Después de aquella semana donde Killua se había estado atormentando con sus propios pensamientos, ahora se sentía feliz y aunque más que todo era por Gon, también estaba feliz de haber hecho nuevos amigos, aunque nunca diría algo como eso enfrente de Leorio o Zushi. A pesar del interrogatorio que le habían hecho los dos mencionados chicos al principio, el descanso había pasado normal entre risas. 

Sin embargo, ahora era cuando se sentía nervioso de ir a casa. No sabía si mantenerlo en secreto o simplemente hacerles frente. Se mantuvo todo el camino a casa pensando en pros y contras, y mientras más caminaba más seguro estaba de que debía enfrentarlos, después de todo ellos mismos se darían cuenta con el tiempo, incluso había pensado de más en todo lo que su familia le había prohibido u obligado a hacer y ahora se sentía molesto. Con eso en mente y antes de que se echara para atrás, aceleró su paso y al llegar a su casa se dirigió directamente a la oficina de su padre, pues sería más fácil razonar con él.

—¡No puedo! —. Fue lo primero que dijo mientras entraba abruptamente casi azotando la puerta. Su padre, totalmente extrañado y con una mirada llena de confusión, levantó la vista de los papeles que hasta hace unos momentos estaba revisando. 

—¿No puedes, qué? —. Killua se dio cuenta hasta entonces de lo que había hecho, y otra vez queriendo golpear su cabeza contra la pared, carraspeó un poco y se dirigió a la puerta para cerrarla. 

—No estoy de acuerdo con Illumi padre, no pueden simplemente pedirme que me alejen de mi amigo, me niego totalmente —. Reclamó, cruzando sus brazos sobre su pecho y frunciendo su ceño para hacerle saber a su padre lo molesto que estaba con esa idea. Aún así, su padre no parecía comprender del todo.

—¿Tu amigo? —. Preguntó, haciéndole saber que no sabía de lo que hablaba.

—¡Gon Freecs! Illumi me dijo que ustedes estaban de acuerdo con él en que no debía hablar con él, pero no quiero, disfruto mucho estar con él —. Continuó con sus reclamos, a pesar de que se sentía inevitablemente intimidado por la seria mirada de su padre, no iba a echarse para atrás.

—Oh, ese chico —. El mayor pareció recordar entonces de qué hablaba su hijo, sonrió un poco al ver sus expresiones al hablar del chico —Ya veo... está bien —.

—¡Sí, y no voy a-...! Espera, ¿qué dijiste? —. El albino menor se desconcertó, incluso creyó que no había escuchado bien.

—Está bien, Kil, puedes seguir siendo amigo de Gon. Se nota que te gusta mucho —. Killua abrió su boca cuando escuchó a su padre, sin terminar de creérselo. Y aunque seguramente se refería a gustar como persona, no pudo evitar sentirse avergonzado. 

—¡¿De verdad?! —. Preguntó de nuevo un poco desconfiado, de haber sabido que sería tan fácil lo hubiera hecho hace mucho.

—Sí Kil, de verdad. Te ves mucho más feliz ahora que la semana pasada —. Inevitablemente la sonrisa de Killua se ensanchó más.

—¡Gracias, papá! —. Y sin más, salió de la gran oficina, dejando a su padre sonriendo levemente. 

Ahora sí, la sonrisa de Killua era imperturbable. Después de todo a su padre no podían contradecirle y teniendo su aprobación no habría quién pudiera impedirle nada, ni Illumi ni su madre. Ahora sólo había algo de lo que debía preocuparse. 

—¿A qué te referías con ser algo más? —. Preguntó por fin lo que había estado rondando por su cabeza. Había pedido a Gon que pasaran el descanso en la azotea sólo ellos dos, por lo que por fin tenía la oportunidad de preguntarle. 

—A ser algo más que amigos —. Dijo, como si fuera lo obvio, aunque sabe que no es a lo que se refiere Killua.

—¿Algo como... ser mejores amigos? —. No quería hacerse ilusiones, por lo que preguntó con desconfianza, ya se había avergonzado demasiado enfrente de Gon. El mencionado soltó una risa mientras negaba con la cabeza —¿Hermanos? —. No lo juzguen, quería asegurarse. El moreno simplemente volvió a reír.

—¿Quieres que seamos hermanos? —. Preguntó, claramente no era eso a lo que se refería.

—Huh... No... —. Contestó no muy seguro a decir verdad. El contrario le hizo frente y lo tomó de los hombros mientras lo miraba a los ojos.

—¿Qué quieres que seamos? —. Volvió a preguntar, casi en un susurro, como si quisiera que nadie más escuchara, aunque realmente ahí no había nadie más además de ellos. 

Killua parecía confundido aún, pero esta vez estaba seguro de que no era una ilusión ni parte de su imaginación. Su mirada se desviaba con nervios de los ojos de Gon a sus labios, una y otra vez. Finalmente se rindió a tratar de adivinar si su mente lo estaba engañando o no e hizo caso a la otra parte de su mente que le gritaba que lo besara de una vez. 

Y así lo hizo, llevó sus manos a las mejillas de Gon y finamente unió sus labios con los de Gon en un corto pero dulce beso. 

—Sé mi novio —. Pidió sin poderlo evitar más. Gon simplemente rió mientras asentía y Killua no podía estar más feliz. 

[•••]

—...Y así fue como conquisté a Gon. Te dije que mi plan iba a funcionar —. Terminó de contarle a Kurapika los últimos sucesos con Gon mientras caminaban, el mayor sólo se limitó a soltar una carcajada.

—Debes estar bromeando —. Killua volteó a verlo sin entender a qué se refería —Niño tú no conquistaste a Gon, él totalmente te tiene en la palma de su mano ¡él te conquisto! Además ninguno de tus planes funcionó como querías —. Killua frunció su ceño bastante indignado, quiso refutar pero en cuanto se puso a pensarlo, el rubio tenía razón, su boca se abrió en sorpresa.

—¡Él me engañó! —. Espetó indignado, Kurapika simplemente rió más fuerte. 

me duele y me emociona a la vez acabar este fanfic [?]

pqsinohanentendidopuessíesteeselfinallosientosiesperabanmás

los amo x leer esta cosa y gracias :(((((( siento q ya queria acabar el fic pero a la vez no quiero AYUDS

estaré escribiendo más proximamente, aunque no estoy segura si tmb sera killugon 
tengo muchos borradores y x esperar a acabar este fic ya casi olvidé de qué trataban JAJDHJAJA pero ntp aun tengo varios killugon x ahi y un leopika