Vuelve a la oficina tras haberse olvidado de lo sucedido con Ace.

Él se acerca a ella y nota como está de distraída.

Ace: ¿Y a ti que te pasa?

Tn: ... -alza la vista para verlo y poco a poco volver a la realidad- Hola.

Ace: Olvidalo. ¿Ya pensaste en lo que te dije?

Tn: ¿Que cosa?

Ace: Que harás como que vas a esa fiesta pero en realidad no irás.

Tn: Ace... Sabes que debo ir. -dijo tranquila-

Ace: Hmm... Ya vuelvo. -tras haber dicho eso, pasa al costado de ella y ella se voltea para agarrarle el brazo y decirle-

Tn: Ace, por favor, sabes que debo ir a esa fiesta. Puedes beber tranquilo, total, sé conducir, ya saqué mi permiso el año pasado.

Ace: ¿Acaso tú no bebes?

Tn: Sip, poco pero esta vez será la excepción, debo ayudarte con esa persona en la fiesta.

Ace: ... Ok. Solo eso, ¿verdad? -ella asiente- Entonces... ¿Paso a recogerte?

Tn: ¿Eh?

Ace: Solo me darías tu dirección, claro, si es que quieres.

Tn: Ahm, está bien.

.....

Mientras camina pensativa choca con alguien y al alzar la vista se sorprende.

- Que gusto verte. Cuánto tiempo, sigues viéndote igual.

Tn: Her... Hermano. -se le sale algunas lágrimas y lo abraza muy efusiva- Te extrañé mucho. -su abrazo es correspondido-

- Pues, hubieras ido a verme.

Tn: Ni siquiera sé donde vives.

- Nuestros padres lo saben. -deja de abrazarlo de inmediato- Hermanita... -dijo algo triste- Ellos son diferente ahora, han cambiado.

Tn: ¡No! Ellos jamás van a cambiar, no me hables de ellos. Cambiando de tema y mejor háblame de ti.

- Sabes... Los he perdonado, debes hacer lo mismo.

Tn: Ya te dije que cambiemos de tema, es tu asunto con el de ellos no el mío.

- Está bien, ¿que quieres saber?

Tn: ¿Te casaste? Hmm... Dime donde vives para irte a visitar mejor.

- Ok, pero antes, dame tu número de celular. -ella se lo da y él se sorprende de que sea un celular muy bueno el que tiene su hermana- ¿Y ese celular? ¿Cuántos años te tomará pagarlo?

Tn: Ningún año, lo compré al contado. -su hermano se sorprendió- Trabajo... -se voltea y señala, cerca a ella la empresa. Ambos están en la esquina y él se sorprende-

- Aquella empresa...

Tn: Sip, es la más conocida a nivel nacional, la paga es buena. -dijo orgullosa-

- Wao, ¿cómo le hiciste para entrar? Escuché que es muy difícil.

Tn: Y lo es, indagué, tengo suerte de tener a una amiga que trabaja aquí y ella hizo que entrara. Hablé directamente con el dueño.

- ¿Qué? ¿De verdad? -ella asiente- ¿Y que tal es? ¿Es bueno o un tirano?

Tn: Es alguien muy bueno, es amable. Pero sobre todo, cuando habla con su esposa, es súper dulce.

- ¿Eh? -Desconcertado-

Tn: Ah, es que fui a su casa y su esposa es súper amable. Vi el trato del señor hacia su esposa y me gusta. -dijo alegre-

-Oh vaya.

Tn: Sii, ojalá y encuentre alguien así en el futuro.

- Ojalá hermana, ojalá.

Tn: Oye Sabo, ¿que tal si me quedo contigo en tu casa?

Sabo: Me gustaría pero... Nuestros padres irán a verme y no querrás verlos, ¿o si?

Tn: No, no, es mejor así. Pero es noche ya, ¿por qué irían a tu casa?

Sabo: Dijeron que estuvieron ocupados temprano y que como no me ven mucho, decidieron verme hoy, así que iré a comprar algunas cosas.

Tn: Te acompaño. -ambos caminan hacia el super- ¿En dónde trabajas?

Sabo: En la empresa Monkey D.

Tn: Pero... Espera, cuando te señalé la empresa, debiste saber más o menos quien es el dueño.

Sabo: Ah, eso. A pesar de que es más o menos cerca, la empresa donde trabajo no tiene ningún contacto con la empresa en la que estás y bueno, ni que yo tuviese un cargo importante para saber ese detalle.

Tn: Ahh, entiendo. Así que no sabes realmente si ambos tienen contacto.

Sabo: Así es, puedo decirte que no, pero lo más probable es que me esté equivocando.

Tn: Ok. Cambiemos de tema. -se adentran al super- ¿Que quieres comprar?

Sabo: ¿Que me recomiendas?

Tn: Hmm... Chaufa.

Sabo: Eso es lo que te gusta. -ella ríe- Mejor compro otra cosa, cuando vayas a visitarme ahí haré tu comida deliciosa.

Tn: Gracias. -sonríe- Oye hermano, ¿que tal si me invitas un helado?

Sabo: De acuerdo, helado de chocolate ¿cierto? -ella asiente-

Compra el helado de chocolate y lo mete al carrito, luego compra una bebida de chocolate que viene en bolsa, compra 3, dos para su hermana y uno para él. Compra el resto de la cena. Ahora que ya compró lo necesario, es que van para pagar en caja.

Salen y llaman a un taxi, ambos se suben y el taxista deja a la chica primero a pedido de su hermano y luego lo lleva a su casa.

Entra feliz y las chicas la miran.

Nami: Eso quiere decir que... ¿Ya estás junto a Ace? ¿Cuándo nos vamos de viaje? -Vivi y Tn la miran extrañadas- ¿Qué?

Tn: No, no quiero hablar de ese idiota. Estoy molesta con él. Estoy feliz porque vi a mi hermano, hacía tanto tiempo que no lo veía. Un día de estos iré a su casa y me quedaré allí.

Nami: ¿Quedarte?

Tn: Sip, tenemos muchas cosas de las cuales hablar, que con solo pensarlo ya me hace muy feliz.

Vivi: Es bueno oírte decir eso y verte muy feliz.

Tn: Gracias Vivi. -sonríe- Ah si, antes que me olvide. Hace unos días, el señor Roger le dijo a su hijo para que vaya a una fiesta muy importante y que allí debe hacer un trato con un señor llamado Shirohige. No sé bien de que va pero, lo malo es que yo también debo ir como acompañante de ese idiota y no quiero. -puso cara de sufrida-

Nami: ¿Y por qué debes ir?

Tn: Para vigilar a su hijo y que de verdad lo haga.

Vivi: Oh, entiendo. Entonces solo queda conformarte.

Tn: Sip.

Las chicas se ponen a hablar un rato y después cada una se va a su habitación para irse a dormir ya.