secuestro.

Colette.

11:00pm.

Pasaron una hora desde que Edgar se marchó de la tienda y me tenía muy preocupada. Pero lo más raro fue que me pidió la dirección de Chester...

Creo que iré hacia Candyland a buscarlo, de seguro se encuentre ahí platicando con el bufón. Me sorprende que sean amigos porque los dos tienen una personalidad muy distintas.

Tomé mi mochila de trabajo y las llaves de la tienda. Ya iba a cerrar, cuando de repente escucho un auto estacionarse justo de frente de la tienda. Inmediatamente voy a fijarme de quién se trataba y para mí sorpresa era Edgar.

¿Que hacía con el auto de la pandilla de retro polis?.

Collete: ohh Edgar!. – lo llamé entusiasmada.–

Él se dispuso a entrar con mucha prisa y me sonríe con una leve sonrisa para luego acercarse hacia a mi.

Edgar: lo siento la demora Colette.... Pero tenemos que marcharnos de una vez de aquí. Tú sorpresa te está esperando.

Mi sonrisa se amplía de la emoción y asiento con la cabeza.

Colette: si vámonos. Pero... ¿Que haces con el auto de la pandilla de retro polis?. – pregunte curiosa–

Edgar: pues me lo prestaron. Andando Colette vámonos de aquí ahora.

Yo solo asentí algo dudosa, porque me parece extraño que Edgar ahora se lleve bien con la pandilla de retro polis sobre todo con Bibi. Ya no importa. Solo quiero ir a ver mi sorpresa.

Sonriente salí de la tienda junto con Edgar y me dispuse a cerrarla.

Colette: ¡Listo, vámonos!.

Edgar: ven aquí rápido Colette. – saca de su bolsillo una venda.– te voy a vender los ojos.

Colette: ¿Que?. – confusa le miré.–

Edgar: tranquila, es parte de la sorpresa.

Dicho eso se puso detrás mío y me vendo los ojos apretando un poco el amarre que me hizo doler un poco.

Colette: ¿Acaso piensas llevarme a un lugar romántico o algo así?. – sonrió.–

Edgar: exacto.

Al oír su respuesta me entusiasmé mucho más. Es la primera vez en mi vida que un chico me hace un detalle tan emocionante. Sentí la mano de Edgar guiarme hacia al auto y con un leve empujón me metió dentro.

No se porque sentía que Edgar se encontraba muy apresurado. Pero de seguro es porque quiere pasar está noche romántica conmigo lo más pronto posible. Escuché como el auto se encendía y se puso en marcha.

(...)

Después de un largo rato, me encontraba ya ansiosa por llegar a nuestro destino.

Edgar: ya llegamos. – aviso.–

Colette: ¡Genial!. – sonrió feliz.–

Escuché como se abrió la puerta del auto para que Edgar me sacara de ahí. Nuevamente me guío tomados de las manos. De pronto dejo de guiarme y me empezó a desatar la venda de mis ojos.

Edgar: listo Colette. ¿Que te parece?.

Abrí los ojos con emoción y observé todo a mi alrededor.

Me encontraba en una vieja cabaña.

Mi expresión de mi rostro disminuye poco a poco... ¿Que significaba esto?. Aunque la verdad no está tan mal, después de todo tengo que apreciar lo que mi novio me está dando supongo...

Colette: ehh pues... Está bonito el lugar.

Edgar: se nota mucho que no te gustó. – ríe leve.– tranquila cariño, esto no es la sorpresa.

Colette: ¡¿En serio?!. – sonrió de nuevo entusiasmada.–

Edgar: si. Solo toma asiento y espérame aquí.

Obedecí de inmediato y me senté en un mueble algo polvoriento. Observé todo a mi alrededor y me fijé en una de las ventanas que estábamos en un bosque.

Edgar: ya volví. – apareció con un vino y unas copas.–

Colette: ¡Genial!. – sonrió.–

Edgar: vamos a brindar por nuestra reconciliación. Después de todo nos amamos, ¿verdad?.

Él empezó a servir las copas y me ofreció una y gustosa le acepté.

Edgar: Colette déjame decirte la hermosa que te vez. – me sonríe mirándome.– soy muy afortunado de tenerte.

Me ruborizó ante sus halagos, me parecía algo extraño escuchar eso viniendo de Edgar, pero me encantó.

Colette: ¿En serio?. Y-yo no se qué decir... – me puse nerviosa.– realmente me gustas Edgar...

Edgar: shhh... – me sisea.– no digas ya nada más. Tú sorpresa ya está por llegar.

Me quedé más ansiosa por saber que ocurrirá.

Edgar: todo de tu boca solo sale mentiras Colette.

Colette: ¿Eh?...

Él se paró de su asiento y tiró la copa de vino junto con la botella haciendo añicos y los cristales salpicaron delante mío.

Edgar: ¡Estoy cansado de tus mentiras!. –se me acerca más y con su bufanda me toma bruscamente del brazo.– vamos a tu habitación para darte tu sorpresa querida novia.

Colette: ¡Espera!. –intentaba zafarme.– Edgar por favor... Me estás asustando yo no entiendo nada. ¿P-por qué estás actúando así?...

Edgar: no soy Edgar. Soy Scarf. –me dice con un tono de voz cambiante.–

En ese momento fui arrastrada contra el piso, sentí dolor pero a la vez satisfacción... Mierda. ¿Que me sucede?. Tengo que poner resistencia, pero al final todo se puso en negro en ese momento.

(...)

Mientras tanto en la tienda de regalos se hacían las investigaciónes interrogando a Griff el jefe de los jóvenes que trabajaban en aquel lugar.

Colt: bueno tal parece que el viejo esté no sabe nada. –decia saliendo de la tienda.–

Shelly: necesitamos más información.

Fang: oh no... Edgar de seguro se llevó a Colette a otra parte..

Entonces se quedaron mudos pensando que más pistas podrían encontrar en esta situación. Hasta que un momento Fang recuerda que antes él y Edgar pasaban tiempo juntos en una cabaña lejos del bosque.

Fang: quizás se donde está Colette... pero no estoy seguro. Edgar la llevo en una cabaña cerca del bosque.

Shelly: estas seguro de eso?.

Fang: no estoy muy seguro. Pero podría ser una opción.

Colt: muy bien vayamos entonces y llamaremos a los oficiales del parque Larry y Lawrie.

Entonces empezaron a idear un plan. Las máquinas del parque le implementaron un mini micrófono espía a fang para grabar toda la evidencia. Fueron en una furgoneta llegando hasta al bosque encontrándose con la cabaña específica que había dicho Fang.

Colt: muy bien llegamos. Suerte...

Fang: bueno en todo caso que Edgar esté en esa cabaña. Hacemos el plan...

Shelly: ¿estas seguro que Edgar no te hará daño?. -preocupada-

Fang: como les dije. Edgar me atacó antes pero no llego a matarme. Quizás pueda darle pelea... Quiero salvar a mi mejor amigo..

Dicho eso salio de la camioneta preparado para lo peor quizás. Camino hacia aquella cabaña algo vieja donde tenía recuerdos con su mejor amigo y eso le impulsaba a seguir adelante con el plan. Toco la puerta sin rodeos esperando que alguien estuviera ahí.

Entonces se abrió la puerta dejándose ver a Edgar con una expresión de molestia y confundido ante la presencia de Fang.

Edgar: pero mira quien tenemos aquí. El mejor amigo homosexual.

Fang: vaya realmente estabas aquí... –suspira– por favor Edgar... no arruines tu vida así...

Edgar: déjame decirte que estas equivocado. Soy Scarf. –lo mira seriamente.– Edgar es un niño estúpido débil que no sabe hacer las cosas bien. Ahora tomé yo el control de su vida y se lo que hago.

Fang: Scarf... Si tu sed de venganza es matarme esta bien estoy aquí. Pero por lo que más quieras no hagas daño a Colette. Por favor.

Edgar: ¡¿que te importa esa perra?!. ¡¿Acaso te gusta?!. ¡Ella es mía y haré lo que se me plazca!.

En un movimiento rápido Scarf jala a fang hacia dentro haciéndolo caer al suelo con brusquedad. Fang sabía que iba pasar a esto, así que rápidamente empezó en marcha el plan. Se incorporo un poco del suelo.

Edgar: te voy a matar. Por más que ruegues a Edgar él ya no te escuchara.

Fang con el dolor que estaba por a punto se hacer tomó el valor y saco un revolver que tenia escondido y disparo directo en la pierna derecha de Edgar para dejarlo inmóvil.

El grito de dolor de Edgar cayendo al suelo hizo que el corazón de Fang se estrujara y sentir culpa por lo que había echo pero él no era su mejor amigo.

Edgar: por favor... me duele.. me duele mucho Fang... ayúdame amigo. ¿Por qué me has echo esto?...

Fang simplemente ignoró aquella suplica ya que sabía perfectamente que era parte de una manipulación y se fue en busca de Colette.

Edgar: ¡Estupido vuelve aquí no puedes salirte con la tuya!. ¡Voy a matarte maldito gay!.  –empezaba arrastrar sobre el suelo.–

El joven karateca hacia caso omiso a la palabras de scarf. Busco en los cuartos de las cabañas hasta que por fin la encontro Colette. Fang algo desconcertado se quedó ya que pensó encontrarla amarrada de pies a cabeza pero simplemente la encontró acostada en la cama leyendo un libro.

Colette: ¿uh?... –mira a fang algo sorpendida–

Fang: ¿estas bien?...

Colette: si estoy bien.

Fang: Colette tengo que sacarte de aquí. Scarf piensa matarte no entiendo como puedes estar tan tranquila.

Colette: ¿scarf?. Estas hablando de mi novio... él no haría eso conmigo el me quiere por lo que soy. No es como Edgar que me dejo...

Fang: ¿disculpa?. Edgar te amaba pero sin embargo tu hiciste todo esté lío.

Colette: ¿todo este lío?.

Fang: ¡si!. –se exalta un poco.– ahora una bufanda mágica desquiciada nos va matar si no salimos de aquí ahora. Andando vamonos.

Él joven karateca toma del brazo a Colette arrastrándola hacia la salida de la habitación. Para su sorpresa de ambos Edgar se hace presente interrumpiendo su paso. Estaba ahí parado con la herida en la pierna parece no haberlo dejado totalmente inmóvil.

Edgar: ¿van alguna parte?.

Entonces Fang se puso en frente Colette queriendo protegerla.

Maldición. ¿Por qué los oficiales no hacen la entrada?. Pensó con preocupación Fang.







Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top