-Abuelaaaaa -el rubio se lanzó sobre la rubia quién comía con velocidad, sonrió -vamos mocoso -se metía comida y más comida -no te pongas sensible, ¿acaso crees que eso es suficiente para detenerme? -Naruto negó con emoción -¿me traen noticias? -Kakashi asintió -akatsuki reto a las cinco naciones a la guerra, debemos ir -Tsunade negó comiendo -desgraciados, ¿qué sabemos? -el peliplata respiró hondo -cuentan con siete de las nueve bestias y una bestia mitológica que forma un solo ser, es donde están metiendo el chakra de los bijus, se hace llamar Madara este sujeto que dice ser el líder, pero… -Kakashi bajó su mirada con angustia, Naruto y Sakura lo vieron con cuidado, Tsunade apretó el ceño preocupada -Naruto descubrió con el modo sabio que el chakra de ese sujeto correspondía al chakra en mi ojo -la hokage abrió bastante sus ojos al entender, apretó el ceño con coraje -maldito traidor hijo de puta, ¿cómo se atreve a atacar a Naruto? -el rubio los vio con duda, Kakashi negó -no lo sé, lo ví morir Tsunade-sama, no entiendo nada -Naruto sacó un pergamino, sacó su contenido -se arrancó este brazo después de que lo ataqué, el chakra en esto es similar a tu chakra abuela -la rubia lo vió -Shizune, revísalo -la pelinegra asintió, lo colocó sobre una mesa y sacó de un sello equipo de laboratorio, comenzó a revisarlo, la vieron un momento. Tsunade comía con velocidad, Naruto estiró su mano, robó un panecillo de carne, moría de hambre, la rubia sonrió -tienen razón lady Tsunade -hay células Senju en este brazo, usaron las células de Hashirama-sama -la rubia azotó su mano -malditos hijos de puta, Kakashi, encárgate de enviar esta información, no menciones que el chico es Obito Uchiha, no queremos que embarren más a Konoha en sus estupideces, que sigan creyendo que es Madara -Kakashi asintió, salió con velocidad del lugar, Sakura y Naruto lo siguieron.

….

-Abuela -la rubia levantó su mirada, ya estaba recuperada -¿qué sucede mocoso? -el rubio rascaba su nuca con vergüenza -mmmmm después de conocer a papá le conté a Kakashi sensei, él dijo algo sobre que mi clan era especialista en fuinjutsu, ero-sennin y papá también lo eran -Tsunade sonrió -por fin te interesas en tus orígenes -Naruto mordió su mejilla -cuando era pequeño, moría por saber sobre mis padres, jiji dijo… -guardó un momento silencio, apretó el ceño con coraje, ese anciano no era su jiji, era un maldito, mando a su Itachi a ese mundo oscuro, no tuvo los pantalones para poner un alto al clan Uchiha y a su consejero, suspiró con coraje y fastidio -los muertos, muertos están, hay que dejarlos en paz, no necesitas saber más, no quiero escuchar más preguntas -

Tsunade apretó el ceño con coraje -desgraciado anciano, olvídate de esas estúpideces, es hora de que lo aprendas, el legado de tus padres Jiraiya lo tenía, dile a tu invocación que lo necesitas, es tuyo, te pertenece, ese viejo tonto de Jiraiya no quería abrumarte, quiso enseñarte poco a poco mucho de todo, te darás cuenta cuando lo leas -Naruto asintió lentamente sin entender, pero sonrió con emoción, abrazó a su abuela con fuerza -gracias abuela, te prometo que seré aún más fuerte-

Tsunade sonrió con orgullo -aunque será en tu tiempo libre, irás a la nube, conseguí que el hermano del Raikage te enseñe a manejar el chakra biju -Naruto abrió sus gemas con sorpresa, sonrió con emoción -te juro que esa guerra quedará estúpida con mi poder abuela, lo prometo -la rubia negó con diversión -en una semana sales, tienes tiempo para avanzar con esa habilidad tuya con los clones, tu control de chakra es bastante bueno para el fuinjutsu, te daré unos ejercicios para afinarlo -Naruto asintió con emoción.

…..

Naruto veía a sus clones con cuidado, recordaba como su ero-sennin lo ponía a pasar sus manuscritos de sus pervertidos libros en limpio, quería los kanjis perfectos o lo hacía repetir planas hasta que el maldito kanji salía, pensó que perdía el tiempo, ahora comprendía que lo preparaba para el fuinjutsu; sus malditos ejercicios de control de chakra lo torturaban, quería que mantuviera con una miserable gota de su chakra una hoja por horas recorriendo su cuerpo, para llegar a ese punto fue mucho tiempo y sacrificio, ahora entendía que el control de chakra para el fuinjutsu era tan fino como el ninjutsu médico, sonrió divertido, recuerda haber ensayado posturas y sellos de manos distintos, creyó que se burlaba de él, negó con diversión, avanzaba con velocidad, tenía las bases ahora las implementaría, eso y los quinientos clones que escribían con un palito en el suelo, no había material con la destrucción de la aldea. Un clon leía con velocidad y desaparecía al acabar un sello, todos repetían y practicaban, el proceso se repetía cuando quedaba dominado. Abrió los ojos con sorpresa al ver que el clon que leía el legado de su madre desapareció, caminó lentamente observando el pergamino, tenía kekkei genkais, chakra sanador, recordaba a Karin, levantó su mano con duda, mordió su dedo, vió la sangre escurrir, llevó el dedo a su boca y mordió su piel, abrió sus ojos con sorpresa al quitarlo, no había sangre, sonrió como un zorro con emoción, mordió su mejilla, el ojo de kagura no lo tenía, no podía sentir el chakra a distancia a no ser que usara el modo sabio, sus gemas bajaron sobre el pergamino, cadenas de diamantina, creo diez clones más, las instrucciones eran claras, su control de chakra era bueno, lo intentaría; sus clones trabajaban, había unos afinando su control de chakra para no necesitar escribir el sello con tinta, formar sellos con su chakra era el objetivo, los veía practicar formando kanjis con su chakra, tenía demasiados clones en el conocimiento en fuinjutsu y unos cuantos en las cadenas.

Unos clones colocaron sellos de peso en sus extremidades, tenía una maldita semana que no desaprovecharía, siempre superó sus retos y esta vez no sería la excepción, comenzó correr a toda velocidad alrededor de la aldea, la gente lo veía con sorpresa -uoooooo tus llamas de la juventud resplandecen, entrenemos juntos -Naruto sonrió al ver a Lee seguirlo, comenzó a seguir la rutina extrema del especialista en taijutsu, por la tarde practicaban posturas, tenían duelos, debían avanzar con velocidad.