—No tienes que decírmelo...— Jimin se aclaró la garganta — solo me sorprendió, tu forma de pensar y el hecho de que tu madre esté casada con una mujer no encajan, ¿Me entiendes?— trató de explicar.

—Lo sé — Jungkook frunció el ceño y se pasó las manos por el rostro — Es difícil, y es un poco a lo que me lleva a no querer ser como ella—

Jimin lo analizó, en realidad si tenía sentido, si el hecho de que a su madre le gustaran las chicas terminó por arruinar su matrimonio, Jungkook podría tener un concepto malo de lo que era sentirse atraído a una persona de su mismo sexo.

Aunque seguía siendo injusto consigo mismo, Jungkook merecía ser feliz y sentirse bien tal como era.

—¿Te llevas mal con tu madre?— Quiso indagar nada más un poco.

—No, tampoco somos tan cercanos, pero la relación es cordial, y su esposa en realidad es agradable — Confesó Jungkook haciendo una mueca de incomodidad — Ella es mi madre, soy su hijo, es algo que no podemos cambiar—

Jimin dejó un momento lo que estaba haciendo y puso su mano sobre a de Jungkook en el mesón, dándole una mirada llena de comprensión.

—Jungkook, sé que nos conocemos hace muy poco, y no confías en mí, pero créeme te entiendo, y si en algún momento te sientes listo para hablar de ese tema con alguien, siempre estaré aquí dispuesto a escuchar — Le aseguró Jimin.

Jungkook asintió mirando sus manos, en otra ocasión quizá habría alejado la mano de Jimin de la suya como si fuera una amenaza, pero en ese momento solo pudo quedarse viendo, las manos de otro hombre no se veía entre las suyas.

—Gracias, Jimin — Jungkook el asunto no era fácil de afrontar, y nunca lo había hablado con nadie, ni siquiera con TaeHyung, bueno obviamente no lo podía hablar con su mejor amigo.

Pensar en hablar con Jimin le atemorizaba, no lo conocía, aunque a la vez el hecho de no conocerlo y que Jimin fuera de la forma en que era, le hacía querer confiar.

No parecía un mal tipo, tampoco era un chismoso, hasta ahora no le había dicho nada a nadie de su secreto, además había algo en este chico, esos bonitos ojos cafés, le transmitían comprensión.

Jimin le sonrió soltándole la mano —Los macarrones están listos — Anunció Jimin sirviéndolos —Ven a comer — ordenó llevando a la mesa dos platos humeantes y deliciosos.

Jungkook se sentó frente al suyo suspirando, le dio una probada y esto parecía un manjar de los dioses — Es realmente delicioso —

—Te dije que era muy bueno — Murmuró Jimin sonriéndole orgulloso.

—Eres más que bueno, te lo concedo — Respondió Jungkook devorando el plato en poco tiempo.

—Puedo darte más si quieres — Cantó Jimin mirando el plato vacío — Los deportistas deben alimentarse bien—

Jungkook lo miró dudoso.

—No tengas pena — Jimin se levantó para servirle otro plato — Cuando estés aquí, no tienes que fingir ser ese chico perfecto que le muestras a todos—

—No finjo ser perfecto...

—Si lo haces, te he analizado, no dices cosas fuera de lugar, siempre actúas con propiedad y de forma cool, debe ser agotador — Afirmó Jimin —Conmigo solo sé tú mismos, a veces está bien ser débil, bajar las defensas y mostrar tus defectos—

Jungkook se quedó mirando el nuevo plato un poco sonrojado, en realidad Jimin tenía razón, a veces se sentía agotado de todo esto.

¿Por qué este chico parecía leer sus pensamientos a veces?

—¿Tú tienes defectos?— Preguntó Jungkook.

—Claro, tengo un montón — Aseguró llevándose unos bocados de macarrones a la boca — Aunque sé que soy hermoso—

—Lo eres — Jungkook estuvo de acuerdo.

—Awww, eso fue un cumplido, y no puedes retractarte — Le advirtió Jimin.

Jungkook se rio — No iba a hacerlo, eres algo así como perfectamente imperfecto—

—Wabi-Sabi— Murmuró Jimin de repente encogiéndose de hombros.

—¿Qué?— Jungkook lo miró sin entender.

—Es... como te explico — Jimin frunció los labios en un leve puchero — algo así cómo una filosofía japonesa, Wabi-Sabi, aprecia la belleza de lo imperfecto, acepta tus defectos, deja de buscar la perfección, descubre lo maravilloso que puede ser mundo y su naturaleza llena de irregularidades—

—Eso fue muy profundo — Aseguró Jungkook asombrado — Eres todo filosófico—

Jimin soltó una risita — Te dije aún no sabes nada sobre mí, y esas son algunas de las filosofías o mantras, por las que rijo mi vida — señaló algunas palabras escritas en japones en las paredes.

—Es sorprendente — Jungkook levantó una ceja — ¿Dónde lo aprendiste?—

—Me los enseñó una persona a la que quiero mucho— Jimin sonrió, aunque su sonrisa no fue tan radiante —Esa fue la primera que aprendí, "Shikata ga nai", se traduce algo de este modo como "no hay nada que hacer", es la aceptación de las cosas que están fuera de tu control y no puedes cambiar—

—¿Es como resignarse?— Preguntó Jungkook.

—Si y no — Jimin sonrió ante el rostro confundido de Jungkook— Es aceptación, como cuando sucede algo malo en tu vida, en lugar de encrucijarse en eso, solo dices "no hay nada que hacer", solo sigues adelante con una mente positiva tratando de hacer que las cosas mejoren, se necesita mucho coraje para superar y salir del abismo—

—Entiendo...

—También lo puedes aplicar a tu vida, el hecho de que te gusten los chicos es algo que no puedes cambiar, incluso si estas con la mujer más hermosa, solamente puedes aceptar quien eres, lo que te gusta y avanzar desde allí — Jimin le guiñó un ojo — No puedes luchar contra tu naturaleza, es una batalla perdida—

Jungkook bajó su mirada al plato casi vacío — Supongo que eso fue lo que hizo mi madre, dejó de luchar contra su naturaleza—

Tragó grueso, esos fueron días malos para él, empezaba a descubrir que se sentía atraído por los chicos y sus papás se divorcian por algo similar.

—He tratado de entenderla, pero ella fue muy injusta, no debió hacerle tanto daño a mi padre, incluso si asegura que nunca le fue infiel, ella fingió amarlo, fingió ser feliz y luego cuando no pudo más solamente lo hizo a un lado — Jungkook apretó el tenedor en su mano — Mi padre es el hombre más fuerte que conozco y tuve que verlo de rodillas en el piso llorando, porque él no entendía que había hecho mal—

—Él no hizo nada malo Jimin — Jungkook soltó un suspiro — Fue un esposo amoroso y un padre ejemplar, ella fue demasiado egoísta se casó con mi padre sabiendo que le gustaban las mujeres, jugó con sus sentimientos—

Los ojos de Jungkook se pusieron acuosos —Tuve que ir a la escuela y que se burlaran de mí, porque a mi madre ahora le gustaba "comer vaginas", "Prefería una de plástico a una real", fue un maldito infierno, nunca se lo voy a perdonar y no quiero ser como ella—

Si no hubiera sido por TaeHyung que nunca lo dejó solo, e incluso se fue a los golpes con otros por defenderlo, e incluso lo siguió cuando su padre tuvo que cambiarlo de escuela.

—Jungkook, tú no eres como ella — Le aseguró Jimin — Pero si no aprendes a aceptarte vas a terminar siéndolo — Le dijo mordiéndose el labio inferior.

—¡Claro que no!— Gruñó Jungkook mirándolo mal.

—Ella fingía ser feliz con un hombre cuando no lo era — Jimin le volvió a tomar las manos — Tú sabes que te gustan los chicos, pero no lo aceptas, en algún momento de tu vida todos esperan verte casado, formar un hogar, ¿Te ves a ti mismo teniendo a una esposa e hijos?—

Jungkook frunció el ceño —Claro que no, las veces que estuve con chicas no fue  desagradable, no satisfactorio —

—Ese es el punto Jungkook, estoy seguro de que si te imaginas en un futuro con un hombre, las cosas cambian, por ejemplo con TaeHyung, ¿Te imaginas con él siendo una pareja?— Interrogó Jimin.

—Él es heterosexual — Dijo Jungkook bajito.

—¿Seguro?—

—Por supuesto que si, nos conocemos desde niños— Afirmó Jungkook.

—Está bien, pero eso no quita el hecho de que para ti es más agradable un futuro al lado de un hombre, y cuando te aceptes a ti mismo te sentirás mejor, ya verás — Le aseguró Jimin.

Jungkook se pasó las manos por el cabello — No quiero decepcionar a mi padre, ya fue un golpe lo suficientemente duro para el que su esposa lo haya dejado por una mujer, ahora su único hijo a quien dedico todo su tiempo después de su fracasado matrimonio le gustan los hombres—

—Jungkook no es tu culpa, tu padre te ama y lo hará sin importar tus preferencias — Le aseguró Jimin — Es tu vida, solo piénsalo algún día vas a estar listo para abrirte y aceptarte a ti mismo—

—Haces que parezca fácil...

—No lo es, pero la aceptación es el primer paso a la liberación — Jimin le soltó la mano — Tú puedes chico guapo, y si me lo permites estaré aquí para lo que necesites—

Jungkook lo miró, ¿Cómo es que este chico tan extrovertido y todo bonito, podía tener pensamientos tan profundos y aconsejarle de esta manera?

Aunque seguía teniendo miedo, saber que podía contar con alguien, le hacía sentir mejor, sin duda, Jimin de verdad era agradable.

—Gracias, Jimin —

—¿Cuáles gracias?, quítate la ropa y baila para mí — Jimin movió las cejas de forma pícara.

—¿Qué?

La carcajada de Jimin llenó todo el lugar y casi se cae de la silla, —Debiste ver tu cara, eres un poco inocente, chico guapo—

Jungkook rodó los ojos, Jimin a veces era también molesto.

—No tengo experiencia con chicos, eres el primero con el que hablo de esto — Gruñó Jungkook entre dientes.

—Oh— Jimin se llevó una mano al mentón — ¿Eso quiere decir que fui el primero al que besaste?—

Las orejas de Jungkook se pusieron rojas y se quedó en silencio.

—Awww soy tu primer beso con un chico — Jimin aplaudió emocionado — Es un honor ser el primero, aunque ahora que sé que soy el primero me hubiera gustado dártelo sobrio, habría sido un mejor recuerdo para ti—

—Está bien, fue mi culpa, estaba siendo impulsivo — Dijo Jungkook rascándose la nuca.

Nunca había sido fan de los besos, solo beso a un par de chicas con las que estuvo, realmente no fue una gran experiencia, aunque definitivamente con Jimin se había sentido diferente, mucho mejor.

—Tienes razón, también fui impulsivo, me haré responsable — Murmuró Jimin para sí mismo y se puso pie.

—¿Responsable?— Jungkook levantó una ceja.

—Si — Cantó Jimin y tiró del brazo de Jungkook para hacerlo levantar.

—¿Qué haces?

—Borra ese beso, te daré un nuevo primer beso mucho más memorable — Aseguró suspirando y se acercó un pasó más quedando a centímetros, mirándolo a los ojos, se mordió el labio inferior.

Jungkook estaba paralizado, entendía la idea de Jimin y su corazón estaba acelerado de repente, un tanto emocionado, pero a la vez confundido, no podía dejar de mirar esos gruesos labios rosas.

Jimin se pasó la punta de la lengua por los labios antes de ponerse de puntitas y rodear el cuello de Jungkook con sus brazos, tenía esa sonrisa linda e hipnotizante.

Primero Jimin se acercó rosando sus narices tan cerca y luego apenas roso sus labios con lo de Jungkook, empezando a besarlo de forma suave cerrando sus ojos.

Jungkook un poco aturdido lo imitó disfrutando de los dulces besos, sus manos fueron a la cintura de Jimin por inercia, apegándolo más a su cuerpo mientras el beso se profundizaba.

Holis mis amores, aquí estoy, tratando de llevar esta historia lo mejor que puedo, un poco de la historia de Jungkook, espero que les ayude a comprenderlo.

Les amo mucho.

Y para las personitas que no entendieron cuando puse que Jimin y Jungkook no son asiáticos, estaba hablando de sus nacionalidades, en el contexto de la historia ellos no son de corea, pero los personajes son como los conocemos, no tienen que imaginarlos diferentes.