DESMOND

Conan no reacciona, se ha quedado paralizado ante este recuerdo. Sus padres siguen caminando camino abajo, hacia Agroz... hacia su fin. La madre de Conan es la que toma presencia del hechicero herido, le avisa a su esposo y juntos corren a ayudarlo, se dejan caer junto a Agroz tomándolo de las manos.

—¿Qué fue lo que te sucedió? —El padre de Conan le pregunta con insistencia—. No puede ser... estás muriendo.

—Fue... —Agroz intenta pronunciar algo, pero está demasiado herido—. Fue el kraken.

—¿El qué? —Pregunta la madre de Conan limpiándole la sangre con su propia manga—. ¿Vienes del océano?

—Sí... vengo de los reinos lejanos.

La madre de Conan voltea a ver a su esposo algo asustada y sorprendida, él le hace señas de que siga insistiendo en hacerle preguntas.

—Tus ojos son rojos, tus brazos están llenándose de marcas. Tú eres un hechicero oscuro.

—Y tu una sanadora —Agroz le sonríe como puede dejando ver sus colmillos afilados—. Son hechiceros de sanación ¿no?

—Te salvaremos —La madre de Conan toca su mejilla, su esposo la detiene viéndola con negación—. Tenemos que hacerlo, está muriendo, el vino de los reinos lejanos hasta acá...

—Me tardé dos años —Agroz vuelve a hablar—. Dos años para encontrarlos.

—¿Ya vez? —Vuelve a decir la madre de Conan—. No puede morir así.

—No sabemos quién es —El padre de Conan mira a su esposa, pero ella le ruega con su mirada, el padre de Conan acepta soltando a su esposa, rendido da un último vistazo al mar—. Lo haremos juntos.

—¿Hacer qué? —le pregunto a Conan que poco a poco ha avanzado para ver mejor—. Conan...

—¿Me van a salvar? —Pregunta Agroz mientras tose sangre—. ¿Lo harán?

—Lo haremos —La madre de Conan pone su mano en el corazón de Agroz mientras con la otra se toca el vientre, un vientre demasiado abultado

—No puede ser —Me digo a mí mismo tapándome la boca

El padre de Conan pone la mano sobre la de su esposa y juntos se concentran para poder salvarle la vida a la persona que menos se lo merecía. Del corazón de cada uno salen flotando burbujas de color rojo, bailan de un lado a otro mientras se van acercando... una, dos, tres, cuatro... ¿Por qué hay cuatro burbujas si solo hay tres personas? Escucho un golpe sordo y volteo a ver a Conan que se ha dejado caer de rodillas.

Eso significa que Conan es la cuarta burbuja. Su madre lo lleva en el vientre. ¿Eso significa que Conan también salvo a Agroz?

—¡No puedo creerlo! —Agroz se levanta como si nada, sus heridas se han curado, ya no hay sangre en su cuerpo, está sano y salvo—. ¿Que pasara ahora? He escuchado sobre su magia, sé que este hechizo no es sencillo.

—Estamos conectados —La madre de Conan suspira algo cansada—. Tu alma y la nuestra se han conectado.

—Debes ser muy cuidadoso, ¿comprendes? No querrás desperdiciar esta oportunidad —El padre de Conan se acerca a Agroz—. No planeo morir por tu culpa, no dejaré que nada le pase a mi familia.

—¿Acaso dicen que si llego a morir ustedes igual? —Agroz se espanta un poco tocándose el corazón, los hechiceros rojos asienten lentamente—. Entonces si ustedes mueren... ¿Yo también?

—Si —El padre de Conan toma la mano de su esposa—. Así que mantente alejado de los problemas, nosotros lo haremos... nada malo nos ocurrirá si somos cuidadosos.

—En cualquier momento podemos quitarte los pedazos de nuestras almas que ahora viven en ti —La madre de Conan lo mira de arriba a abajo—. Y cuando eso pase morirás en segundos.

—¿Es una amenaza? —Agroz se ve irritado

—De nada —La madre de Conan le dice ignorando su pregunta con una sonrisa—. Fue un gusto haberte salvado la vida.

Se ve que Agroz va a decir algo más, pero el recuerdo se esfuma frente a nosotros. Un silencio doloroso se esparce alrededor de nosotros. Conan no se levanta, ni yo puedo moverme, mis piernas no responden, mi cabeza está en blanco y mi corazón parece querer salirse.

—¿Esto era lo que no querías decirme? —Susurro y mi voz hace eco—. ¿Conan?

Lo veo acariciando el anillo que le regale, una lágrima cae sobre la obsidiana y es ahí donde mis piernas por fin se mueven, me dejo caer junto a Conan intentando entender su dolor.

—¿Tu secreto era que tus padres y tú salvaron a Agroz?

—Ni siquiera puede elegir —Conan me mira intentando contener las lágrimas—. Yo no sabía lo que pasaba, nunca lo supe. Mis padres me mintieron toda la vida, guardaron esto y me dejaron solo.

—Por eso Agroz se llevó a tus padres al templo Ardor —Le digo tomando su mano—. Por eso los asesino y por eso no te ha hecho nada a ti. Eres lo único que le queda.

—Soy solo una marioneta para el Desmond, solo me usa para seguir con vida...

—Mi padre quería asesinarte, los reyes querían asesinarte para poder asesinar a Agroz también. Ellos sabían todo, ellos lo sabían. —No puedo seguir aquí, no puedo siquiera respirar, el aire ya no pasa, me siento demasiado mareado para continuar

—Pensó que si solo tenía a una persona con vida todo sería más fácil... que todo saldría bien para él. Solamente me utiliza, soy su juguete personal.

—Mi padre ya no está intentando matarte... —Empiezo a conectar todo en mi cabeza, con un dolor sofocante me doy cuenta de todo—. Porque tú salvaste a Luca... tú y mi hermano están conectados y mi padre lo sabe, ¿cierto?, lo supo antes que yo.

Tomo a Conan de los hombros haciendo que se gire hacia mí, con voz dura y seria, llamo su nombre, le ruego que me mire y cuando lo hace ya no veo nada en él, solamente a alguien que ha sido manipulado sin poder hacer nada.

—Dime la verdad, dímela y te dejaré en paz —Le digo negando con la cabeza intentando no derrumbarme—. Realmente tu no querías despertar a Luca. Tu mismo lo dijiste una vez... que este hechizo era poderoso y que traía muchas consecuencias. Tú no querías despertar a Luca porque sabías que se conectaría con Agroz... todo lo que me dijiste, todo lo que dicen los demás de que lo despertaste solo por mí, solo porque Luca era la única persona que podría salvarme de esa boda ¿era mentira no?, quizas los demás si te creyeron y aún lo siguen haciendo —Me acerco más y nuestros labios quedan a pocos centímetros—. Pero yo ya sé la verdad. Agroz te obligo a hacerlo ¿o me equivoco?, hace unos minutos dijiste que eres su marioneta... lo hiciste para él, no por mí, nunca fue por mí.

—Desmond eso...

—¡Dimelo! —Alzo la voz levantándome y alejándome de él, Conan se levanta siguiéndome—. Me dio demasiada alegría ver a mi hermano ese día en la iglesia, pero ¿sabes a quién quería ver pasar por esa puerta? ¡a ti! —Me acerco empujándolo un poco—. ¡Maldita sea Conan Chalamet! Quería verte a ti derrumbar el muro que mi padre construyo para nosotros porque para ser sinceros, aparte de Luca, todos sabían que tú podías ser el que detuviera esa boda. Agroz te pidió despertarlo, ¿verdad? —Conan no me contesta y eso en él significa que tengo toda la razón, canalizo mi energía en mis manos, me concentro viendo fijamente y alzo mis manos haciendo un movimiento para que Conan venga hasta mí, un déjà vu confunde mi mente, aun recuerdo el día en que hice lo mismo donde Conan y yo pasamos el mejor día de nuestras vidas—. ¡¿Verdad?! —Le vuelvo a repetir ahora teniéndolo más cerca

—Agroz me pidió que despertara a Luca —Empieza a decir—. Él quería hacerlo porque sabía que los reyes me asesinarían... yo lo hice, desperté a Luca para que él no muriera, para salvarlo y para salvarme a mí mismo ¡Lo hice también por mí! Si Luca se anclaba también a Agroz, los reyes no intentarían nada, me dejarían en paz y Agroz podría seguir como siempre.

—¿Cómo siempre? —Mi voz suena irreconocible—. Agroz está haciendo planes para conquistar los reinos, para asesinar a los reyes, para que algún día él sea el máximo gobernador, el rey supremo. Usaste a mi hermano como carnada como si no fuera una persona.

—¡¿Y yo qué?! —Conan se altera intentando alejarse de mí, pero lo sigo reteniendo con mi energía—. ¿Merecía morir por un destino que no elegí?

—¡Es lo que hubiera hecho yo!

Mis palabras parecen marcarlo demasiado, su expresión se hace más fría y seria, su cabello parece perder color.

—No dejaré que nadie me culpe por querer vivir —Conan me dice saliendo del trance de mi energía, se rasca su nariz y se acomoda su cabello hacia atrás—. Tome decisiones sin ver las consecuencias de ello, lo acepto, sin embargo, no pienso oír que fui un cobarde solo por no atreverme a dar mi vida por el bien de estos reinos... no cuando por mucho tiempo me trataron y me siguen tratando como una escoria, como una rata, como si fuera lo más asqueroso que hayan visto.

Un recuerdo más viene a nosotros, nos golpea de un lado a otro llevándonos hasta la cima del castillo Umbria, de mi castillo. Mi vista va hacia la de Conan, nuestras miradas irradian enojo y frustración, unas voces nos hacen olvidar nuestra plática de hace minutos para poder concentrarnos en lo que dicen.

—¿Voy a morir? —Una voz femenina tan familiar para a la vez tan lejana viene del balcón—. Dímelo y juro que jamás volveremos a vernos.

—Quizás no mueras si sigues siendo tratada con magia roja, yo no puedo hacer nada, ya no. —La voz de Agroz se escucha mucho más relajada que de costumbre

Al ver con quien está hablando Agroz me quedo pasmado, quiero agarrarme de algo, gritar o salir huyendo de aquí. Mi madre mira con anhelo al oscuro frente a ella, con esos ojos verdes tan soñadores y maravillosos, su cabello rubio cae en bucles sobre sus hombros, parece realmente un ángel.

—¿Tienes que hacer esta guerra? —Pregunta mi madre con miedo—. Quizás pueda convencer a mi esposo y...

—¿Para qué? —Agroz mira al cielo estrellado—. ¿Para que me vuelva a sacar a rastras como un animal? Yo solo quiero un reino digno para todo ser mágico de estas tierras. Tu esposo no quiere eso, está demasiado cómodo con todos esos hechiceros que le hacen la vida más fácil.

—No digas eso Agroz —Mi madre lo toma del pecho y unas ganas de vomitar vienen a mí—. Él no es así, él trata bien a todos los hechiceros.

—¿Acaso no quieres un reino donde ellos se sientan más cómodos Cera? —Agroz la toma de las manos—. Porque juro que todos los hechiceros se sienten fuera de lugar siempre, no creen que encajan en ningún reino y si yo hago el mío... si eso pasa todo será mejor.

—Y aun así me atacaste con tus marcas oscuras —Mi madre recorre los brazos de Agroz con sus dedos

—Sabes que no fue así, yo no tuve la culpa —Agroz cierra los ojos algo enojado—. Tú te interpusiste. Además, no fue con mis marcas oscuras

—Ibas a matar a mi esposo —Mi madre lo ve con irritación—. Mataste al comandante... a su mejor amigo, ¿tú dime como no me iba a interponer?

—El dejo que mi hechizo cayera en ti Cera, en cuanto vio la oportunidad fue por su amigo ya muerto... en vez de protegerte a ti, a su esposa, a su hijo. Te dejo sola sin importar que diste la vida por él —Agroz intenta acariciar su mejilla, pero mi madre se aleja—. Él no te merece.

—Tampoco tú —Le responde mi madre sin bajar la mirada

—Pero aquí estás —Agroz señala todo el lugar—. Estás aquí conmigo en medio de la noche en vez de estar dormida junto a tu rey.

—Él no es mi rey —Mi madre se cruza de brazos—. Y esta será la última noche que nos veamos.

—¿Por qué? —Agroz se aleja algo herido

—Eres un asesino. Y empezarás una guerra que derramara sangre sin piedad, no quiero ser parte de eso, no contigo. Me quedaré protegiendo lo que es mío —Mi madre se toca el vientre y Agroz mira como ella lo protege

—Algún día te arrepentirás, igual tu querido esposo. Le arrebataré todo, a sus hechiceros rojos, el respeto de su reino y sobre todo su trono —Agroz se aleja más llegando a la orilla del balcón—. Su corona será mia.

Mi madre y él se quedan viendo unos segundos con miradas tristes llenas de agonía y enfado.

—Vas a perder.

Agroz le sonríe de oreja a oreja, parece que aquellas palabras pronunciadas por mi madre lo único que hacen es inspirarlo más. Agroz se deja caer balcón, mi madre da un grito y corre para ver. El recuerdo desaparece dejándonos sumidos en humos de dolor y pesadez.

—Mi madre y Agroz —Empiezo a decir, pero no puedo continuar

—Solo se ve que eran amigos —Conan intenta arreglar las cosas—. Solo eran amigos.

—¿Amigos? —Volteo a verlo con indignación—. Eran más que eso... se conocían demasiado bien. La historia de ese día, la que mi padre le contó a todos, es mentira. Mi madre fue hechizada por salvar a mi padre, no porque Agroz la descubrió yendo por ayuda. Más y más mentiras, no lo soporto —Conan intenta tomar mi brazo y yo lo empujo—. Cortaré la cabeza de Agroz, se la arrancaré y la quemaré —Volteo a verlo, me mira demasiado preocupado, puedo ver el miedo en sus ojos—. Sin importar nada. Seré yo quien lo asesine, el que termine todo esto.

Otro recuerdo empieza a formarse llevándonos a la sala de tronos, donde mis padres están sentados, en una esquina el padre de Medras tiene su espada lista para atacar, su cabello morado es igual que el de su hijo, solo que las canas ya han aparecido por doquier. Frente a mis padres haciendo una reverencia se encuentra Agroz que sonríe con burla, después le da una mirada a mi madre, una mirada bastante profunda, bastante cercana.

—Déjate de ridiculeces —Mi padre le dice, se ve mucho más joven y sin cara de mala muerte—. Habla ya, sabes que no me gusta la espera.

—Ya sabes por lo que vengo —Agroz se acomoda su cabello y hace relucir sus marcas oscuras—. Créeme que me canso de explicártelo cada vez que vengo, siempre lo ignoras, parece que tu mente es demasiado estúpida para retener información simple.

Mi padre se empieza a reír, el padre de Medras blande su espada, algo inútil, ya que Agroz puede atacarlo con más crueldad. Mi padre hace señas de que baje su espada y el padre de Medras se relaja un poco.

—Quieres hacer un reino y bla, bla, bla. Ya lo sé y ya te dije que eso es imposible —Mi padre mira a mi madre por apoyo, pero ella no le quita la vista a Agroz—. Ningún reino te apoya, nadie quiere un nuevo reino.

—Porque les da miedo —Agroz admite pronunciando las palabras como su mejor arma—. Les da miedo, saben que si lo hago, mi reino será el más poderoso. Tendría a todos los hechiceros viviendo en él y ustedes se quedarían sin magia, sin poder... porque saben que sin los hechiceros no son nada.

—¡Basta! —Mi padre se levanta de su trono caminando directo a Agroz y tomándolo del cuello de su camisa mientras saca su espada posándola en su cuello, Agroz da una carcajada divertido por la situación—. ¡Nunca te daré el derecho y el honor de portar una corona! ¿Crees que no sé lo que eres? No tienes corazón, está hecho de piedra, emana un olor a muerte y tus poderes son demasiado peligrosos para ti y para todo el mundo. Así que no, jamás serás rey de absolutamente nada.

—Kaner... —Mi madre llama a mi padre, él no lo hace caso—. Déjalo ya.

Esas palabras hacen que mi padre explote, suelta a Agroz y mira a mi madre demasiado enfadado.

—¿Estás del lado de este maniático? —Mi padre señala a Agroz y después a todo el lugar—. Nos arrebatará todo por lo que hemos trabajado si hace lo que quiere.

—No lo estás escuchando con atención —Mi madre trata de explicarle—. Él solo quiere un reino para la gente mágica. No nos quitará nada, no nos está quitando nada. Los hechiceros no son de nuestra propiedad Kaner, ellos merecen su reino y...

—Con que siempre fue así —Mi padre se pasa los dedos por la boca sonriendo con dolor—. Lo apoyas porque nunca dejaste de ser su amiga, ¿verdad?, te dije que te alejaras de él, que solamente quería enredarte en sus mentiras y ya veo que lo hizo, no solo te enredo en sus mentiras sino también en su cama...

Mi padre sale volando por los aires. Agroz lo ha aventado con sus marcas oscuras que salen de su cuerpo. Mi madre da un grito y corre por mi padre, es ahí donde el padre de Medras se interpone, la pelea de él y Agroz no duro ni cinco minutos, unas lágrimas se me escapan al verlo caer de espaldas con una marca oscura atravesándole el corazón. Mi padre vuelve en sí viendo el cuerpo de su amigo muerto. Jamás olvidaré el grito de dolor que mi padre dio, ni la desesperación en la que corrió por él. Agroz vi su oportunidad, mi padre herido y solo, corriendo sin prestar atención a su alrededor, así que hace un hechizo en sus manos, una especie de flecha negra y la lanza apuntando a la cabeza de mi padre. La flecha no da en el blanco porque mi madre ha empujado a mi padre y ella es la que termina recibiendo el hechizo.

—¡Cera! —Agroz grita y corre por mi madre

Mi padre parece darle igual, se levanta y corre por su amigo. Ni siquiera se vio ni un poco preocupado por su esposa, por mi madre. El enojo y la decepción que siento ahora es demasiada y sé que Conan lo puede sentir, sé que él sabe como me siento y eso me hace sentir peor. El recuerdo se hace borroso y nos devuelve al fondo estrellado de siempre.

—Fueron amantes —Digo como puedo—. Mi madre y Agroz... y tú —Señalo a Conan con culpabilidad—. Tú... yo... esto no va a funcionar.

No sé en que momento regresamos a la torre lunar, la madre Selene y Amber nos miran a los dos muy preocupadas. No espero a que Conan responda, tampoco hago caso a las voces de fondo, oigo que la madre Selene me llama, pero yo ya estoy bajando las escaleras y en cuanto salgo de la torre y veo a Medras recargado en un árbol, unas cuantas lágrimas brotan de mis ojos, él me mira sin entender, lo tomo del brazo demasiado fuerte.

—Vámonos de aquí —Veo que Binu y Félix me miran de arriba a abajo—. Binu llévanos a casa.

La tomo de la mano atrayéndola detrás de mí, hago lo mismo con Medras y me quedo viendo a Félix que poco a poco entiende todo.

—Lo siento —Mis palabras suenan tan sentimentales, llenas de dolor y tristeza, de conmoción y de anhelo, Félix puede sentirlas y da dos pasos hacia atrás

Jalo a Medras y Binu por el camino del bosque, lejos de la torre lunar, lejos de Conan y lejos de los recuerdos de Agroz. Tengo que tomarme un tiempo incluso de mí mismo, de mi vida y de mi futuro. Luca sabrá esto, Medras igual... les diré la verdad, no me importa si se los digo de la manera más cruel, ni la más dolorosa, solamente lo diré, merecen saberlo todo. Una parte de mí aún se niega a creer que en cualquier momento puedo perder a mi hermano y a Conan, pensar en ello hace que mi alma arda, que se asfixie y que se ahogue en lo más profundo de mi ser.

Lo sé, nadie se esperaba algo así ¿Verdad? Les juro que yo tampoco jajaja al principio dude pero creo que esto le da un toque más a la historia yyy es uno de mis capitulos favoritos.
La verdad ya quiero que conozcan al hijo de Agroz pero eso tendrá que tardar, explicaré también la verdad atrás de la relación de la madre de Desmond y Agroz ¿Ustedes se lo esperaban? Hasta el próximo capítuloooo<3

Ala. 👑