Capítulo 3 - Situación
Nunca he confiado en nadie, pero tiene razón, debo hacerlo...
Si escape dos veces puedo hacerlo una tercera, así que iré a casa.
Luego de unas dos horas caminando y corriendo por las calles, he llegado a casa... en espera de que no haya nadie ahí.
Mis padres deben estar durmiendo aún...
— ¡Mamá, papá! — Entre sollozos gritaba sus nombres a todo pulmón
Subí las escaleras y corrí por los pasillos hasta su habitación. No puedo creer que esto me este pasando a mí.
— ¿Qué es esto? —grite al abrir la puerta
Comenzaron a mascullar cosas, no les entendía nada púes tenían un pañuelo en la boca. Me acerque a ellos y los desate...
— ¿Qué les ha pasado? —Solloce
Sabía que era culpa de ese tipo, de Jack, es un imbécil. ¿Pero como... ¡Melanie y Vanessa! Son aún más traidoras.
— Unos tipos vinieron y... no escuchamos nada, solo entraron, golpearon a tu padre y a mi me pusieron algo en el rostro... no se más, no recuerdo —Sollozo mamá
El rostro de mi padre esta lleno de moretones, pero no veo sangre, eso es bueno.
— Ellos nos golpearon y luego nos ataron, tu madre estaba inconsciente, pensé que te habían hecho algo antes —Dijo papá
¿Y desde cuando les importa lo que me sucede o pueda pasarme? Nunca ha sido así, o quizá no lo demuestran...
— Esos tipos vienen por mí —Solloce
— Debemos denunciar esto —Grito mamá
— ¿Pero como que ellos vienen por ti? ¿Qué hiciste? —Grito papá
— Son mafiosos —Grite
— Eres una estúpida —Grito mamá
¿Qué? No es mi culpa.
— Te recuerdo que soy tu hija —Grite— tal vez herede la estupidez de ti —Opine
— ¿Cómo te atreves a hablar así? —Grito papá
—No vengan a echarme la culpa, ustedes en parte la han tenido —Grite— Ahora, al menos ayudenme.
Ese tipo sabe donde vivo, quizá lo sabe todo sobre mi.
— ¿Ayudarte? ¿Qué culpa tenemos nosotros de que te metas en esas cosas? —Pregunto mamá
— Primero explica en que te has metido — Masculló papá
— Estaba en una fiesta y... unos tipos se acercaron
— ¿Pero qué has hecho? — Gritó mamá
— No hice nada. Luego de hablar con ellos uno me siguió y me propuso matrimonio, era una reunión donde la mafia elige a sus esposas...
— ¿Y qué hacías tú ahí? ¿Sí sabías las consecuencias por qué fuiste? — Gritó papá
— Los chicos me engañaron, nada ha sido mi culpa.
Mi móvil comenzó a sonar, lo tomé y vi en el identificador que era un número desconocido.
Aún así atendí la llamada, si debo hacer algo lo haré ahora no les tengo miedo a esos tipos.
— Hola.
— Hola sonrisitas.
— Jack.
— Vaya, me recuerdas.
— Claro que te recuerdo imbécil.
— Cuida tu boca.
— Tú no me dices que hacer.
— Escucha como lo hago. Nos encontraremos en tú casa, les dirás a tus padres que te casarás conmigo para que yo los pueda proteger de esos tipos que los golpearon y todo estará hecho, el mismo plan de ayer sonrisitas.
— Pero no quiero, no puedes obligarme.
— A mi no me importa que no quieras ¿Qué decides? ¿Vendrás a mi o iré por ti?
— Correré.
Tire el teléfono por la ventana haciendo que se rompiera en pedazos. Lo sabía ese tipo no me dejará en paz.
Corro escaleras abajo para avisarles a mis padres.
Mis padres estaban sentados en el sofá con dos tipos frente a ellos.
— Tatianna, diles que nos dejen en paz, que no nos hagan daño — Susurro papá
La puerta se abrió dejando ver a otros dos tipos, y a Jack.
— Te lo advertí.
— No.
— Tatianna, ¿tienes algo qué contarles a tus padres? — Preguntó Jack.
— No.
— Oh, ayer eran sonrisas, hoy son ''no'' — Sonrió— Bien, señor y señora Whittemore, tengo el gran honor de desposar a su hija, y no, no es una pedida de mano, lo haré quieran o no.
— Jack por favor, no lo hagas —Solloce— Eres un caprichoso.
— Amor mío, no llores, serás la mujer más feliz del mundo, tendrás todo lo que quieras.
Abro lentamente mis ojos y veo siluetas pasar de un lado a otro.
— Señor, ha despertado.
Volteo a ver de quien es esa voz y veo a un hombre parado en la puerta.
— Vaya, hola amor mío —Sonrió Jack
Trate de levantarme del piso pero no pude, todo se hizo borroso y sentí como me desvanecía de nuevo. Siento unos brazos rodearme y supe que es Jack quien me toma en brazos envitando mi caída.
— Debes... adaptarte a los efectos primero —Susurro
Trate de soltar su agarre, pero me siento demasiado débil.
— No si no me hubieses secuestrado —Gruñí
Me sujeto del cuello de Jack mientras el me tenía en brazos, pero solo por el hecho de que estoy un poco mareada.
— Te llevaré a tu habitación —Informo
— No dormiré en este lugar, no se donde estoy, no se quien eres tú, no quiero estar aquí —Grite
— Si dormirás, lo necesitas, estás en mi casa, sabes perfectamente quien soy y si no quieres púes te obligaré.
— Ésta es tú habitación —Dijo Jack sentándome en la cama
Al ver a mi alrededor supe porque Melanie y Vanessa querían un esposo así... El lugar es hermoso, no me importa que haya sido comprado con dinero sucio, dinero es dinero, lo único que cambia es como te lo ganas...
— ¿Te gusta? —Pregunto Jack
— Si —Sonreí
Trate de seguirle la corriente, no quiero que me haga daño, pero claro, jamás dejería que lo hiciera.
— Aquí hay ropa para ti, tanto tuya como otras cosas más que compre, tienes todo tipo de productos para el higiene personal... maquillajes, todo lo que usa una chica.
— Gracias —Susurre
— ¿Por qué ese cambio tan repentino en ti? —Pregunto Jack
Quiero llorar ahora mismo.
— Púes... ya se que me quedaré aquí, no tengo escapatoria, por lo que vi este lugar esta lleno de armas y hombres extremadamente fuertes —Suspiré
Si, habían hombres armados, muchos a decir verdad pero puedo escapar de ellos si logro ganar la confianza de Jack.
— Eres inteligente —Opino Jack— Más te vale que no trates de escapar —Advirtió
Planeaba ganarme la confianza de Jack, rondar por la casa, ver los puntos claves y cuando baje la guardia escapar de aquí. Pero se llevo mi maleta, no podré guardar ropa.
Pensé en un plan B, le robaría a él mismo. Sólo que para eso debo ganar aún más confianza... lo cual será difícil; casi no hablamos en esto cuatro días que llevo aquí, cuando trato de sacar información se cierra y no dice más. Camino por el lugar y hay sitios a los cuales no puedo pasar porque sus hombres no me lo permiten.
— Señora debe bajar para el desayuno.
Como siempre uno de los hombre de Jack viene a avisarme que debo hacer... Lo he dejado en su lugar varias veces, se supone que soy ''la señora de la casa'' pero Jack siempre pone muecas muy extrañas cuando lo hago es como si me estuviera regañando.
Quizá soy yo quien se está adaptando muy rápido a esto.
— Hola amor mío —Sonrió Jack
— Hola —Susurre
— Quería hablar contigo. Esta noche vienen unos amigos, vienen a conocerte —Me informo—Quiero que hagas todo lo que te diga —Ordeno
Lo sabía, esto traerá consecuencias, y las pagaré todas yo, me harán daño.
— ¿Como qué? —Pregunte de mala manera
— Te portarás cariñosa cuando estés conmigo, pero no tanto eh, serás amable y si alguno llega a insinuar algo te alejas y se lo informas a Clark.
— ¿Algo más? —Pregunte soltando el tenedor
— No, solo ponte hermosa. Leah te llevará lo que te pondrás en unas horas.
— Bueno. Yo también quería hablar contigo —Admití
— Con una condición —Sonrió
De cierta manera... le estaba tomando cariño a este hombre, no le diré nada sobre eso, pero si, tiene ese aspecto frío que te hace tenerle miedo pero cuando le hablas tiene un pequeño brillo en los ojos...
—¿Me pondrás una condición para hablar contigo? —Pregunte incrédula
— Si, más bien... es una circunstancia para poder hablar mejor —Admitió
Aunque tenía un poco de nervios no me iba a doblegar.
— Púes, dime...
— Sientate aquí, en mi regazo.
— Bueno —Suspiré poniéndome de pie
Era algo incomodo pero a medida de que pasaban los segundos me acostumbre...
— Bien, quería hablarte sobre algo que he querido desde que llegue —Admití y el asintió— quiero salir.
Sonrío y luego frunció un poco el ceño haciendo una mueca.
— No, no lo permitiré.
— Por favor Jack, me aburro en este lugar —Bufe— Por favor.
Mis ojos se cristalizaron un poco y su expresión cambio por completo.
— Te seré sincero Tatianna, te quiero como esposa porque al verte me enamore de ti, porque eres hermosa, eres etéreo... tu manera de ser me encanto. Y no quiero compartirte, no quiero que salgas y que... trates de escapar.
— Jack, con eso lo único que logras es asustarme. Te tengo miedo, estoy temblando aquí donde estoy; tengo miedo de que hagas daño.
— A la única o únicas mujeres que soy capaz de dañar son a las mujeres de mis enemigos.
— ¿Eso debería calmarme? —Pregunte levantándome
— Si, Tatianna te quiero solo para mi y eso es todo, no saldrás de este lugar y punto.
En ese momento supe que jamás saldría de aquí, comencé a llorar, quisiera pero a la vez no volver a mi vida de antes.
Subí a mi habitación.
¿Será verdad lo que dijo? Si, claro que es verdad, si no fuera así él no se hubiese dado la molestia de ir por mi. Y se que no me quiere de rato, porque me hará su esposa, me presentará con sus amigos... Se supone que debo tener miedo, púes hoy estaré rodeada de mafiosos y de muchos hombres armados, más de lo normal.
Sería una oportunidad. Ninguno de ellos trabaja para Jack, podría insinuarme con alguno y que me saque de este lugar, luego escaparía... no, estoy pensando en algo imposible, quienes vendrán deben ser personas de mucha confianza para Jack, no lo traicionarían.
Mi vida en momentos como estos no tiene sentido. ¿Para que escaparé? No tengo familia ni amigos, nunca los he tenido. No tengo a donde ir, me quedaré aquí, lo tendré todo si me quedo. Pero no se cuales son los riesgos de esto...
Hablaré con Jack. Abro la puerta de mi habitación para ir a hablar con él, pero Clark esta justo frente a la puerta.
— ¿Quisieras hacerte a un lado? —Pregunte
— No. No puede salir sin una orden.
— ¿Quien lo dice? ¿Jack? —Pregunte y el asintió— Púes yo soy su mujer, por lo tanto te ordeno que te apartes que voy a salir.
Clark se hizo a un lado sin peros y cuando estoy por caminar hacía las escaleras Leah aparece por el pasillo.
— Señora, le he traído su ropa.
— Déjala en mi habitación —Ordene
— Debe empezar a arreglarse, los señores llegarán en dos horas.
— ¿Tan pronto? ¿Que hora es? —Pregunte
— Son las dos de la tarde.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top