CAPÍTULO 25

-En multimedia: Victor y Mandy-

Estamos en medio de la pista de baile dando vueltas sin parar. Víctor es un buen bailarín, sabe cómo llevarme. Y a cada paso que doy, me estrecha cada vez más fuerte contra su cuerpo, haciendo que me suba la temperatura.

—¿Bailo bien?

—Ni te lo imaginas... — Víctor me mira desconcertado —¿Por qué lo preguntas?

—Me siento un pato. Tengo calor y eshtoy mareada dando tanta vuelta.

—Vamos a descansar —me lleva de la mano hasta una silla — ¿Te traigo una botella de agua?

—El whisky viejo mejor.

—¿Segura princesa?

—Por supuesto — le digo totalmente segura.

El whisky está haciendo maravillas en mí. Me siento súper bien, feliz y tranquila. Hace que me olvide de las preocupaciones y sobretodo de Coralina. Necesito más.

—Aquí tienes —se sienta a mi lado con dos copas de Whisky.

—Mira.... — anuncio cogiendo una de las copas — Tú también queres ehh...

— Es que tienes buen gusto princesa. —dice mientras me da un guiño.

Ambos alzamos las copas y brindamos en silencio antes de dar un sorbo a la copa.

—¿Te sientes mejor?

— Con esto... —le enseño la copa con una gran sonrisa antes de dar otro trago — musho mejor.

— No deberías beber tanto...

—¿ Acaso eres mi padre?

—No.

—Pues bebo lo que quiero.

—Vale —levanta las manos en son de paz con una pícara sonrisa.

—Oye, ¿Cómo es que me encontraste tú?

—Cuando vimos que tardabas mucho, Becca fue al baño y no te encontró. Enseguida fui a buscarte. — me coge de la mano —y voilá. Caíste a mis brazos.

—Como la odio...

—Tranquila. — se acerca a mi oído y me susurra — En un rato la vamos a desenmascarar.

Le sonrío mientras doy otro trago de mi bebida. Coralina no tarda ni cinco minutos en venir a incordiar.

—Víctor, querido —se acerca Carolina —¿bailamos?

—Vamos. —dice al mismo momento que me guiña el ojo. Cuando se levanta tras de Carolina se gira y me indica que los siga.

Me levanto, tambaleándome un poco, por saber qué es lo que van a hacer.

Víctor se gira para ver si le estoy siguiendo y me sonríe. Antes de que empiecen a bailar la guía al escenario mientras le dice algo al oído que la hace sonreír.

Desde el escenario Coralina me manda una sonrisa victoriosa y le respondo con el dedo medio de mi mano.

—Señoras y señores, tengo el placer de comunicarles de que Carolina Morales ya no será parte de nuestros socios. —un gran silencio se apodera de la sala. —Quiero contarles porqué y para ello necesito la ayuda de Mandy y Katia. Subid.

Katia me coge del brazo y ambas nos dirigimos al escenario.

—Como la mayoría sabréis —continua Víctor cogiendo del brazo a Coralina, que tenía intención de irse —íbamos a ser socios para crear un nuevo complejo hotelero en la ciudad, pero la mujer aquí presente, tan solo quería la fama del hotel y a mí como novio.A

—¡Mentira! —se hace la inocente Carolina — ¿¡Como me haces esto Víctor!?

—Has humillado a mis amigas...

— ¡Ellas me tiraron comida encima! —se defiende Carolina.

—¡Serás descarada! —interviene Katia —tu misma nos dijiste a que Víctor era tuyo y que tenias una oferta que ofrecer a mi amiga, que se apartara de él, ya que debía fijarse en ti para poder ser la futura directora ejecutiva.

—Además —continúa Víctor — hoy mismo acaba de dejar encerrada a mi novia Mandy en una habitación, para que no "molestara", y pudiera bailar conmigo.

Lo observo sorprendida al dirigirse a mí como su novia. Un gran murmullo recorre la sala.

—Mandy — me grita Alex desde abajo—puedes denunciar lo ocurrido hoy.

Asiento como puedo con la cabeza.

—Como podréis observar, gente así no la queremos en nuestro equipo. Por lo tanto desde este mismo momento, y en consenso con mis hermanos, queda anulado nuestro contrato.

El público aplaude y vitorea a Víctor por su decisión.

Carolina baja enfadada del escenario y se va, seguida de su amiga. Víctor se acerca y baja por delante de mí las escaleras, con tan mala suerte de que tropiezo perdiendo el equilibrio. Víctor consigue cogerme, antes de que toque el suelo.

—Te tengo mi princesa.

—¡Ups! —rio tontamente.

Me endereza muy cerca de su cuerpo y el alcohol que llevo encima hace que el escalofrío que recorre mi cuerpo se sienta más exagerado.

Estamos tan cerca que sé que me va a besar. Es un beso lento y tierno donde nuestros labios se mueven al compás. Pongo mis manos en su cabeza cogiéndole del pelo, profundizando así el beso, muerdo su labio inferior. Él gime y baja la mano hasta la parte baja de mi cintura apretándome a su entrepierna.

—Ey pareja — canturrea Lucas cerca de nosotros — arriba tenéis habitaciones....

Víctor se separa de mí y me da un breve beso en la boca antes de reírnos.

—¿Vamos arriba? —digo envalentonada.

Wow, ¿eso ha salido de mi?

—Claro. — Víctor me observa fascinado. —Pero debería de invitarte yo.

—Adelante, pero acuérdate de la bebida para festejar —esta vez soy yo la que le guiña el ojo.

Víctor ríe y veo que se despide de Lucas desde la distancia en una especie de mensaje secreto entre hermanos que no puedo comprender.

—Cierra los ojos —me indica delante de la puerta de su apartamento.

—Pelo dame un trago — ambos vamos bebiendo whisky directamente desde la botella en el recorrido hasta su apartamento. —Vale, ya estoy.

Me enderezo y cierro los ojos, acto seguido siento como los tapa también con una de sus manos y con la otra me guía hasta el interior de la casa. Noto que ando lo suficiente como para cruzar un salón e ir a otra habitación, hasta que para y oigo abrir otra puerta.

—¡Sorpresa! —exclama quitando su mano de mis ojos.

Una gran habitación decorada con pétalos de rosas rojos desde el suelo a la cama me deja boquiabierta.

—¿Sabías que íbamos a llegal juntos hasta aquí?

—Sí, aunque la verdad pensaba que me iba a costar más convencerte.

—No te cleas —le digo convencida. —mis obleros van a comenzar a hacer obra en la cosina... y no podré vivir allí durante una semana. Pensaba venir al hotel una temporada... ¿Me alquilas eshta habitación?

—No me gusta hacer tratos estando tú tan ebria.

—Tranquilo, que eshtoy muy consciente. —le hago ojitos y él se ríe.

—¿Qué te parece si me lo firmas? —sonríe maliciosamente —No vaya a ser que luego me acuses de aprovecharme de ti...

—¡Perfecto!

Veo como Víctor abre un cajón del escritorio, saca un bolígrafo y escribe algo. Me lo tiende para que lo lea y lo firme.

—Alquiler de 10 días en esta habitación con todo incluido. Gratis, cortesía del Hotel Montero. —explica lo escrito en su papel, él ya ha firmado.

Es una habitación tan preciosa, grande, elegante y con su pequeño despacho que firmo sin tan siquiera leerlo.

Igual estoy firmando mi sentencia de muerte...

Bah, es Víctor, me fio de él.

—Aún no has visto el baño, te va a encantar —le miro sorprendida y salgo corriendo a verlo.

Tiene una gran bañera de hidromasaje donde entrarían hasta 3 o 4 personas. En ese momento entra Víctor con ambas copas con nuestro whisky viejo y las deja sobre la repisa del lavamanos.

—¡Oh dios! Es precioso.... — digo anonadada. —¿No selá la suite nupcial, no?

—No tranquila, es todo tuyo durante 10 días. Disfrútalo.

—¡Glacias! —le doy un gran abrazo y Víctor me gira sobre sí mismo. — ¿Estrenamos la bañera? Quielo ver tu gran paquete...

Víctor para y me deja en el suelo. Se acerca lentamente a mi boca cuando siento que estoy muy mareada y quiero devolver. No me da tiempo a reaccionar.

**************************

Hola Wattpanianos!!!

Espero os guste mi novela.♥

Gracias a todos los que me leéis.

Un beso enorme y disfrutad.

. • * '¨ '* • ♥ • STEFFY • ♥ • *' ¨' * •.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top