Capítulo 16

—¿Por qué estabas enojado en el partido?— Preguntó Jimin una vez cruzaron la puerta del departamento.

—¿Yo enojado? — Preguntó Jungkook de vuelta.

Jimin se rio — No quieras negarlo, estuviste gruñendo y maldiciendo entre dientes, ¿Estabas celoso?— Cantó con diversión.

Jungkook tragó grueso, ¿Jimin se había dado cuenta?

—Y-yo no estaba celoso, tú lo dijiste, nada de celos, posesividad o sentimientos fuera de lugar — Dijo rápidamente.

Jimin rio aun más fuerte —No estaba hablando de mí, lo decía por TaeHyung las chicas a su lado se le estaban insinuando de forma exagerada, ¿Por qué estarías celoso de mí, si las cosas entre nosotros están claras?—

Jungkook se rascó la cabeza, para Jimin estaban claras, el tenía un jodido lío en la cabeza que lo estaba volviendo loco, y si había estado malditamente celoso esta noche, pero ni siquiera sabia de quien lo estaba más.

Por un lado, con TaeHyung estaba un poco acostumbrado a esas escenas de él con chicas, que por lo general se sentían con navajas en clavadas en su corazón sangrante, pero no tenía más remedio que soportar.

Pero con Jimin era diferente, eran celos que lo hacían sentir un tanto posesivo, lo que estaba jodidamente mal, Jimin no era suyo, incluso si fueran pareja, Jimin era una persona independiente, ¡Pero no podía evitarlos!

A veces pensaba que experimentar este tipo de cosas con Jimin estaba jodidamente mal, porque su mente se estaba confundiendo más, pero miraba esos hermosos y brillantes ojos cafés y no quería alejarse.

¿Cómo diablos había llegado a esto?, ¿Y por qué era el único que parecía afectado?

¿Jimin no sentía nada?, ¿Realmente solo eran clases y una caritativa forma de ayudar a Jungkook a descubrirse y aceptarse a sí mismo?

—No lo pienses mucho chico guapo— Jimin le sonrió — Pronto estarás listo para decirle lo que sientes, e incluso si no lo haces, estarás listo para estar con el chico que quieras —

—Dudo que esté listo algún día, me aterra la idea de que los demás se den cuenta de que soy gay, TaeHyung y todos podría hacerme a un lado, mi padre estaría tan decepcionado por ser igual a ella — Jungkook se pasó las manos por el rostro.

Jimin le sonrió y le pasó la mano por la mejilla — "Kaizen"— susurró.

—¿Qué?— Preguntó Jungkook sin entender la palabra.

Jimin señaló una de las frases en japones en la pared — "Kaizen", es mejorar continuamente, no necesitas salir gritando que eres gay, que te gustan los hombres y pedirte a TaeHyung que se case contigo, un paso la vez, empezaste aceptando quien eres, nunca te había escuchado decir "Soy gay" en voz alta—

Jungkook parpadeó un par de veces, eso era cierto, jamás en su vida se había atrevido a admitir tal cosa, incluso en sus pensamientos se negaba a aceptarlo.

—El Jungkook que conocí, le daba asco tocarme, ahora me abrazas y duermes conmigo casi todas las noches, eres una gran persona Jungkook, una que mejora cada día por su bien, haces pequeños cambios que te llevan a vivir una vida llena de plenitud, sin miedos, ni ataduras, y sé que lo vas a conseguir, los grandes avances, empiezan con pequeños esfuerzos — Le aseguró Jimin mirándolo a los ojos.

Jungkook suspiró y tomó el rostro de Jimin entre sus manos dándole un beso, un beso de esos que los dejaban a ambos sin aliento.

Jimin se separó con una sonrisa atontada —¿Y este por qué fue?

— En agradecimiento, por todos tus consejos filosóficos— Le dijo Jungkook sonriendo avergonzado.

—Ya veo — Jimin se mordió el labio inferior — Es mejor que nos vayamos a dormir—

—Espera... — Jungkook le tomó la mano y sacó la cajita de su chaqueta — Te dije que tenía algo para ti —

Jimin lo miró confundido, entonces Jungkook dejó la cajita en su mano.

Jimin la miró con curiosidad y la abrió poco a poco, sus se llenaron de sorpresa y un precioso brillo de radiante emoción cruzó por ellos —Jungkook... esto es hermoso—

Jungkook sonrió orgulloso —Supuse que te gustaría —

—¡Me encanta! — Chilló Jimin llevándose una mano a la boca.

—Se parecían a las flores que pintaste en la pared, pensé en ti en cuanto las vi — Comentó Jungkook, eso era cierto, al entrar a la pequeña joyería sus ojos enfocaron esos accesorios.

Un bonito collar plateado que como dije tenía una bonita flor de cerezo con pétalos rosas, esta venía acompañada con una pulsera que traía diminutas flores como decoración, tan delicada y bonita como Jimin.

Esto hizo un hueco en sus ahorros, pero ahora que veía la sonrisa de Jimin, confirmaba que había válido absolutamente la pena.

—En Japón se conocen como sakuras, es de verdad precioso, Jungkook — Jimin no podía apartar la mirada de su regalo — ¿A qué se debe el obsequio?—

—Es mi regalo de felicitaciones por ganar el concurso de arte, eres muy bueno en lo que haces, y te mereces lo mejor — Aseguró Jungkook.

Algo mejor que un estúpido ramo de flores que se marchitaría enseguida.

—Awww estoy conmovido, muchas gracias, chico guapo — Jimin hizo se acercó a su mejilla para dejarle un beso, pero Jungkook se apartó.

—Vamos a cambiar la forma de agradecernos entre nosotros — Propuso colocando su mano en la mejilla de Jimin.

Acercó su rostro al de Jimin besándolo con suavidad, sus labios apenas tocándose —Así debe ser de ahora en adelante— Susurró sobre sus labios.

Jimin sonrió — Eres un poco codicioso, pero estaba bien, te lo acepto exclusivamente a ti, porque eres guapo—

Jungkook se rio, ahora era algo que solo compartían ellos dos — ¿Quieres que te los coloque?— Señaló su regalo.

Jimin asintió mostrando la muñeca derecha donde tenía la pulsera ancha con los colores del arcoíris, solamente tenía un par de pulseras más de ese lado.

Jungkook le colocó orgulloso la pulsera —¿No te apretan?—

—No, las uso todo el tiempo — Jimin sonrió — Se ve preciosa—

—Como tú— Quiso decir Jungkook, pero mejor detuvo el comentario — Vamos a la cama — dijo en su lugar.

Dejaron solo el collar en la cajita, ya que iban a dormir — Quiero darme una ducha antes de acostarme, aunque no hay pijamas limpias, ya sabes que no tengo muchas, ¿Puedo usar una de tus camisetas?—

—Claro — Jungkook se encogió de hombros, y sus ojos fueron a una esquina de la sala.

Allí había un florero con girasoles ya marchitos, frunció el ceño y se acercó a ellos — ¿Jimin puedo tirar esto a la basura?, ya están muertos, y no armoniza con la decoración —

—Ouch, si tienes razón, no logré conservarlos por mucho tiempo — Dijo caminando la habitación.

Una sonrisa adornó el rostro de Jungkook mientras tiraba las flores a la basura.

Jungkook se cambió directamente con ropa más cómoda, ya que él se había duchado ya y se metió en la cama, Jimin salió después de un rato del baño, usando una camiseta blanca que le pertenecía a él, esta le llegaba a mitad de los muslos.

¡Maldición se veía tan sexy!

Jungkook tragó grueso teniendo que pensar en otras cosas para detener su mente de esos pensamientos, sobre todo cuando Jimin empezó a ponerse sus cremas como era costumbre.

—Listo — Jimin se metió bajo la manta junto a él — Buenas noches — Murmuró utilizando el control para apagar las luces menos su lámpara y darle un corto beso.

Ya no se molestaban en dormir por separado, Jungkook le dio un beso en la coronilla de la cabeza, y Jimin se acurrucó en su pecho y se dormió como un bebé.

                             ♡

—No, por favor no…

Jungkook abrió los ojos abruptamente cuando escuchó la voz suplicante de Jimin.

¡Por el diablo y todos sus jodidos demonios!, estaba todo oscuro, ¿Qué había pasado?

¿Jimin estaba llorando?

—¿Jimin?— Susurró buscando su celular en la mesita.

Jungkook maldijo entre diente cuando el jodido teléfono cayó al piso, y tuvo que separarse de Jimin para tomarlo y encender la linterna.

—No, te lo suplico — Jimin sollozó

Jungkook abrió los ojos cuando escuchó la voz quebrada de Jimin, dándose cuenta de que todo estaba oscuro, al parecer hubo un corte de electricidad.

—¿Jimin?— Susurró buscando su celular en la mesita.

—No, no vengas te lo ruego — Jimin sollozó más fuerte con sus ojos apretados cubriéndose el rostro con los brazos.

Jungkook lo miró aturdido e intentó abrazarlo —Jimin tranquilo—

— ¡No te me acerques!— Casi gritó Jimin alejando sus manos con sus ojos apretados.

¿Qué estaba pasando?, ¿Era una pesadilla?

—¡Jimin despierta!— Jungkook dejó el celular sobre la mesita con la lámpara encendida hacia arriba, mientras volvía a tratar de consolarlo.

—¡No me hagas más daño!— Gritó sentándose en la cama mientras sollozaba.

—Jimin no voy a hacerte daño, soy yo— Dijo tomando sus manos.

— ¡Yoongi No!— Gritó de forma desgarradora abrazándose a sí mismo, su cuerpo temblaba como una hoja de papel, y su rostro lleno de lágrimas mientras negaba con la cabeza.

Jungkook lo atrajo a su cuerpo tomando el rostro de Jimin entre sus manos, terror puro había en el rostro del chico —Jimin mírame, soy Jungkook—

Jimin parpadeó un par de veces enfocando un poco su vista y cuando logró distinguirlo enterró el rostro en su pecho — Jungkook, no dejes que venga, no quiero que se me acerque, viene por mí —

—Tranquilo — Susurró Jungkook acariciándole la espalda — Nadie vendrá por ti, es solo una pesadilla, estás bien, estoy contigo—

Jimin sollozó —Si me encuentra esta vez, si lo hará, él me...

—Shhh, calma, no permitiré que te hagan daño, voy a cuidarte, te tengo— Susurró abrazándolo a Jimin contra su pecho.

—No te vayas, no me dejes solo, quédate conmigo — Imploró Jimin con su voz quebrada.

—Estoy aquí para protegerte, no voy a dejarte — Le prometió Jungkook sintiendo como Jimin se calmaba un poco más—Sí, soy yo, tranquilo nadie va a lastimarte, no lo permitiré— Susurró

Los brazos de Jungkook envolvieron el cuerpo más pequeño de Jimin en un abrazo protector, mientras le susurraba palabras amables para calmarlo.

Entonces Jungkook se dio cuenta de que Jimin se estaba quedando dormido.

Se acomodó de nuevo en la cama con Jimin sobre su pecho, dejándole caricias suaves en su espalda y sin dejar de hablarle.

¿Por qué se había cortado la electricidad?

Jimin le había dicho que no le gustaba la oscuridad porque le ocasionaba pesadillas, ¿Pero como es que lograba saber que todo estaba oscuro?

¿Qué tipo de pesadillas tenía Jimin como para despertar tan alterado?, Jimin estaba totalmente aterrado que sus gritos le helaron la sangre.

Y sobre todo ¿Quién diablos era Yoongi y por qué Jimin le tenía tanto miedo?

Jimin le estaba suplicando que no se le acercara, que no lo lastimara más, estaba tan asustado de que lo encontrara, como si temiera por su vida.

Jungkook tenía que admitir que el rostro temeroso de Jimin, y sus ojos aterrorizados le sorprendieron tanto, nunca pensó que alguien tan hermoso y alegre que siempre mostraba una sonrisa y esos ojos radiantes y llenos de picardía podrían tener una expresión tan aterrada.

Era casi como si Jimin estuviera viendo al mismísimo diablo.

¿Era solo una pesadilla o esto tenía que ver con la vida de Jimin?

Jungkook no podía creer que detrás de una persona como Jimin, tan seguro de sí mismo, que termina decir lo que pensaba, que se mostraba agradable, encantador, que coqueteaba con todo el mundo, dueño de esa radiante y contagiosa sonrisa, pudiera verse tan frágil, reducido a lágrimas y gritos aterradores.

Jamás se lo esperó.

Jungkook suspiró dejando que Jimin se acomodara en mejor en su pecho, escogiendo el rostro casi en su cuello, era algo incómodo, pero si esa posición lo hacía sentir seguro para Jungkook estaba bien.

La luz de la lámpara de su celular iluminaba su habitación, susurrando palabras de consuelo y acariciándole el cabello a Jimin, se quedó dormido.

Cuando despertó ya la luz del día se colaba por la ventana, parpadeó un poco acostumbrándose a la luz, entonces se dio cuenta de que Jimin no estaba a su lado en la cama.

Hola mis amores, espero que este cap. les haya gustado.

Ay mi Jiminnie hermoso, se merece todo lo mejor de este mundo.

Nos leemos pronto.

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