Extra 3: Una cita
Skylier
Había recibido un correo electrónico de Thiago, lo abrí para poder leerlo.
Asunto: Una cita.
Buenas noches preciosa, sé que quizás en estos momentos debes de estar durmiendo pero no pude evitar enviarte este correo, sé que aún estamos en la fase de recuperar todo, y cuando digo todo, hablo también de la confianza, quería preguntarte si quieres salir conmigo el próximo fin de semana, quizás en ir a cenar juntos?
Dentro de unos días es el cumpleaños de mi madre así que viajaré para New York, pero después iré a Miami, y espero que podamos vernos.
Re: Una cita
¿Una cita?
Re: Re: una cita.
Si, una cita, preciosa
Asunto: ¿Te la ganaste?
¿Te la has ganado?
Una sonrisa tonta apareció en mis labios.
Re: ¿Te lo ganaste?
Claro, me lo he ganado, desde hace dos años no tenemos una cita, es hora de que llegue mi gran recompensa.
No pude evitar reírme.
Re: Re: ¿Te lo ganaste?
Bueno, no puedo decir si te lo ganaste o no, por el momento no tengo pensado tener una cita contigo.
Re: Re: Re: ¿Te lo ganaste?
Ya lo veo, sigues con tu empeño de hacerte la dura, preciosa. Ya veremos si no tenemos una cita, nos vemos el fin de semana.
Deje el móvil sobre mi mesita de noche y me metí debajo de las sabanas con una gran sonrisa en mi rostro, hablar con Thiago siempre me ponía de buenas.
Al día siguiente eran las doce de la mañana cuando me desperté, no tenía nada importante que hacer así que me duche mientras me ponía a pintar un poco.
Eran las cinco de la tarde cuando escuché que el ruido del timbre se había comenzado a escuchar, salí de mi estudio de pintura para caminar hasta la puerta, al abrirla Aubrey abrazo mis piernas, mientras Harriet besaba mi mejilla.
—Hola, bebé —Me agache para tomarla en brazos, ella de inmediato puso sus bracitos en mi cuello, así que bese su mejilla.
Ella se río, dejando que la llenará de besos, entramos al apartamento.
—Ma-má —Aubrey camino hasta su madre dónde Harriet la cargo y saco un par de sus juguetes.
—¿Que hacías? —Me preguntó mi mejor amiga.
—Estaba pintando. ¿Quieres algo de tomar?
—No, estoy bien gracias.
—Ashas. —Repitió Aubrey, había desarrollado la costumbre de repetir todo lo que decimos y me daban tantas ganas de llenarla de besos, ella era tan adorable.
—Thiago me invitó a tener una cita con él.
—¿Una cita? —Ella sonrió, moviendo sus cejas con picardía, no pude evitar reír.
—Si, una cita.
—¿Aceptaste?
Me encogí de hombros.
—Tiene que ganárselo.
Ella se empezó a reír.
—Bueno, creo que ya se la ha ganado, Sky. Han pasado dos años, casi tres, tener una cita no le hace daño a nadie.
—Es que aún no lo perdono y sé que una cita es paso a otra, y a otra, y así sucesivamente.
—Debes de dejarle en claro que solo es una cita, y que no lo perdonas aún, sé que le está costando y si no tienen ninguna cita se que el pobre se volverá loco, pero si aceptas tener una cita con él, disfrútala, Sky.
—¿Porqué él no puede ser un imbécil? ¿Porqué aunque me rompió el corazón me fue imposible odiarlo?
—beshil. —Aubrey repitió, y tape mi boca de inmediato tratando de contener la risa.
—Si amor, tu tío Thiago debería de ser un imbécil, pero lamentablemente no lo es y por eso me es difícil olvidarlo.
—Ño, tío Thiago ño. Beshil ño. —Hizo un puchero demasiado adorable.
Harriet me dió una mirada de advertencia.
—Aub, no repitas todo lo que diga tu tía Sky.
—¿Ño?
—No, mi amor. —Besó su cabeza y ella volvió a ignorarnos para seguir jugando con sus muñecas.
—Porqué lo amas, Sky. Thiago es el único hombre en tu vida, cuando termine con Ashton, intenté salir con otro chico intentando olvidarlo, pero no pude, porque lo amo.
»Cuando amas a alguien, y si las personas dicen malas cosas de dicha persona nunca les creerás, porque es como si tuviéramos una venda en los ojos, amamos aquella persona con todo y sus defectos, y es imposible odiarlo, Thiago te mintió, y sé que te dolio, pero creo que él está haciendo todo lo posible por recuperarte.
Harriet tenía razón, Thiago estaba haciendo todo lo posible por recuperarme, aparte ya había pasado mucho tiempo.
El timbre se había vuelto escuchar así que camine hasta la puerta y al abrirla los chicos sonrieron, viéndome mientras me atraían a sus brazos, Leonardo beso mi cabeza y despeinó un poco mi cabello, golpeé su mano.
—Mi pelo, estúpido. —Él comenzó a reír, besando mi cabeza—He tardado dos horas en arreglarlo
—¿Estás bromeando?
—No, eso fue lo que tarde.
—Dios santo.
Aubrey abrazo las piernas de Leo, el la cargo y beso varias veces sus mejillas.
—¿chocoliate?
—Ah, solo vienes a buscarme por el chocolate, me siento ofendido, Aub.
Ella lo miro esperando su chocolate, el saco uno de su bolsillo y se lo entrego, ella comenzó a quejarse para que él la bajara.
—ashas —Dijo cuando la bajo y corrió hasta su papá para abrazarlo— Papi.
—Aubrey solo me quiere porque la lleno de azúcar, si no fuera por eso ella ni se acordaba de mi existencia.
Me reí, tristemente tenía razón.
—Bueno, si esto te hace sentir mejor, quizás cuando tenga un hijo puedes ser su tío favorito.
—Bueno, espero que tengas un hijo rápido, dile a papi Thiago que lo perdonas, necesito ser el tío favorito, pero a la de ya.
—¿Porqué le diría a Thiago?
—Porqué regresaran y el será el papá de Sophie o de Eidan.
Me reí nuevamente, una vez dije que me gustaría que así se llamarán mis hijos, me sorprende que aún se acuerden.
Todos tenían aquella certeza de que Thiago y yo regresaremos.
Mi móvil suena, es otro correo de Thiago.
Asunto: ¿Lo has pensado?
Preciosa, chica anónima. ¿Has pensado en tener una cita conmigo?
Re: ¿Lo has pensado?
No sería mala idea, pero solo es una cita.
Asunto: cita genial.
Bueno, ya veremos eso, he comenzado a planear nuestra cita y será la más genial que has tenido en tu vida, puedo asegurarlo
Negué al leer el correo, él ya había planeado como sería nuestra cita y yo ni siquiera le había dicho que si.
Re: cita genial
Me sorprende que hayas planeado una cita, no sé cómo estabas tan seguro de que iba aceptar. ¿Que hubiera pasado si no lo hubiera hecho?
Asunto: instinto
Ah, por eso no te preocupes, te conozco perfectamente bien, y sabía que ibas a aceptar, solo te haces la dura pero insisto, me sigues amando y una cita conmigo, es de considerarse afortunada, Skylier.
Aparte mi instinto me decía que aceptarías, así como me dice que estás muy cerca de cederme tu perdón, debo de admitir que cuento los días y horas para que eso suceda y que vuelvas a ser mía
Siempre he sido tuya, estuve tentada en escribir pero negué.
Asunto: Me ahogas.
Tu ego era el que ocupaba mayor parte en nuestra relación, aparte,te corrijo, querido. La afortunada aquí no soy yo, serías tú. Tu eres el que quiere mi perdón, no al revés.
Re: Me ahogas.
Touché, el afortunado soy yo, nos vemos el fin de semana, preciosa.
Deje el móvil sobre la mesa con una gran sonrisa en el rostro.
—Bueno por esa sonrisa puedo asegurar que estabas hablando con papi. —Dijo Tristan.
Me mantuve callada y el llegó a la conclusión de que estaba hablando con Thiago.
El día de la cita había llegado, me había cambiado varias veces mi atuendo, no me sentía lo suficiente cómoda, tome otro cambio de ropa y me observé en el espejo, sonreí viendo el resultado, este era el atuendo ganador.
Pinte mis labios de color rojo y acomode mi cabello, acomode el collar que Thiago me había regalo en mi cumpleaños hace años, al estar arreglada, escuché el ruido del timbre, mis manos habian comenzado a sudar, hace meses que no veía a Thiago y me sentía muy ansiosa, corri hasta la puerta y al abrirla lo encontré tan guapo como siempre, su olor llegó a mis fosas nasales haciendo que perdiera el sentido por unos segundos.
—Hola.
Me acerque a él y lo abracé con fuerza, él pareció sorprendido pero aún así, no dijo nada y dejo que lo abrazara, sentí como beso mi cabeza, haciendo que mi estómago se revolviera y las mariposas se volvieran locas. Era como si estuvieran diciendo «Ya llegó la única persona que siempre nos va a ser perder la cordura»
—Te miras preciosa —Dijo al separarnos del abrazo, al momento que nos observamos con fijeza.
—Tu también te miras demasiado guapo —Admití y sentí como mis mejillas se volvían rojas en un instante.
—Gracias, preciosa. —Él sonrió y me entrego una rosa roja.
—Es preciosa
Él sonrió, asintiendo mientras acomodaba un mechón de mi cabello atrás de mi oreja, uno de sus dedos fueron directamente a mis labios, mientras los acariciaba con ternura, haciendo que mi respiración se acelerara.
—No me estés provocando, no tienes permiso. —Él se río
—¿No tengo o es porque no podrías aguantar seguir haciéndote la dura y tines miedo de ceder a besarme.
—Sueña Thiago. —Mi voz sonó temblorosa y maldije al instante, él me sonrió con burla.
—La verdad si, sería uno de los mejores sueños.
—Vamos, antes de que me arrepienta.
Eso era mentira, solo quería salir de mi apartamento lo antes posible.
—Vamos, gruñona.
Thiago abrió la puerta del auto, subí y suspiré, el auto olía a él, y su olor era demasiado adictivo, el comenzó a conducir, yo picaba mi pierna nerviosa, aclare mi garganta para después hablar.
—¿Cómo te va en la universidad?
—Cada vez se pone más difícil, pero amo lo que estoy estudiando.
Sonreí con orgullo.
—Me alegra demasiado eso, después de todo era tu sueño
—Bueno, ahora mi sueño es estar contigo, estoy muriendo por cumplirlo.
Senti mis mejillas rojas.
En el resto del camino ya nadie dijo nada, hasta que me di cuenta que habíamos llegado a la cabaña de Thiago, el abrió la puerta del copiloto, y me mostró una venda
—¿Puedo taparte los ojos?
—Bien —Bufé.
Él se colocó atras de mi y puso la venda, mientras sentía como me guiaba al interior de la cabaña, al entrar el olor a comida inundó mis fosas nasales
—Huele delicioso.
Continuamos caminando hasta que paramos y el quitó la venda, noté como llegábamos al lago que estaba cerca de la cabaña de Thiago.
—Un picnic —Thiago sonrió con sus manos en sus bolsillos.
—Me encanta.
—¿Puedo tomar tu mano?
—¿Okey?
Él tomo mi mano y la llevo a su boca para después besarla, él tomó una flor que se encontraba en la canasta donde se encontraban toda la comida, colocó la flor atrás de mi oreja, su aliento golpeó mis labios, pero se separó de inmediato, dejando una gran distancia entre nosotros y lo agradecí de inmediato, si seguía tan cerca iba a perder la cordura.
Él me pasó un sándwich de maní, así que la acepte mientras lo llevaba a mi boca y le daba una mordida, hice un sonido de satisfacción al saborearlo.
Al terminar de comer, ambos nos miramos con fijeza, estiró su mano.
—Bailemos —Tomó mi mano mientras me ayudaba a levantarme del césped.
—No hay música —Dije obvia.
—¿Ese es un problema? —Iba a decir que si pero su dedo índice estaba sobre mis labios, evitando que hablara—Porqué si es un problema, podría cantar, preciosa.
Le sonreí, asintiendo, él tomó aire mientras comenzaba a cantar, su aliento en mi oído me hacía cosquillas mientras yo suspiraba, sin soltar su cuello
—Eres tan perfecta, preciosa. —Él susurró en mi oído causando que mi piel se erizara
—Thiago. —Susurré.
—Perdóname. ¿Dime, que tengo que hacer para que me perdones y dejemos de ser simple amigos? ¿Quieres que te baje una estrella? ¿Quieres la luna? ¿O quieres que te compre una galería de arte? Pídeme lo que sea, te juro que te lo daré, pero perdóname, Sky.
»Me he cansado de que seamos amigos, ya no soporto más esto, sé que me amas, así como yo te amo, dejemos el pasado atrás y seamos felices, sé que estuvo mal lo que sucedió, y acepto mi error, pero levántame el castigo de estar sin ti.
No dije nada, solo lo atraje a mi para besarlo, desde que salimos de mi apartamento sabía que él me haría perder la cordura y tuve toda la razón, no me imaginé que en la primera cita iba a terminar besándolo, pero no me arrepentía en absoluto, porque al besarlo me di cuenta de lo mucho que lo echaba de menos y lo mucho que lo necesitaba, debía de soltar el pasado, sé que él había cometido un error, pero estaba haciendo todo lo posible por enmendarlo, él me amaba y yo sin embargo, a pesar de lo que sucedió, lo amaba más que a nada en este mundo.
✨🧋✨🧋✨🧋
Holaa, holaa. ¿Cómo están?
Espero que les guste este extra que he escrito con mucho amor.
Por cierto, ya casi llegamos a los 22k de votos y tenemos 300k vistas, en serio, todo esto es gracias a ustedes, lxs amodoro❤️
—Jaz✨
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