C11: Kibito y el Supremo Kaio.
Narrador omniciente
El día lucia como cualquier otro y los combates habían vuelto a la normalidad como si nada hubiese pasado desde un principio. Sin embargo, Gohan se encontraba llevando con mucha rapidez a Videl hacia la enfermería que había dentro del edificio del torneo de las Artes Marciales.
Su mente no dejaba de pensar en Dalem y lo que había sucedido hace unos minutos, no tenia ni la menor idea de porqué la chica había desaparecido así de la nada después de haber detenido a Spopovich, tampoco sabía porqué su amiga conocía a los tipos que se habían atrevido a hacerle daño a Videl, y a pesar de eso, lo único que tenia claro era que algo malo habia estado sucediendole a Dalem antes de irse.
Cuando llegó a la enfermería se limitó a dejar a Videl en una camilla mientras los doctores que estaban allí se encargaban de hacer su trabajo. Justo en ese instante, llegó Mister Satán tan preocupado y exagerado como siempre, moviendo sus manos frente a Gohan diciéndole que se debía ir del lugar ahora mismo.
—Espera...espera, Gohan—la voz de Videl hizo que el pelinegro se detuviera antes de irse—Gohan, quiero que le des su merecido a ese tipo—pidió—Por favor.
El hijo mayor de Goku solo asintió de forma serena y se retiró lo más rápido posible a esperar a su padre, junto a sus amigos en la primera planta, pues Goku debía de traer las semillas del ermitaño para lograr sanar a Videl.
—Krilin, ¿Qué estás tratando de decir?—pudo oír a 18 murmurar casi en silencio, así que se colocó detrás de una pared para escuchar sobre qué estaban hablando—Eso es imposible.
Krilin se veía muy confundido y 18 estaba de la misma forma, ambos hablaban tan bajo que Gohan apenas podía oírlos. La androide solo negó con el rostro, parecía estar totalmente segura de lo que decía.
—Esa de allí era Dalem, todos la vimos—comenzó a decir Krilin—Fue ella la que detuvo a Spopovich, llegó justo en ese instante junto al otro participante llamado Yamu, quizás debe conocerlos—él solo rascó su cabeza negando de la misma forma que su esposa—No te estoy diciendo que son amigos o algo así, solo pienso que todo esto es muy extraño.
—Solo nos queda esperar que Dalem no esté metida en nada grave—repusó 18 de forma relajada cruzando los brazos—Porqué me niego a creer que ella sea amiga de sujetos como ellos.
—Me niego a creerlo, pero todos la vimos. Era ella y se veía muy enojada con Spopovich cuando llegó hasta el cuadrilátero—volvía a decir Krilin serenando su mirada mientras observaba hacia el suelo con una pizca de confusión—Aunque no lo sé, fue un poco extraño que tuviera que irse demasiado rápido durante la pelea de Trunks y Goten. Todos allí la estábamos pasando bien.
Desde su lugar, Gohan observó totalmente confundido a Krilin teniendo una sola duda en su cabeza, ¿Dalem había estado con ellos antes?
—Gohan—la voz serena de Picoro hizo que el pelinegro dejase de prestar atención a la conversación sintiéndose aún más confundido por todo—¿Qué haces aquí?
—Señor Picoro—llamó el chico soltando una risita nerviosa comenzando a avanzar, dejando su escondite y sin saber que responder—¿aún no llega mi padre?
—Aún no—había soltado Picoro situándose a su lado, ambos observando hacia afuera desde la gigantesca ventana del edificio, el pelinegro solo dejó escuchar un pequeño suspiro—¿Qué te sucede?
—Una pregunta Señor Picoro—soltó con curiosidad al instante mientras el aludido asentía—¿Dalem estuvo con ustedes?
—Claro—había respondido Picoro serenamente—Estuvo con nosotros observando las peleas de la sección infantil justo cuándo tu seguías en la fila con la hija de Mister Satán esperando a medir tu fuerza—Gohan solo tragó saliva y observó al namekiano—Se quedó con nosotros hasta que la pelea de Goten y Trunks diera inicio, luego dijo que tenía algo que hacer y se fue.
El pelinegro apretó sus puños por un instante sin saber porqué su amiga no se había atrevido a saludarlo a él también, o al menos, a esperar a que llegase para hablar sobre lo que le había sucedido aquella vez en el callejón pues aún el chico estaba muy preocupado por eso.
—Nada de esto me da buena espina—pudo oír que Picoro decía cruzando las manos y adquiriendo un rostro más sereno que antes—¿Y a ti?
—También creo lo mismo Señor Picoro—respondió el pelinegro al momento y con respeto—Siento que algo malo le estaba pasando a Dalem justo antes de desaparecer de esa forma.
—Lo sé.
Gohan decidió adelantarse hasta llegar al lado de Krilin observando hacia arriba, lo que Picoro le dijo le habia dejado más nervioso qué antes y quería acabar con todo lo más rápido posible para poder ver a Dalem.
—Mi papá ya se tardó mucho—soltó el pelinegro observando a su amigo krilin—¿Cierto?
—Si—contestó el hombre al instante—Se supone que regresará pronto con la ayuda de la teletransportación, puede ser que quizás se hayan acabado las semillas...
—No digas eso Krilin, estoy muy preocupado—soltó Gohan interrumpiendolo y alejándose unos centímetros dispuesto a correr hacia el segundo piso—Avísame cúando llegue mi padre, te lo agradeceré
—Espera, espera—el pelinegro se detuvo al oírlo y lo observó—Por la forma en la qué te comportas parece que hay algo entre tú y Videl. Qué suerte, Gohan.
Lo que Krilin le acababa de decir hizo que un pequeño rubor se acoplara en su mejilla, aún así sin responderle volvió a correr hacia el segundo piso a ver en qué estado se encontraba Videl, sin embargo se detuvo allí.
¿Suerte?
¿Estar con Videl era tener suerte?
¿Por qué seguía pensando en Dalem a pesar de todo lo sucedido con Videl?
Estaba claro que también le importaba Videl pues la hija de Satán le había ofrecido una muy bonita amistad, o eso era lo que él creía y también se había preocupado mucho por ella cuando Spopovich la estaba golpeando. Sin embargo, Dalem ocupaba un gran espacio en su corazón desde que era pequeño y verla justo allí deteniendo aquella pelea, había echo que todo el enojo qué había en él se esfumase, verla lo calmaba por completo.
Ahora, gracias a Krilin, se encontraba totalmente confundido.
Volvió a recordar la razón por la que había subido hasta aquí y observó hacia el cuarto de Videl, el lugar se encontraba lleno de reporteros justo en su puerta y estos estaban todos amontonados e intuyó que no le dejarían pasar así que optó por regresar con sus amigos con toda la cabeza llena de un revuelo de emociones.
Por otro lado, la ausencia y la preocupación de los Guerreros Z hacia Dalem le causaron más nervios pues justo cuando bajó todos allí se encontraban hablando sobre su amiga de la infancia con expresiones preocupadas.
—Solo esperemos que Dalem esté bien—había soltado Krilin con preocupación después de que todos allí analizaron la extraña escena que Dalem había tenido—Todo esto es muy raro.
Justo en ese instante Goku apareció con una pequeña bolsa de semillas en las manos, exactamente tres semillas con las cuáles cualquiera podría recuperar las energías.
—Tengo un mal presentimiento sobre todo esto—informó Goku con rapidez y luego observó a su hijo—Ten Gohan, Daselas a esa niña.
[...]
Gohan respiró agitado mientras frente a él se encontraba el participante Kibito, hace unos segundos éste le había pedido que se transformase en Súper Saiyajin y el pelinegro había aceptado dejando de cuidar su identidad, pues ahora que todos habían presenciado aquel gran desato de poder, ya habían reconocido quién era el gran Saiyaman. Sin embargo el hijo mayor de Goku no contaba con qué, quizás, los mismos tipos que estaban junto a Dalem se acercarían a él logrando absorber toda la energía que poseía dentro de si mismo con un objeto extraño.
Por otro lado no tenía ni la menor idea de porqué nadie había venido a ayudarlo mientras estos le absorbían la energía, ni siquiera su propio padre. En la zona de espera se encontraban todos; Goku, Vegeta, Krilin, Picoro e incluso Videl. Todos ellos veían la escena con enojo y curiosidad pero a pedido del participante llamado Shin nadie había echo nada.
—Todo estará bien, Kibito le regresará la energía a Gohan—soltó Shin—Ahora el siguiente paso de nuestro plan es seguir a esos dos sin que se den cuenta—el hombre misterioso solo se detuvo y observó a todos allí—Tengo entendido que ustedes son amigos de Dalem, ella también está involucrada en todo esto.
El rostro de todos adquirió una mueca de sorpresa mientras escuchaban al Supremo kaio.
—¿Dalem...—intervino Goku con confusión pues prácticamente la pequeña había crecido junto a él y los guerreros Z y jamás había echo algo malo, Shin asintió—¿Ella también?
—Así es—informó Shin moviendo la cabeza y alejándose del resto para poder levitar unos metros sobre el suelo—y si lo prefieren pueden venir con nosotros para descubrir la verdad—todos allí asintieron mientras veían que Shin estaba dispuesto a alejarse volando—Nos serían de gran ayuda.
Justo en ese instante, el extraño hombre llamado Shin salió volando mientras Picoro, Krilin y Vegeta lo seguían. Sin embargo, Goku se acercó hacia el cuadrilátero y observó a Gohan detenidamente, para luego de un par de segundos observar a Kibito con serenidad.
—¿De verdad puedo encargarte a Gohan?—pudo soltar sin una pizca de diversión viendo a su hijo en el suelo—¿me prometes que no le pasará nada?
—No te preocupes—respondió Kibito observando al hombre pelinegro de cabello alborotado—En cúanto le de algo de energía los alcanzaré, seguramente él también irá.
Goku asintió y salió de allí volando siguiendo al resto mientras Gohan los veía irse, el chico estaba en el suelo sin levantarse y a penas podía hablar. A pesar de eso, justo frente a él alguien muy conocida apareció en su campo de visión.
—¿Dalem?—preguntó débilmente, zarandeo la cabeza tratando de observar correctamente para apreciar si lo que había visto era cierto y una vez que descubrió su error, se limitó solo a soltar una pregunta—Videl, ¿a dónde van todos?
Sin perder ni un segundo, Kibito se agachó a la altura de Gohan y le proporcionó de su energía para que el muchacho pudiera recuperarse pues estaba claro que también necesitaban de su importante ayuda para cumplir con lo indicado.
—Listo—pudo oír que Kibito informaba—Ya terminé.
Las personas que estaban sentadas en las tarimas soltaron algunos suspiros fuertes demostrando lo impresionados que estaban al ver a Gohan levantarse ileso, incluso Videl estaba sorprendida y unos cuántos enfermeros que habían traido una camilla también lo estaban.
—Gohan—llamó Videl con emoción, el pelinegro solo la observó—¿Ya recuperaste tus poderes?
—Ahora quiero que me sigas—interrumpió Kibito comenzando a volar y Gohan asintió con serenidad—En el camino te explicaré lo que sucedió.
—Oye Gohan—interrumpió Videl observando al chico—¿está bien si te acompaño?, Es que quiero saber la razón de muchas cosas.
—No Videl, esto es muy peligroso—soltó el pelinegro, sabia claramente que los tipos que habían tomado su energía estaban relacionados con Dalem de alguna forma y ese hecho le preocupaba muchísimo—Si la situación se torna peligrosa, ¿me prometes que huiras lejos?
La hija de Satán solo asintió y los tres salieron de allí volando bajo la impresionada mirada de todo el público, incluso el presentador de las peleas se había quedado totalmente anonadado observando como todos los participantes se habían ido de aquella forma.
[...]
Goku, Picoro, Krilin y Vegeta se situaron al instante detrás de Shin manteniendo su concentración en el vuelo, estaban totalmente confundidos por lo que había sucedido con Dalem aquel día, y también se encontraban ansiosos por saber el paradero de esos dos tipos que le habían quitado la energía a Gohan.
—¡Hola!—saludó Goku.
—Sabia que iban a seguirme—comenzó a decir Shin sonriendo gentilmente—Serán de gran ayuda ya que sin sus poderes probablemente no podríamos ganarles.
—¿Ganarles?—preguntó Goku—¿te refieres a esos dos sujetos?
—No Goku, ellos solo están siendo manipulados—Shin solo soltó un suspiro lleno de nerviosismo—Me refiero a un mago muy poderoso.
—¿Eh?—volvió a preguntar Goku—¿Cómo qué un mago?
—En los tiempo primitivos cuando el humano comenzaba a utilizar sus dos piernas para poder caminar en la tierra, existió algo maligno llamado Bibidi, él cuál vivía en la parte más lejana del universo—informó serenandose por completo dando a entender de que el caso era realmente muy grave—Cierto día ese mago creó una criatura realmente muy poderosa llamada Majin Boo.
—¿Majin Boo?—repuso Goku con diversión—Tiene un nombre muy gracioso.
—Majin boo no tiene la capacidad de razonar ni de tener sentimientos, lo único que sabe hacer es destruir y acabar con la vida—comentó Shin centrándose en mirar a todos revelando aquel misterio—Es un mounstro que nació solo para hacerle sentir el terror a los seres vivos. Hace algunos cientos de años se dijo que él destruyó todo el universo convirtiéndolo en polvo.
Justo en ese instante el supremo Kaio solo observó a Vegeta velozmente, habia oido perfectamente lo que el Saiyajin había dicho en su mente pues Shin poseía una grandiosa técnica de telepatía.
—Se equivoca, Señor Vegeta—soltó con serenidad y preocupación—En realidad existían cinco supremos kaiosamas, cada uno de ellos era tan poderoso que podía destruir a Freezer de un solo golpe, y cuatro de esos supremos kaios fueron asesinados por los terribles poderes de Majin boo.
—Increible—había soltado Goku lleno de impresión.
—El mago Bibidi también tuvo muchas dificultades al tratar de controlar el temible poder de Majinboo, tan grave fue el asunto que para tomar un breve descanso encerraba provisionalmente a Majin boo dentro de un huevo para qué no pudiera moverse—Krilin y Picoro solo observaban muy atentos a Shin mientras éste hablaba—Y cuándo logró encerrarlo, mandó al amenazador Boo al planeta tierra ya que este sería el siguiente blanco, dejándolo totalmente intacto. Se suponía que el único que podía sacar a aquel monstruo del huevo era solo el mago Bibidi, sin embargo, nos acabamos de enterar de algo espantoso.
Goku y Vegeta, junto a Picoro y Krilin se observaron entre ellos mismos comenzando a captar lo que Shin les quería mostrar, y luego todos observaron al Supremo Kaio dispuestos a dejar que hablase para seguir escuchándolo.
—El poderoso mago Bibidi tenia un hijo, el también posee los mismos maléficos poderes que su padre y éste se llama Babidi—una expresión de miedo se apoderó del rostro de Krilin al oír lo que Shin decía—Y parece ser que Babidi también sabe cómo sacar a Majin boo de ese huevecillo.
[...]
Gohan había tenido que dejar atrás a Videl ya que a la chica aún se le dificultaba volar con rapidez, a su lado estaba Kibito quién ya le había explicado la mitad de todo el problema, y ambos volando casi al mismo nivel, tuvieron que apresurarse para llegar al lado de Shin y el resto. La mirada de todos se enfocó en ellos y Goku al ver a su hijo recuperado y mucho mejor que antes, soltó una mirada serena con las intenciones de averiguar qué rayos tenía qué ver Dalem en esto.
—Oiga—comenzó a llamar el mayor de los Son con mucho respeto hacia Shin y Kibito—Creo qué todos aquí necesitamos saber algo, ¿Qué tiene que ver Dalem en todo esto?
—Dalem es una sayajin—había soltado Kibito demostrando un rostro de serenidad total. Desde su sitio y aún volando por los aires, pudo observar que el rostro de todos se llenó de una impresión más grande que antes—Es lo que sabemos.
—¡¿Qué?!—Krilin fue el primero en preguntar.
—¿Dalem es...—repuso Goku al instante más confundido que nunca—¿Dalem es una sayajin?
—Imposible, no puede serlo—soltaba Krilin totalmente impresionado y con una pizca de confusión, todos estaban del mismo modo—Solo Goku y Vegeta habían sido los únicos sobrevivientes después de qué aquel planeta estallase.
Kibito y el Supremo Kaio Shin observaron a Krilin con mucho interés, no tenían en mente de que aún existieran más saiyajins, pero ahora que lo veían de ese modo, era la única razón por la que Shin había tenido que usar mucha energía para inmovilizar a Gohan durante el torneo. Quizás había más de lo qué no sabían sobre ellos.
—Al parecer, lo son—volvió a soltar Shin centrándose en los únicos saiyajines puros de allí—Ustedes son los únicos sobrevivientes a ese ataque—esbozó una mirada preocupante y soltó un pequeño suspiro mientras todos allí lo observaban dispuestos a escucharlo—pero la historia no empieza desde allí.
—¿Qué?—fue lo único que Gohan logró preguntar aún con mucha más confusión que antes—¿Cómo fue qué...
No planeaban detenerse, nadie allí. Así que el Supremo Kaio shin se encargó de contarles lo único que sabía sobre Dalem y su origen mientras volaban para llegar hacia el dichoso escondite de Babidi siguiendo hábilmente a Yamu y Spopovich.
—Un par de meses antes de que Frezzer destruyera el planeta, el abuelo de Dalem habia logrado escapar en una nave dirigida justo hacia la tierra—Shin se detuvo solo para observar a Krilin, Picoro y luego a Gohan pues eran los que se veían más confundidos—Luego de lo sucedido, el hombre rehizo su vida con total normalidad en este planeta e incluso tuvo un pequeño hijo.
—Lo que sucedió después sigue siendo realmente muy raro, incluso para nosotros—comenzó a decir Kibito a su lado, ésta vez observando a Vegeta y a Goku—Al parecer la sangre sayajin había decidido saltarse una generación pues el padre de Dalem jamás llegó a adquirir ningún poder sayajin, ni tampoco tuvo una cola.
—¡Eso ni siquiera tiene sentido!—bramó Krilin confundido observando a Picoro para que apoyase su idea—¡Es imposible!
—Vaya—pudo soltar Goku esbozando una risita de asombro, la noticia le había impactado demasiado ya que ni siquiera Kaiosama habia dicho algo al respecto—El regreso de Freezer, los Androides, Cell y luego los Guerreros de Plata, al parecer hemos estado tan centrados en nuestros enemigos, qué en ningún momento nos detuvimos a pensar en la razón por la cuál Dalem posee un ki más grande a cualquier guerrero de clase media.
—Pero papá...—replicó Gohan al instante observándolo—¿Cómo fue posible que ninguno de nosotros lo hayamos notado desde antes?
La risa masculina y burlona de Vegeta los hizo confundirse aún más, el príncipe de los saiyajin solo volvió a soltar una risa más fuerte sin perder la coordinación en su vuelo y observó a todos con una sonrisa altanera.
—Sabandijas—comenzó a llamar con confianza y burla—¿Realmente fueron tan idiotas todo este tiempo?
—Señor Vegeta—llamó Gohan con rapidez sintiendo que el hombre sabía algo más—¿Dé que está hablando?
—Vegeta—llamó esta vez Goku impresionado—¿Ya sabias sobre esto?
—Claro que si, era imposible no saberlo—soltó Vegeta riendo y sintiéndose superior a todos—Desde un principio supe que esa mocosa poseía la sangre de una de las mejores élites guerreras antiguas de mi planeta, supuse que ustedes mismos se darían cuenta pero ahora comprendo que son mucho más inútiles de lo que pensaba.
—Realmente es...—Krilin solo suspiró acostumbrado a aquella forma obstinada en la que Vegeta hablaba—Si que me ha sorprendido esta noticia, jamás creí que Dalem sería...
—Veanlo de este modo—apremió Picoro de forma serena—Que ella sea una sayajin sería la única razón de su fuerza y la gran rapidez que tuvo para aprender nuestras técnicas, cómo la teletransportación que Goku le había enseñado despúes de volver a la tierra, o las técnicas de Roshi.
—Ah, ¡es cierto!—Goku había chocado las palmas de sus manos como si una idea en su mente diera frutos—O cómo cuando aprendió a volar.
—Eso quiere decir...—Gohan titubeó antes de que pudiera aclarar una duda—¿Y por qué sus padres la abandonaron?
—Bueno...—comenzó a decir Kibito—Los abuelos de Dalem habían muerto cuándo el padre de la chica aún era muy joven, por lo que el padre de Dalem no tenía ninguna noción sobre luchar y no había sido inculcado, ni entrenado con algo así. Eso hizo que éste nunca supiera que su padre poseía habilidades grandiosas como esas.
—Conforme iban pasando los años, Dalem comenzó a desatar su fuerza cuando apenas tenía 8 años, incluso ella ni lo sabía—Gohan observaba tan atentamente al Supremo Kaio que no pudo evitar imaginarse todo lo que Shin relataba en su cabeza—Fue por eso que el papá y la mamá de Dalem la abandonaron en el mismo instante en que creyeron que su hija era un completo monstruo, por su fuerza. Le tenían miedo y no sabían cómo cuidar de ella, por eso la dejaron.
—Vaya—susurró Goku apenado, pero tenía un par de dudas en su mente—Aún no entiendo algo, ¿Cómo es qué lo de ser Sayajin pudo saltarse una generación?, ¿y qué hay de su cola?
—Sobre lo de su cola, se la quitaron cuando era una bebé—informó Shin—Es lo que sabemos.
—Y por otro lado, nosotros tampoco sabemos porqué su padre no obtuvo la sangre saiyajin—respondió Kibito—Es una situación demasiado extraña.
La risa de Vegeta volvió a desconcentrarlos a todos, Gohan lo observó al instante reconociendo, por la forma en la que el príncipe Vegeta reía, que sabía algo más que el resto había ignorado.
—Realmente eso no es para nada extraño—comentó Vegeta soltando risitas altaneras—La sangre Saiyajin si puede saltarse una o dos generaciones en raros casos, y cuándo sucede algo así, la que llega a tener la oportunidad de poseer la sangre guerrera obtiene el 100 por ciento, lo que hace que sea un Saiyajin puro.
—Vaya—soltaba Kibito con impresión—Esa importante información ni siquiera nosotros la sabíamos.
—Por otro lado—volvió a decir Vegeta sin prestarle atención a lo que Kibito había dicho—Las patéticas personas que no poseían ninguna pizca de sangre Saiyajin eran aniquiladas porqué representaban una completa deshonra para nuestra raza.
—¡Aún así me niego a creer eso!—había soltado Krilin nuevamente, claro que el hombre habia comprendido todo lo que Vegeta habia decía pero no entendía porqué rayos nadie había podido reconocer que Dalem llevaba esa sangre con solo sentir su ki—Si ella hubiera sido una sayajin lo hubieramos sentido todos desde el principio justo cómo lo sentimos con Raditz, Napa o Vegeta.
—Deja de martirisarte, Krilin—soltó Picoro de forma relajada e interrumpiendolo—Debe existir una razón que desconocemos, además estaba claro qué todos aquí sabiamos que el ki de Dalem estaba por encima de un guerrero de segunda clase cuándo solo era una niña e intentó luchar con Cell—Goku asintió seriamente dándole la razón—Todos lo sabíamos, sin embargo, pensábamos que era por el hecho de que Goku y yo la habíamos entrenado junto a Gohan. Nunca pasó por nuestra mente que ella también fuese una Saiyajin, así que no te atormentes.
Gohan no dudó en observar a Picoro mientras éste hablaba, estaba claro que recordaba cuándo su padre había entrenado junto a él y Dalem, lo recordaba perfectamente. Aquel día Dalem había tenido la iniciativa de querer entrenar junto a ellos.
"—¿si, señor Goku?—había suplicado observando al padre de Gohan, cuándo era más niña le llamaba mucho la atención entrenar y aprender técnicas nuevas—Diga que si Señor Goku.
—¡Ni se te ocurra Goku!—el grito enojado de Milk hizo que Goku prácticamente saltara de la impresión mientras soltaba una risita nerviosa cayendo al agua y mojando su cuerpo por completo—¡Dalem debe concentrarse en los estudios!
Dalem se encontraba sentada junto a Gohan mientras el chico comenzaba a reir al ver que su padre había caído directo hacia el lago arruinando su alborotado cabello amarillo que poseía en ese instante. A Dalem siempre le había parecido muy curioso la forma tranquila en la que estaban mientras poseían aquella fase número uno del súper sayajin.
—Por favor señora Milk—suplicaba la pequeña observando a la mamá de su amigo, sabia perfectamente que la mujer no le dejaría permiso alguno así que hizo un rostro de súplica queriendo convencerla—Solo será esta vez, concentrarme solo en los estudios es muy estresante.
Milk relajó su mirada mientras la observaba y supuso que ya era hora de darle un descanso a la niña pues ella sabía perfectamente que en casa de Bulma obligaban a la niña a que estudiase de noche y de día.
—Esta bien pequeña Dalem—susurró Milk con una sonrisa, justo en ese instante Goku salía del agua dando un salto muy animado por lo que su esposa había decidido—¡Goku!—el grito lo volvió a espantar pero esta vez cayó al suelo golpeando su cabeza, la mujer solo se acercó quedando a centímetros del rostro de su esposo mientras él estaba sobando su cabeza—No seas tan duro con Dalem.
Goku asintió con miedo mientras Milk se retiraba del lugar esbozando una sonrisa. Por otro lado, Gohan había permanecido mirando todo desde su sitio, tenía una sonrisa plasmada en el rostro pues ahora su amiga tenía el permiso de su madre para entrenar con él.
—¿oíste eso, Gohan?—Dalem llamó su atención mientras éste también poseía una gran sonrisa—¿Lo oíste?
El entrenamiento solo duró un par de horas, Goku y Gohan se mantenían aún en la fase uno de un sayajin, y ambos estaban totalmente impresionados por los golpes que Dalem había logrado esquivar con rapidez. El hombre de cabello alborotado la observó por un instante e intuyó que la pequeña tenía una fuerza especial que ocultaba. Su hijo y él estaban peleando contra ella y aún asi Dalem los podía esquivar. Y el hecho de que tuviera esa gran agilidad y fuerza le parecía muy increible.
No obstante, Dalem estaba totalmente feliz, estaba claro que Picoro y Roshi le habían enseñado movimientos muy específicos y buenos que ahora estaba usando contra Gohan y Goku, sin embargo, odiaba no poder ganarle a alguno en ese instante. Muy en el fondo sabia que no podía contra ellos, no es que quisiera vencerlos, no se consideraba fuerte, ni tampoco débil, aquella vez solo se estaba divirtiendo.
El entrenamiento cesó cuándo Dalem cayó al suelo, lucia cansada y estaba agitada. Goku se acercó a ella extendiéndole su mano, la niña se apresuró en levantarse al ver a Milk qué se acercaba con unas cestas de comida.
—Rayos—comenzó a decir un poco enojada soltando un pequeño suspiro—Aún no puedo ganarles.
—Dalem, estuviste increíble—había intervenido Gohan sonriendo—Si sigues practicando podrás aumentar tu fuerza aún más.
Una vez que tomaron en cuenta aquel potencial para las luchas de Dalem, y con su consentimiento, Goku y Picoro comenzaron a entrenarla junto a Gohan la mayor parte del tiempo. Con ambos maestros, la niña incluso ya había aprendido a manejar a la perfección arrojar energía sin dañar a nadie y había luchado casi tan a la par con Picoro.
—¡Ahora!
La voz serena de Picoro despertó a Dalem, todos se encontraban entrenando, llevaban casi todo un día haciendolo y habían desatado una pelea, ambos niños en contra de ambos adultos. La niña abrió los ojos con rapidez levantando su brazo izquierdo y lanzando una esfera de energía, la cúal había atinado directamente al punto exacto, en la espalda de Goku. El Saiyajin sonrió al notar que la niña había tenido una gran agilidad para hacer eso pues lo había tomado desprevenido.
Sin embargo, debido al cansancio la niña solo descendió y piso el suelo un poco cansada, se la habían pasado todo el dis entrenando, ya estaba apunto de anochecer, estaba muy agotada, pero si realmente quería proteger a sus amigos, debía entrenar, era la única razón por la cuál Dalem no se había rendido aún.
—Estoy cansada—declaró la niña con molestia—¿es necesario hacer esto todo un día completo?—Dalem se sentó en el suelo y Goku imitó su acción solo para descansar un instante—No sirvo para estas cosas.
—Tu poder escondido es sorprendente—había aceptado Picoro frente a ella, Gohan se situó al lado de su amiga y sonrió—Por eso tendrás que sacar todo ese poder con el entrenamiento y le darás un buen uso."
Gohan aún recordaba la gran sonrisa que había visto en el rostro de Dalem ese día, en muchas ocasiones, y más ahora en su ausencia, anhelaba con todo el alma ver la sonrisa de su amiga otra vez.
—Ese mago posee la habilidad de controlar a sujetos que tengan un corazón maligno, cómo fue el caso de Yamu y Spopovich—soltó Shin haciendo que Gohan despertarse de aquel recuerdo—Solo espero qué entre los hombres de Babidi, no haya alguien poderoso.
—Justamente por eso es qué pensamos que Babidi a querido usar en su tropa a Dalem—admitía Kibito con rapidez, todos allí lo observaron con confusión—Sin embargo, cúando nosotros la vimos, no pudimos distinguir ninguna pizca de maldad en ella.
—Aún no sabemos si la está utilizando—informó Shin nuevamente—ya que a diferencia del resto la señorita Dalem no poseía una M en la frente.
—Así es—repuso Kibito—No estamos totalmente seguros de eso.
Una gran cantidad de preguntas se abalanzaron en la mente de Gohan mientras recordaba que Goten, aquella noche le había dicho que Dalem quería suprimir su fuerza para siempre.
—¡Ah!, disculpe—llamó Gohan con confusión a Shin sintiendo preocupación por su amiga—¿y usted cree que ese tal Babidi pueda eliminar para siempre el poder de un sayajin?
—¡¿Qué?!—Todos adquirieron una reacción serena debido a la reacción del Gran Kaioshin y Kibito, la pregunta los había sorprendido también—Joven Gohan—llamó Shin con serenidad—¿Alguna vez Dalem le dijo que quería dejar de tener la fuerza que ya posee?
Picoro, Vegeta, Krilin y Goku observaron con una pizca de curiosidad a Gohan esperando su respuesta, aquella pausa que hizo el hijo de Goku les causaba cierto temor por lo que Dalem pudiera haber dicho, y por lo que hubiera estado pasando con ella durante todo el tiempo en la qué no la veían.
—Se lo dijo a mi hermano—respondió Gohan con preocupación. En lo que sea que Dalem estuviese involucrada era totalmente muy peligroso y eso no hacía nada más que preocuparlo—Una vez.
—No lo sé, el poder de Babidi no puede hacer algo cómo eso—soltó el supremo Kaio volando aún más rapido—Aunque tampoco descarto la idea porqué él es un mago muy perspicaz y controlador, sabe cómo convencer a los demás. Ese individuo posee habilidades mágicas poderosas—Kibito voló a su lado con más rapidez y el resto hizo lo mismo—Si es así, debemos llegar lo más rápido posible porqué si Dalem ya le entregó su fuerza, Majin Boo ya estará despierto. O en el caso más probable, Dalem ya será parte del equipo de Babidi.
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Holaaaa
Perdonen por la demora, sé que tarde demasiado en subir este capitulo, he tenido un par de problemas personales pero lo prometido es deuda, aquí está la razón por la que Dalem es fuerte como el resto de Guerreros Z.
⚡
¿Cómo han estado?, ¿todo bien en sus casas?
Espero realmente que les esté yendo bien a tod@s por la situación que está pasando el mundo entero debido al Covid19, les mando abrazos psicológicos ❣. Pronto subiré el capitulo siguiente.
¿Qué les ha parecido este capítulo?
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