano derecha sobre mi mentón haciendo que lo mirara y con la otra me acariciaba el rostro.

— No vuelvas a disculparte, nada de lo que pase a causa de basura es tu culpa.

— Pero él te amenazó, Noah. Lo que dijo fue una amenaza, además te observó como si no temiera y como si no le importara lo que le digas.

— No te preocupes por ello, esa rata solo demostró lo que es. Y está claro que le incomodó mi advertencia, soñé todo mi postura tomada ante él. Tengo experiencia en tratar con ese tipo de basuras, no te preocupes por mí. Ahora mejor dime ¿por qué ese idiota te llamó Sandra?— me alejé un poco de Noah pero aún mirándolo a los ojos.

— Inventé ese nombre para poder ingresar a trabajar aquí. Me conocen como Sandra Sampedro, no tenía otra opción, necesitaba poder llegar aquí. Necesito estar aquí, Noah. Es la única forma que tengo, para poder llegar a reunir pruebas que puedan inculparlo de algún delito.

— No me gusta que sigas exponiéndote de este modo— Noah se levantó llevando sus manos a la cabeza y luego volvió hacia mi, colocándose en cuclillas— debemos de encontrar otro modo, ese hombre no puede seguir cerca tuyo. No quiero eso, Dimi. No quiero que sigas en el mismo sitio que ese hombre.

— ¿Y cómo haremos para conseguir pruebas contra él? No, no puedo irme ahora, no puedo dar marcha atrás. Mariana me entregó hoy estos documentos, mira— me levanté buscando los documentos que estaban sobre mi escritorio mientras Noah se levantaba y luego se los pasé — estos documentos ya son indicios de que él está malversando los fondos de la compañía. Y... Y esos viajes que realiza, de seguro son sólo pantallas para maquillar sus negocios socios. Tengo que seguir aquí, es la única forma de conseguir más pruebas. Debo seguir aquí, Noah. No puedo, no quiero que él siga libre, que siga impune y con es a sonrisa en el rostro como si no debiera, como si no temiera a nada, ni nadie. No puedo...

— Shh...—dejó la carpeta en el escritorio y se acercó a mi secando mis lágrimas, no sé mi como había empezado llorar. De pronto me sentí desesperada, impotente y con rabia se no poder hacer algo más— tranquila preciosa. Sé que te sigue haciendo mucho daño, que te hace mal y no sabes todo lo que daría, por no volver a verte derramar una lágrima más por culpa de esa maldita rata. Te prometí que no te dejaría sola en esto, te ayudaré en todo lo que haga falta y sea necesario. Si no nos queda de otra más que este camino, estaremos juntos en esto Dimi. No voy a permitir que ese hombre vuelva a lastimarte, eso tenlo por seguro— me abrazó y me quedé allí, entre sus brazos, era el lugar donde me sentía segura y protegida. Era el lugar que había estado buscando hace mucho tiempo.

— Gra- Gracias Noah— intenté secar mis lagrimas pero él se adelantó con sus labios sobre mis mejillas. Besándome cada lado del rostro y al finalizar dejó un beso sobre mi frente.

— Un día dejarás atrás todo este dolor, volverás a sonreír con el alma y serás feliz. Te lo prometo— Noah me besó de nuevo pero ahora en la boca, lo había hecho nuevamente pero no quería escuchar lo que la última vez. No le seguí y me alejé un poco de él pues sus brazos no me lo permitieron del todo.

— No hagas eso, por favor... no puedo con el hecho de que solo sea un impulso tuyo. Con que no lo sientas de verdad, eso también me lastima Noah— apoyó su frente sobre la mía y dejó escapar un suspiro.

— Perdóname, perdóname por hacerte sentir de ese modo. Pero he sido un idiota, te he mentido al respecto y te lastimaos sin querer. No es impulso porque cada vez que estoy cerca tuyo, cada vez que miro tus labios, cuando hablas, cuando sonríes, cuando lloras. Dios... Yo... quiero besarte Dimi, no porque sea un impulso y nada más. Sino porque en verdad lo deseo, me gustas y me importas mucho.

— Noah ... — no sabía que decir, era la primera vez que él se abría de ese modo.

— No digas nada, salgamos de aquí. Vayamos a un lugar más privado. Tenemos que seguir hablando y aquí, no es el lugar adecuado— asentí lentamente mientras lo observaba aún muda sin saber que decirle. Tome mi bolso y luego salimos de mi oficina dirigiéndonos al ascensor. Al ingresar, como si en verdad fuéramos una pareja de novios, Noah volvió a besarme. Pero esta vez fue diferente, la primera vez había sido completamente dulce, suave como la segunda y la tercera vez. Ahora parecía posesivo, un poco salvaje y egoísta.

Pero sus besos me tenían embrujada, estaba volviéndome adicta a ellos y no sentía temor. No tenía miedo de que los labios de Noah estuvieran sobre los míos. Era algo que me hacía sentir, algo bonito, algo que no imagine sentir de nuevo. Como si volviera a sentir esas mariposas en la panza, como cuando alguien que te gusta, siente lo mismo por ti.

Perdón por la demora 🙏🏻 pero deseo disfruten del capítulo! 🤗
Los espero en los comentarios 😛
Hasta el próximo 💜😘