CAPÍTULO 18
-En multimedia Mandy de frente y Katia de espaldas -
15 de Mayo de 2015
—¿Qué hiciste qué? —Katia eleva la voz agudamente. Izan levanta la vista sorprendido e intentamos disimular, él sonríe.
—Chsssst ¡No chilles! —Estamos en un rincón de la barra del restaurante.
— ¿! Cómo que lo echaste de casa!? —me zarandea por los hombros —¡Estás loca!
—Pero bueno... Te estoy diciendo que me escuchó la mente.
—¡Una vez Mandy! —Katia no da crédito a mis palabras.
—¿Pero tú a favor de quien estás? ¿De él o mía?
—¿Yo? De los dos....
No sé porque le estoy contando todo esto, no me ayuda en nada....
Ahora que lo pienso en frío, soy una tonta. Bueno más que eso, soy una miedica. Actué así instintivamente y ahora me arrepiento.
—Haber — continúa Katia ante mi consternación — ¿Por qué desconfías tanto de Víctor? No crees que él también estará hasta las narices de ese don....
—Pues si....
—Es un don Mandy, siempre lo va a poseer. Será como un resfriado que siempre vuelve. No como un embarazo de un hijo, que solo lo pasas una temporada en toda tu vida y ya está.
—Hombre dicho así... la mala parezco yo... —hago un puchero que hace reír a Katia — Creo que debo una disculpa.
—La debes —me afirma rotundamente.
—¡Hemos estado a punto de hacerlo!
—Oh, menudo problema —ironiza Katia. —¡Es Víctor! Ambos os amáis todavía, tan solo había que veros la otra noche.
—Debe pensar que soy bipolar o algo así...— Suspiro exageradamente y con gran pesar.
Katia ríe con mi comentario, pero rápidamente se pone seria. Su mirada es de advertencia.
—No te gires. — susurra.
—¿Qué pasa? — murmuro —¿ Por qué susurramos?
—Acaba de entrar Víctor.
—¿Nos ha visto?
—Él no, pero su acompañante a tí, sí.
—¿Su acompañante? —balbuceo. Intento ver quién es, pero Katia impide que me gire.
—Espera, yo te aviso. — está pendiente de algo durante unos breves segundos.
—¿Es rubia, pechugona, anorexica, joven y con cara de amargada?
—Lo has clavado. Creo es esa. Ya puedes girarte.
Al otro lado del restaurante localizo a Víctor sentado de espaldas. Carolina observa de reojo y veo furia en su mirada.
—Es la zorra de "Coralina".
—¿Coralina?
—Bueno es así como yo la llamo. Víctor me contó que es una socia inversora del hotel que van a construir en la ciudad.
—Ah, ¿Os conocéis? Porque por sus miradas asesinas creo que te tiene manía...
— Yo también lo creo. La conocí antes de ayer. Víctor anuló su cita para ir conmigo...y ahora está con ella....
—¡No pienses mal!
—¿Segura que no me ha visto Víctor?
—Segurísima, no nos ha visto.
"¿Víctor?"
Me concentro en él. Espero me oiga y se gire.
"¿Víctor? "
Nada no se mueve.
"¿Víctor?"
—¿Qué haces? —pregunta Katia con incredulidad.
—Usar la telepatía. Estoy llamándolo con mi mente, pero no se inmuta.
Katia ahoga una risa como puede. Se tapa la cara con las manos intentando sofocar sus carcajadas.
—Llamándolo...dice...M...me... meo... — Las lágrimas empiezan a llenar su cara. — ¿te piensas que sois un teléfono inalámbrico o qué?
—¿Y si esta disimulando? ¿Y si se hace el despistado? Porque seguro me oye....
—¡Mandy! —exclama secando sus lágrimas — ¡No desvaríes! Te dijo que no.
"Te huelen los pies"
"Tienes la picha floja"
"!Mírate la bragueta que se te sale el pajarito! Pio pio pio"
Pfffffffff. Las ideas se me acaban, tengo que ser más bestia si quiero que se altere.
"La otra noche fuiste malísimo conmigo"
"No me calentaste nada"
"Besas super mal"
"Le cuelga un moco a Coralina. ¡Mira que ya se asoma!"
"Mírame Víctor estoy enseñando los pechos a todos. Wiiiiii"
—¿Pero qué haces? Bueno mejor dicho ¿Qué estás pensando ahora?
—Estoy insultándole y diciendo burradas para ver si se ríe.
—Estas como una cabra. —suelta una carcajada débil.
—No me hace caso. Y mira que le he dicho que su picha no funciona bien y que estoy con las tetas al aire... Y nada.
Katia vuelve a reprimir la risa para que no nos pillen.
—¿Te estás riendo de mi?
—Un poquito —haciéndome el típico gesto de pequeño con el pulgar e índice. —Pero definitivamente nos hemos ganado el odio de Coralina, se habrá creído que nos reíamos de ella. Seguro.
En ese momento Carolina se disculpa y se acerca a nosotras.
—Sígueme al baño.
—¿Porque? —Katia reprime una risotada, Carolina se detiene y se gira enfada.
—Víctor es mío, así que te interesa ver que te ofrezco.
—Yo creo que no me interesa. El otro día me prefirió a mí...
—Sí, tienes razón... Pero por la noche volvió a buscarme bastante tarde, se vé que a terminar lo que no pudiste acabar tu...—Se marcha con paso elegante al servicio.
— ¡Será hija de puta! — dice Katia asombrada —Tengo que hablar con Víctor...
—¡No! —la detengo — Por favor. Espera haber que me dice esta zorra.
Bajo del taburete y me dirijo al baño. Cambio mi chip interno por el de una zorra irónica. Al entrar está en el espejo pintándose los labios.
—Así que te gusta ser segundo plato...—deja de mirarse al espejo y se planta de cara a mí —Recogiendo las migajas que me sobran...Que poco mujer eres....
—Escúchame bien, pueblerina asquerosa...
—Ey ey ey —la interrumpo —yo soy de ciudad, estoy aquí de paso... como tú.
—Víctor es mío... Me acosté con él antes que tú... hace un mes ya....
Le aplaudo lentamente y sarcásticamente.
—¡Premio para la pechugona teñida de aquí delante!
—!Dios no te soporto!
—Es mutuo
—No te metas en mis planes...Voy a ser la futura directora ejecutiva de los hoteles montero. !Y tu no me lo vas a fastidiar!
—Vaya— deberían darme un Oscar por mi interpretación tan fría y sarcástica, nunca soy así — no sabía que Víctor era un trozo de filete que nos tenemos que rifar...
—Vas a ver cómo me va a elegir a mi... —parece recordar algo y me lo suelta con malicia — Veras como abrirá el baile de la fiesta del 75 aniversario del Hotel conmigo...
—Veremos a ver... —Me cruzo de brazos con indiferencia —Igual te sorprendes TÚ.
Carolina se ríe falsamente y se marcha del lugar, me ha cabreado increíblemente.
¡Pero que se cree! ¡Que Víctor es un trofeo!
Tan solo lo quiere para ganarse un buen puesto en la empresa...
—Cuenta, cuenta... —Katia está ansiosa — ¿Que ha pasado ahí dentro?
—Sólo lo quiere para tener más poder dentro la empresa, dice que bailará con ella en la fiesta. Y que ella ganará. Será suyo.
—¡Será ZORRA! — se altera — Víctor lo tiene que saber, que está jugando con él.
—Lo sé —la detengo. Pienso por unos segundos qué hacer. — Déjame hacerlo a mi manera
—¿Y qué has pensado? —dice recelosa.
—¿Me dejas hacer un pequeño espectáculo aquí? —pido inocentemente a Katia, ella abre los ojos sorprendida y maravillada.
— Por supuesto —contesta con una fascinada sonrisa. —y si necesitas una cómplice más, te ayudaré encantada en tu "show".
Chocamos los cinco mientras que a la vez susurramos "por el club de la muzzarella".
Mi yo interior se emociona dando gritos de alegría, vamos a jugar a ser malvadas.
—Esto es la guerra —afirmo mirando fijamente a Carolina que me devuelve la mirada a la vez que coge la mano de Víctor y éste le toca una mejilla.
Mi subconsciente me advierte de que ella se lo tiene merecido.
*****************************
Hola!!!
Mil Gracias a todos los que me leéis y me votais.
Agradezco de todo corazón vuestros votos y comentarios, me animan y me alegran muchísimo.
Un beso enorme y disfrutad.
. • * '¨ '* • ♥ • STEFFY • ♥ • *' ¨' * •.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top