Capítulo 1 : Las malas influencias
Kazumi :
Bien, ¿por qué empezar? Mi nombre completo es Kazumi Midori, aparento tener unos 19 a 20 años de edad pero ni yo misma sé cuantos años tengo. Han de ser alrededor de los 200 y algo apróximadamente. Vivo sola desde hace un buen tiempo ya que yo soy la "oveja negra" de la familia. Ser hija única no es fácil y más en una familia de shinigamis y pocos demonios. Mi genética me dió el don de ser los 2 así que no, no soy híbrida, sólo soy lo que quiera ser. Me explico, si en algún momento quisiera transformarme en demonio lo haría, si quisiera transformarme en shinigami lo haría, puedo ser las 2 cosas en su forma "pura" es decir, 100 % demonio o 100 % shinigami. El punto es que según mi familia soy una mala influencia porque soy un poco, digamos que "rebelde" así que me mudé y se acabó el problemilla o al menos disminuyó.
12 : 00 p.m.
Kazumi : que aburrimiento -cambiando los canales en la tele- Hey, ¿ésa no es la mansión Phantomhive? -sube el volumen-
En la tv:
Reportera : estamos en directo desde la mansión Phantomhive con el Conde Ciel quien ha sido víctima de la peor broma pesada posible, ¿algunas palabras, señor?
Ciel : -lleno de pegamento y plumas- Sí, si mi querida "amiga" Kazumi no viene será un problema para los "trabajos" de Inglaterra -sonríe falsamente-
Apaga la tv_
Kazumi : bien eso fue... ay, pero de que hablo -comienza a reír- eso me quedó espectacular -ríe más fuerte- eso quedará grabado en la historia -se seca una lágrima- ¿para qué me querrá ese enano? Meh, yo me quedo aquí -se duerme-
3 horas más tarde~
Kazumi :
Me levanté por un ruido extraño en la cocina pero... ¿qué es lo que huelo? ¡¡Café!! Rico café, voy por ti cariño~ Oh sí, no hay cosa que más ame que el café en la mañana, tarde o noche, whatever.
Sebastian : buenas tardes, joven -cerca de su rostro-
Kazumi : ¿y tu quién eres? -estirándose-
Sebastian : mi nombre es Sebastian Michaelis, mayordomo de la casa Phantomhive -se inclina-
Kazumi : ¿ése pitufito te envió a buscarme?
Sebastian : me temo que- señorita Midori, ¿qué hace?
Kazumi : escapar por la ventana -sonríe- good bye -salta-
Sebastian : lo que faltaba, otra loca y encima escapista -mira por la ventana- ¡¿quién demonios es ésa chica?!
Kazumi : -le saca la lengua- no soy wonder woman, sólo soy endemoniadamente buena en lo que hago -sonríe arrogante y empieza a correr-
Sebastian : esto no es algo normal que se vea todos los días -confundido salta por la ventana-
Luego de un rato~
Kazumi : bien, aquí no me va a encontrar- -con la respiración agitada-
Sebastian : joven Kazumi -le toca el hombro- por favor no corra más -cansado-
Kazumi : mijo, quiero correr pero no puedo -se sienta en el callejón- habla y rápido
Sebastian : la reina quiere que trabaje con el amo -serio-
Kazumi : ¿sabes? Me empiezas a caer mal -ladea la cabeza- yo no trabajo con inútiles -se levanta-
Sebastian : bocchan no es un inútil -serio-
Kazumi : por algo llené la mansión de pegamento, ¿no crees? -sonríe malvada-
Sebastian : se arrepentirá de eso -la esposa-
Kazumi : con un demonio... ¡suéltame ya! -forcejea-
Sebastian : sí, literalmente soy un demonio señorita -la lleva al auto- y no trate de tirarse del auto en movimiento -le abrocha el cinturón-
Kazumi : ni que fuera tan idiota -rueda los ojos-
Sebastian : lo que usted diga -ríe- bien -se monta en el auto y arranca-
Kazumi : -mirando por el cristal- ¿a dónde me llevas?
Sebastian : a la mansión, allí estará unos días hasta que llegue el día del juicio
Kazumi : ¡¿qué?! No, no, no y no, ¡¿para qué demonios quieren encarcelarme?!
Sebastian : señorita, ¿debo recordarle todas las bromas que le ha hecho a bocchan y a muchos otros? -mira por el retrovisor-
Kazumi : emm no, gracias -baja la cabeza-
Kazumi :
¡Este tipo agh! Entra en mi casa, me persigue, me esposa y !ahora me acusa de que le hago demasiadas bromas a Ciel! ¿Qué le pasa, qué le hice? Maldito demonio, me las pagarás aunque tenga que ir a prisión en el intento *molesta*
Sebastian : e¿n que piensa señorita?
Kazumi : en como matarte -sonríe-
Sebastian : wow, trás ser sincera también tierna -ríe-
Kazumi : ¿tierna yo? Muy gracioso Sebastian, muy gracioso -seria-
Sebastian :
¡Esta chica agh! Le pregunté que en que pensaba porque literalmente no sé, no puedo leer sus pensamiento y eso me molesta. ¿Quién rayos es esta chica? ¿Será algo sobrenatural que no haya captado aún? Que digo, claro que es algo sobrenatural porque sino su alma me despertaría el apetito. Confieso que en un principio iba a devorar su alma y hacer como que nada pasó pero al final bocchan tenía la razón, ella es diferente. ¡Agh, esto es confuso!
Sebastian : hemos llegado -aparca el auto-
Kazumi : bien, ya comenzaba a darme sueño -se frota un ojo-
Sebastian : -baja del auto y abre la puerta- ¿me permite señorita?
Kazumi : ¿te recuerdo que no tengo opción? -se deja cargar y la bajan-
Elizabeth : ¡Kazumi! -corre y la abraza-
Kazumi : ehh, ¿Elizabeth? -le devuelve el abrazo- ¿qué haces aquí?
Elizabeth : Cieluu me dijo que le has estado molestando, hermanita -hace un puchero-
Kazumi : oh vamos Lizzy, sabes que es divertido -ríe-
Elizabeth : pero no es divertido que te encarcelen -triste-
Kazumi : -le susurra- saldré de esta
Elizabeth : bien, Sebas, quitale las esposas por favor
Sebastian : claro, Lady Elizabeth -le quita las esposas-
Kazumi : al fin -estira las manos-
Elizabeth : por cierto Cieluu es mi prometido -sonríe-
Kazumi : oh si tú prometido... espera, ¡¿TU PROMETIDO?! -se desmaya-
Sebastian : -la atrapa- cielos, esta chica -suspira-
Elizabeth : creo que me pase un poco -mira preocupada a Kazumi-
Ciel : pienso lo mismo -caminando hacía ellos-
Elizabeth : C-i-e-l-u ♡ -corre a abrazarlo-
Ciel : hola, Lizzy -sonríe entre muelas-
Sebastian : bocchan -se inclina-
Ciel : llevala a la habitación que le preparaste y explicale sobre su estancia aquí -serio-
Elizabeth : no le harán nada malo a mi hermanita, ¿cierto? -cara inocente-
Ciel : ¿acaso son hermanas? -sorprendido-
Elizabeth : hai, no de sangre pero la quiero mucho -sonríe-
Ciel : ya veo... Sebastian encárgate -se va- y olvida lo que dije antes
Elizabeth : esperame Cieluu -se va con el-
Sebastian : esta chica me está causando muchas molestias ya -arrastra a Kazumi hasta adentro de la mansión-
Sebastian :
Esto es increíble, esta chica pesa más que yo... y eso es mucho decir. Oops, no sería mi culpa si se golpea la cabeza, ¿cierto? Jejeje veamos...
Sebastian : -trata de hacer que Kazumi se golpee con las escaleras- ehh... ¿pero cómo?
Kazumi : -sentada al final de las escaleras- ¿qué tratabas de hacer, idiota? -con los ojos cerrados-
Sebastian : ehh, ¿yo? Nada -nervioso-
Ciel : Sebastian deja de jugar con ella -entrando a su habitación-
Sebastian : -suspira- bien, por aquí, señorita -le señala el pasillo-
Kazumi : ya sé donde es, gracias -le saca la lengua-
Sebastian :
¡¿Trás sobrenatural, maleducada también?! Rayos, como se le ocurrió a bocchan traerla aquí *se da en la frente*
Kazumi : -ríe mientras sube las escaleras-
Sebastian : ¿qué le da tanta risa, señorita? -molesto-
Kazumi : na-da -entra a su habitación-
Sebastian : ¡¿qué le hice al mundo?! -se golpea con el barandal-
Ciel : no eres ni medio normal -le pasa por el lado como si nada-
Sebastian : gracias por el apoyo, bocchan -sarcástico-
Ciel : voy a ir a verla -cruza el pasillo-
Mientras con Kazumi~
Kazumi : ¡sorprendente!
Tocan la puerta~
Kazumi : entre -seria-
Ciel : soy yo -entra-
Kazumi : ¿a qué vienes? -molesta-
Ciel : ¿tengo que recordarte que esta es mi casa? -tranquilo-
Kazumi : buen punto -se relaja- dime
Ciel : necesito hablar contigo de algo importante...
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