12:30am.

Ambos jóvenes seguían en la taberna de barley platicando. Las horas pasaron y era ya muy tarde.

Colette: yo también me dije lo mismo. Edgar es muy guapo~ - dando un sorbo a su bebida.-

Fang: que suerte tienes ¿eh?. Es un buen chico, siempre quiso estar contigo. Ahora es el hombre más feliz del mundo.

Colette: supongo que tengo suerte, ¡jaja!.

Fang: ohh... - mirando la hora de su teléfono.- ya es muy tarde.

Colette: es cierto. Me tengo que ir. - se levanta de la mesa.-

Fang: déjame acompañarte a tu casa. Es muy tarde y no sería adecuado que andes sola...

Colette: ohh... - se ruboriza.- no habría problema.

Ambos chicos se retiran del lugar pagando la cuenta.

Él asiático muy amable acompañó a la albina hasta su casa. Mientras estaban caminando Colette no dejaba de mirar de reojo a su acompañante, le parecía muy atractivo y sobre todo ese cuerpo que estaba bien formado.

Hasta que llegaron finalmente.

Colette: ohh gracias por acompañarme. - decía sonriente.-

Fang: no es nada. Fue un gusto platicar contigo.

Colette: ¿N-no te gustaría pasar un rato?

Al asiático eso lo tomó muy inesperado.

Fang: lo siento, pero no puedo. Tengo que volver a casa...

Colette: ohh.. pues bueno está bien. - solo dijo disgustada.-

Fang: nos vemos Colette. - se despidió.-

Cuando ya estaba apunto de darse media vuelta, fue detenido por un inesperado beso en la mejilla.

Colette: nos vemos Fang. Gracias otra vez. - sonriéndole.-

Dicho eso la albina se mete a su casa. Fang solo se quedó algo sorprendido, tocándose la mejilla, pero para sobarse donde fue besado del disgusto. Él no era un tonto y se había dado cuenta de las insinuaciones de esa brawler.

Fang: se me acaba de ocurrir una idea..

Al día siguiente...

11:30am.

En la tienda regalos se encontraba solo el joven azabache haciendo limpieza. Su novia por el momento no se encontraba, así que también tenía que ocupar su puesto ante su falta de presencia.

Edgar: donde diablos se habrá metido Colette, me dijo que no tardaría tanto... - decía barriendo.-

Entonces apareció muy cautelosa para sorprender a su pareja. Fue directo hacía él a sus espaldas y le tapó los ojos con ambas manos.

Colette: adivina quién soy jeje - decía divertida.-

Edgar: obviamente eres tú Colette...

Colette: ¡jaja!, no puede ser me descubriste. Te mereces un premio~

La albina quita sus manos, para luego rebuscar en uno de sus bolsillos la sorpresa. Edgar simplemente se quedó mirando con extrañeza.

Colette: ¡Toma, es un rico Chocolate de Candyland!, lo traje especialmente para ti. - ruborizada le ofrece.-

Edgar: ohh... G-gracias... - solo dijo recibiendo.-

Colette: ¿T-te gusta?...

Edgar: por supuesto que sí... - intentaba tapar su sonrojo con su bufanda.-

Colette: ay Edgar, eres muy lindo cuando te sonrojas.~

Él azabache opto por no decir nada, porque más rojo se estaba poniendo. La bufanda con su manga acaricia a su novia en la cabeza.

Colette: ohh que lindo gesto Edgar~ -ruborizada.-

Edgar: ehh.. si...

Sabía perfectamente que él no había sido.

Edgar: ¿Está vez si iremos a cenar juntos en barley's?...

Colette: ¡Pues claro que sí!.

Edgar: no te preocupes, yo pagaré todo. Quiero disfrutar cada momento contigo. - se empezó acercar para tomar el rostro de la albina.-

Sus respiraciones estaban chocando, poniéndose muy nerviosos, para luego unir sus labios en un beso intenso. Las caricias no se hicieron esperar y seguían besándose con esa misma intensidad.

Fang: maldición... - entró a la tienda para encontrarse con esa escena.- ¡Lo siento!, jaja - ríe nervioso.-

Al escuchar esa voz de inmediato se logran separar. Edgar se fijó en su amigo y se sintió un poco culpable por lo que pasó entre ellos.

Edgar: Bro... - se acerca hacia él.-

Fang: Edgar... ¿Sigues molesto conmigo?...

Edgar: no ya no. Más bien disculpame a mi...

Fang: ya no importa bro. - le sonríe.- veo que tú y Colette están muy bien... - susurrándole.-

Edgar: estamos mejor que nunca. Ella es tan linda conmigo.

Fang: lo importante es que tú seas feliz.

Edgar: gracias amigo. Realmente lo soy... - se ruboriza un poco.-

Él asiático sabía muy bien como deseaba tanto esté momento su amigo, pero es que algo no le cuadraba del todo y teme lo peor. Colette que se encontraba en su puesto de cajera, no dejaba de observar al joven karateca.

Edgar: esta noche iremos a Barley's. Será como una cita...

Fang: ¡Oh, eso es genial Bro!. De verdad espero que la pasen muy bien.

Edgar: ¿Tú no tienes a alguien especial?. - preguntó curioso.-

Si, eres tú. Pensó él asiático.

Fang: ohh yo no jaja - trataba de no sonar nervioso.- estoy muy bien siendo soltero, creo que la chica indicada no a llegado jaja..

Edgar: tú tienes muchas chicas por elegir, no entiendo porque sigues soltero. Ya ni modo. - se encoge de hombros.-

Ambos jóvenes siguieron platicando, pero él asiático tenía que retirarse para volver a su sitio de trabajo.

(...)

Mientras tanto en la sala de cine se encontraba Buster limpiando junto a su mejor amigo, cual estaba muy pensativo y no muy concentrado.

Buster: hey Bro. ¿Tienes planes para esta noche?.

No pudo responderle porque seguía hundido en sus pensamientos.

Buster: hey Fang. ¿Tienes planes para esta noche?. - volvió a preguntar.-

Fang: ¿Que?... - solo dije confuso.-

Buster: ¿Que te pasa Bro?. Andas muy raro últimamente...

Fang: solo estoy... Algo pensativo...

Buster: ¿Puedo saber sobre qué?. Sabes que puedes contar conmigo. - posa su mano sobre su hombro observándolo.-

Fang: es sobre Edgar y Colette ellos ya están juntos, pero... Algo no me cuadra de esa chica...

Buster: ohhh tú amigo por fin le atinó.

Fang: ehh si, pero esa chica no me buena espina, ¿entiendes?.

Buster: pues estamos hablando de la acosadora de brawlers, ella nunca da buena espina. - dijo con normalidad.-

Fang: no, no me entiendes...

De pronto el sonido del teléfono del joven karateca sonó interrumpiendo.

Fang: que raro. Esté número no lo tengo agregado. - revisando su teléfono.-

Sin embargo esté contestó.

Colette: ¡Hola!. ¡Soy yo Colette!. No preguntes cómo obtuve tú número jaja.

Fang: ahh si, mejor ni pregunto....

Colette: ¿Que tal?, me gustó mucho platicar contigo, no sé cuándo se podría dar la ocasión otra vez.

Fang: si igualmente, podría ser...

Entonces se le ocurrió una grandiosa idea para seguir con su plan en marcha.

Colette: ¿Podría ser que?.

Fang: ¿Que te parece esta misma noche?, ¿eh?.

Colette: ¿E-esta misma noche?...

Fang: si, está misma noche. ¿Es que acaso tienes algún inconveniente?.

El asiático sabía perfectamente que la albina tenía aquella cita con Edgar, estaba poniendo a prueba su fidelidad.

Colette: jaja no, claro que no. ¡Solo dime dónde y ahí estaré!.

Fang: pues estaré aquí en el cine. ¿Te parece bien?.

Colette: ¡Genial!. En media hora salgo del trabajo y ahí estaré ahí sin falta.

Fang: perfecto. Nos vemos.

Dicho eso él asiático corto.

Buster: bro... ¿Por qué invitaste a esa chica aqui?.

Fang: solo es algo que estoy planeando. - dijo serio.-

Buster: amigo, no quiero que te metas en problemas. - le decía preocupado.-

Fang: esa chica no se merece a Edgar.

Él asiático estaba reprimiendo su enojo. No podía creer que haya caído redondito en su plan, esa chica no vale la pena para su mejor amigo y tenía que hacerle abrir los ojos de alguna forma.