Burn

Aclaración: este capítulo está relacionado directamente con el anterior "limonada fría", es sobre el pasado de SJ y SY con sus padres, así que pequeña advertencia sobre maltrato físico y psicológico. Había querido escribir esta versión desde hace mucho tiempo pero me preocupaba no ser capaz de escribirlo adecuadamente, quiero decir que le tengo mucho cariño a este capítulo y lo he escrito con las mejores intenciones pero es posible que refleje un poco mi ignorancia en ciertos temas.

Dicho esto, no se sientan obligados a leer, los capítulos de esta historia no tienen continuidad aunque algunos capítulos hagan referencia a lo que pasa en otros y no es necesario que lean este si no quieren. Gracias.

*

Decir que Shen Jiu no era una persona competitiva sería mentir. 

Yue Qi había conocido a su futuro esposo cuando ambos estaban en la escuela primaria. Ambos eran de familias asiáticas y vivían en la misma calle. Yue Qi había conocido a sus futuros suegros una mañana de domingo mientras paseaba con su madre y hermana por el parque cerca de una de esas enormes iglesias a la que quizás la mayoría de sus vecinos acudía. Su familia no era en lo absoluto religiosa... de hecho, su familia no era una familia demasiado convencional para la zona en la que vivían. Su madre era una mujer joven y soltera que era muy mal vista por los vecinos en ese entonces, no exigía de más a sus dos hijos en los estudios o que se unieran a diferentes clubs después de la escuela, disfrutaba de escuchar rock de los 80's los sábados por la mañana mientras hacía la limpieza y a veces iba a la tienda con una falda corta y un top sin mangas que hacía que las vecinas la odiaran. Ya que solía trabajar hasta 46 horas a la semana, Yue Qi aprendió a cocinar para él y su hermana y a veces su mamá, además de turnarse en hacer los quehaceres de la casa. 

La familia de su Xiao Jiu y Shen Yuan era muy diferente. 

Cuando los conoció ya eran tres hermanos, Shen Ying tenía a penas unos pocos meses de edad mientras los gemelos Shen estaban por cumplir los 10 años. Era un matrimonio mixto que combinaba los peores estereotipos de dos culturas: el fanatismo religioso de una madre blanca conservadora y la exigencia académica de un padre asiático. Todas las mañanas veían al padre de los gemelos salir muy temprano por la mañana con un traje en alguna tonalidad de gris al trabajo, su madre era ama de casa, la pasaba haciendo los quehaceres o chismeando con las otras mujeres de la iglesia. Yue Qi tenía algo en claro: Shen Yuan no había aprendido nunca a cocinar porque su madre le había prohibido el acceso a la cocina por algo que no fuera tomar un tazón de cereal y Shen Jiu nunca había aprendido porque desde muy joven lo forzaron a aprender a servir a su hermano gemelo y su padre y lo odiaba. A-Ying y A-Lian sólo sufrirían las consecuencias de aquella nefasta educación conservadora de sus hermanos mayores. 

La primera vez que vió a Xiao Jiu llevaba un vestido arriba de la rodilla de color rosa y su largo cabello recogido en dos coletas altas, se encontraba en los columpios con el vestido manchado de lodo y una media rota, luego se enteraría que se había peleado con unos niños que molestaban a su hermano. A Xiao Jiu siempre le había gustado su cabello largo, solo recordaba una vez en los más de 10 años que llevaba de conocer a su pareja en la que no lo había tenido largo, fue en esa época cuando tenía 19 años y que había decidido revelarse, se había cortado el cabello muy corto y lo había invitado para tener sexo en la cama de sus padres... pero eso era avanzar demasiado rápido en la historia. 

Iban en la misma escuela aunque en diferentes salones, no fue hasta llegar a la escuela secundaria cuando pudieron conocerse mejor. Iban en el mismo salón, tenían casi las mismas calificaciones, a veces Xiao Jiu puntuaba mejor en un examen, otras veces era Yue Qi quien lo hacía mejor. Silenciosamente Xiao Jiu comenzó una competencia contra Qi-ge para ver quien era mejor en las clases, a pesar que se sentaban juntos, Xiao Jiu parecía que lo odiaba y siempre fruncía el ceño cuando lo veía cerca. Fue durante el segundo año que Shen Jiu por fin se cansó y decidió una tregua.

- No entiendo la clase de química... ¿puedes ayudarme? - pidió, sus mejillas estaban rojas y su cabello caía delante de su rostro. Siempre llevaba ropa muy holgada y a veces se encorvaba, a veces ataba su cabello en un moño alto y muy raras veces llevaba las gafas que se supone debía usar. 

- Claro ¿qué es lo que no entiendes? uh... ¿⬛︎⬛︎⬛︎⬛︎?

- Jiu - corrigió - solo... llámame Jiu. 

Comenzaron sus citas de estudio en la biblioteca. Se quedaban después de clases y a veces Xiao Jiu inventaba alguna excusa para ir a casa de Qi-ge a estudiar los sábados y a veces los domingos bajo la excusa de un exámen importante el siguiente lunes. La verdad era que no tardaban demasiado en las materias que Yue Qi le explicaba, Xiao Jiu era rápido aprendiendo, así que pasaban el resto de la tarde conversando, a veces viendo una película o saliendo a algún lugar. Fue a sus 15 años cuando se dieron su primer beso y comenzaron a salir oficialmente como novios. Quizás una de las cosas que más le gustaba a Xiao Jiu de salir con Qi-ge eran las veces que podía ir y cenar con ellos, especialmente porque le gustaba ver a Qi-ge cocinar.

- Es raro. Mi hermano no sabe ni siquiera freír un huevo - comento una noche mientras ayudaba preparando la ensalada para la cena. - mamá dice que es mi obligación.

- Bueno... mamá trabaja. Sería muy desconsiderado de mi parte dejar que Mei haga todo en casa ¿no?

- Mi madre dice que me prepara para la vida.

- Bueno, yo también lo hago. Cocinar es una habilidad básica, todos deberían saber cocinar lo básico...

- Mi padre se burlaria de ti y diría que suenas gay con eso.

Yue Qi sonrió.

- Creo que Xiao Jiu puede garantizar que no soy gay.

Shen Jiu hizo un gesto en esa ocasión. No era la primera vez y no sería la última. A pesar que esa noche fue la primera vez que trato de enseñar a su en ese entonces novio a cocinar algo, por alguna extraña razón todo termino quemando, solo sobrevivió la ensalada de lechuga. Cuando llegó su suegra, en lugar de los gritos que Shen Jiu esperaba recibir, ella solo río por lo sucedido y sugirió pedir una pizza.

Fue el tiempo que hizo que Yue Qi se diera cuenta de lo incómodo que Xiao Jiu a veces se encontraba consigo mismo. No sabía cómo explicarlo, cada vez que usaba los pronombres incorrectos o cuando Xiao Jiu se veía forzado a vestir o hacer algunas cosas, cuando las personas de su alrededor decía que "no era para señoritas" parecía realmente molesto. Fue cuando tenían 17 años que Xiao Jiu se lo dijo.

- A veces... creo que estoy en el cuerpo equivocado. - confesó esa tarde mientras veían una película, una de esas tontas comedias de cambio de cuerpo. - ¿Es extraño?

- Hay... personas que se sienten así. Es normal, supongo. ¿Alguien más lo sabe?

- Yuan... él me apoya en todo. Cuando estamos solos me llama Jiu-ge, frente a nuestros padres... usa el otro nombre.

- Entiendo...

- No debería sentirme así. Es... es raro... va en contra de todo...

- No, está bien sentirse así - lo interrumpió, tomando el rostro de su novio entre sus manos y besando sus mejillas - Xiao Jiu es... Xiao Jiu. Por eso te quiero y... si no te sientes cómodo con esto... busca que es lo que se siente correcto. Estaré contigo siempre.

Eran adolescentes, Yue Qi no sabía que decir, pero sabía que amaba a Xiao Jiu. Xiao Jiu tampoco entendía bien como se sentía, pero saber que Yue Qi lo aceptaba y lo amaba, era suficiente en ese momento. Se besaron una y otra vez, hasta que Yue Qi comenzó a reír en mitad del beso.

- ¿Qué?

- Creo que... el padre de Xiao Jiu estaba en lo cierto después de todo. Creo que sí soy gay.

- Idiota - bufó Shen Jiu, golpeando el hombro de su novio. Pronto ambos comenzaron a reír sin control.

No pasó mucho tiempo antes que Xiao Jiu saliera del clóset con su suegra y cuñada. Ambas se vieron un poco sorprendidas, pero pronto sonrieron y le dieron la bienvenida de nuevo a la familia, esta vez con el nombre y pronombres correctos, incluso su suegra se disculpó por haberlo llamado con el nombre equivocado tantas veces. Xiao Jiu le dijo que no importaba.

La graduación se acercaba, con ello los exámenes para la universidad y los 18 años de Xiao Jiu. Había pensado mucho en eso, se mudaria de casa junto a Qi-ge, sus padre no sabían y era mejor que no lo hicieran. Sus calificaciones eran buenas pero no perfectas como su padre a veces desearía que fueran. Había aprobado el examen de ingreso a medicina, pasar tanto tiempo con su suegra había hecho que se interesará mucho por la medicina de urgencias, especialmente cuando contaba todas esas historias de personas que llegaban a emergencias con casos extraños y a veces hilarantes.

- ¿Medicina? No es algo que te de mucho tiempo para estar en casa y cuidar de tus hijos. Quizás sería mejor algo más fácil como enfermera, es algo que queda mejor con más chicas - observo su madre una tarde mientras ayudaba en la cocina - ¿qué pensara tu futuro esposo?

- Él ya piensa muy bien de eso y me apoya. - su madre puso los ojos en blanco, por supuesto que se refería a Yue Qi.

- Tienes suerte que sea un buen chico, incluso está dispuesto a convertirse por ti.

- Es un buen novio.

- Y un buen futuro esposo, espero. Solo quiero verte feliz y casar a mi hija de blanco con un hombre que sea un buen esposo.

Shen Jiu forzó una sonrisa. Shen Yuan solo miraba a su hermano en silencio. Estaba feliz porque cuando su hermano se fuera podría ser él mismo, pero había otras cosas que lo preocupaba.

- ¿Hiciste qué? - pregunto Shen Jiu en voz baja.

- Odio el derecho. Sabes que quería ir a la escuela de arte.

- Van a matarte.

- ¿A mi? Si llegan a saber que vas a vivir con Qi-ge es a ti a quien van a matar.

- No van a enterarse.

- Jiu-ge. 

- No lo harán. Me iré de aquí, comenzaré el tratamiento, me graduarse y ellos nunca lo sabrán.

- Cuando tu voz comience a cambiar y tú mismo hagas los cambios ellos se darán cuenta ¿acaso no piensas regresar jamás? ¿Cómo pagarás la universidad?

- Pensaré en algo...

- ¡Jiu-ge!

- ¡Si lo saben me enviaran a uno de esos malditos campamentos! ¡No pueden saberlo! Tu... no puedes decirlo.

- Nunca lo haría. Eres mi hermano, no voy a traicionarte así. Por eso... te pido que no digas nada sobre la escuela de arte.

Shen Jiu soltó un suspiro. Ambos tenían sus secretos, ambos tenían miedo de sus padres. Durante la cena, su padre volvió a quejarse sobre que las notas de ambos eran demasiado bajas, se quejó que Xiao Jiu no había entrado a cierta universidad y que los resultados de los exámenes de Shen Yuan eran patéticos. Esa noche los hermanos decidieron que no volverían a casa una vez pudieran escapar de sus padres.

Yue Qi a veces visitaba esa enorme iglesia junto a Xiao Jiu y sus padres, era muy incomodo, las personas lo veían y a veces hablaban de su madre. Escuchar las palabras del líder era agotador, mantenía la mirada fija en un lugar y trataba que el disgusto no se reflejará en su rostro. El buen trato de todos era abrumador al saber lo hipócritas que eran, solo queriendo a otro en sus filas.

- Me sorprende un poco que permitan que vayas a la universidad con este tipo de mentalidad - suspiro Qi-ge una vez mientras caminaban por el parque después del servicio.

- Es más idea de mi padre que de mi madre. Él quiere un abogado y un médico en la familia. A-Ying supongo que será forzado a medicina también ya que yo me convertiré en una esposa modelo para cuando él tenga edad de ir a la universidad. A-Lian quizás también sea forzado a algo así.

- Xiao Jiu será un buen doctor. Yo trataré de ser un buen amo de casa. - Shen Jiu trato de ocultar una sonrisa - mamá... esta hablando con un colega para tu tratamiento. Cree que podrás iniciar antes de iniciar clases.

- ¿En serio? - Shen Jiu no pudo ocultar su sonrisa esta vez - Gracias. Tu madre es genial.

- Te quiere casi tanto como yo.

- ¿Casi tanto?

Yue Qi sonrió, beso la mejilla de su novio, vigilando que nadie los viera.

- Te amo.

No era la primera vez que lo decía, la primera vez había sido cuando le propuso vivir juntos en un apartamento a dos horas de la universidad, habían visitado el lugar y Shen Jiu parecía emocionado de vivir lejos de sus padres.

Desafortunadamente, ninguno se dio cuenta de una de las mujeres chismosas que había escuchado su conversación. No se dieron cuenta cuando está se acercó a hablar con los padres de Xiao Jiu, ni tampoco prestaron atención a como la expresión de ambos cambiaba al ver a su hijo mayor mientras caminaba junto a Yue Qi. No, hasta que fue tarde.

*

Cuando regreso a casa con sus padres esa tarde, su padre no tardó en golpearlo, gritarle sobre lo que aquella mujer había dicho, Shen Jiu no lo negó.

Esa fue la primera vez que enfrentó a sus padres, lo encerraron en su habitación y amenazaron en enviarlo a un campamento para que recobrara el sentido. Le dijeron que debía de alejarse de Yue Qi y su familia. Esa misma tarde el padre de los gemelos Shen también se presentó en casa de la familia Yue, le dio un puñetazo en la cara a Yue Qi y lo amenazó para que se alejara de su familia.

Al día siguiente en la escuela, Xiao Jiu tenía varios moretones en el rostro. Antes que Yue Qi pudiera preguntarle algo o decir algo, Shen Jiu se acercó a él.

- Acompáñame. No quiero entrar a clases hoy...

- ¿Qué quieres hacer? - preguntó, tomando la mano de su novio, apartando un mechón de su cabello para verlo mejor.

- Primero... vamos a la peluquería.

Fue una mañana larga. Fueron primero a la peluquería, a Shen Jiu le gustaba su cabello largo, siempre lo presumía y le gustaba cuidarlo. Pero esa mañana decidió cortarlo muy corto en un estilo convencionalmente masculino. Lo siguiente fue comprar ropa, algo más del gusto de Xiao Jiu, no era la primera vez que usaba el binder que Yue Qi le regalo para su cumpleaños en secreto, pero era la primera vez que compraba ropa que fuera de su gusto. Yue Qi pensó que su novio se veía muy guapo con su nuevo estilo.

- ¿Cómo te sientes? - pregunto cuando Shen Jiu se quedó en silencio frente al espejo, o observando de pies a cabeza a la persona en el espejo.

- Yo... creo que por fin... comienzo a verme como quiero. Me veo como Yuan...

- Eres muy apuesto - sonrió, besando la mejilla de Shen Jiu y tomando su mano. - ¿qué piensas hacer ahora? Si te ven así...

- Es lo que quiero.

- Es peligroso. Iré contigo.

- Es lo que pretendo. Que vengas conmigo... solo hay una cosa peor que ser trans para ellos - sonrío, la sonrisa malvada que Qi-ge pronto descubriría que lo volvía loco de amor - y es que su "hija" sea una puta.

- Xiao Jiu.

- Vamos a mi casa, quiero coger contigo... pero antes... vamos por condones.

Shen Jiu conocía a sus padres, sabía que esa mañana habían ido con el líder de su congregación para hablar sobre su "hija", regresarían a casa antes que ellos regresarán de la escuela, quizás iban a preparar las cosas para que Shen Jiu fuera a uno de esos malditos campamentos. Se había adelantado, había metido todas las cosas importantes a su mochila esa mañana y dejado en casa de Qi-ge, no le importaba la ropa u otras cosas que dejaría atrás. Subieron a la habitación de sus padres, al principio fue incómodo pensar en hacerlo ahí, pero estaba decidido. Se quitó la ropa, todo excepto el binder, daba la espalda a la puerta, cuando sus padres entraron, estaba montando a Yue Qi y gimiendo.

No le importó los gritos, como lo jalaron del cabello o los insultos, se preocupó un poco más por Yue que termino con el la lo roto al tratar de defenderlo. Fue arrojado fuera de su casa solo con la ropa que acababa de comprar, llamando la atención de todos los vecinos y ante la mirada preocupada de sus hermanos. Pero nunca se había sentido tan libre. Esa fue la primera vez que Yue Qi vio a Shen Jiu reír con todas sus fuerzas, tirado en el césped frente a la casa de sus padres bajo la lluvia que comenzaba a caer. Yue Qi pensó que esa era la primera vez que Xiao Jiu era verdaderamente feliz.

Claro, la madre de Qi-ge estaba furiosa por lo que había sucedido.

- ¿Estas seguro que estás bien, A-Jiu? - pregunto mientras limpiaba las heridas del rostro de su yerno - deberíamos ir a la policía y levantar una denuncia.

- No... tienen suficiente después de ver eso. Gracias por... recibirme.

- Cuando quieras, cariño - sonrió la mujer - tengo que volver al hospital. Por favor... llamen si necesitan algo.

- Gracias, mamá - sonrió Yue Qi.

Ambos se despidieron. Yue Qi fue a preparar una taza de té me manzanilla, después que la adrenalina del momento hubiera pasado, Shen Jiu volvía a sentirse temeroso. No se arrepentía, volvería a hacerlo, pero sentia miedo. No por él, sino por sus hermanos.

- He sido muy egoísta - susurro cuando Yue Qi le llevo la taza.

- Hiciste lo que pensabas era correcto para ti... A-Yuan entenderá.

- Lo hará... pero eso no significa que he arruinado también su vida. Joder... no debí ser tan impulsivo.

- Está bien... Xiao Jiu hizo lo mejor que pudo... esta bien...

Antes que Qi-ge pudiera decir algo más para consolar a su novio, el teléfono comenzó a sonar, era Shen Yuan... y estaba muy alterado.

Sus padres ha Ian tenido un accidente.

Sus padres habían muerto esa misma noche.

*

Yue Qi había recordado todo eso cuando encontró una vieja fotografía que habían tomado frente a aquella enorme iglesia, Xiao Jiu se veía triste con ese simple vestido violeta y el cabello negro suelto, parado al lado de su hermano gemelo y sus padres, con A-Ying a un lado suyo y con su madre cargando a un recién nacido A-Lian.

- ¿Qué haces? - pregunto Shen Jiu entrando, al ver a su prometido sentado en el suelo.

- Encontré esto - le mostró la vieja fotografía - ¿qué debería hacer con ella?

Shen Jiu la tomo en sus manos. Vio la fotografía por un momento antes de devolverla a Yue Qi.

- Quemala.







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No sabía si publicar este capítulo o no, seguramente voy a arrepentirme pronto de haberlo hecho, pero realmente quería escribirlo desde hace mucho, casi nació junto con la idea de crear cooking diary pero nunca tuve el valor de escribirlo o dar demasiadas pistas acerca de este capítulo.

Cómo dije, los capítulos de este fic no están completamente relacionados más allá de ser algo que escribo después de cocinar algo que me gusta o algo relacionado con la comida... qué más bien aquí es porque SJ es experto en quemar la comida (?). 

No quería dar la advertencia de un personaje trans porque... honestamente... no le veo sentido a que sea una advertencia. La advertencia sería más por mi desconocimiento acerca de los temas y por quizás un mal uso... y esto es lo que me daba más miedo de escribir este capítulo, aún ahora estoy escribiendo esto y siento que debí haber dado algún tipo de advertencia pero no estoy segurx de cuál 😥 o si simplemente soy yo hundiéndose en la ansiedad como siempre. Hoy pensaba en algo relacionado con el tema por algo que sucedió y creo que eso fue lo que me dio el impulso que necesitaba para escribirlo... y me alegra haberlo hecho. Solo... no quiero hablar mucho de mi vida... además que no he dormido por culpa de la ansiedad, una rata y que mi casa se llenó inexplicablemente de insectos... así que también culpen al insomnio por la ansiedad que siento escribiendo esta nota y por lo que es tan larga... y también a los errores al tipear, tuve que reescribir muchas veces porque no podía escribir bien así que me disculpó.

Hay otro capítulo que está relacionado a estos pero desde la perspectiva de SY que quizás también me animé a terminar de escribir algún día... aunque es un poco más deprimente.

Gracias de nuevo por leer.

💚

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