27. Sin prejuicios

Sonrío intentando no estar muy seria, esto no es tan cómodo como se ve en las películas, es completamente abrumador. Resulta que Dylan me invitó a otro evento, el lanzamiento de un nuevo cd de una banda que nunca en la vida he escuchado, pero mi novio parece ser bastante amigo de los miembros. Es una fiesta aburrida o puede que lo sea porque no conozco a nadie. En realidad, hay varios factores por los que esta fiesta me parece aburrida y me siento incómoda: los fotógrafos y sus flashes, la música es lenta y algo depresiva, los camareros ni siquiera sonríen o son muy amables cuando pasan con las bandejas, el vestido es corto y ajustado, por ende, se sube con cada paso que doy, los pies me están matando por el dolor que me causan los tacones y Dylan saluda a tantas personas que no tengo ni el menor interés de conocer. La comida no está tan mal, pero pudo haber sido mejor. Creo que Ari debe estar delirando con esta pésima organización y lo percibo cuando noto que no deja de tocar su cabello. Drew está totalmente cómoda, como si estuviera en su casa; habla, ríe, hace bromas y realmente está disfrutando esto.

Siento el brazo de Dylan rodearme desde que llegamos, no se ha apartado de mí y es algo que agradezco, pero de todas formas me siento incómoda y seguro lo debe notar. Lo peor es que la noche va por la mitad, espero que mejore en algún momento.

Bajo el vestido cuando lo siento subirse, no quiero mostrar mi trasero. Es un bonito vestido blanco ajustado, tiene un escote redondo que hace resaltar bastante mi busto y una parte descubierta en mi espalda media. Los tacones son dorados y bastante altos, pero solo llego a la barbilla de Dylan, normalmente solo alcanzo su hombro.

Suspiro antes de deshacerme del brazo de mi novio, que ríe con los miembros de la banda y sus novias. Me he perdido el chiste, pero tampoco creo que haya sido la gran cosa. Le entrego la copa vacía a un camarero que pasa.

—Voy al baño —murmuro por lo bajo antes de alejarme.

El baño es bastante elegante, de tonalidades rojas y doradas, el espejo es enorme y cada rincón está minuciosamente limpio. Un orden bastante satisfactorio para la vista. Hay una chica retocando su maquillaje frente al espejo y suspiro antes de observarme un poco y lavar mis manos.

—¿Aburrida? —inquiere ella sentándose en el lavabo y observando su reflejo.

—Un poco —admito dándole un vistazo. Tiene una falda negra de charol y una camisa roja traslúcida, medias negras y llamativamente porta unas botas de cuero. Su cabello es oscuro, corto y tiene muchos rulos pequeños, su piel es morena y sus labios son bastante grandes, puede ser que luzcan más grandes por el labial rojo, ojos oscuros y nariz ancha—. ¿Y tú?

—La música de este disco tiene muchas baladas, esperaba más rock, así que estoy algo aburrida refugiándome en el baño.

—Sí, no son muy llamativas las canciones —concuerdo con una sonrisa—. ¿Conoces a la banda?

Me observa sorprendida por un momento y luego ríe.

—Tú no conoces a la banda, ¿verdad? —cuestiona y niego con mi cabeza.

—Acompaño a mi novio que es amigo de los miembros de la banda.

—¿Cómo se llama?

—Dylan Eriksen.

Sonríe asintiendo. Parece que ella también lo conoce.

—El buen Dylan —murmura guardando su maquillaje en el bolso—. Entonces, tú debes ser su hermosa Maravilla —asegura apoyando los codos en sus rodillas y la cabeza en sus manos.

Me sorprende un poco que ella me llame por el mismo apodo que utiliza Dylan.

—¿Te ha hablado de mí?

—La pregunta correcta sería: ¿cuándo no lo hace? —bromea antes de extenderme su mano—. Roxy Bloom, hermana de Oliver Bloom.

Sonrío tomando su mano y agitándola.

—Katerine James y no tengo idea de quién es Oliver, pero estoy segura de haberlo visto —comento y ella ríe—. Es que Dylan me ha presentado a muchas personas y ya he olvidado los nombres de la mayoría.

—Es el bajista de la banda —aclara y vuelvo a sorprenderme, debe ser muy obvia mi expresión porque ella ríe—. No te preocupes, mi hermano y yo somos un asunto aparte. —Asiento sin saber muy bien qué decir—. ¿Te escondes de Dylan?

—Más bien, de todo —confieso con una sonrisa un poco tensa antes de también sentarme en el lavabo cerca suyo, pero no tanto—. Soy tímida y estos eventos requieren mucha exposición y, aunque no seas una persona famosa, acabas llamando la atención de alguna manera. Me siento algo incómoda con las cámaras y este vestido que no deja de subirse a cada paso que doy. —Suspiro jugando con mi cartera y balanceando mis piernas—. Es la segunda fiesta a la que vengo y no creo poder acostumbrarme a toda esta exhibición.

—¿Dylan te ha obligado a venir? —inquiere con el ceño fruncido.

—¡No! No, Dylan supo que no iba a gustarme mucho antes de ir a la primera, pero yo quise hacerlo para no sentirme excluida y tratar de acompañarlo en sus cosas.

—Eso es bastante dulce, pero es una mierda. No tienes que hacer cosas que no te gustan y muchos menos pasar por un mal momento solo para ser parte de algo y complacer a alguien más.

—Es que... —Suspiro. Sé que en parte tiene razón—. Me gusta ir a fiestas, mi mejor amiga siempre organiza y son increíbles. De hecho, amo ir de fiestas, pero estas son totalmente diferentes y creo que...

—Creo que no te gustan las fiestas de famosos —comenta divertida.

—Es muy diferente —secundo—. Hay miles de flashes y todas esas personas famosas fingiendo divertirse cuando seguramente puedan clavarte un puñal por la espalda ante el primer medio que se les presente.

Ríe asintiendo con su cabeza. Me cae muy bien, supongo que es porque parece ser bastante sincera y agradable. Es bastante raro que congenie con alguien en alguna fiesta, pero supongo que las chicas tenemos esa virtud de hacer amigas en los baños de mujeres.

—Estás siendo algo exagerada y juzgando a esas personas sin conocerlas —replica con una sonrisa antes de bajarse del lavabo y mirarse en el espejo—. Pienso que deberías librarte de todos esos prejuicios y dejarte llevar. Los fotógrafos solo sacan fotos a los famosos y sus acompañantes, Dylan no es tan famoso, pero no creo que su relación sea secreta...

—No lo es —confirmo.

—Entonces no te preocupes, solo será alguna foto y listo, no estarán toda la fiesta sacando fotos, ellos también quieren disfrutar la celebración —asegura con una sonrisa—. En cuanto a los invitados famosos, puedo prometerte que ninguno de ellos es así. Bueno, quizás lo comentan entre ellos porque algunos son bastante chismosos, pero no van a la prensa. —Toma mi mano y tira suavemente para que me ponga de pie. Acomoda mi cabello con una pequeña sonrisa—. Si te preocupa salir mal en las fotografías, puedo asegurarte que no será el caso. Estás preciosa y dudo que puedas salir mal.

Sonrío y ella me abraza. Esta mujer me cae muy bien. Le devuelvo el abrazo sintiendo su perfume frutal... Creo que ahora tengo ganas de comer un par. Bueno, los antojos casi no han aparecido, pero sí algunas náuseas. También parece que estoy desarrollando cierto asco por las cosas dulces, me provocan náuseas mientras que algunos antojos por ciertas frutas o comida chatarra hacen que Dylan recorra media ciudad para traerme. No puedo quejarme de él, es de lo más atento y bueno conmigo. Sabe exactamente qué hacer y cómo tratarme.

Roxy se separa de mí y me sonríe antes de tomar mi mano para salir del baño. Esta chica me cae muy bien y lo compruebo cuando nos dirige hacia los miembros de la banda y les pide que tocan algún éxito en vivo. La fiesta cobra mucha más vida cuando tocan temas mucho más movidos y que sí he escuchado antes, incluso algunos covers. Mi nueva amiga me cuenta que está saliendo con el baterista, pero no es algo muy oficial. Es bastante achispada y frontal para decir la verdad. Intercambiamos números y en ningún momento cuestiona por qué no tomo alcohol. Hablamos y bromeamos un montón, incluso llego a olvidar que mis pies duelen y el vestido se sube todo el tiempo, simplemente lo dejo ser. Me presenta a muchos otros famosos y acompañantes y, siguiendo su consejo, me doy cuenta que no son esas personas mentirosas de las que temía, consigo relajarme bastante y disfrutar de la fiesta. Dylan habla con otros famosos e incluso baila con las chicas y cada cierto tiempo se acerca para asegurarse que me encuentro bien.

Estallo en carcajadas con la anécdota de Brian, un compositor que lleva en la música unos cuantas décadas. Bebo un poco de jugo cuando siento un brazo rodear mi cintura y la presencia de Dylan a mi lado.

—Dylan, tienes suerte de contar con la encantadora compañía de esta bella dama —halaga Brian con una sonrisa.

—¿Verdad que es increíble? —inquiere besando mi mejilla y siento que me sonrojo mientras los demás sonríen—. Se las voy a robar un momento. —Sonrío a todos dejándome guiar por Dylan mientras bebo del jugo—. ¿Quieres bailar?

Asiento y dejo la copa sobre una mesa antes de que vayamos a la pista, hay una canción lenta y sonrío un poco mientras abraza mi cintura y yo rodeo su cuello con mis brazos. No decimos nada, pero no es necesario hacerlo; este momento no necesita de charlas. Cierro los ojos y apoyo mi cabeza en su hombro mientras nos movemos sutil y suavemente.

—Quiero hablar de un par de cosas contigo —susurra y hago un sonido de afirmación para que continúe hablando—. Primero quiero saber cómo estás, te he visto con Roxy bastante cómoda y no quería interrumpirte.

—Ella es muy divertida —admito sintiendo que esta música me relaja mucho, es probable que me duerma en poco tiempo—. Estuve bailando y comiendo un par de cosas.

—¿Has tenido náuseas?

—Tengo antojos de cerezas, nada de náuseas —informo y ríe por lo bajo. Aparto mi cabeza de su hombro y fijo mis ojos en él—. ¿Qué más querías decirme?

—En todos estos meses he aprendido a conocerte muy bien y sé que cuando te fuiste al baño no te encontrabas muy a gusto con la fiesta. —Asiento, no hay por qué negarlo. Si no fuera porque hablé con Roxy, estaría bastante malhumorada ahora mismo—. Quería hablar contigo para decirte que podíamos irnos si no te sentías a gusto, pero te fuiste con Roxy.

—Sí, es que ella...

—Maravilla, no has venido a esta fiesta para estar pegada a mí y sonriendo como una muñeca. Tú puedes divertirte todo lo que quieras y no necesito que me des explicaciones por ello. —Sonrío y me pongo en puntas de pie para besar sus labios cortamente—. Yo realmente quería que disfrutaras la fiesta, pero no sabía cómo hacerte sentir cómoda con todo esto y pensaba que quizás tú te aburrirías y luego te sentirías muy hostigada por las figuras famosas y los paparazis y te distanciarías y...

Interrumpo sus palabras con una carcajada sin dejar de bailar. Dylan es bastante tierno cuando se pone nervioso. Acaricio su mejilla y niego con mi cabeza lentamente.

—La farándula no sería un motivo por el cual te dejaría —aseguro tocando sus labios y alternando la mirada entre ellos y sus ojos—. Creí que yo era la paranoica que pensaba demasiado —bromeo haciendo que sonría.

—De vez en cuando te robo el papel.

Me hace girar en sus brazos y mi espalda queda pegada a su pecho mientras abraza mi cintura y nos movemos al mismo ritmo. Ladeo mi rostro para poder verlo un poco.

—¿Eso era lo que querías hablar conmigo?

—No —sus manos acarician las mías con suavidad—, tengo una pregunta que podría ser tomada como una propuesta.

Siento un cosquilleo en mi estómago. Me hace sentir un poco nerviosa el saber que tiene una propuesta para nosotros. Llevamos unos cuantos meses de novios y estoy embarazada, pero no creo que la paternidad demuestre otro tipo de vínculo. Somos novios y seremos padres, es cierto, pero eso no quiere decir que este bebé va a convertirnos en un matrimonio ahora mismo.

—¿Vas a pedirme matrimonio? —bromeo. Estoy segura de que no es eso, lo habría hecho de otra forma y seguro habría sido mucho más íntimo, sabe que amo las cosas sencillas. Ríe y vuelve a besar mi mejilla.

—No sabía que tenías tantos deseos de casarte conmigo —ruedo los ojos, pero no contengo la sonrisa—, pero tendrás que esperar un poco más para el anillo, cielo. No creo que estemos para esos gastos ahora mismo.

Me hace girar y de nuevo estoy frente a él. Su sonrisa es hermosa y sus ojos tienen ese brillo que siempre me encanta ver resaltando sus ojos chocolate. Me abrazo a su cuello y no contengo el suspiro que escapa por mis labios. Estoy tan enamorada de este hombre que ya no me da vergüenza demostrarlo donde sea y cuando sea. Dylan siempre ha tratado de hacerme sentir lo más segura posible.

—¿Cuál es tu propuesta?

Mi pregunta lo hace sonreír y se inclina para besar mis labios una vez más.

—Bueno, estuve pensando que hace casi un mes que estoy durmiendo en tu departamento.

—Porque eres exagerado y quieres estar pendiente de cada síntoma.

—Solo quiero asegurarme de que se encuentren bien y que todo salga bien —ruedo los ojos—; además, tampoco es como si me molestara pasar tiempo contigo.

—¿Y tú sabes si a mí me molesta que estés todo el día conmigo?

Su rostro se pone serio rápidamente y me observa sorprendido, sus labios parecen titubear y se ve realmente adorable nervioso.

—Yo... ¿a ti te molesta que esté quedándome contigo?

—No, pero aprecio tu interés en preguntarme.

Sonríe ligeramente y niega con su cabeza.

—Mejor dejemos esa conversación para después antes de que acabemos peleando. —Asiento y suspira haciendo movimientos con sus labios. No entiendo qué es lo que lo tiene tan nervioso, él nunca se pone nervioso y dijo que no iba a proponerme matrimonio—. Como te decía, estaba pensando en que me gustaría estar contigo durante este tiempo.

Frunzo el ceño, pero no dejo de bailar.

—Estás conmigo.

—Me gustaría estarlo más...

—Bueno, cuando te dije que no iba a pasar de nuevo por el quirófano iba incluido a alguna especie de unión a otro cuerpo —su ceño se frunce—, no quiero ser una siamesa.

Ríe por lo bajo y niega con su cabeza.

—Sería muy tétrico —afirma y asiento escuchando una de las canciones que me encantó en San Valentín—, pero no me refería a eso. Pensaba en acompañarte un poco más y sentirme mucho más cerca de ti.

—Creo que lo mejor sería decirme tu propuesta porque estás siendo una mierda para explicarte y si pensaba que antes querías que pasemos por el quirófano para que nos cosan, ahora solo puedo pensar que me estás pidiendo tener sexo mucho más seguido.

—¿Qué? No —niega rápidamente con su cabeza—, tú no me estás dejando hablar y estoy nervioso porque no sé cómo decírtelo para no asustarte.

—Solo dímelo, Dylan.

Respira hondo y observa mis ojos con mucha atención. Bueno, es posible que ahora me esté contagiando un poco de su nerviosismo. Aún bailamos lento, pero la canción que ahora suena es de mi cantante favorito; Ed Sheeran.

—¿Quieres vivir conmigo?

¿Qué? ¿Esto es en serio? Me observa atento a una respuesta y no puedo evitar pensar que seguro escuché mal. Sonrío y niego con mi cabeza.

—No te entendí, ¿qué dijiste?

Dylan respira hondo y no puedo decir quién de los dos se encuentra más tenso en este mismo momento.

—Pregunté si quieres vivir conmigo —repite con paciencia.

—¿Qué?

—Que vivamos juntos.

Debo estar loca para estar escuchando esto. No puede ser posible. ¿Vivir juntos? Eso sería un completo desastre. ¿Cómo es que Dylan siquiera lo está considerando en este momento?

—¿Por qué? —inquiero no comprendiendo de dónde ha salido esa idea.

—¿Cómo que por qué? —cuestiona con el ceño fruncido—. Somos novios, ¿no? Seremos padres, no le veo lo malo a compartir techo.

—¿Esto es por el bebé?

—No es solo el bebé —asegura aumentando un poco el compás del baile—. Me gustaría dar el siguiente paso con mi novia, vivir con ella. ¿Eso está mal?

—No, pero creo que no lo estás pensando bien.

—Maravilla, no estoy pidiéndote matrimonio.

—Me estás proponiendo algo parecido. La convivencia es complicada, Dylan. No se puede tomar tan a la ligera —aclaro girando en sus brazos—. ¿Qué pasa si necesito mi espacio e intimidad?

—Me lo dices y te lo doy.

¡Qué sencillo! Lo hace sonar tan fácil y todo el mundo sabe que las convivencias son una prueba para la pareja. Esto me toma bastante desprevenida, no es una pregunta que se puede responder tan a la ligera porque conlleva muchas responsabilidades.

—¿Dónde viviríamos?

—Bueno, había pensado que podríamos quedarnos en tu departamento y luego de que nazca el bebé podríamos buscar alguna casa para encontrarnos más cómodos.

Algo me dice que lleva pensando mucho tiempo en esto.

—¿No te parece apresurado?

—Todo lo que siento por ti ha sido completamente apresurado —afirma y siento mi rostro arder. A veces dice cosas tan lindas—. A mí me importa más amarte que llevar una relación con un tiempo estricto antes de dar cualquier paso.

—Hoy estás diciendo muchas cosas dulces.

—Todo por ti, mi amor —asegura con una sonrisa antes de besar mis labios delicadamente—. No tienes que responderme ahora.

—No iba a hacerlo —confirmo y ríe por lo bajo—. Es una propuesta que tengo que pensarla bien.

—No la pienses mucho porque ya sabemos lo que sucede cuando piensas demasiado.

—Sí, hay charlas con galletas recién horneadas. —Asiente y acaricio su mejilla suavemente. Dylan nunca usa barba y eso me encanta—. Nunca me habían pedido convivir —confieso un poco nerviosa—. Ya sabes, mi último ex me tenía de amante y se quedaba un par de días en mi departamento, pero jamás dijo algo sobre la convivencia.

—Maravilla, ambos sabemos que ese sujeto era un imbécil —sonrío de lado— y no creo que salga mal, técnicamente estamos conviviendo ahora mismo, solo que no es tan oficial.

—Está bien, lo pensaré.

—Incluso puedo hacer una propuesta mucho más romántica y bonita para ti.

Niego con mi cabeza, pero no dejo de sonreír. Este hombre me encanta.

—No creo que sea necesario, solo dame una semana para pensarlo.

Asiente y vuelvo a ponerme en puntas de pie para alcanzar sus labios, creo que siento un flash, pero lo ignoro. Roxy tiene razón, no hay que darles demasiada importancia y, al fin y al cabo, no puedo reprimirme solo para que los demás no me vean. Mejor demostrarles que no me importa más que Dylan en este preciso momento.

¡Hola mis amores!

Bueno, quizás mañana suba otro capítulo, aún no lo tengo escrito y tengo que hacer un par de cosas. ¡Muchas gracias por los 1k de leídos! No creí que esto subiera tan rápido jajajajja y MRSV casi está llegando a los 10k.

Capítulo dedicado a mi hermana que ayer fue su cumpleaños, vayan a seguirla y darle amor: Marisol1833

Los amo y nos leemos pronto♥♥♥

Les dejo mis redes sociales, casi siempre estoy informando si estoy escribiendo o paso adelantos o citas de la novela:

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top