La información que a nadie le importa, pero me vale xD
Nominación:
Kokoro_No_Shimai me nombró en el suyo como nominación Random, así que aquí estoy.
Etto... Diez cosas... espera que pienso... ¡Bueno, creo que ya está!
1. Me gusta el anime.
Creo que quiénes ya me conozcan sabrán ésto, así que no hace falta explicarlo pero... estoy corta de ideas, no me juzguen.
2. Soy pésima bailando, o ni le pongo ganas directamente.
Ésto ya lo describe todo. No me gusta demasiado bailar, y cuando lo hago debo estar con unas amigas que sepa que me van a aguantar tratando de moverme de una forma menos desastrosa que de costumbre al estar en confianza.
3. Tengo 14 años.
Creo que debería haberlo dicho como primer cosa pero... neh, ¿ya qué? Éste año –2019 para la gente del futuro– cumpliré 15 años, y si les interesa saberlo –cosa que creo que no, pero bueno– mi signo es Aries.
PD: Si alguien llega a tratar de acosarme lo último que verá será su cabeza decapitada colgada sobre un monte, para que todos sepan lo que trato de hacer...
4. Mido 1,48.
Para aquellos que se quejan de medir 1,56 –¡Te lo estoy diciendo a ti, Atsushi Otani!–, no saben lo que es ver que tus amigas a las que antes pasabas son más altas que tú, y que algunos te llamen Loli ;-; (? XD
5. No soy buena socializando.
A los extraños los trato como si fueran la peor mierda del mundo, hablándoles de manera cortante y fría y mirándoles sin interés alguno. Además, no me gusta salir de mi círculo de personas, por lo que apenas si les hablo al resto de mis compañeros de clase, y cuando lo hago suelo ser fría e indiferente, completamente diferente de cómo soy con mis amigos.
6. Me dan miedo las personas enfadadas.
Cuando alguien se enoja, tengo miedo de estar presente, por alguna razón que desconozco. Tal vez sea porque siento que se desquitarán con lo primero que vean, y ese primero seré yo. O no lo sé.
7. No me gusta que se hagan de rogar, y que tampoco sean muy insistentes conmigo.
Tanto una como la otra me cansan. La primera porque después de algunas cuántas disculpas de mi parte, si la otra persona sigue sin prestarme atención yo no voy a estarme arrastrando para que me perdone, a menos que haya sido por algo que yo considere importante.
Y la otra se refiere a que no me gusta que me pregunten tantas veces “¿cómo estás?”; “¿estás bien?”; “¿estás enojada?”; “¿te molestaste?”; etcétera. Me hace sentir sofocada y hasta cansada.
Aclaración: Me refiero a que si contesté “Bien, gracias”, y me siga preguntando, o desconfíe de mí, o me llame o me mande muchos mensajes para ver si estoy bien. Eso me cansa. Para aclarar, porque sé que con ésto alguien se puede ofender o llamarme “exagerada” por hartarme éstas cosas, gracias.
8. Me gustan los juegos Otome.
Sí alguien de aquí leyó mi historia de mi hermoso Kentin de Corazón de Melón, ya se lo habrán imaginado. Pero bueno, no tengo ideas, dejadme. Al igual que en los animes de Harem inverso –donde un grupo de varios chicos están enamorados de la misma chica–, me desespero con éstos juegos –en ambos casos mayormente por culpa de la maldita lenta de la protagonista...– debido a sus dramas que se forman por estupidez o malentendidos que justamente los personajes vieron y no quieren escucharte.
Y por si se lo preguntan, sí, yo soy de esas que quiere entrar al mundo 2D del juego o del anime que esté viendo para darle bofetadas a los personajes –mayormente a los protas– por su ceguera, estupidez, ingenuidad, lentitud, etcétera. Lo mismo con Ladybug.
9. Me encantan los peluches –y los dinosaurios–.
¡Amo los peluches! ¡Son tan suaves y lindos! Tengo peluches desde que tengo memoria, y siempre los preferí a ellos a las muñecas o juegos de mesa. ¡Nunca se es tarde para tener algo que te haga feliz! Y sí, tengo peluches de dinosaurios y también juguetes de dinosaurios. No puedo evitarlo, me gustan también.
10. Quiero ser veterinaria.
Es un sueño que casi todos tenemos de pequeños, pero lo mío es verdadero a mis ojos. Desde pequeña lo he decidido, y nunca he cambiado de idea. Los animales son algo hermoso y seres tan vivos como nosotros que tienen y deberían tener los mismos derechos de los humanos –cof cof que también somos animales cof cof– de vivir en lugares aptos, acceso a medicina y salud, seguridad, buena alimentación, libertad. Y eso es lo que yo quiero que la gente entienda cuando me vean de adulta, y trabaje para cuidar y proteger a las criaturas que todos estamos llevando a la extinción.
Aunque quitando ese discurso emotivo barato, soy pésima dueña de mis mascotas... Sí, lo sé, hipócrita, pero bueno...
*
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¿Contar un chiste? Ehh... Si hay algo que olvidé mencionar, es que no entiendo los chistes muy rápido.
Veamos...
—¿De qué color es tu auto?— preguntó la chica, frente a toda esa audiencia sentada que había desperdiciado su valioso tiempo solo para verla, y mirando a su compañero, que iba a ayudarlo.
—¡Amarillo!— levantó la voz el chico, en un grito que se escuchó por toda la sala. Ambos vestían un traje para tratar de lucir elegantes.
—¡Pero, ¿se puede saber por qué lo gritas?!— sabía que eso era parte del chiste, pero seguía sin creer que su compañero tuviera una voz tan potente.
—¡Porque es amarillo chillón!— le habló con una sonrisa de Naruto, dando así por terminada la función.
No me pregunten por qué lo hice así, solo quería ambientar.
*
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¿Eh? ¿Un Spoiler? Mmm... ¡Ah, ya sé! Digamos que en una de las próximas historias de Ladybug basadas en canciones Vocaloid, Alya puede ser la protagonista, y estará en pareja con Nino, para que el chico no quede en el olvido, ya que ¡sí! ¡Tiene importancia, no solo es amigo de Adrien, coño!
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Vale, a nominar a gente al azar puro, ya que quiénes me nominaron ya lo hicieron.
Nominaciones –no, no al Oscar, gracias–:
A...
Esos serían todos. ¡Gracias por haberse quedando hasta el final! ^^
Las reglas... pues son las de arriba, me da pereza escribirlas.
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