Minho parecía un niño que acababa de descubrir la lluvia; todo el recorrido se la pasó jugueteando con las gotas que golpeteaban la ventanilla de su lado, estas hacían un camino irregular hasta unirse con las demás. Era fantástico ver el cielo desbordarse, y mirar de vez en cuando un rayo que iluminaba todo.

– ¡Hemos llegado Señor Choi! –Por segunda ocasión era dicha esa oración, pero como tampoco recibió respuesta el abogado, lo siguiente fue poner su mano sobre el hombro de Minho y sacudirlo suavemente. Lo cual resultó, pues este de inmediato volteó algo aturdido. Seguía ensimismado en sus pensamientos.

– ¿Qué?... Perdón... abogado, es que estaba pensando en lo maravilloso que es ser libre y poder disfrutar de este clima y de todos en general.

– No se preocupe, si lo saqué de sus pensamientos es porque necesitamos entrar al departamento, se tiene que rasurar. Fue una condición de la Señora BettyKey, para aceptarlo en su Mini Super. Otra cosa Minho, ¿Tiene algún tatuaje en los brazos?

– No abogado, yo no me tatúo.

– ¡Excelente! Le voy a ser sincero, la señora BettyKey es algo conservadora y le gusta que sus empleados se vean limpios y serios. Ella es buena gente, no puso ningún pero cuando le mencioné que usted venía de la prisión. Sólo sea usted mismo, y todo estará bien.

–¿Abogado? ¿Cree usted que algún día pueda yo volver a ejercer mi profesión legalmente?

–No puedo asegurarle nada Señor Choi, como le dije antes, sus credenciales como economista fueron revocadas al momento de declararlo culpable del fraude. Pero de igual forma buscaré alguna solución.

– Pero usted demostró que soy inocente, por eso me dejaron salir de prisión.

-Así es pero las leyes no contemplan regresarle todas sus garantías, eso es aceptar públicamente que la justicia se equivocó, y eso mi señor, jamás va a suceder, no en este país. Mire, por lo pronto tendrá un trabajo que le permitirá vivir honradamente.

El edificio era de cuatro pisos, el departamento que ocuparía Choi, estaba marcado con el número 13. El abogado le dio la llave a él para que abriera.

- Me mencionaron que se tiene que jalar la manija hacia afuera, cuando le de la vuelta a la llave. – Expresó el abogado.

Siguiendo las instrucciones no hubo mayor problema; la puerta se abrió y sus ojos inspeccionaron rápidamente el lugar. El sitio era pequeño: una estancia con dos sillones individuales, una mesita de café, una cocineta con barra, una recámara y un baño; también había un diminuto balcón con dos sillas. Todo estaba impecable; de hecho se veía que los muebles eran nuevos, o que quizá tenían poco uso.

El abogado Hyukjae explicó. – Tiene todo lo necesario para hacer su estancia más cómoda, cuenta con utensilios de cocina básicos, toallas y edredones. En el sótano están las lavadoras y secadoras de ropa para los inquilinos, y, por cierto, sus vecinos son todos muy decentes y tranquilos; no tendrá problemas con nadie.

– Yo no creo que vaya a poder pagar este lugar, pensé que sería algo viejo y sin muebles. Pero, ¿Esto, abogado? Aunque sea pequeño, desde la zona en donde se encuentra ubicado; estuve preso, pero conozco cuando algo es costoso.

– No se preocupe, mi amigo Changmin me lo prestó por un año, en cuanto supo quién viviría aquí, me lo ofreció de inmediato.

– ¿Cómo es eso?

–Él estaba enterado que yo llevaba su caso, él siempre pensó que usted era inocente. Lo suyo fue un caso bastante sonado Señor Choi. Y a pesar del tiempo que ha pasado, hay personas que aún lo recuerdan. Y que siempre creyeron que hubo irregularidades en su juicio.

Minho no sabía ya qué decir, su rostro hizo una mueca y comenzó a llorar. Tuvo que sentarse para no caer, pues sintió sus piernas flaquear. Llevó su mano a su rostro, para tratar de ocultar su vergüenza.

– Señor Choi, requiero que se rasure, la Señora BettyKey nos espera en su tienda. Hay algo de ropa nueva en el clóset, espero le quede, mi amigo tiene la misma complexión de usted.

Minho obedeció y se dirigió hasta la habitación; buscó entre la ropa, de verdad todo estaba nuevo e increíblemente era de su talla. Tomó lo que necesitaba y fue al baño para asearse.

Media hora después se encontraban en el Mini Super.

– Señora BettyKey, él es Choi Minho. La persona que va a trabajar aquí con usted.

– ¡Ohhh! ¡Qué guapo! Bienvenido, espero que nos llevemos bien, me da pena la paga que puedo darle, una persona con sus estudios no debería desperdiciar sus conocimientos en un lugar como este. Pero es lo único que puedo ofrecerle.

– No, no se sienta mal señora BettyKey. Yo estoy conforme con el sueldo y agradecido de que me haya aceptado en su negocio. Y tenga la seguridad que voy a trabajar lo mejor que pueda.

– Eres un Sol, cariño; seguro nos llevaremos bien. Y por favor sólo dime Betty, no soy tan grande.

El abogado Lee se dirigió a ambos sonriendo. – Bueno, veo que se han entendido a la perfección. Señor Choi, lo dejo en buenas manos. Estaré en contacto, le llamaré aquí con la señora Betty, si es que hay alguna novedad. Y esta es mi tarjeta con mi número de celular, hábleme para cualquier duda.

El primer encargo para Minho fue sacar unas cajas de la bodega, y desempaquetar los productos para acomodarlos en los anaqueles correspondientes. Betty se acercó a él y le preguntó si podía quedarse una hora más, pues el chico que atendía en el turno nocturno llegaría una hora más tarde.

– ¡Claro que sí! No hay problema, nadie me espera en casa. Así que cuente conmigo siempre. – Sólo es porque quiero que Junsu te conozca, por si tienen que trabajar juntos en alguna ocasión. Él entra a las 8, pero a veces llega hasta las nueve; como estudia yo le doy esa facilidad.

Su nueva jefa se fue a atender la caja registradora, se escuchaba música tranquila ambientando el lugar, más de pronto el volumen fue subido y comenzó a escucharse a un locutor de radio, su voz era suave y melodiosa. Se sentía reconfortante oírle.

– ¡Buenas noches, Mis Corazones! Bienvenidos una vez más a este, su programa de radio favorito. 💖CORAZONES SOLITARIOS💖 

– Conducido por un servidor Kim Jonghyun. Recuerden que aquí pueden encontrar su alma gemela, o simplemente platicarnos sus experiencias de amor. Pueden pedir su canción favorita y dedicarla. De igual forma llamen para decirnos algún pensamiento o poema de amor. Y no se olviden de las reglas, mis Corazones. Tienen que tener un seudónimo que empiece con la palabra "Corazón". Empezamos con una llamada de nuestros radioescuchas.

 – ¡ALO! ¿A quién tenemos en la línea? – Mi nombre es Corazón Cándido y quisiera encontrar a mi alma gemela.

– Muy bien Corazón Cándido, tu voz nos dice que eres muy dulce, entonces, platícanos, ¿Cuáles son tus gustos?, ¿Tus defectos? ¿Y tu mayor virtud? Recuerda que debes ser honesta, para que uno de nuestros corazones solitarios se identifique contigo y tengas la oportunidad de obtener una cita.

– ¡Ohhh, cielos! Es que yo soy...tan...tímida, me da vergüenza. – Sólo di las cosas como se te vayan ocurriendo. Estás entre amigos.

– Yo...me gusta que los chicos sean caballerosos, que sean inteligentes y risueños. Yo soy muy introvertida, pero soy buena escuchando a la gente, me gusta ayudar...bla...bla...bla.

La chica continuó hablando alrededor de 10 minutos, hasta que hicieron corte para tocar una canción de amor. Al término de esta, el locutor anunció que ya tenía en la línea telefónica a alguien que diría un pensamiento. Esa parte era de las favoritas del público.

– ¡Adelante, te escuchamos! ¡Ahhh, pero antes dinos tu nombre!

– Ss...soy...Corazón Enamorado.

– E...espero sea de su agrado.

💖💖Mi mayor angustia es tu dolor, no soporto verte sufrir, vendería mi corazón si fuese condición para verte sonreír. Expresar lo que siento es fácil gracias a ti, dejo fluir mis pensamientos porque eres la luz que hay dentro de mí.

Me asusta la manera en que te amo, es como si antes no hubiera nada y después de ti tampoco. Hoy te amo más que ayer pero menos que mañana... estoy preparado para que sea así durante el resto de nuestras vidas.💖💖

Se hizo un silencio, signo de que el pensamiento había terminado. Por lo que Jonghyun retomó la locución.

– ¡Dios, qué belleza! Como todos los demás que nos has regalado. Porque recuerden que Corazón Enamorado es un chico que en varias ocasiones nos ha deleitado con sus lindos pensamientos.

– G...gracias.

Sólo eso dijo e inmediatamente después colgó, siempre hacía lo mismo.

Minho se quedó totalmente embelesado por la voz, y sobre todo por el pensamiento escuchado. En la cárcel acostumbraba leer poemas de amor, pero esto era especial, le había llegado al alma, lo conectó de inmediato con el hombre que lo dijo. Sintió que era dedicado a él. 

– [[¿Qué tonterías estoy pensando? La alegría de haber salido de mi encierro me tiene con los sentimientos a flor de piel, ya hasta imagino que tengo la suerte de ser la inspiración de un artista de las letras.]]

La sensación era bastante extraña, Minho jamás había estado interesado en un hombre, en ese momento pensó que era debido a la excitación del momento. La música de fondo, la belleza en la voz y sobre todo lo hermoso que había sido el pensamiento.

Cuando terminó el programa de radio, el volumen fue bajado por su jefa, para ser escuchado en tono bajo. Hoy definitivamente había sido un día especial. Lleno de gratas sorpresas, de principio a fin.

– ¿Escuchaste que hermoso pensamiento?  – Interrogó la señora Betty.

– Sí, estuvo muy bonito. ¿Usted siempre oye ese programa?

– ¡Aja! Todas las noches en punto de las nueve, como te dije a esa hora entra Junsu, y yo puedo escuchar con calma mi programa. No me lo pierdo por nada del mundo, estoy segura que algún día yo encontraré mi alma gemela. Y cuando lo escuche, le llamaré para tener una verdadera cita con él.

Minho solo le sonrió a su jefa, realmente no sabía que decir, no quería ser impertinente, opinando de algo de lo que no sabía absolutamente nada. Pero lo que sí, es que estaba interesado en saber qué estación era y la frecuencia, quería poder hacer lo mismo cada noche que llegara al departamento, después de su horario de trabajo. Un poco de esperanza no le haría daño a su pobre corazón solitario.

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