38
El chico se acercó a Woozi, poniendo una mano en su hombro con una firmeza tranquilizadora.
—Confía en mí. —dijo con un tono bajo—Yo sé cómo lidiar con esto, tú ocúpate de mantener a Jimin cerca, es lo único que importa ahora.
Woozi asintió, sintiendo un leve alivio, al saber que tenía a alguien a su lado que entendía la gravedad de la situación. Pero sabía que esto no se resolvería fácilmente. La sombra de Yoongi y su persistencia podían complicar las cosas, y no podía simplemente esperar a que todo se despejara por sí solo.
—Gracias. —murmuró Woozi, su voz llena de determinación. —Pero no pienso dejar que Yoongi se meta más, haré todo lo que esté en mi poder para proteger a Jimin de él.
El chico asintió en silencio, apreciando la tenacidad en las palabras de Woozi. Sabía que no era fácil para él estar en una posición de vulnerabilidad, especialmente con alguien como Yoongi al acecho. Pero si había algo que este chico desconocido tenía, era una habilidad para adaptarse y mantenerse un paso adelante en medio de la adversidad.
—Entonces, es hora de ponerse a trabajar. —dijo el chico, dirigiéndose hacia la puerta. —Yo me encargaré de Yoongi y tú solo mantén a Jimin cerca y asegúrate de que no haya dudas sobre su relación.
Woozi asintió, un nudo de preocupación en su estómago. Aunque confiaba en el chico, no podía evitar preguntarse si podrían mantener su fachada sin que se desmoronara bajo la presión de las circunstancias. Pero con la seguridad de que alguien estaría vigilando a Yoongi, se sintió un poco más tranquilo, sabiendo que no estaban completamente solos en esto.
—Lo haré. —respondió Woozi con determinación, preparando su mente para lo que se avecinaba. —No dejaré que nada nos detenga.
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Yoongi salió de su casa para despejar su mente, pero se detuvo al ver al que era el tutor de Woozi en una esquina fumando un cigarro. Este al verlo dejó salir el humo y apagó el cigarrillo en el suelo y se acercó a este para verlo.
—Debemos hablar. —le dijo Yoongi.
—Bien. —Asintió.
—¿Quién eres tú? —preguntó Yoongi analizando al chico.
—Yoon Jeong-han. —Respondió. —el tutor de Woozi.
—Así que no eres un Park. —lo vio.
—Misma madre diferente padre. —se rio.
—¿Quiénes son ustedes realmente? —pregunto Yoongi.
—¿Por qué habría de decirte? —le dijo.
—A la policía le gustaría saber sobre ustedes. —lo vio. —Tengo pruebas de que son una farsa.
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