Al terminar su helado, las cuatro chicas estaban poniéndose de acuerdo para ver que iban a hacer ahora. La Omega más alta propuso ir de compras, sin embargo, solo su pareja acepto, la Alfa más alta propuso ir al parque, pero al igual que a su pareja, solo Nayeon aceptó. La Alfa más baja solo esperaba la propuesta de la menor para aceptar inmediatamente y empezar a caminar, para que así, nadie se pudiera negar.

Jennie: ¿Entonces que proponen? —Preguntó la Alfa más alta recargando su cabeza en el hombro de su pareja—

______: Mm... —A la Omega se le ocurrió una idea que para ella sería muy genial- ¿Qué tal si vamos al cine? Creo que vi en mi celular que estaba disponible Tren A Busan —Propuso la Omega, la Alfa más baja solo se quedó con una cara de espanto, los zombies realmente le daban miedo—

Nayeon: ¡Si!  No la he visto, pero dicen que es muy buena ¿Qué dicen unnies? —Preguntó la Omega mirando a ambas Alfas—

Momo: N... —La Alfa se iba a negar, sin embargo la voz de su amiga la interrumpió—

Jennie: es una gran idea, ______ —Alagó la Alfa — vamos —La Alfa dejo la propina y se levantó de su asiento, siendo imitada por ambas Omegas. La Alfa más baja, sin otra opción, imitó a su amiga y salió de aquel lugar color rosa, siguiendo a sus amigas y su Omega—

Las chicas se dirigieron al cine entre pláticas, aunque en realidad, solo eran Jennie y Nayeon las que hablaban entre ellas, la Omega más baja iba escuchando música y la Alfa más baja iba con un pánico que se notaba a kilómetros, nunca le gustaron los zombies, le daban tanto miedo que incluso su mente juraba que lloraría del pánico.

______: ¿Estás bien? — La voz de su Omega la hizo reaccionar, al volver a su cuerpo, notó como este se tenso impidiéndole caminar— Si le tienes miedo a los zombies pode... —La Omega fue interrumpida por la Alfa peliazul—

Momo: Pff... ¿Miedo? Ja, esa palabra no está en mi vocabulario... Solo —La Alfa hizo una pausa— que pensé que había dejado mi consola prendida, pero recordé que no —Dijo la Alfa para verse "cool" ente su Omega, y esta sonrió ilusionada—

______: ¿Tienes una consola? ¿Te gustan los videojuegos? —Preguntó emocionada la Omega, la Alfa solo asintió una vez con una sonrisa nerviosa- Genial! Entonces dudo que te den miedo los zombies, sabes que hay muchos videojuegos de esos —Dijo la Omega mientras comenzaba a caminar junto a su amiga y la pareja de esta, ella no sabía que el único videojuego que Momo había jugado en su vida era Mario Kard, y ni siquiera le había entendido—

Al ya tener los boletos en la mano, las parejas entraron a aquella sala gigante de cine. La pareja se sentó en los asientos de atrás, claramente juntas, y la pareja aun no pareja junto a ellas. La película comenzó, aun no aparecían los zombies y eso tranquilizaba un poco a Momo, quien se concentraba en no concentrarse en la película, de lo contrario, comenzaría a llorar en frente de su Omega.
La parte más aterradora de la película comenzó y Momo, en pánico, comenzó a sentir que le faltaba el aire, por lo que comenzó a toser, siendo callada por los demás espectadores. ______ fue la única de las tres que lo notó y comenzó a tirarle aire a Momo y pedirle que se tranquilizara, al no obtener una respuesta positiva, sacó a Momo de aquella sala y le comenzó a dar leves golpes en la espalda, pidiéndole nuevamente que se tranquilizara.

______: Momo, Momo, ya, ya estas afuera, tranquilizante y trata de respirar con normalidad —Dijo la Omega aun dándole unos golpes en la espalda, obviamente leves—

Momo: creo cof, creo que ya cof cof cof —La Alfa trato de hacer lo que le pedía, sin embargo, ahora se estaba ahogando con su saliva—

______: trata de tranquilizarte, iré por agua —Dijo la Omega dispuesta a ir por un agua, sin embargo la mano en su brazo no pudo dejarla caminar—

Momo: estoy bien, cof, solo quédate conmigo, cof —Suplicó la Alfa mirándola como cachorrito mojado, por lo que la Omega no pudo resistir y asintió una vez. La Alfa puso su cabeza en el hombro de la Omega y comenzó a inhalar el aroma dulce de la nombrada, por reflejo, la Omega comenzó a acariciarle el cabello. El lobito de la Omega movía su cola y saltaba con emoción al sentir el aroma a Laurel y Chocolate de la Alfa, cosa que ______ no entendía el porque—

______: ¿Estás mejor? —Preguntó la Omega unos minutos después, cuando Momo ya estaba más tranquila—

Momo: S-Si... —Dijo la Alfa mientras se separaba un poco de su Omega — no me hagas volver ahí... Por favor —Suplicó la Alfa con la cabeza baja, ya que temía que realmente muriera ahí dentro—

______: de acuerdo, esperemos a las chicas en la fuente —Dijo la Omega mientras sacaba su celular para mandarle un mensaje a su amiga. Al terminar lo dicho, la pareja caminó hacia afuera del centro comercial y se sentaron en la esquina de aquella fuente enladrillada—

Sin nada que decir, la Omega se colocó sus audífonos y comenzó a escuchar música en estos, la Alfa revisó la flor que estaba en su bolsa, revisando que este bien. Los 30 minutos que faltaban de la película ya habían concluido y la pareja de Nayeon y Jennie ya estaban cerca de la pareja más baja

Jennie: Jajaja se me olvidó decir que le tenías miedo a los zombies —Se burló la Alfa más alta—

Momo: Ruby, juro que casi muero ahí dentro —Dijo con pesadez la Alfa más baja —

Jennie: Bien, bien, lo siento —Dijo la Alfa poniendo sus manos enfrente, a la altura de su pecho— ¿A dónde quieren ir ahora?

Nayeon: vi que hay un albergue de perros ¿Qué tal si vamos ahí? —Preguntó la Omega con un brillo en sus ojos muy notorio—

______: Nayeon... —La Omega se notaba seria— ¡esa es la mejor idea que has tenido! —Dijo cambiando su cara seria a una sonrisa— vamos —Dijo y ambas Omegas comenzaron a caminar mientras platicaban de su amor por los cachorros, causando la risa de sus parejas—

Al llegar a aquel lugar del que tanto hablaba Nayeon, las Omegas no lo dudaron ni un segundo y entraron a aquel lugar color azul cielo, siendo seguidas por sus Alfas. En aquel lugar había perros de todo tipo, pequeños, grandes, enormes, enanos, de todo. Las Omegas se acercaron con los primeros perritos que vieron, un perrito Pom Pom y un Jack Roussell, ambos de un color beige/durazno.

Nayeon: Mira Jennie Unnie, es muy pequeño —Dijo la Omega con una sonrisa de niña chiquita y un brillo en sus ojos —

Jennie: si, es muy bonito —Dijo, igualmente, con una sonrisa —

La única que no estaba del todo a gusto en ese lugar, era Momo, no porque no le gustaran los perros, al contrario, los amaba, si no que era alérgica y no se podía acercar tanto como quería.

Una chica, encargada de ese lugar, les dejo pasar a las tres chicas para que pudieran acariciarlos y darles de comer, por lo que las tres chicas, aceptaron con gusto. La Alfa más baja solo miraba como su Omega se divertía con aquellos animalitos, la peliazul tenía un brillo en sus ojos al ver como su Omega sonreía, ella estaba enamorada de aquella chica de cabello castaño.

______: Ahh! —La Omega dio un leve grito al ver como el perrito Jack Russell le lengueteaba la cara y se le subía encima—

Nayeon: creo que te quiere, ______ —Dijo la Omega mientras reía, aquel perrito seguía lamiendola, como si le quisiera decir algo—

Lamentablemente para las chicas, su tiempo ya se había acabado y rápidamente el atardecer comenzó a hacerse presente, no sintieron el tiempo pasar tan rápido. El perrito que ______ tenía tan enamorado comenzó a llorar al saber que ya iría, cosa que le llegó a la Omega, sin embargo, no podía llevárselo sin antes consultarlo con sus madres.

Las 4 chicas caminaron hasta la parada de autobús, en donde la Omega más baja debía esperarlo ya que su casa ya no estaba tan cerca. Jennie y Nayeon se fueron de aquella parada, ya que, la casa de Nayeon no estaba tan lejos y podrían ir caminando a lo que la pareja se despidió de sus amigas y se retiró, dejando sólo a Momo y ______

Momo: te acompaño a tu casa —Dijo la Alfa decidida al ver que ya había llegado el autobús, su plan para reconquistar a la castaña aun no acababa—

La pareja se subió al autobús y buscaron lugares libres, aunque solo habían hasta el fondo. Sin alternativa se sentaron ahí, la castaña solo se dedicaba a escuchar música pues no le interesaba entablar una conversación con la peliazul, la mencionada solo daba leves revisadas a la flor que seguía en su bolso, por suerte aun no se marchitaba o se arruinaba. Todo el trayecto de la parada de autobuses a la casa de la Omega fue muy silencioso, solo ser escuchaban las voces de los demás pasajeros y la música que traía el chofer.

¡Al fin habían llegado! Después de 30 eternos minutos, según la Alfa. Ambas chicas bajaron del autobús y caminaron hasta la casa de la Omega, la cual tenía unas luces apagadas ¡Claro! Ya darían las 7:40 de la tarde

______: Bueno, pues, gracias... Supongo —Dijo dudosa la Omega para después voltear dispuesta a entrar a su casa, sin embargo la voz y la mano sobre su brazo de la Alfa peliazul la detuvieron—

Momo: Amm... Bueno, yo... Quería darte esto —Dijo avergonzada la Alfa mientras sacaba la flor blanca que había conseguido hace unas horas solo para su Omega—

______: No creo que a tu novia le guste esto, Momo —Dijo tajante la Omega, dejando confundida a la peliazul—

Momo: ¿Novia?

______: Mina —Respondió celosa la Omega, si, celosa, lo había confirmado oficialmente, si gustaba de la Alfa pero al parecer ella no sentía lo mismo, o eso creía ella— ella me lo dijo... —Eso hizo enojar mucho a Momo ¿Cómo Mina se atrevía a decir eso si ella fue de las primeras en saber que la castaña era su omega? Realmente estaba furiosa con Mina, esto claramente confiando en las palabras de la Omega—

Momo: Ella no es nada mío, solo es mí amiga... Solo aceptala ¿Si? Por favor —Suplicó la Alfa acercando más la flor a la Omega y con la cabeza baja, lo que hizo que la mencionada no pudiera evitar sentirse mal por la forma en que la trató—

______: bien, está bien... Muchas gracias... unnie, nos vemos el lunes —Dijo rápido la Omega para después entrar a su casa casi inmediatamente, dejando a Momo con una sonrisa tonta en su rostro, pues era la primera vez que la llamaba 'unnie' sin ser obligada—

Momo se fue de ahí casi saltando de la felicidad, este día no pudo ser mejor para la Alfa.