"...Jugamos juntos a algo sin nombre...siento mucho...siento poco...es algo confuso...que solo complica las cosas..."

-¡Molly!-grito Serena desesperada, separándose inmediatamente de su profesor, con un rostro completamente sonrojado, mientras la peli roja solo retrocedía un par de pasos, sin saber que hacer

-lo...lo...siento...-tartamudeo tan colorada como ella, para salir del salón de clases

-¡espera Molly!-dijo Serena siguiéndola, dejando a su profesor solo en el salón de clases, sin embargo, lejos de estar preocupado, una sonrisa ladina aparecía en su rostro

-al parecer todo está marchando a la perfección-musito, para desaparecer, Serena por su parte, corría siguiendo a Molly quien subía hasta la terraza, la rubia agradecía internamente, que las chicas aun no habían llegado, subiendo hasta el final de las escaleras encontrándose con una confundida peli roja aferrada a la reja mirando el cielo, sin importar como ella se sentía que debía una explicación, avanzando cautelosamente en su dirección apoyando su espalda en la reja liberando un suspiro

-Molly yo...

-¿desde cuando?-le pregunto ella -¿desde cuando el profesor es tu novio?-le pregunto directamente y a la vez seria, nunca se había imaginado que a Molly le había afectado tanto la situación

-pues...no mucho...-contesto, dejando un vaivén de silencio entre ambas- ni si quiera esto tiene un nombre como tal, solo estoy confundida, quiere que sea su novia, me gusta pero...no se...Darien me engaño con otra mujer y...eso aun me duele mucho –poso las manos sobre su pecho sintiéndose fatal, exprimiendo el broche en donde se encontraba el cristal de plata- ni si quiera se lo que siento Molly

-¿tu novio te engaño?-le pregunto mientras la rubia solo asintió

-no se trata de venganza, Molly-se sentó en el suelo abrazando sus piernas apoyando su cabeza en ellas- solo que el profesor me hace sentir bien, simplemente eso

-¿y tu novio?

-aun me duele..., es difícil de olvidar a alguien de la noche a la mañana, pero lo intento ¿sabes?, es algo complicado...-la peli roja se sentó a su lado, Serena esperaba un reclamo de su parte, sin embargo, esta le miro con una sonrisa sintiéndose apoyada por su amiga

-¿y por qué no me dijiste?

-¿eh?-Molly le dio un leve empujón con su cuerpo

-sabes que puedes contar con mi apoyo ¿si?-expreso sincera- además el profesor es muy guapo-sonrió ampliamente- deberías sentirte afortunada

-gracias Molly-contesto con una sonrisa un poco mas tranquila, sintiendo como las manos de su amiga se entrelazaban con las suyas

-ya no te preguntare mas ¿de acuerdo?-le miro sincera-solo que...deberíamos ir con un medico pronto

-¿un medico? ¿Por qué Molly?

-¡hay por favor!- dijo la peli roja dándole un gran palmada en la espalda de la rubia –ya sabes...tu y él...- le insinuó –aun estas muy joven para ser madre ¿no crees?-aquello ultimo fue como un volcán de emociones para la rubia

-bueno...yo...bueno nosotros aun no...

-entonces se ha comportado un caballero contigo-dijo la peli roja mientras Serena solo asentía avergonzada al recordar aquella vez que estaba dispuesta a tener relaciones con él cuando estaba enfurecida y llena de celos cuando descubrió el engaño de Darien, pero este se negó

-mucho...-confeso

-pero creo que deberíamos ir a la doctora, es mejor prevenir

-si...es verdad...-dijo cohibida-pero que no sea el hospital de Tokio, o Darien lo sabrá o aun peor la mamá de Amy...

-entiendo, buscare la consulta mas discreta –dijo confiada-lo prometo

-¡gracias Molly!-dijo feliz Serena – y...por guardar en secreto

-mientras seas feliz con él, yo estaré feliz por ti amiga-ambas se abrazaron con fuerza, sin saber que eran observadas de cerca por el joven profesor peli plateado sonriendo al ver la escena

-¡chicas!-dijo Lita llegando al lugar-¿Serena? Me sorprende que hayas llegado temprano

-Lita...nosotras...

-no me expliques lo se todo, de seguro le pediste la tarea a Molly y por eso llegaste temprano ¿no Serena?-ambas sonrieron nerviosas ante la teoría de la castaña regresando a las aulas, en compañía de Amy quien se unió al grupo, sin embargo, noto extrañada que el ambiente no estaba completamente solo como esperaban

-quizás debe ser mi imaginación-se dijo la peli azul regresando con el grupo, miradas y sonrojos era lo único que habían en ese salón de clases, incluso Molly se sentía ansiosa ante la situación encontrándola muy romántica, se imaginaba inserta en una relación de Romeo y Julieta, hasta que el sonido de la campana de salida le daba por finalizada la jornada, Serena espero que todos se fueran del salón de clases, incluida Molly, para hablar en privado con su profesor, quien se aseguro de dejarla con seguro la puerta para que no fueran nuevamente interrumpidos, abrazándola con fuerza

-¿Qué fue lo que te dijo? ¿te trato mal?-ella negó su cabeza, mirándolo al momento en que este depositó un beso en su frente

-no..., no dijo nada, nos apoya...

-¿enserio?- ella asintió – me alegro...

-estamos bien-ella sonrió, cuando escucho como la llamaban sus amigas, separándose de él asustada, corriendo hacia la puerta, sin antes darle un último beso para ir en búsqueda de las demás y no notaran su relación

-te estábamos buscando Serena, vimos salir a Molly pero tu no aparecías

-bueno...el profesor me dijo algo de una tarea nada mas-contesto ella rascándose la nuca-¿nos vamos?-todas asintieron, no paso mucho tiempo cuando fueron alcanzadas por Rei y Mina quienes las esperaban en el Crow, las cosas parecían que volvían a la normalidad, Serena tan distraída como siempre, Mina no queriendo estar en los extraordinarios, Amy dándoles las tareas a las chicas, Rei y Lita mirando con resignación la situación

Serena fue la primera en regresar a casa, divagaba en la posibilidad real en que su relación con su profesor fuera mas enserio, la conversación con Molly le dejo muchos cuestionamientos en su cabeza ¿cuidarse? ¿no cuidarse? ¿duraran tanto para llegar a eso?, se cubrió el rostro con ambas manos sacudiendo su cabeza- no puedo creerlo, ni si quiera es algo tan serio para pensar en esas cosas ¿o si?

-¡Serena!- escucho la voz que la dejo estupefacta, viéndolo con un enorme ramo de rosas rojas extendiéndoselo hacia ella

-¿Darien?

-¿Cómo estas?-le pregunto entregándole las rosas, mientras ella las recibió de manera inconsciente- después de tu desmayo, me quede preocupado y no quería llamarte bueno tu sabes

-porque me engañaste, es por eso que no quiero hablar contigo Darien-camino esquivándolo pero este le tomo la mano

-se que aun me quieres, por favor perdóname, soy un idiota en engañarte...yo te amo..., prometo que cambiare, seré mas justo contigo-ella volteo ligeramente mirándolo a los ojos, parecía estar de verdad arrepentido

-Darien yo...-este la tomo de los brazos con delicadeza

-dime Serena...dime que no sientes nada por mi y no te molestare mas, lo prometo

-eres muy injusto-contesto de inmediato-tu sabes que yo aun siento muchas cosas por ti...

-¿lo ves? Estamos hechos el uno para el otro, se que me puedes perdonar te amo...regresemos, he pensado en lo que hice y estuve muy mal, lo siento, no volveré a engañarte lo prometo...-se acerco a sus labios –perdóname...por favor- le susurro para capturar sus labios en un beso en que ella no pudo negarse, aun lo amaba y odiaba amarlo de tal manera que lograba que la besara con facilidad, le dolía y se sentía tan nostálgica al extrañar sus besos, cayendo lentamente en sus brazos dejándose llevar por el tiempo en que ambos se habían separado, sin embargo, las imágenes de su engaño regresaron una y otra vez en su cabeza obligándola a separarse de él

-esto esta mal-se separo finalmente de él-me engañaste-le reclamo-para ti soy solo una niñita que puedes engañar fácilmente

-no es así Serena ¡por favor!

-¡no! Déjame en paz –sin embargo, no esperaba que tras de Darien a unos metros, su maestro estaba con un ramo de flores blancas que solo dejo caer al suelo, haciendo que Serena abriera los ojos ampliamente –no...no es lo que crees...-dejo escapar sin querer

-¿Qué?

-¡déjame Darien!- empujo al peli negro para seguir a su profesor, pero no lo encontró en ninguna parte-pro...profesor...-miro hacia todos lados-Dylan...¡Dylan!-le llamo entre lagrimas, rompiendo en llanto, siento observada todo ese tiempo por un par de ojos purpuras que le miraban molesto y celoso

-lo siento...-se dijo así mismo-pero tendré que castigarte mi dulce princesa, es la única forma que sepas que yo seré el único hombre en tu corazón- pensó empuñando sus manos con fuerza –tu corazón será mío- dijo así mismo viendo como la rubia lloraba desconsoladamente regresando a casa

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Holaaa espero que les haya gustado este capitulo, muchas gracias por leer y comentar, mil abrazos!!! se vienen mas sorpresas jijijiji