Capítulo 18

Aether despertaba solo en la cama. Por un momento pensaba que todo lo ocurrido esos días era tan irreal... Las náuseas traían de vuelta a su mente, haciendo que corriera al baño. MIentras se sujetaba del lavabo, pensaba en lo mucho que odiaba aquello y en que aquella criatura no debería existir. Lloraba. 

Momentos más tarde, la voz de Kara se podía escuchar cercana, acababa de volver y buscaba al rubio. 

- Aether, dónde andas, te traigo algo... - Rápidamente este se lavó la cara y bajó, no quería que sospechara. 

- Estoy aquí... - 

- Aether, - Se veía preocupada. - ¿ te encuentras bien? - El nombrado tan solo asentía. 

- No es nada. - 

- No lo parece, más bien pareciera que vayas a desmayarte en cualquier momento. - 

 - Será que no he descansado muy bien ultimamente. Eso debe ser. - Sonreía de forma nerviosa. Kara le ofreció algo de fruta que traía consigo. 

- Toma, estoy segura que te gustará. - 

- Oh, gracias. - En cuanto dió un bocado, las náuseas volvieron. y salió corriendo de nuevo al baño. Kara lo siguió de inmediato. 

- Aún dices que no es nada. Mírate, estás totalmente pálido. Vamos a ir a ver al médico digas lo que digas. - 

- No, no es necesario. - Aether por fin levantaba su cabeza y lavaba su boca además de su cara y manos. Kara lo ayudaba a volver a la sala, allí se sentó en una de las sillas que se encontraban alrededor de la mesa. 

- Ahora me dirás que ocurre. Si dices que no es necesario, eso significa que sabes lo que te ocurre.- De forma seria Aether suspiraba mientras asentía. 

- Siéntate. - 

Mientras tanto en cierto laboratorio no muy lejos... 

- No puede ser, es imposible. - Al médico de la aldea le estallaba la cabeza. Intentaba entender como algo imposible en un principio, ahora se estaba dando lugar. ¿ Acaso Dios les mandaba un milagro?.

- Qué ocurre, tanto jaleo... - Dainsleif llegaba a la habitación donde el anterior se encontraba, al parecer estaba descansando. Bostezaba. - Es que acaso ni si quiera puedo echar un sueño tranquilamente o qué... - 

- Lo siento, pero ya que estás aquí, échame una mano revisando esto. - Su semblante estaba totalmente serio. - He comprobado los resultados y coinciden, y he vuelto a hacer la prueba un par de veces, sigo sin creer que sea cierto lo que ven mis ojos. - Se echaba una de sus manos a la frente, su mente comenzaba a colapsar. 

- Déjame ver... - Miró las notas, y comprobó los cultivos de los exámenes. Todos se encontraban en los mismos niveles, por lo que simplemente las pruebas conducían al mismo resultado. - Bueno, está bien, ¿no?, no te has equivocado. - 

- No, no está bien. ¿Cómo es posible que llegue a ese resultado si él no puede tener hijos?- 

- ¿ Qué?. - Dainsleif se sorprendía al escuchar esto. 

- Lo que escuchas, Xiao estaba bajo una maldición impuesta por su madre, es por ello que es imposible que pueda concebir. Solo quedaría la posibilidad de que Aether halla estado con alguién más, pero no creo que eso... - 

- O simplemtne tu  primera hipótesis estaba equivocada. - 

- ¿ Qué quieres... -

- ¿ Verdad Xiao? - Se podía observar a este con una mano en su boca mientras sonreía, al parecer había oído toda la conversación y llegado a la conclusión de que su pareja estaba esperando un hijo suyo. Dainsleif le entregaba unos papeles con los resultados. 

- ... - Xiao no era capaz de decir palabra alguna, estaba feliz y su boca no quería hablar, tan solo necesitaba ir a ver a Aether, abrazarlo y besarlo. Se giró y salió del lugar para correr a toda prisa hasta su hogar. Por el camino se topaba con Xi, el cual le pedía que en caso de cruzarse con Kara le pidiera que se apresurara a volver, este tan solo asentía y continuaba con su camino. Xi se decía a si mismo que de algún modo el anterior se veía demasido feliz, seguramente algo bueno había pasado. 

Por fin llegaba e iba a abrir la puerta, pero se detuvo al escuchar la voz angustiada del rubio, quien parecía tener una conversación con alguien más. Xiao supuso que era Kara. 

- Esa es la razón por la que me he estado encontrando mal estos días. - Le acababa de contar a la contraria lo de su embarazo. 

- Embarazado...- 

- Si, de nuevo estoy esperando un hijo de ese bastardo. - suspiraba de forma pesada.

- ¿Se lo has dicho a Xiao? - 

- No, aún no. Pero ... - justo en ese momento la puerta se abría y el moreno hacía acto de presencia. Kara al verlo sonriendo, pensó que era algo raro y mucho más depués de percatarse que llevaba algo consigo, uno papeles que dejaba a un lado. 

- Estoy en casa. - Aether tragaba saliva mientras no encontraba el valor para girarse. 

- Debes estar cansado, quieres... - 

- Kara, Xi estaba buscándote, pidió que te apresuraras. - 

- Cierto, casi lo olvido. - Esta se levantaba mirando de reojo al rubio y volteando posteriormente la mirada hacia su hermano, quien con un gesto le pedía que se marchara. Por lo que simplemtne dejó paso a Xiao para que se acercara a Aether mientras que ella tomaba aquellos papeles que le habían generado cierta curiosidad. 

Xiao por fin abrazaba a Aether desde atrás y besaba su cabeza. El cuerpo del rubio temblaba ante el miedo de cómo reaccionaría al saberlo, pero el otro tenía planes que lo tranquilizarían un poco antes de aquella conversación que debían tener sin falta. 

El rubio tomaba las manos de su pareja para deshacer el agarre de la misma, pero este lo giraba y colocaba una mano en su mejilla, acercaba su cara a la contraria y besaba aquellos labios. Aether se sorprendía un poco, pero no era capaz de negarle aquel beso que tan gentilmente le entregaba, simplemtne se dejaba llevar mientras se derretía debido al mismo. 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top