Capítulo 16. Ryoma

Las reuniones eran lo que más odiaba de mi trabajo aquí en New York. La editorial había iniciado genial desde que la abrimos y no hemos parado de recibir manuscritos de autores nuevos y viejos que querían unirse a nosotros. Lo que no me esperaba era tener que verla de nuevo. Bueno, en realidad no es que hayamos establecido una conversación ni nada, pero si la había visto antes de salir del ascensor con todos los compañeros.

Aquí solo era uno más de los empleados ya que no quería tener un trato especial, quería conseguir un puesto digno por mi mismo. Al principio fue duro hacerlo ya que mi padre no me dejaba, pero al final cedió y me dejo hacer lo que deseaba. Mi hermano estuvo feliz de saber que iba a mandar sobre mí, aún con sus estúpidas órdenes no me iría abajo.

Hoy tocaba una reunión con unos directivos de Japón. Que casualmente eran unos amigos míos se cuando yo me encargaba de la editorial allí.

—Echizen —me llamo uno de mis compañeros.

Me volví hacía el y dejé de mirar al ascensor que ahora subía con Sakuno y Momo dentro.

—Vamos —conseguí decir y me puse en marcha.

Al llegar a la reunión se me hizo eterna la charla sobre los distintos valances que a habitado este año en cuento a las novedades en la editorial. En vez de prestar atención a lo que decían mis compañeros me la pasé pensando en que hacía aquí Sakuno.

Sabía que no debía pensar en ella ahora, pero me era imposible no hacerlo. Ha sido tan solo un segundo de verla y no dejaba de tenerla en mi cabeza.

Ryoma, concentración, me dije dejando el boli con el que estaba jugando a un lado, y me concentre en el trabajo que me tocaba ahora.

***

—Necesito que me traigas unos papeles. —Ordeno Ryoga cuando paso por delante de mi mesa.

Suspiré y me levanté para hacerle lo que me pedía. Tenía que ir a dónde mamá para esos papeles que me pedía. Eran sobre una peli que se iba a realizar, al parecer de una de nuestras autoras. No estaba seguro de quien se trataba, pero si le iban a hacer una película, tenía que ser maravilloso su libro.

Tome el ascensor hasta la planta alta y me acerque a la puerta de mi madre. Llame con tres golpes y segundos después me dejo pasar. Mantuve la mirada en el suelo todo el rato hasta que cerré la puerta, y, al levantar la mirada, me esperaba ver a mi madre, no a Sakuno sentada en frente al escritorio.

—¿Qué haces aquí...?

Mi intención no era que sonara borde, al contrario, estaba demasiado sorprendido de verla aquí en vez de, no sé, en otro departamento, no el despacho de la directora.

Mi madre apareció en ese momento con una carpeta en mano.

Se me quedo mirando, como si supiera ya de ante mano que iba a venir Sakuno y me llevaría la sorpresa del siglo.

—Hijo, necesito que ayudes a Sakuno con la organización de su gran éxito—dijo con una gran sonrisa en los labios mientras se sentaba de nuevo.

Vi como una mueca remplazaba por uno segundos su sonrisa. Sakuno no lo noto, pero yo sí. Mi madre llevaba unos días en los que su cuerpo parecía estar empeorando cada vez más. Para mi, y para mi familia, era algo evidente que mi madre estaba enfermando, ninguno queríamos desanimar a la única mujer de la casa, y la más querida.

—Está bien.—Baje la mirada para no encontrarme con la de Sakuno.

Lo que estaba sintiendo ahora mismo no sabía si era alegría, o sentimientos encontrados de tan solo pensar que volvería a estar cerca de ella como antes..

—Entonces mañana comenzaremos por buscar los lugares en donde se rodara las escenas—. Mi madre siguió hablando, pero no la estaba prestando mucha atención, tan solo tenía la cabeza en Sakuno y en que volvería a estar cerca de ella.

***

—Eso es genial, tío—la alegría de Momo no era algo que me sorprendiera.

Desde hace unas semanas estaba demasiado feliz por alguna cosa, y esa cosa era Ann obviamente, pero no sabía que Sakuno venía con ella. De haberlo sabido no hubiera ido al trabajo hasta que se hubiera marchado, pero ya era tarde de dar marcha atrás. Nos habíamos visto, de lejos y de cerca, nada más. Con solo unas pocas horas juntos volví a sentir como mi yo del pasado salía y quería correr a su lado de nuevo.

El sentimiento de amor, nuestro amor, vuelve a crecer dentro de mí como si volviera a nacer dentro de mi.

Sus ojos carmesí cuando se posaron en mi nada más entrar, reflejaron sorpresa y admiración por unos segundos en los que yo me encontraba analizando la situación. Mi hermano no lo debía de saber, si no no me habría mandado a la boca del lobo a la primera. Sabía que fue él el que nos tendió la trampa para separarnos todas esas veces.

—Tienes que ir a por ella de nuevo, no la puedes dejar escapar...

No le deje terminar la frase.

—No puedo ir de nuevo detrás de ella ahora que Tomoka sigue con sus locuras.—Tome aire relajándome—. Si se llegara a enterar de que Sakuno esta aquí le arrancara los pelos.

—Mejor no, si Sakuno reclamo lo que es suyo así esa chica dejara de estar obsesionada contigo.

—Las cosas son más complicadas desde mi pinto de vista, amigo—suspiré y deje la taza de café a un lado.

—¿Qué has echo ahora?

—Sakuno y Osakada no se pueden ver, no ahora que estoy intentando llegar a un acuerdo con ella.

—No juegues con fuego, amigo. No lo hagas.

Continuará...


 Felices fiestas y no me maten, yo las amo :3

katsewa583
Ginger-Echizen
_Ryxma_Echizen_
RyosakuFr
elonigirisonador
Floor2761

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