Derek

¿Alguna vez se han detenido a ver la vida?, es decir. Su vida, lo que les da sentido, lo que los hace levantarlos por la mañana. ¿Que és?, rutina, deberes, o el sueño perdido de querer hacer algo. Cambiar algo. Ser diferente al del día de ayer. Cuando era niño, mi vida fue diferente. No solo por ser un chico lobo. Que a primeras, y como lo pinta muchas series y películas. Es super genial, un don que tiene un chico sin suerte que en un momento. La vida, la suerte, o algo. Le sonríe y le hace vivir aventuras.

Ojala mi vida fuera así, como una serie. Pero no, la vida no es una serie, libro o película. La vida es vida, y nunca nos detenemos a pensar que es lo que amamos. Que es lo que nos hace levantarnos de la cama. Que es eso que nos hace diferente al del día de ayer. Supongo que nunca nos detenemos realmente a pensar en calam, ver el sol. Ver la luna, ver los seres queridos que tenemos. Hasta que, claro. Se van de nuestras vidas. Para siempre.

Es allí cuando lloramos, decimos que amamos a esa gente que se fue. Pero es tonto, porque esa gente ya no lo sabrá. Porque no regresará. Pero ahora, supongamos. La vida te regresa al ser que perdiste, te hace despertar de nuevo, para cambiar todo o nada. ¿Qué es lo que uno haría?

Yo se lo que haría. Si viera de nuevo a mis padres, mi familia. Lose perfectamente, casi. Que hay veces que siento que las demas gente lo sabe. Como si en mis labios estuviera escrito. Y a veces lo creo. Creo que esta tatuado en letras negras en toda mi cara, mi cuerpo.  Stiles encontró otro lugar que ni yo mismo sabia que allí estaba escrito algo. Él leyó mi alma. La parte más vulnerable, la parte que supe esconder por mucho tiempo. Pero no, no para un chico como él.

Y justo ahora, después de tanta  mierda que he pasado. Que ha pasado en este pueblo, con gente que antes no conocía. Con tantas cosas. Estoy levantado, ni se como. Escuche algunos gritos, pero los ignore, de hecho. Basta con decir que siento una corriente de aire por mi espalda. Se que estoy descubierto de espaldas. Pero nada de eso importa, nada. Es el momento en que la vida te da la ultima oportunidad para cambiar.

Y yo cambiare todo.

—Derek...por favor. Ya, estoy bien—Stiles trata de separarse de mi un poco. No para alejarse, si no para acomodarse mejor entre mis brazos. En ese momento de tu vida que quieres que todo salga bien. Pero no busques la perfección en ese instante. La vida lo hará.

Justo como ahora, que tengo a Stiles vivo. Entre mis brazos. Y nunca me ha gustado que otros me vean llorar. Jamas me ha gustado. Pero ahora mismo, él me esta viendo. Llorar. Llorar como un niño pequeño. Y Stiles lo hace. Llora igual conmigo. 

Y ahora mismo es el momento más perfecto. Porque me encuentro con él. En una habitacion donde estan las personas que amamos. Las personas que lloran igual con nosotros. Y pronto. Un abrazo que era de dos, paso a ser un abrazo de toda una familia. No se si es primero Peter, o el Sheriff. Lydia, o Scott. No se nada. Y es perfecto.

—¿Comó...?—Pregunto en voz baja, tan baja que temo que Stiles no la pueda escuchar.

—No lose... estaba en un lugar. Y luego pensé en ti, en todo. Y dije "Tanta mierda para no estar con la persona más sexy del pueblo". Y...desperté.

Se que hay un trasfondo. Se que hay más historia. Pero no puedo preguntar nada. Porque no quiero, porque este momento es solo para disfrutar. Se que tendré más tiempo con él, más tiempo con todo. Lo atraigo más hacia mi. Teniendo miedo de que en cualquier momento esto se rompa. Él se rompa y deje todo. Incluso si dejo de pensar en eso. Aun esta el miedo.

—Te amo, te amo Stiles.—Acerco mi rostro al suyo solo para buscar sus labios. Y dejar que el momento siga. Si va a terminar. Puede hacerlo con mucho gusto después de este beso.

Otra cosa más. ¿Crees que los sueños ser reales?, como si alguna fuente de magia que esta en alguna parte del mundo se encarga de dar la energía y fuerza para eso. Cuando era niño, soñaba con explorar el mundo. Con hacer todo diferente, hacerlo a mi manera. Tener a alguien para compartir esos momentos. Y heme aquí ahora. En la cama del hospital. Con heridas, de noche. Sintiendo pulsadas en cada instante. Pero con él. Con Stiles a mi lado. Es real, y no lo creo.

La noche es oscura. Con una luna que apenas es la luz del momento. Los sonidos que hacen los cables y las maquinas. Es como una danza lenta que nos lleva otro mundo. A otro lugar, es un lento viaje. Stiles esta junto a mi lado izquierdo, con los ojos abiertos. Me mira. Estamos muy juntos en esta cama. Se que podriamos estar en otro lugar, en otra cama. En otras circunstancias. Pero aquí estamos, juntos.

Mi mano busca la suya, la sostengo con fuerza. Me muevo un poco para verlo mejor, crece igual que yo. Hemos pasado por un infierno, pero ahora. Estamos aquí. Sin que nadie nos quiera molestar ahora.

—Stiles.—Mi voz suena grave pero baja.

Los ojos de Stiles solo ven mi rostro. Esta calmado, puedo escuchar los latidos de su corazón como si fuera un lento tambor. 

—La primera vez que abrí los ojos...estaba en un lugar. No se que era, pero te vi. Y tuve miedo. No por verte,claro esta. Si no quer tuve...miedo de que fuera la ultima vez que te viera. No se sentía como si estuviera vivo. Se sentia una paz tan rara que algo me decía que era peligroso.

Stiles aprieta mi mano. Me sigue mirando a los ojos mientras suelta un suspiro largo.

—Si no quieres cintar yo...

—No.—Interrumpe.—Quiero contarte todo, por eso miro a tus ojos. Porque allí veo la verdad reflejada...mi verdad. Y esto es algo que necesito.—Se toma unos segundos. Parpadea un par de veces. Se acerca más a donde estoy.—Cuando cerré los ojos cuando te vi. Estaba mirando a mi mamá. Lucia...como el día en que ella estaba aquí. En el hospital, pero...sin. Y sabes, la cara pálida, sus ataques. Todo en ella estaba con...vida. Y cuando ella se acerco para abrazarme. Fue un abrazo tan cálido. Que sentí que estaba en medio del desierto con un sol solo para mi. 

—Estabas...

—Sí....muerto. Lo estuve, porque ahora estoy vivo. Pero. Bueno, siguiendo con esto. Supe en ese momento que si estaba con ella era porque había pasado. Y me sentí calmado,pero llore. Por que pense en mi papá, en la vida que le dejaba. En ti. En mi. En todo, como si todo lo que pasamos fue inútil, en vano. Y luego la vi a ella, y sabia que si estaba con mi madre todo seria diferente. Necesitaba paz, amor. Y lo sabes. Estar con ella era todo eso y más. Pero luego, ella me miro. Y como buena madre supo leer todo de mi en un solo segundo. Me beso la frente y dijo...

«Eres lo más hermoso que llevo a mi vida. Junto con tu padre. Pero te conozco, cariño. Y se que aun quieres estar aquí. Siempre estaré esperando, cuando regreses aquí. No lo harás solo. Así que cuídalo, cuida mucho a las personas que amas, y recuerda. Siempre te escucho, siempre estoy a tu lado. Nunca te he dejado de amar»

—Después de eso. Ella se separa, y una luz me ciega. Cuando podría abrir los ojos, miraba sombras, crei que eran demonios...que venían por mi. Por todo, los cerraba con miedo. Y de nuevo, cuando los abría. Escuchaba voces, movimientos, gritos, sangre. Y luego vino una oscuridad grande. No supe nada más. Hasta que abrí los ojos y vi a papá. Llorando, pedir perdón. 

Stiles para de momento, su mano se aleja de la mía para subir a mi pecho. Y la deja justo allí, con mi lenta respiracion. Ambos miramos como su mano sube y baja. Desvió la mirada para verlo. A ese chico que ya no es tan humano como cuando lo conocí. Ambos estamos rotos, cortados, y ambos nos juntamos para buscamos. Para ser mejor en algo que no comprendemos. 

—Él me pidió perdón. Me contó toda la historia, me contó como era estar atrapado con esa cosa adentro. Me da...miedo de solo volver a recordar aquello.—Stiles se calla de nuevo. Su mirada de nuevo busca mis ojos, y en ellos veo lo que me dice. El terror de perder a su padre, el miedo de quedar soló como yo. Saber que Jhon estaba allí, pero que su cuerpo, las acciones que él hacia no era porque lo queria. Si no por esa cosa.—Y cuando le pregunte por ti. Que como estabas, su mirada fue lo que más me dio miedo. Por eso. Actúe como loco cuando empece a escuchar que estabas despierto, tu corazón hizo que el mío latiera tan fuerte que por un momento pensé que me iba a dar un infarto o algo asi.

Mis manos caminan al rostro de él. Ya no es aquel chico del bosque que conocí, el mundo. Mi mundo y su mundo lo han transformado en alguien nuevo. Que cuesta verlo, cuesta creer que es él. Mis dedos acarician su rostro, bailan también por la barba que le nace ahora. Suelto una leve risa, y lo contagio a él. Mis dedos rozan su vello facial. Y ahora ya no es un chico con un rostro blanco con lunares. Ahora esta marcado por las cosas que ha vivido. Por las elecciones que cada uno toma. Y eso es algo que no nos detenemos a mirar hasta que realmente lo deseamos. ¿Como pude estar tan ciego de no querer ver el amor que siento por Stiles?, ¿Como?

—Stiles.—Mis manos se detienen de explorar el universo que hay en él.— Te amo. Te amo tanto, que cuando pensé que estabas muerto, cuando jure que no estabas más aquí. Yo pense que era mejor morir, porque ya no había otro motivo para atarme aquí a la tierra.

No dice nada. Se queda callado. Pero su mirada me dice todo. Es como un libro abierto para mi, se lo que piensa. Se lo que quiere hacer. Y no estoy yo para detenerlo. No, claro que no.

Porque yo también deseo eso. Mi cuerpo casi grita y llora por eso.

Y cuando él se por fin se atreve a besarme. Yo le sigo. Y no paro, no paro en ningún momento. Su boca explora la mía, y yo la suya. Con calma. Saboreando este momento. Como esa sed que tengo cuando corro y corro y no me detengo a parar. Stiles es más que mi agua. Es mi necesidad. Y cada vez que mis labios buscan los otros, cada vez que saboreo su lengua, su ser. Crece en mi una necesidad muy grande. Muy inmesa.

No puedo, no puedo pensar en un mundo alejado de él. ¿Que me has hecho Stiles?, que ahora mismo. Mientras me besas, no puedo pensar en nada más que estar una vida contigo. Estar siempre así contigo. Has hecho que este enamorado de ti. Que te ame. Y eso me aterra, sí. Pero también me gusta.

Y cada vez que yo lo beso. Mis manos buscan más de él. Y él igual. Es el encuentro que hace mucho queríamos. Pero que ninguno había dado antes. Es curioso, me pregunto ¿Qué sera de mi vida sin él?,  y cuando me alejo de él. Cuando me separo y Stiles suspira. Se que él igual lo piensa. Pero ahora es inevitable, ahora que lo tengo delante. Ahora que se que es tan real. Nada ni nadie nos podra separar. Sí...se que pueden ser simples palabras. Pero no.

No ahora que exploro con mi boca su cuerpo, no cuando él se aferra a mi. No cuando nos quedamos desnudos, mirando el verdadero cuerpo de cada uno. Con las marcas, golpes y manchas. Y pienso, que es así como uno debe de ver a la persona que ama. Con esas marcas, con esos golpes, con esas imperfecciones. Y pensar "Son lo más puto hermoso que he visto" y sentirte el rey del universo. Cuando se entregan los dos. Cuando aceptan todo. Cuando no ven el cuerpo, si no el alma.

Y cada vez que nos complementamos. Cada beso que Stiles me da. Cada caricia que le doy. Nos hace ser seres completos. Y podría estar así siempre. Puedo estar yo arriba de él, o él arriba de mi. Eso no me importa. Tal como ahora. Porque cada momento que Stiles me da de placer y cada vez que yo le regalo ese tacto con mis manos. Se que por fin estamos sanados.

El futuro viene, a pasos lentos pero seguros. Con sorpresas y retos que nos tocaran. Tal como una vez que yo les pregunte a mis padres ¿Como es el amor?, y su silencio que fue su respuesta me dejo pensando. Pero no es hasta ahora que lo entiendo, el amor es no saber nada. No saber que pasara, no saber que tan fuerte, hábil o demas lo es. El amor es vivirlo, es sentirlo en aquel momento que lo ves. Y lo siento ahora. Con él.

Pasamos las noche entera haciendo el amor. Y de pensarlo, sonrío como idiota. Porque mis heridas sanaron en algún momento de la noche que no me di cuenta. Y ahora que Stiles igual es un lobo. Sana más rápido. Estamos juntos en la cama del hospital. Se que es poco ético hacerlo aquí.  Pero ya hemos limpiado y enviado las sabanas a lavar. Estoy sentado con él en la cama. Tomando su mano. Listos para irnos. 

¿A donde?

No lose.

Pero con Stiles. 

Puedo ir seguro de que sera un lugar fuera de lo común. Así que me giro para verlo. Stiles hace lo mismo. Aprieta mi mano. Y me sonríe como él sabe hacerlo.

—¿Listo Sourwolf?

—Listo, Stilisnki.

FIN.