Capítulo 18. [Maratón 2/3]
-Ambos sabemos que mueres por mí. Sabes que cada día me deseas más, preciosa.-dijo caminando atrás de mi.
-Mentira. Él único que se siente de esa forma, eres tú. Tú, desde el primer día, te mueres por mí, me deseas desde el primer día que me viste en esa maldita clase.
-Al parecer, la niña piensa que lo sabe todo, ¿no? Se cree, la persona más importante de este mundo, piensa que sin ella no puedo respirar. Vamos, Nicole. Solo eres un juego, ¿qué acaso no lo ves?
-Eso no es lo que me dijeron. ¿Sabes? Alguien muy cercano a ti, no supo guardar tu "pequeño" secreto. Sé que estás enamorando de mí, Dolan. Lo sé todo. ¿No lo ves?
-¿Por eso te comportas así? Piensas que así me alejaras, preciosa. Bien, te equivocas. Un paso en falso, y tú serás la que esté enamorada de mi.
-¿Quieres apostar, Dolan?
-No pierdo mi tiempo, con juegos, Nicole.
-Como sea-dije alejándome de ahí, encontrándome con Aaron.
Estaba tan enojada, no puedo creer que estoy enamorada de él. Nunca debí empezar a jugar pero ya era tarde ahora, Grayson va a saber quién es Nicole Garfield.
-¿Qué acaba de pasar ahí?-preguntó.
-Aaron, sabes que te amo, pero esto no lo diré-dije abrazándolo.
-Esta bien...¿qué clase te toca?-pregunto, devolviéndome el abrazo.
-Teatro-dije contenta, pues bien sabía que no me tocaba con Dolan.
-Rayos a mí me toca español-dijo.
-La aburrida que te vas a meter-dije para ir al auditorio donde ya se encontraba el profesor y uno que otro compañero.
-Hey...-escuché una voz
Me voltee a ver quién era y era Ethan.
-Hola, niño-salude contenta.
-¿Lista para este viernes?-me preguntó
-Muy lista-respondí al recordar mi vestido-¿tú?
-Nervioso-dijo mirándome.
-¿Nervioso? ¿De qué?-empecé a cuestionarlo.
-Dana me pone los nervios de punta-confesó.
-Ethan, eres un niño súper lindo y te gusta, le gustas así... Que no te preocupe. Todo saldrá bien, tranquilo-le dije tratando de tranquilizarlo.
-Esta bien,está bien-dijo tranquilizándose.
-Bien, pues...¿qué me cuentas?-preguntó.
-Que no aguanto a a tu hermano-dije mirándolo.
-¿Ahora qué hizo?-preguntó.
-Ser él. Tiene un ego del tamaño de mundo ¿sabes?
-Gray no es así, simplemente no sabe cómo expresar sus sentimientos.
Me quede pensando en todo lo que había pasado hoy, como él se comportaba, como cuando le coquetee se volvía más odioso más egoísta.
-No creo que sea eso, Ethan. De verdad.
-Vamos, Nicole. Ya te dije que lo traes vuelto loco.
-Y yo te voy a decir que coquetee con él y se comportó como un idiota, que piensa que puede tener cualquier chica-dije enojada.
-¡¿Hiciste que?! Pensé que no te agradaba-dijo confundido.
-Pues ya ves aveces las cosas cambian-dije tratando de que no se descubriera mi plan.
-Oh, no. No me digas...Nicole Garfield la mujer más terca de este mundo, que decía que mi hermano nunca le iba a gustar le coqueteó, pues déjame decirte que te acabo de descubrir-dijo sonriendo.
-¿De qué hablas?...no te entiendo-dije haciéndome la desentendida.
-Nicole, lo único que te pido es que no lastimes a mi hermano, ni tampoco te lastimes tú-dijo mirándome directamente a los ojos.
-¿No estás enojado?-pregunta cabizbaja.
-No, claro que no. Solo no quiero que lastimes a mi hermano, como ya te he dicho, a él le gustas y no sólo para un rato si no para más.
-Pues...el me trató mal hoy y no lo voy a permitir, Ethan. Seguiré con lo que tenía planeado pero no dejaré que me trate como una más de su lista-dije decidida.
-Y estoy contigo para lo que sea si necesitas un consejo o ayuda recuerda que estoy aquí, pero recuerda no lo puedes lastimar.
-Y te repito que no lo haré, pero quiero ver cuánto significó para él. Pero como me trató hace un rato, de verdad no sé qué pensar.
-Solo, ten cuidado con tus actos.
Nos quedamos callados.
-Y bien...¿qué papel quieres?-dije cambiando radicalmente de tema.
-Noah.
-Oh. Pudimos ensayar juntos si es que nos quedamos con los estelares.
-¿Quieres a Allie?
-Si-dije sonriendo-¿no te lo esperabas?
-Claro que lo esperaba.
-¿Tan predecible?-dije con una pequeña sonrisa en los labios.
-Ahm...si-dijo soltando una pequeña risa.
-Okay, chicos. Guarden silencio. Las audiciones están a punto de comenzar, los chicos que se quedaron en escenografía, ya nos montaron el lugar de la escena de la audición. Irán pasando en parejas, las cuales yo elegiré. ¿Entendido?
Todos asentimos.
-Okay, primera pareja Sr. Harper y Srta. Montgomery. Adelante.
Y así empezó. Ya habían pasado varias parejas más, cuando volvió a hablar.
-Sr. Dolan y Srta. Garfield, adelante. Es su turno.
Nos sentamos en la sillas que estaban ahí, para la escena.
Esperamos a que el profesor, nos indicará que empezáramos.
Ethan empezó.
-¿Qué es lo que vas a hacer?-dijo serio.
Después de un silencio contesté.
-No lo sé.
De nuevo silencio.
El solo suspiró.
-¿Regresamos a lo de antes? Lo estamos reviviendo. ¿Qué pasa con estos dos últimos días? Fue hermoso.
Lo interrumpí.
-Sé lo que pasó, fueron días maravillosos. Pero, muy irresponsables.
Ethan se paró enojado de la silla.
-Tengo esperando a mi prometido quien estará destrozado cuando sepa todo esto-le grite.
-Entonces haces el amor conmigo y luego te vas con tu prometido.-dijo él ahora gritándome a mi.-¿Ese es tu plan? Solo fui una prueba que no pase.
Me tocó interrumpirlo.
-¡No! Le hice una promesa a un hombre. Le di mi palabra-dije parándome.
-Esa palabra vale un carajo. ¿No crees?
-Ya lo sé. Pero eso lo sabrá cuando hable con él.
-Esto no se trata de mantener tu promesa y menos de seguir lo que tu corazón siente. Se trata de seguridad.
-¿Cómo debo interpretar eso?
-¡Dinero!-gritó exasperado.
-¿Cómo dices eso?-dije sorprendida.
-Él tiene mucho dinero.
-Yo te odio-Dije enojada.-Maldito bastardo.
-Si te vas en este momento, te odiaré
-Te odio.
-¿Quieres irte?
-¿No te haz dado cuenta de lo que está pasando con nosotros?-dije gritando enojada.
-Creo que no. Debí haber interpretado mal las cosas.
-Si, creo que así fue.-dije caminando para irme de ahí.
-¡Estás aburrida!-gritó a mis espaldas.-¡Estás aburrida y lo sabes! No estarías aquí si algo no te faltará.
-Arrogante-dije entre dientes-Maldito desgraciado.
Estaba saliendo muy bien.
-¿Quieres quedarte conmigo?-preguntó.
-¿Quedarme contigo? ¿Para qué? ¿No te das cuenta? Ya estamos peleando.
-¿Y que? Siempre lo hacemos. Es normal. Tu solo dime cuando me comporté como un maldito arrogante y yo te diré cuando me irrites. Que por cierto lo haces la mayoría del tiempo. No me da miedo herir tus sentimientos. Tengo dos segundos para ser honesto y me sales con una de tus estupideces.-dijo caminando.
-¿Y qué?-pregunté.
-No va a ser nada fácil, va a ser muy duro. Pero tenemos que trabajar en esto, todos los malditos días y me gustaría hacerlo por qué te quiero. Quiero que estés conmigo para siempre. Solamente tú y yo.
Yo comencé a llorar.
Realmente estaba saliendo bien. Tal vez ambos nos quedemos con el estelar.
-¿Harías algo por mí?, ¿Por favor? Imagina cómo sería tu vida conmigo.
Silencio.
-Dentro de 30 o 40 años-dijo volviendo a hablar.-¿Cómo la imaginas? Si él está en lo que ves. Vete.
Yo lloraba aún más.
-Lárgate. Ya te perdí una vez y creo que podría soportarlo. Si eso es lo que quieres, bien. Pero no tomes el camino fácil-dijo enojando.
-¿Qué camino fácil? No hay camino fácil. Haga lo que haga, alguien saldrá herido.-dije con un tono melancólico, aún llorando.
-Deja de pensar en lo que los demás quieren. Deja de pensar en lo que yo quiero. En lo que él quiere o lo que tus padres quieren. ¿Tú qué quieres?
Solo negué con la cabeza llorando.
-¿Qué es lo que tú quieres?-continuó.
-No es tan simple.
-¿Qué es lo que tú quieres?-dijo enojado.
Silencio.
-¡Responde! ¿Qué es lo que quieres?
-Ya me tengo que ir.
Silencio.
Se empezó a ir. Dejando espacio para que pudiera salir de escena.
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