Ꮺ ! 2O: pancita.
Tres meses habían pasado y el embarazo de Taehyung iba bastante bien, según las propias palabras del doctor, el comportamiento antes agresivo y arisco del tigrecito ahora había sido reemplazado por uno más cálido y cariñoso, se pegaba a Jungkook cada vez que podía y no se alejaba hasta obtener algunos mimos y abrazos, eso sí, aún no dejaba que nadie tocara su vientre, era muy protector con esa área de su cuerpo.
Un cambio significativo seria el tamaño de su estómago y el aumento de su consumo de comida, antes comía poco gracias a las náuseas, ahora solo comía sin parar, su comida favorita eran los pastelitos de avena que el conejo solía comprarle cada tarde y que ahora consumía al menos tres veces al día.
Jungkook estaba un poco preocupado con respecto a esto por lo que consultó con el doctor, este le dijo que era perfectamente normal y que intentara cumplir sus caprichos, pero le avisó que no podía consumir demasiada sal o azúcar, el azabache había optado por hacer estos pastelitos él mismo y no agregarle mucha azúcar, en lugar de eso usó un poco de miel para endulzarlas.
Su plan había tenido éxito y a su bebé le habían gustado mucho por lo que dejó de comprarlos y siempre había una gran cantidad de estos para que el tigrecito pudiera comerlos cuando quisiera. Taehyung al ver esto no pudo evitar felicitar a su conejo.
En estos tres meses ambos habían discutido el nombre de la criatura, aunque no estaban claros cuantos serían ya que los tigres eran mayoritariamente fértiles. De hecho, Taehyung había preguntado por qué podía dar a luz siendo hombre y el doctor le pudo contestar luego de una breve duda.
— Una cierta cantidad de tigres machos nacen con esta característica, ya sea por la alta fertilidad de sus padres o por uno de sus antepasados, no está claro pero es posible, mi hipótesis es que desde el comienzo estas personas existían pero eran pocas, hay constancia de otras especies herbívoras que cuando son machos se puede dar esta capacidad. —contestó con lentitud para que entendieran sus palabras—, no son muchos pero si los hay, traté a uno en el pasado, gracias a eso sé lo que puede ayudarte. —agregó.
Ambos entendieron y aceptaron esas razones, probablemente nunca sabrían por qué exactamente existían esta clase de animales pero estaba bien, tampoco les importaba mucho, eran felices después de todo, adoraban poder formar su propia familia. El hombre también agregó que estos casos solo se daban en herbívoros por lo que era poco probable que existiera algún carnívoro macho con esta capacidad.
Antes de irse el castaño recordó algo y decidió cuestionárselo al médico también, para salir de dudas. Quería saber por qué su trasero mojaba cuando estaba muy excitado.
— Tal vez sea por tu fertilidad, tu cuerpo se prepara para aceptar la semilla en tu interior y producir un hijo, al mismo tiempo hace más fácil la penetración, es más placentera y mucho menos dolorosa. —La voz del doctor era dudosa, tal vez no estaba muy seguro, Jungkook se sorprendió, no sabía de esto, puede que ésta fuera la razón por la que siempre el interior de su bebé era tan mojado. Su rostro seguía siendo serio, pero sus pensamientos habían viajado hacia otro plano diferente.
— ¿Esto siempre sucederá? —El hombre con parte del cabello canoso, asintió un poco avergonzado.
— Lo más probable es que sí, ya que tu cuerpo es así. —Las orejitas del tigrecito se estremecieron al igual que su colita atigrada, hizo un puchero asintiendo, su mano acariciando su estómago hinchado.
— Gracias, doctor. —Hizo una ligera reverencia antes de tomar a su conejo del brazo e irse, el azabache le dio una reverencia al hombre antes de correr detrás de su lindo tigre.
Ambos caminaron tomados de la mano por un pequeño sendero para salir del conjunto de casas viejas del lugar, aquí vivía mayormente la gente mayor y algunos doctores herbarios, cosa muy poco útil para un embarazo. Taehyung detalló el lugar por milésima vez antes de seguir avanzando, su oreja peluda tembló al sentir el cálido aliento de Jungkook chocar contra ella.
— No sabía que te pasaba eso amor, ya sé porque siempre es delicioso estar en tu interior, siempre tan húmedo. —El castaño se sonrojó con violencia, apretó el puño al escuchar la risa del azabache, frunció el ceño y le pegó un fuerte golpe al conejo en la nuca, Jungkook sintió dolor y emitió un quejido.
— ¡Animal! —exclamó ofendido ante las burlas maliciosas de su pareja, sus mejillas gorditas se encontraban rojas como tomates al igual que su cuello descubierto, sintió su corazón latir rápido en cuanto obscenas imágenes llenaron su mente. Jungkook bufó.
— Los dos somos animales, literal y metafóricamente. —aclaró. Taehyung gruñó enojado y su ceño se frunció.
Otro fuerte golpe se escuchó en las angostas calles seguido del sonido de una fuerte cachetada, junto a eso se escuchó un quejido y un gruñido.
— ¡Maldito vulgar! —gritó enojado antes de caminar solo por las calles, sus brazos cruzados y sus pasos fuertes y rápidos, alejándose del conejo.
Jungkook se sobó el cachete, aunque era mucho más fuerte que su bebé, si que le dolía un poco, al ver como el castañito se alejaba cada vez más, el azabache corrió hacia su amado e intentó convencerlo, también se disculpó por su indiscreción. Luego de un rato de ruegos, ambos se fueron en paz a casa.
ꕤ
Ya se encontraba anocheciendo y mientras Jungkook preparaba una cena simple y ligera, Taehyung se encontraba dándose un baño con menta, supuestamente el aroma y la planta en si ayudaban mucho al cuerpo, es por esto que el doctor les recomendó utilizarla.
El castaño suspiró gustoso por la temperatura idónea del agua, la misma brillaba a causa de la lámpara de aceite sobre el techo, el rico y refrescante aroma de la menta inundó sus fosas nasales, relajándolo por completo.
Taehyung lavó sus orejas y colita minuciosamente al igual que todo su cuerpo, sonrió feliz, tenía ganas de comer nuevamente esos deliciosos y fragantes pastelitos de avena.
El tigrecito pasó su mano por su vientre de tres meses, el mismo no era extremadamente grande pero si acorde a la fecha de embarazo. Frunció el ceño al sentir algo extraño en su pancita, sintió su nariz agriarse y sus ojos arder ante sus repentinas ganas de llorar, se levantó bruscamente del agua, salpicando el suelo en el proceso.
— No, no, no. —murmuró constantemente, su voz un poco ronca y quebrada por las lágrimas que ahora recorrían sus mejillas.
Jungkook sintió el llanto ruidoso de su tigrecito, se alertó enseguida pensando que había ocurrido algo malo con el cachorro, sus orejas se movieron intentando captar algún peligro, apagó la estufa antes de salir corriendo hacia el baño, su ceño se frunció.
— ¿Qué sucede? —exclamó alarmado. Taehyung sintió la llegada de su conejo e intentó ocultarse, pero pensó que tal vez él tenía una solución a su problema por lo que se volteó y su estómago abultado quedó al descubierto.
Jungkook no tuvo tiempo de admirar la desnudez de su amado antes de fijarse en la pancita hinchada de su bebé, su mano izquierda se paseaba por ella mientras su mano derecha intentaba secar las constantes lágrimas que brotaban de sus ojos estrellados.
— K-Koo... —El mencionado tomó una toalla y cubrió el cuerpecito de su tigrecito castaño, lo secó con rapidez y dio palmaditas en su espalda.
— ¿Qué sucede? —preguntó. Taehyung hizo un puchero que el azabache no pudo evitar besar con cariño.
— Mira mi estómago, es f-feo. —Su voz era baja y quebrada. Jungkook miró su vientre y notó pequeñas estrías en el lugar, sabía que probablemente pasaría esto gracias a que de manera ocasional veía a su castañito rascando el lugar.
Sin embargo, Jungkook no creía que fuera feo, de hecho le parecía hermoso, después de todo era evidencia de que su amante cargaba sus cachorros en su interior, cosa que le encantaba y encendía en igual medida, aunque lo segundo era irrelevante.
— No eres feo. —afirmó—. Eres hermoso, amor, el ser más hermoso que conozco, esas marcas son evidencia de nuestro amor y de que cargas con mis, no, nuestros cachorros en tu interior. —Sus labios besaron cada pequeña marca blanca en su estirada piel del vientre, sus ojos brillaban con amor y adoración, sus besos eran suaves y delicados, amorosos, parecía ser como un devoto religioso.
El castaño dudó, su colita tembló de emoción, pero él siguió dudando. Aún así, sorbió por la nariz y preguntó.
— ¿Lo dices en serio? —cuestionó con voz dudosa, finalmente había dejado de llorar, su nariz seguía roja pero eso solo le daba un aire tierno y lindo.
— Sí bebé, eres perfecto. —insistió. Su voz era cálida, muy tranquilizadora.
Taehyung dejó de dudar, sonrió con suavidad y asintió, abrazó el gran y fuerte cuerpo del mayor, su cuerpo humedeció la ropa del azabache, Jungkook correspondió el abrazo de su pequeño y olió su aroma ahora un poco lechoso.
— Entonces demuéstramelo. —Su voz era baja y seductora, bastante hipnótica para un hombre en abstinencia como Jeon Jungkook, que llevaba tres meses sin probar nada más allá de besos calientes y su fiel mano derecha.
Se relamió los labios con deseo, asintió lentamente, Taehyung fijó su vista en la gran cosa que chocaba contra su muslo y sonrió seductor. Se quitó la toalla y la dejó caer al suelo, exponiendo su blanco y delicado cuerpo desnudo.
Y entonces la cena se fue al demonio.
♡ ggukcotton | 2O24 ♡
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top