Tiempo después

ALESSANDRO P.O.V.

Me estacioné cerca de la escuela, bajé del coche y me acerqué a la entrada donde había otras personas esperando, ella estaba sentada jugando son las correas de su mochila, levantó la mirada, me vió y sonrió mientras corría hacía mí tomando mi mano

-Hola- dijo feliz

-Hola preciosa, que quieres hoy- dije mientras le daba un beso en la mejilla y la cargaba en mis brazos

-Helato- dijo con su voz tierna

-Helado, bien; pero primero hay que ir por mamá-

-Mamá y hemanito- dijo juntando sus manitas

-Si amor, mamá y tu hermanito-

...

Llegamos al parque donde siempre esperabamos a Susan, estaba cerca de su trabajo y de la heladería; en cuanto llegamos Maya corrió a los columpios, yo la cuidaba de lejos, siempre he escuchado de la extraña conexión entre los padres y sus hijas, la de nosotros no era la excepción, Maya tenía el caracter, la sonrisa y belleza de su madre, pero también los gestos, actitudes y cabello de su padre; de un momento a otro empezó a mandarme besos y yo se los respondía, después reía y seguiamos el juego

-¡Hemanitoooo!- gritó mientras se bajaba del columpio y corría a abrazar el vientre de 6 meses de su madre; Susan se veía hermosa con su vestido a los tobillos y sus zapatos bajitos, siempre tan tradicional

-¿Sólo vino tu hermanito?- preguntó a nuestra hija sonriendo divertida

-No, tabién vino mamá- contestó Maya dandole un beso en la mejilla

-Hola hermosa- dije acercándome a ella

-Hola guapo- sonrió y la besé

-No vea hemanito- escuchamos a Maya, nos separamos para mirarla y tenía sus manitas tapando el vientre de su madre

-¿A dónde vamos hoy Maya?- le preguntó su madre

-¡A come helato!- dijo alzando sus manitas en modo de celebraciòn

-Genial, porque traigo antojo- dijo Susan acariciandose el vientre

-¡Chii! Vamo- dijo Maya tomando de la mano a su madre y llevandola a la heladería

...

-¿Qué hiciste hoy Maya?- preguntó Susan después de recibir nuestros helados

-Dibujo- contestó atenta a su helado

-¿Y qué dibujaste?- volvió a preguntar su madre

-A mi familia: a mamá, papá, a hemanito e la paza de mamá, a mí, a tía Gina, tía Lili, tió Fabegas, tía Sophia, abueitos y tío Bandon- dijo tratando de enumerar con sus deditos

-¿Asi? Y ¿que dijo tu maestra?-

-Que eda muy gande- dijo abriendo sus manitas, -y yo dije que chi, y que dos quedía a todos-

-Y ellos tambien te quieren mucho- dije

-Y a mi hemanito también- dijo sonriendo, era tan tierna y cariñosa, siempre hablando de su hermano, ibamos a tener un niño, aún estabamos pensando el nombre

Era el hombre más feliz del mundo, tenía realmente una familia grande, si compartiamos sangre o no, no importaba, han estado con nosotros en las buenas y en las malas; quienes llevaron a Susan al hospital el día que nació Maya, fueron Lili y Gina, yo estaba trabajando, pero en cuanto me avisaron, salí volado a verlas; nuestros hijos no fueron planeados, pero sí esperados, mi gran tesoro

-Papi, ¿ya no te vas a come tu helato?- escuché al voz de mi hija -si quiedes me do como po ti- dijo sonriendo

-Sólo estaba pensando amor-

-Bueno- se encogió de hombros y siguió comiendo, no había terminado su parte y ya quería la mía

-¿En que pensabas?- preguntó Susan en voz baja

-En mi familia gande- dije imitando a Maya a lo que ella rió y la besé

...

SUSAN P.O.V.

Dias después

Estaba en el centro comercial checando las últimas cosas que nos faltaban para el bebé, sería un niño, o eso nos habían dicho en el último ultrasonido, Maya estaba feliz con su hermanito, siempre hablando con él y de él

Veía algunas ropitas, cuando me pareciò ver un rostro conocido, su panza también estaba redondita, y un poco más grande que la mía, cuando me miró pareció reconocerme porque me sonrió

-Hola- saludó Julia

-Hola, felicidades- dije sonriendo

-Gracias, tengo 7 meses, van a ser gemelos- dijo acariciando su vientre -¿y tu?-

-Tengo 6, y será niño- dije sin dejar de sonreír

-¿Quieres, comer algo?- preguntó timida

-Me encantaría- dije sincera

Fuimos a una cafetería, estuvimos hablando de bebés, y yo le hable de lo que había vivido con Maya, fue una platica interesante, dicen que el pasado es eso, pasado, y hay que vivir el presente, ¿no?

...

-¿Y te diò su numero?- preguntó Alessandro mientras acostabamos a Maya

-No, sòlo está de paso en la ciudad- contesté mientras tapaba con su cobija a mi hija, -duerme bien amor- besé su frente

-Sueña con los angelitos- le dijo su padre desde la puerta, salí y cerré

-Me duelen los pies- dije acostándome en nuestra cama

-Hola- dijo Alessandro mientras se acostaba y ponía su cabeza sobre mis piernas dando su cara frente a mi vientre

-Vas a tener tu platica nocturna con tu hijo- todas las noches antes de dormir, se ponía a platicarle de cualquier cosa, y siempre me terminaba durmiendo

-Sí- dijo besando mi vientre, -todos los días me lo imagino, saber que color de ojos tendrá, su vocecita- dijo sonriendo, o eso creo, mi pancita no me deja ver más allá

-Recuerdas que me preguntabas porqué siempre ponía mis manos en tu vientre- dijo después de un silencio

-Sí- dije sonriendo al recordar

-Porqué el vientre de una mujer, es lo más especial, es lo que dá vida, y yo siempre supe que mis hijos crecerían aquí- toco mi pancita, -¿verdad bebé?- y cuando dijo eso se movió dentro de mí

-¿Lo sentiste?- pregunté

-Sí- dijo besando el lugar donde golpeó

-Nuestra relación no fué como muchas otras- empezó a decir mientras se acostaba junto a mí, -pero no me arrepiento de nada- dijo mirándome a los ojos-

-Yo tampoco- y nos besamos

...

3 meses después

-Me aburro- dije mientras servía el desayuno, me habían dado el descanso para lo del parto, pero no me acostumbraba a estar en casa todo el día

-No te puedes arriesgar a que en pleno trabajo entres en labor de parto-

-¿Qué e labo de pato?- preguntó Maya

-Es cuando nazca tu hermanito- explicó su papá mientras yo me paraba para dejar la sartén en la estufa

-Auch- me quejé

-¿Qué pasa?- dijo Alessandro parándose de golpe junto a mí

-Fué solo un pequeño dolor estoy bien- dije acariciando mi vientre, -auch- volví a quejarme mientras sentía algo líquido correr por mis piernas

-Mami, tenes agua- dijo Maya señalando el piso

-¡Rompiste fuente!- gritó Alessandro, -el teléfono, el telefono- dijo mientras buscaba en sus bolsillos, -Gina, no Lili, o las dos- dijo buscando en si directorio

ALESSANDRO    P.O.V.

Marqué a Gina primero, sonó tres veces y contestó, -bebé, parto, fuente- dije desesperado sin encontrar las palabras adecuadas

-¿Bebé, parto?- preguntó Gina

-¡Nacimiento!- gritó Susan, mientras tomaba mi mano y la apretaba con fuerza

-Nacimiento bebé, voy para allá- dijo Gina y colgó

...

-Ya se tardaron- dije parándome

-Tranquilo, ya vendrá el doctor- dijo mi mamá

-Familiares de la señora Susan Zuarez- llamó el doctor

-Soy el padre, digo el esposo-

-Felicidades señor, es un niño y está completamente sano-

-¿Puedo pasar a verlos?-

-Claro-

Entré a la habitación y ví a mi esposa con el nuevo miembro de la familia en brazos

-Mira quien es, mira- le susurró al bebé cuando me acerqué a ellos

-Hola bebé, hola- como si reaccionara mi voz empezó a mover sus manitas

-Ya te conoce- dijo Susan sonriendo

-Parece que sí- dije besando su frente

Después de unas semanas, los cuatro volvimos a casa, Maya había estado un tiempo con Gina, en lo que su mamá salía del hospital

-Bien, acuestate y duerme- dije acomodandole la cama a mi esposa

-¿Y el bebé?- preguntó preocupada

-Tranquila, ya lo trae tu mamá- y como si la hubiera invocado entró a la habitación

-Hace años que no cargaba un bebé- dijo depositandolo cuidadosamente en la cama

-Gracias mamá- le dijo Susan

-Descansen- dijo despidiendose

-Tardaron mucho con los trámites- dije mientras me cambiaba

-Si, se nos hizo de noche, ¿qué hora es?- preguntó

-Las 9, trata de dormir- besé su frente y entré al baño

-¿Mami?- escuché la voz de Maya y me asomé

-¿Qué pasa?- preguntó su mamá

-Puedo domí co utede-

-Ven- dijo su mamá abriendo le espacio, -cuidado con tu hermanito- dijo mientras lo acomodaba junto a ella, -¿ves que pequeño?- le preguntó y la niña asintió cerrando los ojos, -duerman mis bebés- dijo besando la frente de cada uno

Era un hombre feliz, con una familia hermosa, una esposa bellisima y mis hermosos hijos...

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Holis, que tal, les gustó?

Quiero confesarles que esta historia no resulto como yo esperaba, el inicio se me hace poco interesante, pero creo haber mejorado el desenlace; gracias por sus votos

Espero leerlos en mis otras historias, pasen por mi perfil por si se interesan por alguna otra

Los quiero mucho, Cuidense /.\ Saludos