"sentimientos"

El concierto iniciaría dentro de media hora. Ambos jóvenes ya habían ingresado al lugar, muy emocionados por escuchar aquella banda llamada los Bad Randoms.

Edgar: vaya Colette, no sabía que también eras muy fanática de los Bad Randoms. - le decía.-

Colette: ¡Claro que lo soy!. -se mostraba sonriente.- tengo toda una colección~.

Edgar: eso es genial. Porque yo también.

Colette: ohh tenemos algo en común~. - está le guiña.-

El joven azabache solo sonrió ante lo dicho de su amiga.

Así se la pasaron platicando y esperar a que inicie el concierto. Está noche para Edgar era muy importante, estar con ella lo era todo. Transcurrieron media hora y la banda ya estaba lista para tocar.

Colette: ¡Ahhh!. Estoy tan emocionada. ¿Tú no Edgar?. - está toma del brazo de su amigo y se apega a su lado.-

Edgar: s-si , yo también...

La cercanía de su compañera le puso nervioso y solo pudo concentrarse en ella.

Empezó finalmente el concierto. Sonando asi el querido tema we won't cooperate.

Todos los fans empezaron a cantar al ritmo de la canción. Era un espectáculo total. Edgar y Colette igualmente muy eufóricos disfrutaban del concierto.

Todo estaba marchando perfecto. El joven azabache sentía que por mucho tiempo se sentía feliz, junto a la chica que tanto quería. Solo faltaba que ella aceptará sus sentimientos.

Edgar: Colette me gusta mucho estar contigo. - soltó de repente.-

Colette: ¡¿Que dices?!. ¡No te escucho!.

Ella seguía chillando por sus ídolos cantantes. No presto atención y mucho menos con la bulla del concierto.

Edgar: ¡Que me gusta estar contigo!. - alzó su voz.-

Colette: ¡Ay!. ¡Ya te entendí!. - está ríe entre dientes.- ¡Eres genial Edgar igual me gusta estar contigo!.-

Entonces la albina miro de reojo a su amigo que se encontraba a su costado.

Notó nuevamente esos rasgos que le hacen ver atractivo a su compañero. Tenía que admitirlo, no estaba nada mal. Está situación era perfecta, el momento, calor, euforia, emociones y impulso de querer besarlo se hacían presente.

Ella no lo pensó ni un segundo y aprovecho. Tomó a su amigo de los hombros atrayéndolo a su lado. Simplemente paso muy rápido. Colette nuevamente lo beso de sorpresa y Edgar no sé iba quedar atrás y correspondió sin dudarlo.

Por otra parte se encontraban Bibi y su hermano Fang disfrutando igualmente del concierto.

Bibi: ¡Que genial!. ¡Viva los Bad Randoms!. - exclamó eufórica con fanatismo.-

Por otro lado su hermano se encontraba aburrido. Si su plan era ir con Edgar. Todo se fue al tacho. Ahora simplemente le quedaba cruzarse con él o tan siquiera saludarlo.

Fang: oye espérame voy a comprar palomitas.

Bibi: como digas. - le respondio.- ¡Los amo Bad Randoms!. - grito nuevamente con fanatismo.-

Entonces el asiático marchó rumbo a querer toparse con su amigo. Entre tanta multitud le impedían seguir con su búsqueda, la bulla sobre todo lo estaba agobiando, quizás no debió ir en busca de Edgar. Cuando sus esperanzas se estaban desvaneciendo entonces un golpe de suerte pudo encontrar a su amigo.

Fang: ¡Hey Edgar!. - intento pasar entre la multitud.-

Tan solo pudo distinguir su cabellera negra. Estaba con una sonrisa pegada al rostro al poder toparse con su amigo.

Pero inmediatamente su expresión cambio. Con claridad pudo ver cómo Colette y Edgar se estaba besando de una manera intensa.

Entonces se paralizó todo dentro de él. No prosiguió en querer saludarlo. Simplemente retrocedió sin interrumpir.

Su corazón recibió un golpe duro de la realidad.

Volvió con su hermana, pero siendo sincero con él mismo, ya no se sentía de ánimos de seguir en el concierto.

Bibi: hey cambia esa cara. Estamos en un concierto no en un velorio. - le dijo con molestia.-

Fang: lo siento. No me siento bien estando aquí...

Bibi: ¿Que dices?. ¿Estás bromeando verdad?. Si los Bad Randoms son super geniales.

Él joven asiático optó mejor en no decir ya nada más. No quería contarle lo que había presenciado, conociendo a su hermana ella empezaría a burlarse de su situación.



(...)

Ambos jóvenes seguían en su mundo. Ese beso que se estaban dando, los sacaba por un momento de su realidad. Se sentía complementados.

La albina decide separarse de aquel beso. Un Edgar totalmente desconcierto ante la situación, sobre todo ruborizado miraba fijamente a su amiga. ¿Que fue eso?. Pensó.

Edgar: Colette eso fue fantás...

Colette: shhh~ - posó un dedo etre los labios de su amigo- sigamos disfrutando del concierto ¿si?. - sonríe.-

Él azabache no sabía cómo reaccionar. En estos momentos no le cabía para nada eso del concierto. Su mente ahora solo pensaba en ese beso.

2:00am.

Colette: ¡Que genial lo hemos pasado!. - decía con emoción.-

Edgar: la verdad que sí. Fue increíble.

Ambos chicos ya se encontraban yendo rumbo a sus hogares. Él joven azabache no dejaba de pensar en aquel beso.

Colette: gracias por acompañarme a casa.

Edgar: no es nada. Realmente me encantó pasarla bien contigo.

Colette: ¿D-de verdad?. - se ruboriza.-

Edgar: pues hablo enserio.

Un silencio se presentó de repente.

Edgar: Colette... yo necesito saber que es lo que sientes por mí... -intento acortar la distancia entre ellos.-

Colette: ¿Como?. No entiendo... - retrocedía nerviosa.-

Edgar: tú ya sabes a lo que me refiero. Ese beso en el concierto.

Colette: ahhh... ¿C-cual beso?. - se hacía la desentendida-

Edgar: ese beso significa mucho para mí. ¿Por qué lo hiciste entonces?.¿Por qué?. Dime. - inquiere.-

Colette: n-no lo sé Edgar... Simplemente paso... - jugaba con sus mangas desviando su mirada.- ya sabes la situación del momento y esas cosas...

Edgar: no te creo nada. En ese caso entonces no me vuelvas a besar sin mi permiso.

Colette: ¡¿Eh?! - abre los ojos con sorpresa.-

Edgar: entonces dime la verdad Colette.

Colette: ya te dije la verdad. - se cruza de brazos.- solo es un beso de amigos nada más...

Edgar: no me digas eso. Si yo sé que tú sientes lo mismo... ¿Acaso estoy equivocado?. - empieza acercarse más.-

La albina ante la cercanía de su amigo retrocedía por los nervios.

Colette: mira. Tranquilízate. ¿Si?. No es que yo sienta algo por ti jaja.

Edgar: mientes.

Colette: b-bueno... Si me pareces atractivo... Un chico lindo, mi único amigo... Yo la verdad no sé lo que siento...

Edgar: entonces eso significa que...

Colette: no lo sé Edgar. Estoy confundida.

Hubo nuevamente un silencio incómodo.

Edgar: en ese caso. Mejor me voy.

Dicho eso decidió marcharse dejándola sola. No quería mirar atrás porque sabía que le dolería más.

Llego a su departamento deprimido por lo ocurrido de esta noche. Después de todo ella solo le estaba ilusionando.

Edgar: ¡¡Ya no aguanto!!. - grito con frustración.-

Empezó a tirar cualquier cosa que se encontraba en su camino. Estaba tan enojado y herido. En unos cuantos segundos su departamento estaba echo un desastre.

Scarf: ¿Te puedes calmar?. Actúas como un completo idiota.- se pronunció.-

Edgar: ¡Tú cállate!. - le contesto.-

Entonces de repente el timbre sonó.

Él pelinegro se preguntó quién diablos podría ser a estas horas. No quería abrir a nadie. Pero el timbre seguía insistiendo repetidas veces que ya era insoportable.

Pero por un instante se le vino a la mente que podría ser Colette.

No le quedó de otra que abrir su puerta.

Vaya era su sorpresa al encontrar a su mejor amigo recostado sobre el marco de su puerta. Estaba en estado de ebriedad. Lo pudo notar de inmediato por su postura.

Edgar: hey Bro. ¿Que te paso?. - intentá ayudarlo.-

Fang: y-yo..y-yo... - decía entrecortado-

Edgar: me sorprende mucho verte en ese estado. Casi nunca tomas hasta caerte. - se lo lleva arrastrando hacia su sofá.-

Fang: q-quiero decirte algo...

Edgar: oh está bien. - recuesta a su amigo en el sofá.- ¿Que me quieres decir?. - se sienta a su lado prestando atención.-

Fang: es que ya n-no aguanto lo q-que traigo aquí en mi corazón... - decía tocándose el pecho afligido.-

Él azabache quedó confuso y intrigado. ¿Que diablos estaba diciendo?.

Edgar: ¿Ehh?. No entiendo. No soy adivino Fang. Ve al punto.

Fang: es un secreto que tan s-soloo quiero compartir contigo... - esté intenta acercarse a su amigo.- con esos ojos que le han dado luz a mi vivir...

Entonces ambos chicos hicieron contacto visual. Edgar no entendía porque le estaba mirando tanto y la manera en que se acercaba ya parecía extraña.

Edgar: ¿Que secreto hablas?. - preguntó confundido.-

Una pequeña risa salió del asiático. Él pelinegro estaba más perdido en la plática.

Edgar: mejor quédate a dormir. Si que necesitas ya descansar. Estás hablando incoherencias.

Fang: te quiero, te quiero... - empezó a pronunciar posando su mano en la mejilla de su amigo.- se oye en mi pecho... Es el g-grande amor que me has echo.~ -

Inmediatamente Edgar quita el contacto de su rostro. Estaba muy desconcertado por aquel acto de su amigo.

Edgar: si yo también te quiero Fang. Pero tampoco te pongas asi de raro...

Él asiático sonríe de lado de una manera divertida. Le causaba gracia como es que su amigo no captaba nada.

Fang: n-noo entiendes, latido a latido... Te siento conmigo... - su voz empezó a quebrarse. No podía reprimir más ese sentimiento.- Y-yo... y-yo.. ¡Yo quiero ser más que tú amigo!.-

Exclamó lo último desde muy al fondo de su corazón. Edgar quedó paralizado, desconcertado y extrañado.

No entendía la sarta de incoherencias que estaba diciendo su amigo...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top