Capítulo 6
Denki desordenó aún más su cuarto en busca de un atuendo perfecto.
Después de mucha deliberación se decidió por una sencilla camiseta blanca acompañada de una chaqueta de cuero, unos jeans negros con algunas roturas y se puso unos tenis blancos.
Cuando salió de su cuarto Mei lo esperaba con una sonrisa y una caja en sus brazos.
—Son cosas del estúpido de mi ex que son demasiado lindas como para tirar. -Sacó un brazalete negro y un choker del mismo color. —Te advierto que si me los rechazas sufrirás. -Denki aceptó algo temeroso las joyas.
La rubia sonrió alegremente para luego golpear la puerta de su propia habitación.
—¿Ya estás listo? -Kaminari enarcó una ceja y la chica se rió. —Creo que no tendré otra oportunidad para usar las cosas de ese bastardo en algo bueno, así que le regalé algunas cositas a Shinsou.
La puerta se abrió con lentitud y Shinsou salió con calma.
Denki tuvo que aguantar su respiración.
Se había quitado la sudadera y usaba una camisa blanca con algunas franjas verdes en el pecho, se había puesto una camisa de jean de un azul oscuro y se la había remangado hasta los codos.
Mientras Kaminari era incapaz de hablar su hermana le puso a Shinsou un reloj y le había entregado un anillo plateado.
—Yo no puedo aceptar todo ésto... -Le dijo mientras evitaba mirarlos y se sonrojaba levemente.
Mei sonrió enternecida.
—Míralo como una paga por enseñarle a mi hermano... Mira que hay que aceptar semejante reto... En ese caso te estoy pagando poco... -Denki estaba por reclamarle cuando su hermana tomó su mano izquierda y deslizó en su dedo anular un anillo a juego con el de Shinsou.
Por su sonrisa el chico supo que lo hizo adrede.
Si Hitoshi lo notó, no pareció molestarle.
Naomi salió vestida con una minifalda roja y una camisa que ató sobre su vientre para mostrar más piel acompañada con un ligero maquillaje.
Mei tapó su boca y su hermana enarcó una ceja.
—Si vas a decirme que estoy demasiado expuesta ya te voy informando... -Mei agitó su mano y la hizo callar.
—Lo que te iba a decir es que tu delineado está desigual, vayamos a arreglarlo... -Las chicas se metieron en el cuarto de la pelinegra y dejaron solos a los dos muchachos.
Denki miró el suelo con nerviosismo, respiró hondo y se dignó a mirar a los ojos del pelimorado.
—Parece que voy a tener que cuidar que nadie te aparte de mi. -Le dijo con una sonrisa y dió un paso hacia él. —Te ves aún más guapo de lo normal. -Le susurró con una sonrisa coqueta.
Shinsou tragó saliva y puso una mano en su boca mientras su rostro comenzaba a calentarse.
—Tú... También te ves bien... -Susurró mientras evitaba mirarlo.
Denki abrió los ojos con sorpresa y luego sonrió alegremente.
La puerta de la habitación se abrió, Naomi salía con una guitarra en su espalda y Mei sostenía su celular y miraba atenta la pantalla.
—Tal parece que mamá pidió un taxi y ya está esperando, apúrense para bajar niños. -Les dijo mientras los empujaba suavemente hacia las escaleras.
Cuando llegaron a la puerta Hikari los saludó y Mei puso una mano en el hombro de Shinsou.
—Ya intercambiamos números, avísame si pasa algo, cuida que Rayito no beba mucho. -Denki se cruzó de brazos.
—¿Por qué tú tienes su número y yo no? -Preguntó tristemente.
La rubia soltó una carcajada.
—Porque yo soy más lista que tú, vamos, váyanse el taxista no esperará mucho. -Los tres salieron con prisa y subieron al auto.
Shinsou quedó entre medio de los hermanos, que ya se encontraban discutiendo.
—Deja de tocar el brazo de Shinsou o voy a golpear tu feo rostro. -Le dijo Denki mientras tomaba al pelimorado del brazo y lo atraía hacia él.
Naomi sonrió divertida.
—No seas mezquino Rayito, comparte un poco al guapo chico. -La chica también tomó a Shinsou del brazo y así empezaron a discutir.
Para suerte de Hitoshi la casa de Sero no quedaba tan lejos, por lo que llegaron en unos minutos, el pelimorado salió con rapidez del auto y suspiró aliviado.
La música ya se encontraba a todo volumen y algunas personas se encontraban en el patio, charlando y bebiendo alguna bebida alcohólica.
Muchas personas se detuvieron para observar a Shinsou y bastantes le dedicaron una sonrisa que el chico pareció no notar.
Naomi vió la situación y soltó una carcajada.
—Parece que ahora tendrás competencia real hermanito... Espero haberte entrenado bien. -Le dijo mientras se dirigía a sus compañeros de banda y golpeaba en la cabeza al baterista que miraba atento a Hitoshi.
Denki suspiró y corrió para dar alcance al pelimorado y entrelazar sus brazos.
Shinsou enarcó una ceja pero no se apartó.
Mina salió de la mano de Sero y les sonrió.
—¡Hasta que llegas Kami! -Le dijo la chica con una sonrisa la cual se ensanchó al ver que estaba del brazo con el pelimorado. —¡Hola Shinsou! Kirishima y Bakugo vendrán en media hora, tal parece que el pobre Kiri tiene problemas con el gruñón.
La pareja los condujo por la casa hacia unos sillones que estaban en un rincón de una enorme sala donde se había establecido una improvisada pista.
Sero tomó unas cervezas y se las ofreció, Shinsou se negó y Denki aceptó gustoso las dos.
El celular de Hitoshi sonó y éste se dirigió a la salida mientras Denki iba a pedirle al encargado de la música que pusiera una canción que le gustaba.
—¡Hitoshi, sé que dijimos que estaríamos ahí antes que tú pero hubo un imprevisto! -Dijo Midoriya. —Había olvidado algo así que terminé yendo en el auto de Todoroki... ¿Tsuyu, Iida y Uraraka ya llegaron? Nosotros estamos cerca.
—¿Así que estás con Todoroki? -Le preguntó con una sonrisa Shinsou. —Y no he visto a los demás, creo que aún no han llegado.
Un auto de alta gama se detuvo frente a la casa de Sero y del asiento de conductor bajó Todoroki.
Midoriya bajó con torpeza del lado del acompañante y sonrió a su amigo.
—¡Llegamos Hitoshi! -Dijo mientras colgaba el teléfono.
Cuando los dos chicos se acercaron al pelimorado otro auto aparcó y de él bajó el resto del grupo de Midoriya.
—¡Llegamos listos para festejar! -Dijo Uraraka mientras corría alegremente hacia ellos.
Para llevar unos tacones la chica era bastante rápida.
Midoriya se fijó en la vestimenta de su amigo y abrió la boca.
—Hitoshi... Esa ropa... -Le dijo mientras llevaba una mano a su boca.
Uraraka rió con emoción.
—¡Estás muy guapo Shinsou, de seguro que hoy romperás muchos corazones! -El chico no fue capaz de contestar porque la puerta de entrada se abrió tras ellos.
—¡Shinsou te dije que no debíamos alejarnos! -Exclamó Denki mientras se acercaba a él y volvía a entrelazar sus brazos. —¡Hola!
Los ojos de Midoriya se posaron en los anillos a juego que traían los chicos y sonrió.
El grupo entró a la casa y Denki los guió hasta el patio trasero, donde se había montado un improvisado escenario y la banda de Naomi se encontraba afinando los instrumentos, al ver llegar a los chicos sonrió.
—¡Vinieron a verme! -Les dijo alegremente. —Shinsou, cuando me escuches cantar te sorprenderás y entenderás porque yo valgo más que Rayito. -Le dijo mientras le guiñaba un ojo.
Kaminari no supo si quejarse primero porque lo llamó por su apodo o por el hecho de que le había mentido cuando dijo que ya no lo molestaría, pero no tuvo tiempo para ninguno de los dos, porque su hermana ya estaba por cantar.
El grupo de Naomi se llamaba AngelZ y tenían canciones propias, escritas por la chica.
Naomi no mentía cuando le dijo a Shinsou que su canto lo sorprendería, la chica tenía una voz asombrosa.
Denki podía pelear con su hermana en todo momento, pero durante todo el momento en que la chica estuvo en el escenario gritaba como un fan enloquecido y "Accidentalmente" empujaba a aquellos chicos que intentaban tocar las piernas de Naomi o mirar debajo de su falda.
La banda tocó unas cuantas canciones hasta que todos quedaron empapados en sudor y la chica con la garganta seca, por lo que dieron por finalizado el concierto y bajaron a disfrutar de la fiesta.
Denki aplaudió divertido y tomó la mano de Shinsou.
—Volvamos a adentro, me dijeron que después del concierto pondrían la canción que quería. -El rubio los guió nuevamente al interior de la casa.
La noche transcurría con tranquilidad, Denki se había perdido en la pista de baile junto con Uraraka, Mina y Sero.
—¡Ya llegó el alma de la fiesta! -Gritó alguien en la entrada.
Todo se giraron y se encontraron con Bakugo y Kirishima, éste último alzaba sus brazos y le arrebatada la botella de vodka a uno de los chicos ebrios que pasaban.
—¡Sigamos con la diversión! -Dijo mientras bebía sin escrúpulo gran parte de la botella.
Bakugo le gritó algo y le arrebató la botella, pero ya era tarde, Kirishima parecía aún más contento y se sumó al grupo de Denki, que estaban igual o peor.
Midoriya soltó una exclamación y tomó los brazos de Shinsou y Todoroki.
—¿Esa de allá no es Tsuyu?¡Se está besando con Tokoyami! -Todos se giraron y, efectivamente, la peliverde se encontraba ocupada. —Ésto es material de primera. -Dijo el pecoso mientras sacaba el celular y tomaba un par de fotos.
Midoriya tenía una afición por tomar fotos de los momentos más bochornosos de su grupo de amigos para luego chantajearlos, el chico podría parecer muy tierno y amable pero en realidad era todo un demonio.
Uraraka se acercó torpemente hacia ellos.
—Deeeekuuuuu, te quiero pedir un favorsh, Iida dijo que me llevará a casa, probablemente te pida q-que nos acompañesss, por favorr rechazalo, quiero estar a solas con él. -Dijo mientras arrastraba sus palabras y reía tontamente.
Shinsou y Todoroki fruncieron el ceño al mismo tiempo.
—Izuku... -Dijo el pelimorado pero Midoriya le dedicó una sonrisa triste.
—Por supuesto que te ayudaré Uraraka.
Al rato los dos adolescentes se fueron antes de que se cerrara la puerta pudieron notar como la chica tomaba la mano del de gafas.
Midoriya tragó saliva y, sin pensar, tomó un vaso de la mesa que estaba frente a ellos y se la bebió de un trago.
Un chico ebrio apareció junto a ellos y frunció el ceño.
—¡¿Quién se tomó todo ese vaso de vodka?!¡Era para los retos! -No esperó a que le contestaran y se fue refunfuñando.
Todoroki miró alarmado al pecoso que soltó una carcajada.
—¡Era vodka! -Luego sus ojos se abrieron con horror. —¡Yo no tolero demasiado el alcohol! -Midoriya volvió a reír. —¡No importa, vayamos con el grupo de allá, parece que hacen algo interesante!
El peliverde tomó de los brazos a sus acompañantes y los llevó hasta un grupo que estaba sentado en unos sillones que se encontraban formando un pequeño círculo, dándole intimidad al lugar.
Mina y Sero se encontraban abrazados en un sillón individual mientras reían de como Kirishima jugaba con el cabello de Bakugo y éste soltaba groserías y trataba de apartarlo.
Acostado sobre el sillón de tres cuerpos estaba Denki, que apenas vió a Shinsou se levantó.
—¡Te dije que no debíamos apartarnos! -Hizo un pequeño puchero. —¡Eres cruel Shinsou!¡Ahora como castigo siéntate aquí! -Lo tomó bruscamente del brazo y lo sentó a su lado.
El rubio sonrió y pegó lo máximo posible sus cuerpos y terminó apoyando su cabeza en el hombro de Shinsou.
El pelimorado tragó saliva ante el contacto excesivo.
—¡Que te sientes Todoroki! -Gritó un ya ebrio Midoriya mientras le daba un sorbo a una lata de cerveza (Dios sabrá dónde la consiguió) y empujaba al bicolor al lado de Denki. —¡Y yo me siento aquí! -Exclamó mientras con total confianza se sentaba en las piernas de un sorprendido Todoroki.
Shinsou reprimió una carcajada y sacó su celular preparado para sacar muchas fotos.
—Oye... Ayúdame. -Suplicó el de ojos heterocromaticos.
Shinsou negó divertido.
—Lo malo de ser su amigo de la infancia es que Izuku tiene miles de fotos bochornosas mías. -Denki soltó una exclamación y miró suplicante a Midoriya que jugaba con los cabellos de Todoroki, mezclando los dos colores.
—¡Quiero una de esas fotos Midoriya! -El pecoso rió sin razón alguna.
Mina soltó otra carcajada.
—No sabía que fueras tan atrevido Midoriya. -Izuku soltó un suspiro y le pasó la lata a Denki que la aceptó gustoso.
—Soy un chico con el corazón roto Mina... Hay muchas cosas que no sabes de mi. -Kirishima chasqueó la lengua y se apartó de Bakugo.
—Si necesitas ahogar penas... Lo mejor es el vodka, termina ésta botella por mi. -El peliverde agarró la botella que estaba casi vacía.
Bakugo protestaba diciéndole al pelirrojo que dejara de emborracharse y de emborrachar a los demás.
—Midoriya no lo hagas. -Le dijo con voz dura Todoroki.
El pecoso frunció el ceño.
—¡Tú eres el conductor designado Shocchan, así que yo beberé por los dos! -La cara del chico se volvió tan roja como la mitad de su cabello.
Shinsou rió con soltura.
—¡Sí Midoriya llama Shocchan a Todoroki yo quiero llamarte Toshi! -Exclamó Denki, su queja no tenía lógica alguna.
Mina y Sero comenzaron a reír.
—¡Blasty, Toshi y Shocchan, sus chicos están muy ebrios, deben cuidarlos por nosotros! -Le dijo Mina mientras se levantaba y llevaba a su novio escaleras arriba. —¡Nos vemos mañana luego de la resaca!
—Oye Midoriya. -Llamó Kirishima. —¿No que Blasty finge ser malo pero por dentro es un osito?
En circunstancias normales, Midoriya lo hubiese negado para evitar la ira de Bakugo pero bajo los efectos del alcohol soltó una carcajada.
—¡Es verdad que Kacchan es amable aunque al principio no lo parezca!
Bakugo resopló.
—¡Ya cállense los dos maldita sea!¡Les perdono la vida porque están ebrios y no saben lo que hacen! -Midoriya, más valiente que nunca palmeó la cabeza del rubio.
—¡Kacchan, la borrachera nos quita la vergüenza y nos permite hacer cosas que antes no hubiéramos hecho!¡Como ésto! -Acarició con suavidad las mejillas de Todoroki y luego le plantó un sonoro beso en ésta.
Kirishima escupió la bebida que estaba bebiendo.
—¿Ya llegó la hora de los besos?¡Yo quiero un beso! -Exigió el pelirrojo.
Una mano ajena le arrebató la bebida a Kirishima.
—¡Yo también quiero uno! -Frente a ellos estaba un chico de pelo plateado y sonrisa divertida, a su lado una chica pelinaranja sonreía con amabilidad.
Kirishima se levantó con rapidez.
—¡Tetsutetsu, bro, no sabía que andabas por aquí! -Los dos muchachos se fundieron en un abrazo.
Un rubio los separó bruscamente y se acercó a Shinsou.
—¡Al fin te encuentro! -Le dijo, como si se conocieran de toda la vida.
Hitoshi frunció el ceño y Denki soltó un bufido.
—¿Qué haces aquí Monoma? Perturbas mi tranquilidad. -Le dijo Kaminari con brusquedad.
El tal Monoma soltó un risa cínica.
—Ya me cansé de verte todo el tiempo junto a Shinsou. -Se giró hacia el pelimorado. —Cariño, deberías de saber que hay mejores partidos que... Ésta cosa de aquí. -Dijo mientras apuntaba despectivamente hacia Denki.
—¿Partidos?¿De qué hablas? -Pregunto confundido el chico. —No me llames cariño.
El rubio frunció el ceño hacia Kaminari.
—¿No se lo dijiste? -Monoma se encogió de hombros. —Bueno, es lógico, temías que viera las amplias opciones. -No dejó que el chico le contestase y se giró hacia Shinsou. —¿Si sabes que le gustas a muchos chicos y chicas de la escuela no? Incluyéndome, obvio.
Denki bufó.
—Sí sí, lo que sea, si ya terminaste de quedar como un necesitado, ¿Te puedes ir? Me molestas. -Hitoshi puso una mano en su nuca y los miraba confundido.
Kirishima soltó una carcajada.
—¿Así que es verdad? -Preguntó el pelirrojo a nadie en específico. —Cada vez que se ven se pelean por Shinsou, es increíble. -Luego se giró hacia Tetsutetsu. —¿Es tu amigo?
El chico de cabellos grises sonrió de lado.
—Así es, aunque Monoma no es tan perverso siempre, bueno... Tal vez sólo es un poco menos, sólo se calma cuando... -Una puño golpeó fuertemente la cabeza de Monoma.
La dueña de aquel puño era la chica pelinaranja.
—Ya deja de molestar, estás demasiado ebrio. -La chica les sonrió. —Disculpen a éste idiota. -El rubio quiso replicar pero la chica tapaba fuertemente su boca.
Midoriya inclinó levemente la cabeza.
—¿Eres de la clase B verdad? -La joven se fijó en el peliverde y le dedicó una sonrisa.
—Así es, mi nombre es Kendo Itsuka, es un placer conocerlos. -Midoriya le devolvió la sonrisa, Kendo le parecía agradable.
Tetsutetsu observó fijamente a Katsuki.
—Kirishima. -Llamó. —¿Él es...?
El pelirrojo pasó un brazo por los hombros del de ojos rubí y lo atrajo hacia él.
—¡Él es Blasty, digo, Bakugo! -Le dijo sonriente.
Tetsutetsu había oído hablar de Blasty, el vecino de Kirishima, el chico que le gustaba, pero jamás imaginó que el tan famoso vecino del pelirrojo fuera Bakugo Katsuki, el gruñón de la clase A.
—Oh... No pensé que él fuera capaz de tener amigos. -Dijo con cierta malicia.
Todos dejaron sus conversaciones y miraron sorprendidos al chico, incluso Monoma se veía sorprendido.
Bakugo frunció su ceño hacia el chico y se disponía a soltar una sarta de insultos pero se vió interrumpido por la carcajada de Kirishima.
—¿Qué clase de cosas dices Tetsubro? Blasty es muy amable, sólo que pocos son lo suficientemente listos para notarlo, incluso ahora me está ayudando, verás, por una semana él... -Bakugo reaccionó con rapidez y puso una mano sobre la boca del chico y se acercó para susurrarle algo al oído que, por la música, los demás no alcanzaron a oír.
Kirishima asintió repetidas veces y Bakugo le sacó la mano asqueado.
—¿Me acabas de lamer la maldita mano? -El pelirrojo soltó una carcajada. —¡Es todo, ya me harté! -Se levantó con brusquedad y tomó el brazo del chico. —¡Nos vamos cabellos de mierda! -Y comenzó a arrastrarlo a la salida.
Kaminari bostezó y reposó su cabeza sobre el hombro de Shinsou bajo la atenta mirada de Monoma.
El chico de ojos dorados sonrió.
—Si ya no tienes nada que decir vete a ladrar a otro lado, perra. -Si Kendo no lo hubiese estado sosteniendo Monoma se habría lanzado sobre Denki.
Shinsou se apartó del rubio y lo miró con el ceño fruncido.
—¿Hacía falta? -Denki hizo un pequeño puchero que no pudo mantener por mucho tiempo ya que le fue inevitable sonreír mientras veía como Kendo llevaba a rastras a un furioso rubio y los seguía de cerca Tetsutetsu, cabizbajo.
Kaminari iba hablar pero la voz de Midoriya lo interrumpió.
—Creo que voy a vomitar... -Dijo mientras se levantaba con rapidez y corría al patio donde... Sí, efectivamente devolvió toda la comida que había ingerido ese día.
Hitoshi y Todoroki reaccionaron al mismo tiempo, levantándose y acercándose preocupados al pecoso.
—Izuku, creo que ya es hora de que nos vayamos. -Le dijo mientras se cruzaba de brazos.
—Yo los llevo. -Agregó Todoroki.
Kaminari no pudo evitar sentirse triste y sacó su celular, para decirle a su hermana que ellos también debían irse cuando notó los mensajes que le había dejado.
Nao
Rayitooooo
Me voy antes pq... Alguien muy lindo se cruzó por ahí ;)
Vuelve sólo :D
Kaminari tocó sus bolsillos y soltó un quejido.
—¡Te llevaste mi dinero desgraciada! -El rubio no había notado que Shinsou se le acercó hasta que lo tuvo a tan sólo unos centímetros de su rostro, provocando que toda la cara del rubio comenzara a asemejarse con un tomate. —¿P-por qué estás tan cerca?
Hitoshi ladeó la cabeza, sin entender el por qué del sonrojo del de ojos dorados.
—¿Pasó algo malo? -Denki suspiró pesadamente.
—Naomi se fue con alguien y me dejó tirado y sin dinero, podría volver caminando pero... Sé que mamá se enojará si vuelvo sólo. -Subió sus piernas en el sofá y apoyó su frente sobre sus rodillas. —Supongo que me quedaré aquí, esperando a que Sero y Mina se dignen a bajar.
Shinsou no sabía exactamente por qué, pero no pudo evitar decir:
—Ven a mi casa. -La cabeza rubia se levantó con rapidez. —Puedes quedarte con nosotros, de todas formas Eri no está y su habitación está desocupada.
Kaminari no pudo reprimir su sonrisa.
—Gracias Shinsou. -El pelimorado simplemente asintió con la cabeza y miró a Todoroki que había pasado el brazo de Midoriya sobre sus hombros y lo tomaba de la cintura para ayudarlo a caminar.
—Y-yo p-puedo caminar sólo... -Murmuró el peliverde mientras se sonrojaba.
Shinsou sonrió al ver que el efecto del alcohol comenzaba a pasarse y su vergüenza regresaba.
Los cuatro se dirigieron al auto del bicolor, Izuku rápidamente tomó el lugar del copiloto por lo que Denki y Hitoshi tuvieron que ir en los asientos traseros.
Viajaban en silencio, el suave ruido del motor hizo que tanto Midoriya como Kaminari comenzaran a dormitar, el primero apoyado en la ventanilla y el segundo sobre el hombro de Shinsou.
A Hitoshi nunca le gustó el contacto físico excesivo pero Denki había ignorado tanto su espacio personal que ya comenzaba a acostumbrarse al calor que desprendía el cuerpo del de ojos dorados.
Tanto Shinsou como Todoroki adoraban el silencio por lo que el trayecto fue de lo más tranquilo, únicamente hablaron cuando el pelimorado le indicaba que ruta tomar al de ojos heterocromáticos.
Cuando llegaron a destino Todoroki bostezó y frotó su ojo derecho.
Tal vez el sueño había sacado a relucir el lado más amable de Shinsou ya que se encontró diciendo:
—Ya es muy tarde, si quieres puedes quedarte con nosotros. -Todoroki lo observó por el espejo retrovisor y asintió con lentitud.
Los dos se giraron para despertar al chico a su lado.
Y así fue como los cuatro se encontraban somnolientos en la entrada de la casa de Shinsou.
SORPRESAAAA
Un cap de regalo porque... EL. FIC ESTÁ #1 EN SHINKAMI
AAAA LLORO MUCHO BASTAAAAA
GRACIAS, GRACIAS LES AMOOOO
Bueno bsta
Acá otro cap, la famosa fiesta omg
Ahora los cuatro van a la casa de Shinsou ;)
¿Les va gustando la historia?
Estaba pensando que cuando la termine puedo hacer las historias del Tododeku y Bakushima que están sucediendo simultáneamente acá mmm pienso
Bueno, me tengo que ir para seguir escribiendo ésta historia y la del SasuNaru.
Lxs ama, Darkness
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top