Capítulo 55: "Sabía que vendrías"
☆♛☆ 55. "Sabía que vendrías" ☆♛☆
Encontrarme nuevamente en Seattle me resulta tan irónico... y agonizante.
Encontrarme a solo metros de distancia de ella me resulta tortuoso... y emocionante.
Casi puedo sentirla en el aire, su aroma combinado con el shampoo de coco, su voz que llega a mis oídos como una suave melodía.
Está en todas partes, y en este caso, al igual que en mis sueños, no puedo tocarla.
El auto se detiene frente a mí y me subo en la parte trasera. Contesto la incesante llamada de Rei.
—¿En cuánto llegas?
—¿Por qué? Ya sabes para qué estoy yendo y prefiero no apresurarlo.
—Sí sí, avisas cuando llegues que tenemos que darte algo.
—¿Qué estás planeando?
—Agradece que te aviso con anticipación. —Cuelga la llamada.
Hace bastante obvia su molestia hacia mí desde que le dije que planeaba «obligar» a Amelia a que termine conmigo. Aun así, continúa llamándome para preguntarme cómo me encuentro.
Reviso el teléfono y de forma automática llego a mi conversación con Amelia. Lo último que ella me escribió fue un «Te veo en la fiesta».
Al final tenía razón con su afirmación de que iría, pero no tiene ni idea cuál es mi propósito para aparecer en aquella fiesta.
Tal vez...
El auto se detiene y le indico al conductor que pase a recogerme en una hora, que no planeo quedarme mucho tiempo y ya tengo apartado un asiento en el avión que me llevará lo más lejos posible de este lugar.
Aunque no sienta que haya distancia suficiente que me impida el querer regresar. Tal vez deba pedirle a mi asistente que investigue más sobre viajes a otros planetas. Tal vez irme de la Tierra sea lo que necesito.
En cuanto bajo del vehículo la veo ahí parada frente a mí.
—Hola, Frank. —Sonríe de esa manera que me obliga a sospechar de ella—. Te dije que me avisaras.
—Rei, ahora no, debo ir-
—Agárrenlo.
Soy sujetado en cada brazo por mi hermano vestido de pirada y la señorita Rojas vestida de caperucita roja.
—No irás a ningún lado vestido así. —Hace un ademán con la cabeza, y los dos traidores me jalan hasta una van negra estacionada más adelante.
Me dejo llevar sin poner ni una mínima resistencia ya que soy muy consciente que será más tedioso para mí si me pongo en contra de esa ex modelo.
Dentro de la van, la cual apenas y era iluminada por una tenue luz naranja, soy despojado de mi ropa con tal velocidad que parecía estaba siendo asaltado. Habrá pasado como máximo un minuto por lo corto que se sintió el tiempo ahí adentro con todo lo que estaba ocurriendo.
La puerta vuelve a abrirse y otra vez estoy en la acera, solo que con un cambio de look completo.
Los tres causantes de mi actual estado me examinan de pies a cabeza.
—Tenías razón. —el pirata Jack le codea a la loba Rei—. Se ve genial con ese disfraz.
—Hiciste un magnífico trabajo con el maquillaje. —La loba apoya su brazo en el hombro de la caperucita señorita Rojas.
Acerco mi mano a mi mejilla para comprobar lo que ha dicho. Eso explica por qué mi rostro ha quedado con una extraña sensación. Lo que siento es algo que parece plástico, pero más duro y grueso. Recién noto que me cubre la mitad de la cara e intento quitármelo, pero parece pegado a mi piel.
—Lo siento, amigo, no te lo vas a poder quitar. —Rei niega con la cabeza—. Caperucita usó un poderoso pegamento que solo puede ser removido con un removedor especial muy difícil de conseguir.
Clavo mi mirada en la ex modelo, quien parece divertirle esta situación.
—Y adivina quién tiene el removedor. —Su sonrisa curvada me basta como respuesta.
Amelia debe tener el dichoso removedor.
—¿Por qué haces esto?
—Porque lastimaste a mi querida amiga, a la madre de mi ahijada y mi antiguo crush... —Jack se aclara la garganta—. Nuestro antiguo crush —agrega.
—Frank, eres mi hermano y te quiero —interviene el pirata—, pero no te irás a menos que Amelia así lo desee.
—Exacto —la loba prosigue—. Ya te has marchado dos veces porque así lo quisiste, si habrá una tercera será solo si eso es lo que Am quiere.
—¿Dónde está ella?
—Adentro, en el centro de todo, bailando con su adorable hija. La encontrarás con facilidad... es la estrella de la fiesta.
Inhalo con fuerza, preparándome para mi encuentro con ella. Imaginé tantas veces este momento, el de poder verla de nuevo, lo que solo hacía más insoportable su ausencia. Lo más seguro que después de esto terminaré en cama, agonizando por tanta dicha y tortura.
Y lo volvería a hacer.
Empiezo a caminar, con los nervios en aumento.
Nunca me había sentido de este modo, ni siquiera la primera vez que me reencontré con ella se compara a este momento ya que en esa época aún no conocía la maravillosa sensación de tenerla en mis brazos.
Empujo las inmensas puertas dobles de madera y el ruido del interior llega como una molesta brisa. Hay demasiada gente para mi gusto, pero al menos no tengo problema en desplazarme en el lugar y dirigirme al centro de todo. Y para cuando llego a este comprendo a qué se refería Rei.
La pista de baile cubre casi la mitad del sitio, y la sincronización de los pasos de cada persona disfrazada me da a entender que ya lo han practicado con anticipación. Y justo en el centro de todo ese espectáculo se encuentra Amelia bailando con Lía. Las parejas se mueven alrededor de ellas, como si fueran Lunas y ella el planeta que los atrae.
Sus hermosas sonrisas opacan las luces que se mueven de un lado a otro, y hay un reflector que parece también haber caído bajo su belleza ya que no deja de apuntarle.
Respiro hondo y su aroma embriaga mi nariz, lo que me confirma que esto no es un sueño.
Amelia está ahí, a solo unos pasos de distancia.
Si avanzo lo suficiente estaré tan cerca que podré tocarla. Tan cerca que podría besarla, decirle lo obsesionado que estoy con ella y que solo respiro con la fantasía de volver a estar a su lado.
Hace mucho que soy suyo, pero anhelo demasiado que vuelva a ser mía.
Aun así, no me muevo.
Se ve tan feliz que no quiero ser quien interrumpa ese momento que la hace sonreír con tanta dicha. Me limito a observar cada detalle de ella. Su disfraz combina con la canción que da la ilusión de estar en un baile de una época victoriana. Su vestido resalta su figura y le da cierta elegancia, como si fuera de la realeza. Y Lía viste un adorable traje de príncipe.
Lucen perfectas, mejor que como las había visto en mis sueños.
Los bailarines se detienen al igual que la melodía, y los presentes aplauden por disfrutar de tan coordinada coreografía.
Rei se les acerca y charlan por un par de minutos. Hasta que ella se lleva tomada de la mano a Lía. Antes de desaparecer entre el gentío nuestras miradas se cruzan, y aquellos segundos bastan para entender su mensaje.
Amelia se abraza mientras mira a su alrededor. Parece estar buscando algo. O a alguien.
Tomo el suficiente coraje para caminar hacia ella.
Cada paso provoca un desastre en mí. Puedo escuchar mi corazón en los oídos y mi andar se siente tieso, como si estuviera fingiendo a ser otra persona.
¿Cómo es que esa mujer puede hacerme sentir el hombre más poderoso del planeta y al mismo tiempo convertirme en un ser que puede desaparecer en cualquier momento?
Está por girarse en mi dirección cuando... un sujeto vestido del zorro se acerca a hablarle. Ofrece su mano con una estúpida sonrisa, parece que quiere invitarle a... Acelero el paso mientras Amelia sacude su mano rechazando la propuesta del desconocido, pero él continúa ahí parado cerca de ella, y puedo ver claramente como va acercando su mano hacia...
—Hola. —Me coloco frente a Amelia, lo suficiente cerca que la obligo a retroceder un poco la cabeza para poder mirarme a la cara—. Te estaba buscando. —Sus hermosos ojos verdes se iluminan gracias a los reflectores que se encariñaron con ella.
—Frank.
Sí, así de bien se siente escuchar mi nombre salir de sus apetitosos labios que se curvan hacia arriba en una preciosa y confiada sonrisa.
—Sabía que vendrías.
Cariño... me estás matando y no sabes cómo me encanta.
Se cruza de brazos mientras me mira de pies a cabeza y su sonrisa ladeada me hace pensar que está imaginándome sin nada encima. Como adoro que me mire de ese modo.
—¿Me parece o estás disfrazado del fantasma de la ópera? —Se muerde el labio inferior, una obvia prueba de que lo está disfrutando.
Actúa como si de verdad le alegrara verme, como si no hubieran pasado dos meses sin vernos, como si la última conversación que tuvimos nunca pasó.
Actúa como si aún siguiera enamorada de mí.
Y no estoy seguro de si festejarlo o verlo como un obstáculo a mi objetivo al venir aquí.
Empieza una nueva melodía y Amelia mira a su alrededor.
—Esta pieza no es tan difícil así que te será sencillo seguirme el paso. —Me ofrece su mano.
Entiendo lo que quiso decir, pero me mantengo quieto ya que no creo poder hacerlo.
—Frank, ¿bailarías conmigo?
Al diablo.
Tomo su mano y con la otra la sujeto de la cintura.
—Solo sígueme e intenta no pisarme.
La acerco más a mí y comienzo a moverme en sintonía con el resto de parejas.
—Wow, te adaptaste demasiado rápido. —La hago girar y la regreso a mi lado, con su cuerpo pegado al mío.
—No es mi primer baile victoriano.
La sostengo de la cintura y cargo con facilidad.
—Tampoco el mío.
Sí, es justo esa sonrisa juguetona la que llamó mi atención la primera vez que la vi.
Es esa misma sonrisa la que empezó todo. Porque desde que fui testigo de ella solo podía pensar en qué hacer para volver a verla.
Eso es trampa. No deberías mirarme de ese modo cuando recorrí medio continente solo para conseguir que termines conmigo. Se supone que estoy aquí para que me rompas el corazón.
Pero solo me haces tener esperanzas una vez más.
No es justo.
☆♛♛♛☆♛♛♛☆
¡Hola!
A estas alturas me late que todos juntos recibiremos la confirmación de la cuenta regresiva, que estamos cada vez más cerca pero aún no puedo afirmar del todo cuánto falta para llegar al final u.u
Pero ey, estoy actualizando seguido, eso es algo bueno (?)
Me saldrán caps cortos, me saldrán caps largos, no lo sé, solo me dejo llevar por lo previamente planeado y de ahí veo cómo resulta xd
PD: Si quieres leer antes los caps de "Conde herpes" en mi instagram hay información que podría interesarte :3
Días de actualización: Uy no sé
♛PREGUNTAS♛
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☆¿Teorías del siguiente capítulo?
Nos vemos pronto 7u7
♡ Los adoro ♡
Vale Rie☆
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