-Espera, ¿entonces tu encontraste una puerta secreta dentro de esta casa días después de que te mudaste con tus padres, descubriendo que era en realidad un portal directo hacia un mundo que, en cierto modo era similar al nuestro? -pregunto Victor quien estaba tratando de entender lo que le acababan de decir.

Coraline por su parte, solamente se limito a asentir con la cabeza en señal de que así es justo como el acababa de oír, hacia no mucho desde que le conto la historia del Otro Mundo y, ahora es que las preguntas estaban surgiendo.

No es como que lo pudiera culpar por ello, después de todo ella también se sintió con muchas preguntas en el principio, y el no tratar de buscar las respuestas como debía de el comienzo fue lo que casi la llevo al perderlo todo.

-Se que suena demasiado extraño si te lo pones a pensar fríamente, de no haber pasado por ello y escucharlo de parte de otra persona, tal vez no lo estaría creyendo yo misma tampoco. -dijo Coraline al mismo tiempo en que se rascaba la nuca ligeramente.

-Oye, fui capaz de ver como muchos animales regresaron a la vida después de que yo mismo hiciera eso con mi perro, creo que puedo decir que no puede pasar algo extraño y que me haga sentir totalmente sorprendido. -dijo Victor con algo de gracia en lo que comentaba.

La niña de cabello azul, al terminar de escuchar esas palabras, sin duda la hacia sentirse agradecida de saber que no era la única junto con Wybie, en sentir que ha pasado por algo que muchos no serian capaces de comprender ni tras vivir un sueño retorcido.

-Debo de decir, que es agradable hablar contigo Victor, en serio. -dijo Coraline mientras veía al mencionado directo a los ojos.

-Lo mismo digo Coraline, es increíble como es que a ambos nos ha tocado el pasar por cosas que entre si son demasiado extrañas para muchos, aunque si me lo preguntas, noto que en tu caso es algo que realmente nadie más sabe... a excepción de tu y yo. -dijo Victor con lo ultimo mientras señalaba a la peliazul y a si mismo.

-Pues si, aunque trate de decirle a mis padres en el principio apenas y me escuchaban pero tampoco es que me creyeran, supongo que a los adultos siempre les va a parecer algo difícil de entender ese tipo de situaciones. -dijo Coraline al mismo tiempo en que se sobaba el brazo con algo de pena.

Victor a estas alturas, ya estaba más que claro que por el momento, no había palabras para que aun hubieran de por medio, aunque tampoco es que le molestara realmente, pues nunca ha sido alguien de ruido, siendo ese el motivo por el cual nunca ha tenido muchos amigos, pero ahora estaba claro que eso ya estaba cambiando.

Sin embargo, ese pensamiento se termina disipando cuando voltea a ver la llave que aun tenia a la mano, realmente era intrigante para el ese objeto.

-Y, ¿esta es la llave que abre la puerta hacia el Otro Mundo? -pregunto Victor que no quitaba la mirada de encima de la llave aun en su mano.

-Si, después de que logre salvar a mis padres de la bruja, trate de deshacerme de ella tras arrojarla a un pozo profundo, pero el gato al que ya me había encontrado en los dos mundos, la tenia a la boca cuando Wybie me contó cuando lo fue a ver a su casa. -dijo Coraline mientras veía con recelo aquella llave.

-Pero no tiene mucho sentido, ¿como es que la pudo encontrar después de que la aventaran por un pozo? -pregunto Victor confundido al pensar en las posibilidades.

-No lo se, ni siquiera podría creer de que fuese capaz de llegar a ir a buscarla porque eso lo dudo demasiado, ya que el mismo sabe bien lo que implica el que aun haya posibilidad de poder cruzar entre los dos mundos, y ni saber que podría pasar si esa puerta se vuelve a abrir. -dijo Coraline con un tono de preocupación más que palpable ante lo que acaba de decir.

Bictor tras escuchar las palabras de su nueva amiga, iba a decir pero se detiene al escuchar la puerta de la habitación abrirse, mostrando que tanto sus padres como los de Coraline estaban ahí, parecía que apenas y estaban llegando claro estaba.

-Oh, ¿que pasa? -pregunto Victor al mismo tiempo en que arqueaba una ceja.

-Victor, tenemos que ir a terminar de acomodar nuestras cosas, ya hay que irnos hijo. -dijo Ben Frankenstein que estaba junto a su esposa.

Al escuchar la respuesta de su padre, el chico no pudo evitar que un suspiro saliera de su boca, estaba claro que de una manera u otra, el tiempo que iban a tener ahí no iba a durar mucho.

-Bueno, creo que hasta aquí llega nuestra platica. -dijo Victor un poco desanimado mientras se levantaba.

-Si , supongo que si, al menos por el momento claro esta. -decía Coraline mientras se encogía de hombros, pero después de un tiempo de silencio entre los dos ella retoma las palabras.  -No significa que no se pueda repetir, me gusto poder hablar contigo Victor, de momento no estoy segura de que tanto tiempo tome pero, tengo el presentimiento de que... cuando menos lo esperemos, la palabra amigos sera algo que nos va a caracterizar, ¿no lo crees? -pregunto al ver al muchacho con una sonrisa en el rostro.

Victor por su parte, se mantuvo callado durante unos momentos pero, al final también dejo que una sonrisa propia se le formara en su rostro, al mismo tiempo en que Sparky corría alrededor de el y de la peliazul.

-Jeje, también me gusto el poder conocerte Sparky, cuídate. -dijo Coraline mientras acariciaba con cariño la cabeza del canino.

Más de uno no pudo evitar reírse al modo de actuar del perro, la final ya no paso mucho tiempo para que los Frankenstein terminaran por salir del apartamento de Coraline y sus padres, para así poder ir a ver las cosas de la mudanza al suyo propio.

-Bueno hija, ¿y como te fue con Victor? -pregunto Mel al voltear a ver a la menor.

-Me agrada mucho la verdad, tengo el presentimiento de que quizás nos volvamos muy buenos amigos. -dijo Coraline hablando con confianza.

-Eso es lo que nos da gusto nena, al final el habernos ido a venir aquí sin duda fue algo que vino para bien. -dijo Charlie con una sonrisa simple.

-Ay papa, créeme si supieras lo que llegamos a pasar durante días, se que no dirías lo mismo. -pensó Coraline al recordar a la Otra Madre y su mundo al otro lado de la puerta.

...

-Entonces, ¿ese chico Victor... tiene un perro que el mismo se encargo de revivir? -pregunto Wybie que parecía estar tratando de entender.

En este momento, Coraline estaba afuera del edificio con Wybie, le había dicho como había sido el día de ayer con el menor de la familia Frankenstein.

Y no hacia falta decir, que el chico estaba tratando de terminar de comprender el rumbo en el que había ido aquella platica.

-Si, y no solo eso... también opte por decirle acerca del tema de la Otra Madre, y de lo que implica tener la llave. -dijo Coraline con la llave al Otro Mundo en su mano.

-Espera, ¿hiciste que? -pregunto Wybie que ahora si se sentía incrédulo, pero luego no tarda casi nada en reaccionar. -Oye, disculpa si sueno como que te cuestiono pero, ¿que paso con lo de mantener el secreto? -pregunto mientras arqueaba con intriga una de sus cejas.

-Wybie, se que es una locura, pero Victor no es como mis padres o el resto de las personas de este edifico, el mismo ha pasado por cosas con las que muchos podrían ver posible únicamente en sus fantasías o en un retorcida realidad, además de que aseguro de que no le iba a decir ni una palabra a nadie. -dijo Coraline queriendo calmar a su amigo.

-Eso lo entiendo chica, créeme que si pero, ¿estas realmente segura de que realmente podemos confiar en el? -pregunto Wybie que aun se sentía bastante inquieto con eso ultimo.

Coraline a estas alturas, debía de reconocer que su amigo tenia sus dudas sobre que ella le dijera la verdad as Victor, es más hasta ella misma se lo llego a cuestionar mucho en el momento en que decidió contarle.

Pero, ahora mismo no lo sentía así, no siente que se equivoco al hacerlo.

-Se que es una locura Wybie, lo se de verdad, pero cuando hable con el, no se como explicarlo de manera detallada pero... -decía Coraline buscando las palabras para seguir hablando, hasta que finalmente logra dar con ello. -Es como si sintiera que el pudiera entender esto, aun si no lo conozco como tal, y si puede que el solo hecho de que este diciendo algo así sea más que raro, pero con todo lo que ya hemos visto desde el comienzo, no es como que podamos decir que muchas cosas sean normales, si es que ese termino realmente significara algo. -termino de decir con cierta seriedad en sus palabras.

Wybie por su parte, solamente se quedo callado, pero en eso volteo a ver a un lado y vio que el gato llegaba por lo que se agacho para acariciarle un poco la cabeza.

-Ah y, ¿que crees que no depare a partir de ahora? -pregunto Wybie al voltear a ver nuevamente a su amiga peliazul.

-La verdad... no estoy muy segura. -decía Coraline para luego acercarse y acariciar también el pelaje del minino. -Pero sea lo que sea lo enfrentaremos juntos... ¿cierto? -pregunto mientras extendía su puño frente a su amigo.

Al ver lo que su amiga quería hacer, el chico aunque tomo un poco de tiempo y se quedo sin algo que decir, al final devuelve el saludo y ambos chocan el puño.

-Si, juntos. -dijo Wybie respondiendo con una sonrisa que le contagio a la peliazul.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí el capitulo, espero les guste.

Otra historia que siento gustoso de traer de regreso, a ver que tal se ve el desarrollo, es muy emocionante tener esto de regreso para trabajar.

Los invito a que dejen sus votos si les gusta el capitulo, además de que también los invito a que escriban sus opiniones sobre el capitulo en los comentarios, ya casi termina el maratón, estén al pendiente.

Que lo disfruten.