Un día en la vida de la familia Min.

Ya habían pasado alrededor de 5 años aproximadamente. Todo era bastante normal en la familia Jeon-Min.
Momo y ______ estaban cumpliendo ya 5 años de casadas, al igual que JungKook y TaeHyung.

El pequeño Hye-Seung estaba muy grande, raramente más alto que algunos de sus compañeros de preescolar. Que Bueno, pensándolo detalladamente, tenía un historial de familia (por parte de su mamá Omega) que era muy alta.

Ahora eran exactamente las 8:34 de la mañana. El pequeño cachorro escuchó su alarma y corrió hasta el cuarto de sus madres, subió a la cama y brincó en ella, despertando así a sus progenitoras.

—Hye-Seung, ¿Qué te he dicho de saltar en la cama?— Regañó la adormilada Momo.

—¡Es hoy! ¡Es hoy! ¡Mamá ______*! ¡Mamá Mimi!— Dijo emocionado el pequeño.

—¿Qué es hoy, cielo?— Preguntó la Omega mientras abrazaba a su hijo, haciendo que este dejara de brincar.

—Tío Kookie va a llevarme al parque con Tío Tete y Jung-A.— Habló emocionado el niño mientras ambas adultas sonreían, enternecidas.

—Pero primero debes ir al colegio, mi vida. Vamos, te prepararé la ducha.—

La Omega se levantó de la cama, no sin antes dejar un beso en la frente de su esposa, y caminó hasta el baño, seguida por el infante.
Momo rió levemente, definitivamente no sabía qué haría sin su familia.

La pelinegra también se levantó y le preparó el uniforme a su hijo y a su esposa para el trabajo.
Bajó a la cocina y comenzó a preparar el desayuno para los tres. Panqueques, que era lo único que podía hacer sin quemar la cocina. Créanlo, ya había pasado 2 veces.

—Pórtate bien, pequeño. Tu tío Kookie va a pasar por ti ¿Está bien? No hagas travesuras y entrégale la tarea a la profesora, ¿Okey?.—

—Sí, mamá ______*.—

—Te queremos mucho, tesoro. No les hagas travesuras a tus tíos y no le pintes el pelo a Jeong-Hwa.— Advirtió Momo mientras le acomodaba la camisa a su cachorro.

—Sí, mamá Mimi.— El niño estaba por irse hasta que recordó algo —Ah, mamás, ¿Mis abuelos pueden ir a cenar hoy?—

—Les preguntaremos, cielo. Ve a clases.—

El niño sonrió emocionado y corrió hasta adentro de su preescolar, saludando a un niño que lo esperaba ahí.
La Omega se abrazó de la cintura de la más alta y le recordó lo rápido que había pasado el tiempo. Momo le dio la razón mientras besaba su cabeza.

Al ya estar dentro del carro, la castaña sacó su celular, dispuesta a llamar a sus madres y A sus suegros, pero la mano de su esposa la Interrumpió.

—______...—

—Dime, Momoring.—

—¿Y si le decimos a JungKook que cuide a Hye-Seung esta noche?— Preguntó mientras acariciaba la pierna de su Omega y se acercaba a darle unos cuantos besos al cuello contrario.

—Muk-Mo, no te emociones.— Regañó sarcástico a su Alfa mientras le acariciaba sus negros cabellos.

—Anda... Hace mucho que ya no te mimo, además, aprendí una nueva coreografía y creo que te puede gustar.— Declaró en susurro contra el cuello de la menor. ______ rió antes de responder.

—Lo pensaré.—

Unas cuantas horas después, justo después de que las señoritas Min tuvieran sus queveres, la familia Jeon y la familia Min se encontraban cenando en la casa del KookTae.

Los más pequeños estaban jugando Con los juguetes, valga la rebundancia, de Jeong-Hwa mientras Hye-Seung seq quejaba.

—¡No es justo! ¡Tú sólo tienes juguetes de niña!—

—¡No es mi culpa no tener un carrito como tú!—

Ambos niños se pusieron a llorar por sus propias razones, Hye-Seung porque no estaba cómodo con jugar a las muñecas y Jeong-Hwa por no tener el carrito que le había pedido a Santa Claus.
La Omega, madre del niño, se acercó a ellos para ver qué estaba pasando, pues desde hacía unos minutos había visto como Ambos niños no estaban cómodos.

—¿Qué sucede, tesoros?— Preguntó ______ mientras se acercaba y abrazaba a ambos por los hombros.

—Quiero tener un carrito como Hye-Seung.—

—No quiero jugar con las muñecas de Jung-A. —

Reclamaron los niños al unísono. La castaña se quedó un tanto perpleja ante las peticiones de ambos infantes, pero también sacándole una tierna sonrisa causada por la ternura.

—De acuerdo. Hye-Seung, tú trajiste tu carrito, ve por él y compártelo con Jung-A. Pequeña, después de comer, vamos a jugar con tu primo a las muñecas, ¿Está bien? Después jugarán con el carrito.—

Ambos infantes sonrieron y asintieron para después levantarse, pues Jimin los había llamado para comer.

______ suspiró y caminó hasta sentarse junto a su Alfa, quien le dejó un beso en su cabeza.
Esta sonrió y le devolvió el beso, pero esta vez en sus labios.

—Sabía que serías una buena madre, ______*— Afirmó Momo mientras acariciaba los castaños cabellos de su esposa.

—Gracias, no es fácil lidiar con esos pequeños diablillos.— Aseguró mientras los miraba robar pequeñas probadas del pastel que Jimin había hecho.

JungKook se acercó a su hermana y la separó de Momo, un tanto juguetón, sacándole una risa a las chicas y procedió a preguntar.

—¿Qué pasó con los cachorros, ______?—

—Jeong-Hwa quiere el carrito que pidió.— Afirmó mientras volvía a abrazar a su Alfa.

JungKook asintió comprensivo e invitó a TaeHyung a sentarse junto a él, para después contarle lo que pasaba con su hija.

Momo y ______ rieron ante la reacción de los Jeon ante la petición de su hija; no había nada de malo, claro, era normal el que su hija al juntarse con un niño todo el tiempo le entrara los gustos por ese tipo de juguetes.

El problema era que ni JungKook ni TaeHyung y mucho menos ______ habían encontrado el carrito que Jeong-Hwa había pedido en navidad.

Dejando el tema de lado, la familia completa se propuso a comer. Era una aura muy familiar, no podía haber escena mejor.

Sólo eran ellos conviviendo con los suyos.

Perdón si arruiné la ilusión de algunos ^_^" pero ¡Hey! Yo me enteré la navidad pasada que Santa eran los padres, sigo traumada, estuve 17 años creyendo que Santa era real ㅠ.

Ahora, perdón si pareció más relleno que especial, de verdad me esforcé ㅠ.