Una cita extraña

Renuncia de derechos, los personajes que salgan aquí son de sus respectivos autores.

"...."

Un silencio sepulcral reinaba entre ambos.

-¿Eh? -espetó Goku saliendo de su confusión, no entendía lo que estaba sucediendo en estos momentos ni porqué ella estaba frente a él.

Chizuru parpadeó sus ojos con enorme desconcierto. Sin embargo, su ceño pronto se frunció y llevó ambas manos a sus caderas.

-¿Cómo que "Eh"? -habló Chizuru encarando al azabache, quien tragó- ¿No me has alquilado tú?

-¿Alquilar dices? No entiendo de qué estás hablando -contestó Goku rascándose la nuca.

-¡No te burles de mí Son Goku! ¡Tú me has alquilado y ahora soy tu novia! -habló Chizuru señalándole al pecho con el dedo índice.

Pronto se percató de lo que dijo y su rostro se sonrojó furiosamente. Ella no quería ser la novia del tipo que le fastidió la noche con su tardanza.

"Relájate... recuerda que esto es sólo trabajo"- Chizuru se dijo a sí misma suspirando, tenía que separar el trabajo de la vida personal. Regla N°1.

-¿Eres mi novia? Ahora sí que estoy realmente perdido -confesó Goku rascándose la mejilla con una sonrisa nerviosa y Chizuru le miró con duda.

-¿Entonces qué haces aquí? -preguntó Chizuru enviándole una mirada sospechosa al azabache.

-Pues mi hermana dijo que la esperar... -iba a explicar Goku pero entonces cayó en la cuenta.

"¡Ya lo entiendo! Todo esto tiene que ver con Uta... de esta me acordaré"- discurrió Goku con una sonrisa tétrica, luego ya castigaría a Uta.

-Verás todo esto es un malentendido... yo no debería estar aquí, fue mi hermana menor quien organizó esta situación -explicó Goku sonriendo.

-No me irás a dejar aquí plantada, ¿verdad? -preguntó Chizuru arqueando una ceja- Me has alquilado y tengo que cumplir con mi trabajo.

-No entiendo, explícame qué es eso de alquilar -le pidió Goku dado que estaba bastante perdido.

-Sigh... trabajo como una novia de alquiler, me alquilas y me convierto en tu novia durante unas horas -respondió Chizuru suspirando- Por eso... ¡tú y yo s-somos novios ahora! -exclamó ella.

"Así que es Uta quien la ha alquilado, ahora entiendo porqué se portaba tan extraño esta mañana... ¿de dónde sacó el dinero?" pensó Goku frontándose las sienes con fastidio.

-Entonces, ¿somos pareja o algo así durante unas horas? -preguntó Goku rascándose la nuca y Chizuru asintió frenéticamente ante aquello.

-No pienses que me olvidé de lo de ayer, pero ahora estoy trabajando... así que lo pasaré por alto -expresó Chizuru cruzando sus brazos.

-Ya te dije llegué tarde por culpa del... -habló Goku pero una mala mirada de Chizuru le bastó para callarse- Bueno... ¿qué hacemos ahora?

-Tú eres el cliente, ¿acaso no has estado en una cita antes? -preguntó Chizuru con extrañeza pues era raro teniendo en cuenta su físico y su edad.

-Pues no, nunca antes he tenido una cita -respondió el azabache con una sonrisa y Chizuru parpadeó sus ojos oír aquello.

-Pff... ¡Jajaja! ¿En serio? -Chizuru soltó varias carcajadas llevándose las manos al estómago.

-No entiendo por qué te ríes Mizuhara-san -habló el chico rascando su mejilla con nervios- Entonces, ¿qué se suele hacer en las citas?

Chizuru frenó sus risas, pensó que era una broma de Goku pero parecía que lo decía en serio. Sería más difícil de lo que imaginó.

-Ir al cine, al acuario, o a comer a un sitio.. -contestó Chizuru pues es lo que sus clientes hacían habitualmente en las citas que tenían.

Pero Goku no era un cliente habitual.

-Uh... no tengo tanto dinero para eso, pero ya sé qué podemos hacer -habló Goku alzando su mano con una sonrisa y Chizuru sintió dudas.

Ambos empezaron a caminar pero ignoraban que estaban siendo observados por Uta, quien estaba detrás de un arbusto viéndolo todo.

-Y aquí comienza la cita de mi Onii-chan -habló Uta con una sonrisa y encendió una cámara, sin duda este gran momento pasaría a la historia.

Más tarde.

Chizuru estaba con cara de poker mientras mantenía sus brazos cruzados bajo su busto.

"¿Esto es en serio?"- se preguntó la muchacha arqueando una ceja mientras sus ojos estaban posados en la tienda que estaba frente a ella.

Goku le propuso comprar algo para almorzar y después sentarse en un banco para comer. Sí, su cita sería un almuerzo en un banco del parque.

"¡¿Qué clase de cita es esta?!"- Chizuru gritó en su mente, sería la peor cita de su vida. Sabía que nada bueno podía venir de alguien como Goku.

A ella le costaba enormemente disimular su personalidad cuando estaba con él. Supo que sería difícil pues empezaron con mal pie, pero a estas alturas se le hacía imposible fingir con él.

"Si sólo es con él no hay problema... supongo que es único en su especie"- pensó Chizuru con resignación y dejó escapar un suave suspiro.

Ninguna de sus citas tuvo un comienzo tan peculiar como esta, Goku era tan imprevisible que hasta le intrigaba cómo acabaría esto.

"Hola preciosa"

Chizuru se giró al oír la voz de un hombre de cabello negro, quien venía acompañado de otro rubio y uno pelicastaño con rostros perversos.

-¿Qué hace sola una hermosura como tú? -preguntó el pelicastaño viendo que no había nadie alrededor de Chizuru, punto para ellos.

Chizuru no respondió, a pesar de que era la primera vez que vivía una situación así mantuvo la calma. Ponerse nerviosa sería algo negativo.

-¿No quieres pasar un rato divertido con nosotros? -inquirió el chico rubio tratando de aproximarse a Chizuru y extendió su brazo.

Chizuru al ver aquello se dispuso a coger el spray anti-violadores en su bolso pero entonces una sensación de seguridad invadió su cuerpo.

"No te atrevas a tocarla"

Aquella sensación de seguridad se confirmó con tales palabras, que fueron pronunciadas por Goku quien salía de la tienda con una bolsa.

-Goku... -habló Chizuru viendo al pelinegro, no supo porqué se sintió segura con su aparición.

-¿Goku? Menudo nombre tan estúpido -dijo el rubio compartiendo una carcajada con sus dos amigos mientras contemplaban al muchacho.

-No tan estúpido como tu cara -profirió el azabache con el entrecejo fruncido y se puso delante de Chizuru, quien ahogó una risa.

-¡¿Cómo dijiste?! -demandó el rubio bastante enfadado por ese comentario y sin pensárselo dos veces se lanzó airadamente contra Goku.

Goku dio un paso hacia la derecha esquivando con facilidad el ataque, se notaba a leguas que ese rubio era un simple charlatán de pacotilla.

PAM.

Goku conectó un rodillazo en el abdomen de aquel rubio obligándole a permanecer arrodillado debido al dolor que sentía en la zona abdominal.

-¡Maldito imbécil ahora verás! -exclamó el pelicastaño igual de iracundo que su amigo y arremetió contra Goku cegado por el enfado.

El azabache extendió rápidamente su brazo derecho golpeando con un puñetazo el rostro del pelicastaño antes de que éste pudiera atacarle.

-¡Mi nariz! ¡Me rompiste la nariz idiota! -gritó el pelicastaño intentando frenar la sangre que salía de su tabique nasal a causa del golpe de Goku.

-Lo siento, no quise golpearte tan fuerte -habló Goku con una sonrisa y se giró hacia el miembro restante del grupo- Váyanse de aquí y no vuelvan a molestar a nadie más, ¿eso les quedó claro?

El hombre asintió con bastante miedo y ayudando a sus amigos a ponerse en pie, se alejaron de él huyendo despavoridamente.

-Espero que hayan aprendido la lección -soltó Goku sacudiendo su sudadera con la mano que tenía desocupada- ¿Nos vamos Mizuhara-san?

-Un momento, ¿cómo hiciste eso? -preguntó Chizuru asombrada, no era normal que alguien derrotara a dos hombres con una sola mano.

-Aprendí cosas básicas para defenderme, ahora vayámonos que me estoy muriendo de hambre y no creo que aguante más jajaja -respondió Goku sonriendo y tomó la mano de Chizuru para irse.

"Sí... es único en su especie"- discurrió la muchacha esbozando una pequeña sonrisa en su hermoso rostro. Goku la había salvado.

Minutos después.

Regresaron al parque donde se encontraron antes y se sentaron en un banco frente a la zona de juegos para así comer lo que compró Goku.

-*Munch* está muy delicioso, deberías probar Mizuhara-san -señaló Goku mientras comía su delicioso sándwich de jamón ibérico y queso.

-No gracias, estoy muy bien con estas patatas fritas -respondió Chizuru mientras sostenía una bolsa de plástico junto a una lata de refresco.

-Bah, tú te lo pierdes -habló Goku sonriendo y partió un pedazo de su pan para dárselo a los pájaros que estaban posados cerca de ahí.

No obstante, un pájaro se acercó y picó la mano de Goku, produciendo pequeñas risas en Chizuru a costa del pequeño dolor que sentía el chico.

-¡Oye no te rías! -habló un chibi Goku haciendo un puchero- Tengo una duda, ¿por qué oí que se referían a ti como Ichinose en la universidad?

-Ese es el apellido de mi abuela, actúo como Mizuhara cuando estoy fuera de la universidad -contestó la muchacha- A propósito Son Goku...

Goku iba a decir algo más cuando entonces Chizuru se acercó a él señalándole nuevamente con el dedo índice, tragó saliva ante aquello.

-Lo nuestro es una relación estrictamente profesional, ¿me entiendes? Fuera de esto soy una total desconocida para ti, ¿okay? -preguntó Chizuru con un rostro serio- No me gustaría que mi familia y mis amigos supieran de mi trabajo.

-¿Por qué? -inqurió Goku con curiosidad y a la vez intrigado, aunque hubo algo que no le gustó para nada dentro de lo que Chizuru comentó.

-Porque quiero mantenerlo como un secreto... Sigh, evitaba tener citas cerca de la universidad pero me lo has complicado todo... -Chizuru soltó un suspiro tedioso- Te lo pido por favor.. manten esto en secreto, ¿me prometes que lo harás?

-Bien, te lo prometo -el rostro de Chizuru brilló ante tales palabras- Pero a cambio de una cosa.

-¿Qué cosa? -preguntó Chizuru cruzando sus brazos mientras tenía una ceja arqueda. Sentía que lo que diría Goku no sería nada bueno.

-Que seas mi amiga, no me gusta la idea de tener que alquilarte cada vez que quiero hablar contigo -contestó el chico rascándose la nuca- Me gustaría alquilar de verdad tu corazón...

Chizuru abrió sus ojos ante tales palabras y no pudo evitar que un pequeño tono carmín se esparciera a lo largo de su agraciado rostro.

-¿A-alquilar de verdad mi c-corazón? ¡N-no digas cosas tan vergonzosas! S-soy tu novia de alquiler y nada más, además si se enteran de que nos vemos fuera del trabajo podrían despedirme -explicó Chizuru todavía un tanto ruborizada.

¿Un corazón de alquiler? Sonaba ilógico.

Goku pareció desanimarse por la respuesta de Chizuru, ella le caía muy bien y realmente le habría gustado que pudieran hacerse amigos.

Chizuru se percató de ese cambio en la expresión facial de Goku, pronto recordó que quien la alquiló no fue él sino su hermana.

-Sin embargo... ya que me has alquilado para lo queda de semana, tendré que cumplir mi trabajo -profirió Chizuru desviando su mirada- Por tanto podremos vernos durante tres horas estos días.

Chizuru aceptó ser alquilada durante tres días dado que el cliente le intrigó con su seudónimo, era la primera vez que la alquilaba y le ofreció un precio un poco más elevado que la mayoría.

Recibió el monto total a su cuenta particular, pero el tema del dinero no era crucial para ella. Se tomó a "Onii-chan" como un reto a superar y se puso como meta ganar cinco estrellas como puntuación en los tres días que él la alquilaría.

Al saber que el cliente era Goku aquel reto se desmoronó, por alguna no podía fingir su carácter con él y para colmo estaría con él tres horas al día durante los próximos tres días.

Pero ahora veía con ojos distintos esos tres días. En apenas unos minutos con Goku vivió situaciones insólitas que en ninguna otra cita había tenido, aquello pareció emocionarla.

-¡Bien! Entonces todavía tengo tres días para convencerte de que seas mi amiga... perfecto -dijo Goku con una gran sonrisa en su rostro.

-Te advierto que no será fácil -habló Chizuru cerrando sus ojos mientras tenía una sonrisa- Entonces, ¿ahora ya cumplirás la promesa?

-Lo iba a hacer de todas maneras -respondió el chico encogiéndose de hombros- Sólo debo evitarte en la universidad, y no hablarle a nadie sobre tu trabajo, ¿no? Creo que eso fue todo.

-Y sobretodo no vernos fuera del trabajo, eso sería todo, ¿entiendes? -cuestionó Chizuru y el azabache le dio un asentimiento entusiástico.

-A todo esto hay algo que quiero saber, ¿cuánto es el precio del alquiler por hora? -preguntó Goku un tanto intrigado por lo que Uta había pagado.

-Son 5000 yenes la hora pero pagaste 6000 y haciendo cálculos en tres días me has alquilado por 54,000 yenes -respondió Chizuru sonriendo.

-¡¿QUÉ?! -gritó el pelinegro atónito al punto de que sus ojos ónices casi salen de sus cuencas.

"¡¿De dónde demonios ha sacado Uta tanto dinero?! Dudo que tenga acceso a la cuenta de mamá, ya me dará explicaciones"- pensó Goku intentando calmarse pero resultaba intrincado.

Ellos no eran ricos como para desperdiciar el dinero, todo lo que tenían debían economizarlo y ahorrarlo, por eso quería saber de dónde sacó Uta el dinero para pagar los servicios de Chizuru.

-Uh... sí que eres bastante cara Mizuhara-san, para la próxima alquilaré alguien más barata que tú -habló Goku mientras se rascaba la mejilla.

PAM.

Chizuru le dio un fuerte coscorrón ante aquellas palabras dejando un gran bulto en el centro de su cabeza. ¿Cómo se atrevía Goku a decir algo así?

-¡Auch! ¡Eso dolió! -se quejó Goku con lágrimas cómicas arrinconadas en la cuenca de sus ojos.

-¡Para la próxima escogeré a un cliente que sepa lo que es una cita! -exclamó Chizuru señalándole con un dedo acusador y Goku parpadeó atónito.

-En mi defensa no sabía que tendría una cita -pretextó Goku encogiendo sus hombros- Si lo hubiera sabido lo habría hecho mucho mejor.

-Ah, ¿sí? Bien, mañana tendremos otra cita... sorpréndeme -le retó Chizuru esbozando una sonrisa- ¡Seguro que no eres capaz, ¿verdad?!

-Claro que sí, ya lo verás... te voy a sorprender -respondió Goku con la misma sonrisa retadora, aunque sinceramente no tenía ni idea de citas.

Ambos se quedaron en silencio, pero no uno incómodo como tuvieron al encontrarse, sino uno tranquilo, apacible y bastante sosegado.

La suave brisa de la tarde golpeaba sus rostros mientras el melodioso canto de los pájaros hacia eco en medio del vasto y parsimonioso silencio.

De repente Goku giró su cabeza y la recostó en los muslos de Chizuru, dejando a la chica sorprendida y sumamente sonrojada por eso.

-¡¿Q-qué crees que haces?! -demandó Chizuru sintiendo la cabeza de Goku sobre sus muslos.

-Dormir, anoche llegué tarde del trabajo... sólo serán unos minutos -contestó Goku cerrando sus ojos con una sonrisa pacífica en sus facciones.

Chizuru quiso mover la cabeza del chico pero resultaba pesada, por lo que se resignó. Tendría que esperar a que el azabache se despertara.

-Eres tan extraño... pero a pesar de todo estoy disfrutando tu compañía -habló Chizuru con una pequeña sonrisa y acarició la mejilla de Goku.

Era algo increíble que su opinión por él haya cambiado en tan solo un día. Quizás en el fondo Goku era un buen chico y lo de anoche fue fruto de una serie de malentendidos y casualidades.

"Pero no puedo ser su amiga... no si quiero conservar este trabajo"- pensó Chizuru ya que tenía un sueño y anhelaba hacerlo realidad.

Los minutos pasaron y Goku aún no se despertaba. Chizuru notó que su rostro se contrajo en una mueca de horror y dolor.

"¿Qué estará soñando?"- se preguntó Chizuru observando cómo Goku balbuceaba en sueños.

-M-mamá por fa-favor *hic* n-no me dejes -susurró Goku mientras lágrimas salían de sus ojos y Chizuru se apesadumbró al verle así.

-Sshh tranquilo, estoy aquí... -habló Chizuru acariciándole el cabello con suma suavidad y limpiando las lágrimas sobre sus ojos ónix.

Goku pareció reaccionar ante aquellas palabras y su rostro se volvió uno manso y tranquilo, toda tristeza y dolor desaparecieron de sus facciones.

"¿Él perdió a su madre?"- se preguntó la muchacha no cesando en sus caricias hacia su cabello, pero enseguida Goku se despertó.

El chico notó que sus ojos estaban llorosos y al ver que los ojos de Chizuru estaban sobre su figura, supo que ella lo había escuchado todo.

"Otra vez esas pesadillas... Sigh"- discurrió suspirando, ya había perdido la cuenta de las veces que tuvo aquel sueño tan doloroso.

-Lamento que me hayas visto así... sólo fue un mal sueño -profirió Goku forzando una sonrisa.

Chizuru asintió sabiendo que no debía hurgar más en la herida, así que decidió no preguntarle nada con respecto a aquel sueño que tuvo.

-¡Vamos! La cita todavía no se acaba -exclamó el chico tomándola de la mano mientras que se levantaba- Hay que divertirse Mizuhara-san.

-¿A-adónde me llevas? -preguntó Chizuru y se percató de que entraron a la zona de juegos del parque- ¡N-ni hablar! ¡No voy a divertirme aquí!

-¡Oh venga! ¡No le quites lo divertido a la vida! -pregonó Goku haciendo una mueca y Chizuru nuevamente le miró con algunas dudas.

¿Qué podría salir mal?

Segundos después.

-¡¡Bájame de aquí!! -gritó Chizuru aferrándose al columpio que Goku empujaba con todas sus fuerzas llevándola a lo más alto posible.

-¡No te oigo! -habló Goku con una sonrisa y empujó más fuerte, para desgracia de la pobre Chizuru quien rezaba por bajarse cuanto antes.

Y sus plegarias fueron oídas, acabó siendo lanzada por los aires debido a la potencia del empuje. Goku jadeó al verla en los aires.

-¡AHH! -chilló Chizuru volando, finalmente su sueño de niña se cumplió... ¡pero nunca lo deseó de esta manera! Se iba a estrellas contra algo.

Sin embargo, tal choque nunca acabó sucediendo. Sintió cómo unos brazos la envolvían y abriendo los ojos vio a Goku.

-¡Jaja debiste ver tu cara! Nunca permitiría que te hicieras daño -señaló Goku mirándola con una sonrisa burlona, pero Chizuru no pensó eso.

PUM.

Chizuru le golpeó con fuerza en el abdomen y Goku cayó al suelo mientras un fantasmita salía por su boca. Al final ella cobró su venganza.

Al verle tirado ahí en el suelo no pudo evitar soltar varias carcajadas, esto sí era divertido.

Y así pasó el tiempo.

La cita prosiguió con normalidad. Bueno... cuando se trataba de Goku dicha palabra no existía, todo fueron sonrisas y diversión.

Y finalmente transcurrieron las tres horas que duraba la cita, el cronómetro de Chizuru le avisó de aquello. Por tanto, ahora tocaba despedirse.

-Realmente fue un día muy divertido, mañana te sorprenderé como prometí -habló Goku con una sonrisa atestada de profunda sinceridad.

-Bien, espero ver qué tienes preparado -agregó Chizuru sonriendo- Gracias por salvarme antes... olvidé agradecértelo con todo lo sucedido.

-No fue nada -dijo el azabache restándole importancia- Hasta mañana Mizuhara-san.

-Hasta mañana Goku-san, no te olvides de darme cinco -se despidió Chizuru con una sonrisa y partió en dirección contraria.

Goku vio cómo Chizuru se alejaba con una sonrisa en su rostro, había sido un gran día. Tocaba volver a casa y pedir explicaciones.

Tiempo después.

Uta estaba sentada en el sofá leyendo unos libros de química, calculaba que su Onii-chan estaría regresando de su cita ahora mismo.

-Tres, dos, uno... -Uta contó y cuando terminó de hacerlo la puerta se abrió revelando la presencia de Goku- ¡Buenas tardeeees Onii-chan! ¿Qué tal?

-Sabía que estabas tramando algo Uta... ¿de dónde sacaste el dinero? -preguntó el chico sin más rodeos mientras se sentaba a su lado.

Utahime sonrió nerviosamente al advertir que su hermano había descubierto su plan, y se rascó la nuca tal como hacía casi siempre su Onii-chan.

-Gané un concurso literario que se celebraba en la escuela y el premio fueron 100,000 yenes -respondió Uta dejando boquiabierto a Goku.

Un concurso donde debían escribir una historia de ficción. Uta escribió una historia de romance situada en una guerra y la llamó "Sueño eterno".

Ganó por brutal mayoría, incluso los jueces se sorprendieron bastante al leer aquella obra. Fue una miscelánea de romance, drama y tragedia.

-¡¿Qué?! ¿Y por qué me entero de eso ahora? -preguntó Goku con indignación y Uta sacó la lengua mostrando una sonrisa nerviosa.

-Quise darte una sorpresa para que estuvieras feliz Onii-chan, ¿qué tal fue tu cita con Mizuhara Chizuru-san? -preguntó Uta con muchas ansias.

Dejó de seguirlos después de que dejaron la tienda, así que se perdió buena parte de la cita.

-Oh, fue genial y te agradezco por ello -contestó Goku acariciando su cabello- Mañana tengo que sorprenderla en nuestra cita, será algo difícil.

-¡No! ¡Te ayudaré Onii-chan! -exclamó Uta alzando su mano- Pero primer tengo que hacer algo importante, si me disculpas Onii-chan.

Goku vio cómo Uta sacaba un maletín negro y tras abrirlo sus mandíbula se cayó al suelo al ver un ordenador portátil saliendo de aquel maletín.

-¡¿Qué?! ¿Desde cuándo tienes una laptop? -preguntó Goku viendo con incredulidad a su hermana, él hacía en un ciber sus trabajos.

-Desde que gané el concurso de tecnología, siento no haberte informado Onii-chan -habló Uta rascando su nuca y Goku se levantó del sofá.

-Uta... eres extraña -dijo el chico y Uta hizo un puchero- "¿Cuántos concursos tiene su escuela?"

Goku sacó su móvil recordando que tenía que darle cinco estrellas a Chizuru, vio que la app de alquiler ya estaba instalada... Cosas de Uta.

Una vez dentro le dio esas cinco estrellas y escribió una breve reseña, viendo que habían varias reseñas buenas en el perfil de Chizuru.

"Es realmente buena en su trabajo"- pensó el joven deduciéndolo tras leer los comentarios.

Uta encendió el ordenador y entró a Youtube, aquí comenzaba su carrera al éxito para vivir en Andorra con su Onii-chan siendo millonarios.

En otro lugar.

Mami-chan se encontraba en su habitación recostada en su cama mientras veía su teléfono móvil con ojos colmados de arrebatamiento.

Deslizaba la pantalla viendo fotos donde aparecía Goku, y a medida que las veía un sonrojo se iba apoderando de su rostro.

"Realmente eres hermosa"

Mami recordó nítidamente las palabras que dijo Goku aquel día, su corazón dio un ligero vuelco y apretó sus puños con los ojos lacrimosos.

-Goku-san... -habló Mami liberando un suave susurro mientras veía con anhelo una imagen de Goku donde salía con una camisa apretada.

Mami se sonrojó viendo esos abdominales trabajados, pero eso no fue lo que le llamó la atención de Goku en su día. Fue otra cosa.

Fue algo menos superficial.

Fue algo que nunca antes vio en otro chico, por eso haría lo necesario para tenerle en sus brazos. Sí, ese era el mayor anhelo de Mami.

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Fin del capítulo.

¿Qué tal quedó? *inserte su opinión*

Me sorprendió ver tanto apoyo en apenas dos días, nunca antes alcancé tal registro... Gracias por el apoyo, estaré actualizando a menudo. El fic lo tenía un mes antes de publicarlo xdxd.

Todo va avanzando con calma y parece que Goku guarda algo doloroso ;v pronto lo descubrirán prros, así como el tema de Mami-chan... esa tipa tiene sus razones.

Iniciamos poniendo una meta de 200 votos, ustedes lo quisieron al apoyar tanto el fic XD.

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