Intrusos en la tierra

Todos lo héroes se encontraban nuevamente reunidos en la gran mesa gracias a él reciente encuentro que habían tenido con las dos personas de aura helada ya que ahora tendrían que lidiar no solo con la mujer misteriosa , si no también con aquel hombre, pero tenían una pista en esta ocasión y era que conocían el nombre de este lo que haría más fácil identificarlo.

- Encontré algo- dijo Harley con un tono de orgullo de su descubrimiento.

-¿ Que ?- Dijo Shuri con fastidio y indiferencia.

- El nombre Cetrino es un sinónimo de esmeralda - Dijo el rubio a lo que la morena se sorprendió ligeramente.

- En serio?- dijo escribiendo algo en su computadora verificando lo que el pupilo de Ironman decía.

Y sí, el rubio decía la verdad en esta ocasión, ese nombre significaba esmeralda.

- En esto no mintió eh?- Se dijo en su mente la morena.

- Bueno eso significa que este tipo tiene algo que ver con las esmeraldas- Dijo Ironman ante lo dicho por su discípulo.

- Si, pero de qué nos sirve eso- Pregunto el arácnido de brazos cruzados solo escuchar la voz del rubio lo enojaba.

         En eso Ironman y Blackpanther se miraron mutuamente lo cual no paso desapercibido por Shuri y Peter.

¿ A caso sabían lo que pasaba?

No, eso era imposible

¿Verdad?

            Mientras divagaba en sus pensamientos la morena termino por accidente en una de las escenas de la cámara de seguridad en la cual " Centrino" lanzaba su poder pero allí la chica noto algo y era que la piel del hombre se había vuelto azul aunque solo se podía notar si prestavas mucha atención.

– Oigan tienen que ver esto– dijo la chica al notar el detalle.

     Todos los presentes miraron la computadora de la princesa la cual les mostró el momento exacto del suceso haciendo que la habitación se sumiera en un gran silencio hasta que un gran ruido se escuchó.

– Por las barbas de Odín!– Grito Thor sorprendido.

– ¿Que?– dijeron todos los Nices confundidos ante esas palabras.

– Ya sabemos cuál es la especie de " Centrino "– Dijo Thor con orgullo.

– Si, es un jotun– dijo la Valkiria.

– Que es un jotun?– Pregunto Shazam.

– Son criaturas provenientes de Jotunhaim, aunque normalmente son gigantes, son monstruos de piel azul y ojos color rubí además hay algunos tienen cuernos, pero solo los de la familia real tienen unas marcas y pueden hacer hechicería es raro que un ciudadano común pueda hacer magia – Explicó el dios.

– Por primera vez sabes algo que yo no sé – dijo el Stark.

– Es posible que sean parte de la familia real? – Pregunto el caballero de la noche.

– Es posible, pero poco probable, la mayoría de ellos prefieren mantenerse en el anonimato – Dijo Thor, descartandolo en parte.

– Si no creo que sea eso– dijo la guerrera.

En otra parte

            En un rascacielos de Colombia una mujer se encontraba en una gala con un hombre de cabello rubio el cual miraba con seriedad a la chica.

– Enserio debemos estar aquí?– Pregunto el hombre.

– Padre quiere que nos mezclemos–  dijo mientras tomaba de su copa de vino– Este líquido migardiano me recuerda a la sangre – dijo mirando el color carmín que se quedaba en la copa tras ser bebida.

– Supongo que quiere que reforzemos nuestra "historia"– dijo tranquilo ya que estaban bastante lejos del resto de invitados.

Este es el vestido de la mujer;


– Sí, es lo más probable pero creo que al mismo tiempo nos está castigando por lo que pasó en Wakanda– dijo La mujer.

– En eso estamos de acuerdo – dijo el rubio para mirar en dirección a una puerta en medio del pasillo– Creo que ya es hora– Concluyó con una media sonrisa.

– Vamos entonces – Dijo la mujer para luego detenerse– ¿El Jeet ya está listo?– Pregunto sería.

– Si, ¿Me crees estúpido o que?– Dijo el menor a lo que la mayor puso los ojos en blanco.

– Vamos– dijo mientras caminaba discretamente hacia la puerta.

        Pero en eso su acompañante la detuvo haciendo con la mano una señal de silencio mientras señalaba una cámara discretamente a lo que la mujer agarró una copa Champagne de la bandeja que tenía en mano un mayordomo y espero a que se fuera.

          Y unos momentos después cuando no había nadie la mujer tiro la copa y instantáneamente con mucha elegancia la bebida se congelo haciendo que el hielo creado se expandiera por toda la pared en la que estaba la cámara haciendo que está se congelara.

– Bueno problema resuelto – Dijo para luego abrir la puerta siendo seguido por la mayor la cual cerró la puerta tras ellos.

          Dentro de la habitación se sentía un aura fría y áspera la cual era gracias a que él aire era tan espeso que no los dejaba respirar.

            Era un gran pasillo cubierto de mármol pero allí los dos notaron que había unos puntos en la pared a los que los dos se miraron con ironía.

– Está gente podría ser más obvia –dijo entre risas el ojis verdes.

– Si los Migardianos son estúpidos – dijo para luego crear algo de hielo el cual se convirtió en polvo al instante para luego ser arrojado al aire dejado ver unos láseres azules.

     Al verlos lo dos se quedaron analizadolos un momento para luego lanzarse a atravesar los lasers

   Tras pasar todas las medidas de seguridad las cuales en la opinión de ambos eran muyyyyyyyyyyy malas llegaron a un área donde había una gran estatua de hipogrifo con un ojo brillante.

– Estás seguro que es esa?– Pregunto la mayor con curiosidad.

– Si estoy seguro – Dijo el rubio con fastidio , le desesperaba que la mujer desconfiara de lo que hacía.

– Bueno– dijo para luego escalar la estatua y sacar la gema– mmmm...es más gris de lo que creía – dijo para luego ver como una escalera hecha de magia verde sobre las que regreso al suelo.

– Supon......un momento para que atravesamos los lásers si funcionan detectando el calor corporal y nosotros no tenemos eso– Dijo dándose cuenta de su estupidez.

– Ahora que lo pienso tienes razón... Bueno! Que importa! Ahora lo importante es que tenemos lo que necesitábamos la septima gema del alma– dijo mientras anelaba lo que tenía en sus manos.

       Podía sentir el poder que salía de ella y por eso tenían que impedir que callera en manos equivocadas.

           Ante ese pensamiento ambos se miraron mutuamente con una mirada sería para luego poner una media sonrisa y pasar nuevamente por los láseres con tranquilidad.

– Allí te vamos Nueva York!– gritaron al aire.

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