-Hací que tenias una piscina...- dijo Jack flotando de espaldas encima del agua de esa, enorme, piscina.

-no la uso mucho...no soy de nadar-

- si hicieras una fiesta en tu casa, serias la persona más popular de la escuela-

- si hiciera una fiesta...tendría que limpiar y no quiero limpiar-

-....-

-....-

-Algo más que no sepa de tu mansión?-

-solo una cosa-

*****

Las puertas de la cochera se abrieron, era una moto negra muy moderna, hermosa a los ojos de cualquier adolescente.

-una moto-

-si una moto-

-tienes una moto-

-era de mi madre...no la uso ya que no tengo licencia-

- yo si- ambos chicos se miraron expectantes, Jack tenia en su mano un permizo para conducir...en especifico uno que te permitía manejar motocicletas.

-conveniente-

Jeremy le lanzo las llaves a jack quien las atrapo en el aire, captando el mensaje ambos chicos se subieron, con Jack como piloto y Jeremy atrás de él.

-sabes a donde....- antes de que el castaño terminara su frase, Jack arranco y con cierta velocidad, empezaron a recorrer las calles de la ciudad.

pasando unos minutos llegaron a los limites y cruzaron el desierto, habían salido de la ciudad y Jack solo miraba hacia delante.

-Jer mira hacia tu derecha-

El mencionado, que por la velocidad a la que iban estaba abrazando a su compañero, miro hacia donde este le dijo, sorprendiéndose de mirar a lo lejos la ciudad entera, edificios que se alzaban y el mar que abarcaba cerca de este, era simplemente..

-hermoso-

Los minutos pasaban y solo el silencio reinaba entre ambos, Jeremy hiba a preguntar cual era el plan, pero sin previo aviso Jack giro a la derecha, atravesando la arena hasta llegar cerca al mar y se detuvo.

-llegamos-

-ha si?- Jeremy ya se veía en la portada de de alguna revista con un título parecido a "Lo mató lejos de la ciudad, su mejor amigo".

-Mi padre solía traerme aquí..- Jack corrió seguido de Jeremy que trataba de seguirle el paso, el mayor se detuvo frente a unas rocas enormes que daban cerca al océano- y...con cada año..tallabamos una frase en las rocas como un ritual de padre e hijo-

"Se fuerte"

"Te quiere, papá"

"Papi es el rey del mundo"

Jeremy no sabia si sonreír o llorar con melancolía, muchas palabras, tiernas frases que expresaban amor, sabia que no conocería al hombre que le dio la vida a su amigo pero sabia que fue un gran padre.

-cada año, por estas fechas....pongo una nueva frase, como para que el recuerdo perdure- Jack saco una tiza de su chaqueta y le paso la mitad a Jeremy-  es como una tradicion y ya que estas, escribe algo-

" seré admitido a toda costa "

Jeremy no sabia que hacer, esto era algo demasiado personal y Jack lo compartía con él como si nada, no sabia que poner pero tenia que ser algo profundo, algo bueno, como para un pozo de los deseos.

" solo con mirar tus ojos....."

No termino de escribir el resto...no sabía como seguir..Pero al parecer no era necesario. Jack no le estaba prestando atención y él no quería lo contrario, se sentó a lado del más alto y miro como las olas golpeaban con fuerza al chocar contra la arena.

-quiero mostrarte otra cosa-

Se levanto y corrió hacia la motocicleta montándose en ella, y esperar a Jeremy, cuando estaban listos para partir nuevamente, Jack arrancó y salieron a gran velocidad, otra vez, a quien sabe donde.

Pues era "cilia" la ciudad continua a la suya, dieron un rápido recorrido por toda la ciudad y en el centro de esta estaba aquella universidad que hacia suspirar a Jack.

~Blanca Cilia~ Leyó Jeremy , era enorme, casi como una mini ciudad con sus edificios enormes y ....bueno no habían mas detalles ya que no se. apreciaba todo desde su posición.

- falta poco...la beca que quiero ya esta siendo tramitada por el director y ...dentro de algunos meses podre estudiar aquí-

-el viaje de aquí a tu casa no sera
facil Jeje-

-en realidad, esta uni tiene dormitorios integrados hací que no regresare a mi casa, al menos no hasta alguna festividad-

~no regresara~ y así el mundo que se había construido, un mundo donde no estaba solo, donde tenía un amigo, alguien que le entendiese y le aceptase, cayo en la triste realidad de que no duraría para siempre.