Curita de
Osito Gominola
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¿Ustedes babean mientras duermen?

Bueno, yo sí.

Y Arge también.

El sudaca estaba muy, pero muuuy a gusto en su cama, pequeños ronquidos salían de su boca abierta y una almohada empapada de saliva pedía por ayuda.

Juraría que de pronto la alarma se empezó a oír a lo lejos, cada vez más cerca y fuerte. Frunció el entrecejo y cerró la boca en una mueca cuando aquel sonido aún no había acabado a pesar de haber pasado ya algunos segundos.

Esperen.. Esa no era su alarma..

No, no, él tenía de alarma un audio de Uruguay gritando, y esta era una melodía.

¿Era una llamada?

Se talló la cara con pesar y estiró el brazo para tomar el celular, sus ojitos cansados no lo dejaban ver quién era, pero alcanzó a divisar lo que parecía ser un corazoncito junto con una oruguita.

Arge-..¿____? -contestó confundido.

Se volvió a recostar para tallar su rostro.

Arge- ¿Mmh?, Ah, no pasa nada.. Siempre podes llamar cuando quieras -cerró los ojos con una pequeña sonrisa -..Amm, sí, lo recuerdo.

Soltó un bostezo.

Arge-..¿Mm?.. ¿Qu-.. -abrió los ojos y miró su celular.

Sábado.

Palideció e intentó levantarse rápidamente, pero sus piernas estaban enrolladas en la cobija, cosa que lo hizo tropezar y caerse de la cama.

-¿Argentina?.. ¿Todo bien? -la voz de la chica lo hizo volver a reaccionar normal.

Arge- ¿Q-Qué? -tomó rápido el celular -Eh, ah sí, por supuesto -rio y se acomodó en el suelo como si la chica lo fuese a ver.

Sobó su frente mirando alrededor, intentando analizar lo que pasaba.

Arge- Pff, sí, de hecho ya casi estoy allá.

-Espera.. ¿Sí es justo ahora?

Se quedó callado.

Arge- Eh.. S-Sí, ahorita a las -entrecerró los ojos para mirar la hora -..¿Ocho?.. Digo, sí, las ocho -sonrió -..En el parque, obvio.. Ajá.

Se relajó entre las sábanas tiradas sobre el suelo.

-Ja, ja, veamos quién llega primero~ -rio.

Pero en cuanto la chica cortó la llamada, borró su sonrisa por una mueca de preocupación.

Arge-..La puta madre.

Se levantó de un salto y entre tropiezos salió corriendo al baño.

Arge- ¡Corréte es emergencia! -empujó al pobre pelirrojo que intentaba abrir la puerta, para entrar y cerrar de golpe.

Perú-...

Frunció el ceño y se fue maldiciendo en alguna lengua extraña.

El argento se empezó a desvestir lo más rápido que pudo, ayer no se había bañado con la excusa de que lo haría hoy antes de salir, pero nunca pensó que su cit- digo, su amiga, fuera a madrugar justo ahora.

Arge- Nunca llegás a tiempo o ni siquiera vas -se quitó a jalones la camisa -¿Y ahora se te ocurrió madrugar?.. Espera -se estuvo en los pantalones -Eso es bueno.. ¿No?

Sacudió la cabeza y siguió.

Arge- Claro que lo es, debe estar emocio- AAAAAAAHH!!

Un español saltó en el pasillo por aquel grito.

España- Ostia, ¿Está todo bien ahí adentro? -se acercó a la puerta e intentó abrir -¿Quién puso el seguro?

Arge- La concha de la lora.. -tapó su boca -..¿Qué mierda es eso? -chilló cuando vio su rostro.

Sobre su frente había una rajada que al parecer estaba empezando a sangrar.

¿En qué momento pasó?

¿¡Y por qué en su rostro!?

España- ¿Argentina?.. ¿Eres tú? -tocó.

Se iba a desmayar, tomó papel y rápido comenzó tapar la horrible y enorme herida.

España- ¿Qué fue ese grito? -volvió a insistir.

El argento empezó a dar saltitos y a llorar en silencio con desesperación.

España- Ya habíamos hablado sobre poner seguro a las puertas, chaval, abre o voy por la llave.

Arge- ¡Estoy ocupado! -respondió -¡Se me va a salir el cerebro! -buscó rápido el botiquín.

El mayor se quedó unos segundos mirando la puerta.

España-..¿Estás estreñido, hijo? -habló más bajo.

Mex- ¿Quién está estreñido? -se detuvo a medio pasillo.

Arge- ¡Nadie, largáte gil! -se puso el algodón con alcohol torpemente -¡¡AAAAAAAAAAAGH!!

Otro golpe se oyó con el grito medio ahogado.

Mex- Ay rey, ¿Te dio diarrea o qué? -rascó su cabeza.

Canadá- Diarrea suena leve -un desaliñado canadiense se posó al lado de ambos, preocupado por aquel grito.

España los miró a ambos un segundo, pero se ahorró sus comentarios para él mismo, ahora tenía que atender al hijo con dificultades anales.

España- Arge, las pastillas para el dolor están en el botiquín, ¿O prefieres que te traiga agua?

El bicolor se quedó unos segundos en silencio mirándose al espejo, frunció el ceño y empezó a buscar en la caja llena de pastillas.

Mex- ¿Vas a tragarte una pastilla? -habló de nuevo.

Arge- Sí -frunció el ceño, en verdad estaba buscando alguna curita.

España- ¿Así sin agua?

Mex- ¿Entera? -sonrió.

Arge- Que síii.. -se detuvo- ¡NO!

La risotada del mexicano se oyó por todo el pasillo, así como el chanclazo que recibió después.

Lo maldijo entre dientes, sonriendo cuando por fin encontró el paquete de curitas.

Pero esa sonrisa se desvaneció en cuanto abrió la primera.

Arge-..No me la contés..

...

Arge- ¿Entendiste?

P.B.-...¿Qué?

El chico se detuvo para respirar hondo, con intenciones de volver a explicar todo de nuevo, pero la mujer se adelantó.

P.B.- A-A ver, espera, espera -se escuchó movimiento del otro lado -¿Estás diciendo que no le dimos hora y ahora está en camino?

Arge- En resumen.. Sí -volvió a emprender su rumbo, revisando por ultima vez su vestimenta y arreglando su cabello.

P.B.-...¿¡Argentina por qué no le diste hora!?

Arge- ¡¡NO LO SÉ!! ¡Apenas podía procesar que la invitación había funcionado!, ¿Qué iba a saber yo de la hora?

P.B.- Porque cuando invitas a alguien a un lugar le das la hora o bien se ponen de acuerdo, Argentina -refunfuñó haciendo más ruido desde la otra línea.

Arge- ¿Ahora qué hacés? -frunció el ceño al oír aquello.

P.B.- ¿Cómo que qué hago? ¡Voy por tus perros, tonto!

Los ojos del chico se abrieron y jadeó.

Arge- ¡¡LOS PERROS!! -se jaló el pelo -¡¿De dónde saco los-

P.B.- ¡No, tú ve al parque! Yo me encargo de los perros, sólo tengo que ir por ellos.

Argentina soltó un chillido, casi en llanto, pero antes de poder halagar a la chica de todas las maneras posibles esta colgó.

Y bueno, aquí es en donde nos encontramos de nuevo con esta escena. El argento esperando afuera del parque.

Arge- Okay, todo bien -miró alrededor -Sí.. Aún no llega -suspiró.

Por última vez, miró su atuendo y trató de ver su frente, fallando en el intento, a lo que sólo pudo acomodar su cabello con la esperanza de tapar la curita infantil de ositos de colores. La verdad la herida no había sido tan grave, pero en esas circunstancias todo era grave.

Arge- Sólo a mí me pasan estas cosas.

Su cabeza volvió a hacer click.

Arge- ¿Qué le voy a decir cuando llegue?.. Aah, la saludás, tarado -se pegó en la frente, soltando una queja al olvidar la herida.

Observó que no hubiera nadie cerca, aunque sólo los madrugadores que salían a caminar podrían estar en aquel parque.

Arge- Bueno ¿Cómo la saludo? -puso una mano en su barbilla pensativo -..Hola, ____ -sonrió.

Un silencio.

Arge- Pará, que seco -negó -¡Hola __- No, no da tanta emoción -hizo una mueca -..Hola, ____~ -hizo una cara coqueta, pero rápido se arrepintió -¡No! Agh, que asco.

Se tapó la cara y dio vueltas en su eje estresado y avergonzado por su actuar.

Arge- No, no, somos amigos, Arge, buscamos su amistad -Miró hacia el frente de nuevo y apretó los labios -Hola ____.. -sonrió más tranquilo - Hola.. ____.

Una pequeña sonrisa nerviosa se apoderó de él al decir eso último.

-..Eh, hola, sol.

Pegó un brinco y volteó a su izquierda.

Arge- ¡____! -esperó unos segundos y sonrió como si nada hubiera pasado -...Hola -volvió a apretar los labios en una sonrisa.

Frente a él, la chica que tanto había nombrado hace unos segundos le sonreía..

Estaba ahí.. ¿Esta vez era real?

Parecía que sí, su risa se escuchó bien y sus ojos se veían distintos a los de esa farsante en su cabeza.

-Hola -correspondió.

Secó el sudor de sus manos detrás de su pantalón y trató de mantener su mejor sonrisa.

-..Lindo curita -arqueó la cabeza para ver aquel adhesivo.

Arge- Ah, gracias -tocó esta misma, mirando a otro lado avergonzado.

Ambos guardaron silencio un momento, para poder apreciar sus existencia mutuamente.. O algo así.

Vamos Arge, que la terapia inexistente sirva de algo.

Arge- Bueno.. ¿Vamos yendo? -señaló el parque.

-¡Sí!, S-Sí -rio, ella también había sentido aquella extraña tensión.

Pero así como la notaron, rápido la borraron de sus mentes. Habían venido a pasarla bien con la otra persona, eso era lo único importante.

Ambos comenzaron avanzar con tranquilidad por la vereda, cada uno a una distancia moderada.

-Oh, por cierto -lo miró -¿No dijiste que pasearíamos perros?

La mitad del argento quedó tiesa al oír aquella pregunta, pero por suerte pudo seguir avanzando.

Arge- ¿P-Perros? -sonrió nervioso -¡A-Ah! Claro, sí, obvio, los perros -asintió metiéndose las manos en los bolsillos del pantalón.

-...

Arge-...

-..¿Eran.. Perros imaginarios? -miró alrededor de ellos, casi como si buscara a los perros.

El contrario sudó frío y apretó sus labios.

Arge- Pff -volvió a reír -Para nada, ya vienen en camino -la miró y ella volvió a poner su atención en él -Sólo que.. T-Tenían que tomar el transporte.. Público.

Ella parpadeó y analizó aquello.

-¿Solos?..

Arge-..S-Sí.

Todavía podías correr, Argentina.

-..¿Vamos a pasear perros.. Que saben tomar el transporte público? -abrió sus ojos y frenó su andar.

Bueno.. Ya estábamos aquí.

Arge-..Increíble, ¿Verdad? -alzó las cejas.

-Brutal -sonrió.

Los dos rieron, soltando aquel aire de tensión por fin.

Por otro lado, una pelirroja estaba en apuros, y por más buena gente que fuera, no volvería a ofrecerse de ayuda después de terminar este proyecto.

P.B.-...¿Por favor?

T.Reich- No.

Suspiró agotada.

Había llamado a todos aquellos a quienes les había pedido prestado a sus caninos y había conseguido cinco en total.

Nada mal.

Y serían seis perros corriendo rumbo al parque junto con ella, si no fuera por un pequeñísimo inconveniente.

P.B.- P-Pero.. Es que es algo urgente, de verdad -miró con preocupación al nazi.

Él la miró unos segundos en silencio y se cruzó de brazos mirando al suelo.

T.Reich- Bueno.. Tal vez si lo pienso.. Amm -los ojos de la chica brillaron en esperanza -..No.

P.B.-...

Arge le iba a deber más de una..

P.B.- Mira, escucha Thir-

Al contrario alzó la ceja.

P.B.-..Eh, ¿Reich? -parpadeó.

Él frunció el ceño.

P.B.-.. S-Señor -apretó sus manos detrás de su espalda -V-Verá, es un asunto de vida o muerte.

T.Reich- ¿Eso qué tiene que ver con mi Blondi?, Ella no es doctora.

P.B.- De vida o muerte social -insistió.

El hombre hizo una mueca y rodó los ojos.

T.Reich- No sé qué te dio la osadía de venir a mi casa por mi presiada hija y pretender que podías llevártela sólo porque sí.

P.B.- Pero esta casa no es suya.. Y Blondi es de Alemania -el gesto de ofensa total se reflejó en el de tez roja -A-Además, ya le había pedido permiso a Ale.

T.Reich- Ay~.. Es una pena total -fingió tristeza.

P.B.- Per-

T.Reich- Mi Blondi es fina y.. -miró a los otros caninos que iban con correa -No dejaría jamás que se junte con perruchos de la calle.. Mucho menos que la cuides tú -la miró de arriba abajo.

Bajos lo miró lentamente de manera fulminante, borrando todo rastro de mied- digo respeto.. O lo que fuera.

Third no esperó a que respondiera y se movió para cerrar la puerta, pero aquel intento falló, pues la femenina puso el pie bruscamente.

T.Reich- Oye, eso cuenta como allanamiento a casa ajena -señaló el zapato -Llamaré a las autoridades.

P.B.- Escúcheme bien, señor "Soy raza superior" -finguió la voz e hizo una mueca.

El nazi estuvo por hablar pero la neerlandesa golpeó la puerta en un intento de abrir.

P.B.- Blondi irá conmigo quiera o no.

T.Reich- N-

P.B.- Mi amigo está en una situación crítica ahora mismo, y si no le llevo estos perros ya, quedará más idiota de lo que se despertó hoy.

T.Reich- ¿Y a mí qué me importa si tu amigo es idiota o no?, Búscate otros amigos -empujó la puerta.

P.B.- ¡Comprenda! -puso resistencia -¡Su nueva vida y salud mental dependen de esto!

T.Reich- ¡Mi Blondi sigue sin tener nada que ver! -miró a la perrita llegar, pues había oído su nombre.

P.B.- ¡Es la más importante! -intentó empujar con los dos brazos ahora -¡Según mi investigación ella es.. -casi se resbala -Ella es la que mejor se lleva con ____ de todos estos perros!

El chihuahua ladró levantándose de su lugar, muy enojado por aquel comentario.

P.B.- ¡Sht, sígueme la corriente, Paco! -murmuró viendo al perro.

T.Reich- ¿____? -frenó, pero no dejó de hacer fuerza para cerrar -¿Esa niña que tiene que ver con todo esto?

La chica notó su clara curiosidad y sonrió.

P.B.- ¡S-Sí! Ella.. Ella está con mi amigo ahora mismo.

Se giró tratando de empujar con la espalda. Mientras tanto los perros veían entretenidos aquello.

P.B.- ¡Todos fueron seleccionados cuidadosamente para que esto funcione, así que tengo que llevárselos a Argentina para que tengan una actividad diver- AAAH!

Cayó de espaldas, soltando un gran quejido por el golpe. Pero fue consolado por los lenguetazos de alguien más.

P.B.- Ah- ¡Blondi!, ¡Espera, espera! -rio intentando alejar a la canina.

Miró hacia arriba y encontró al nazi observándola confundido.

P.B.-...Y-

T.Reich- Repítelo otra vez -la detuvo -¿Dijiste.. Argentina?

P.B.-..¿Sí?

T.Reich-...

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Arge- Mmh, no -tragó -No podés.

-¿Qué? -lo miró desconcertada -¿Cómo que no?

El chico se limpió los restos de algodón de azúcar y la miró.

Arge- Simplemente no podés -volvió a tomar otro pedazo -Nadie se escapa de EU.

-Pero.. Me pude escapar de OTAN -alegó.

Arge- OTAN no es igual a EU -negó -Si él pudiera preferiría no tener que relacionarse con nadie.. Y el campo de ataque de EU está en cómo se relaciona.

La chica se tomó de las cuerdas del columpio y miró el suelo devastada.

-..¿Y qué voy a hacer ahora? -soltó.

Arge- Estás acabada -la miró de reojo.

-..¡Ya sé! Me puedo escapar en algún descanso con ayuda de alguien -lo volvió a mirar sonriente.

Arge- Amm.. No lo sé, no creo que nadie quiera arriesgarse a quedar en la mira de EU.

-Per-

Un tono de llamada la interrumpió.

Ambos se miraron y al instante el argento reconoció su celular, pero al ver de quién se trataba casi se ahoga con el pedazo de dulce.

Arge- Eh, dame un segundo -le entregó el algodón de azúcar.

Ella lo miró curiosa para acomodarse en su asiento y darle una mordida al dulce.

Arge- ¿Hol-

P.B.- ¡Argentina! Rápido, necesito tu ayuda.

Arge-..¡Oh!, ¡Chile, hola! -miró de reojo a su acompañante -¿Q-Qué pasó?

-¿Es Chile? -sonrió -Mándale mis saludos.

Arge- Obvio -rio nervioso -¿Oíste? ____ te manda saludos.

P.B.-...

Arge-..¿En serio? Jaja, no me digas -miró a otro lado intentando mantener la calma.

P.B.- Arge, necesito tu ayuda, Reich no me quiere dar a Blondi y la necesito.

Arge- ¿A-Ah?, ¿Qué tiene que ver eso con esto? -volvió a fingir que reía.

P.B.- Estoy intentando qu-

T.Reich- Argentina, ¿Estás con ____? -se escuchó de golpe la voz, tanto que tuvo que alejar el teléfono de su oído.

Arge- S-Sí, ¿Por? -miró de reojo a la mencionada.

T.Reich-..¿Qué está sucediendo?, No pienso dejar a Blondi al cuidado de alguien tan..

Escuchó gritos de la otra línea, así que se levantó, le hizo una señal a ____ con una sonrisa y se alejó un poco.

Arge- Basta, no estoy entendiendo nada.

P.B.- Reich no me quie-

T.Reich- ¿Están tú y ____ ahí? -volvió a interrumpir.

Arge- Ah, sí, pe-

T.Reich- ¿Solos?

Arge-..¿Sí?

Oyó unos gritillos y unas cuantas risas.

Arge- ¿Qué suce-

T.Reich- Ay niña, hubieras empezado por ahí.

P.B.- ¿Qué?

T.Reich- Eres un genio, Argentina, impresionarla con el control de la raza más leal del planeta.

Arge- Pará, pará, ¿De qué me hablas?

T.Reich- Ni siquiera te preocupes, tendrás todo lo que quieres lo más rápido posible.

El argentino quedó más confundido al oír más sonidos de alegría y quejas de su amiga.

Arge- Pero.. Third-

T.Reich- ¡¡POR FIN VOY A GANAR UNA APUESTA AJAJAJAJAJAJ-

Y se colgó.

Arge-...

Se separó del teléfono para mirarlo unos segundos, empezando a preguntarse que tuerca se le había roto ahora al nazi.

Regresó al columpio, donde encontró a la de mechones blancos terminandose lo que quedaba de algodón de azúcar.

-¿Qué cuenta Chile? -limpió su boca.

Arge- Aah.. ¿Números? -sonrió nervioso.

Ella rio y él pudo relajarse.

Arge- B-Bueno, ¿En dónde nos quedamos? -volvió a sentarse en el columpio.

De pronto la sonrisa de su compañera se tensó, él parpadeó ante esa reacción y la miró confundido.

Arge- O mejor.. Dejamos ese tema, ¿No? -sonrió.

-Eh, sí -lo miró -Hay muchos otros temas para charlar -volvió a sonreír tranquila.

El chico asintió y comenzó a mesearse de atrás a delante.

Arge- ¿Qué tal todo lo demás? -la miró parpadear con un gesto confundido -Eh.. ¿Cómo está.. Tu familia?

-¡Oh! Claro -apretó la cuerda del columpio -Todo tranquilo, como siempre.. Sa-, m-mi mamá ya está en los últimos meses -sonrió.

Arge- El embarazo, cierto.

Miró unos segundos al cielo.. Y esperó que no se haya notado que no se acordaba de eso.

Se aclaró la garganta y volvió a hablar.

Arge- Debes estar emocionada, ¿No?

-Ah, sí -asintió tranquila, moviendo la tierra con sus pies -Será divertido, espero -sonrió pequeño.

Quizás aquello era la única esperanza propia de que todo mejorara.

Arge- Ya vi a ONU entrando en crisis  -rio, tomando más impulso para volver a columpiarse -Te apuesto lo que quieras a que es capaz de empezar a quedarse calvo del estrés -la miró.

-Si es que antes no se rapa para no tener que jalarse el cabello -tomó su propio cabello por inercia.

Arge- Trato hecho.

-¿Mmh? -lo miró llendo de un lado a otro -¿Un trato?

Arge- Si él se rapa por desesperación te deberé algo, pero si se le empieza a caer el cabello del estrés, tú me deberás algo a mí.

La chica procesó aquella apuesta, preguntándose realmente cuántas posibilidades tenía de ganar.. Y cuando vio su alta desventaja lo volvió a ver atacada. Iba a reclamar por el intento de estafa, pero se detuvo cuando el argentino le sacó la lengua divertido.

-...Bien -sonrió entrecerrando los ojos -Trato hecho.

Arge- ¡Fantástico! -alzó las piernas -Por cierto, ¿Qué tal todo con él?

Guardó silencio unos segundos, el sudaca la volteó a ver esperando respuesta, pero ella sólo miraba al suelo de nuevo.

Detuvo su balanceo confundido.

Arge- ¿__-

-Sí -soltó alzando la vista con una sonrisa -Todo bien.

Arge-..¿Segura?, Eh, ¿Pasó algo?

-¿Mmh?, ¿Por qué? -negó.

Pensó que con eso bastaría para no darle importancia al tema y empezó a pensar que otro tema de conversación que sacar, pero Argentina la seguía viendo con dudas para nada disimuladas.

-...

Arge-...

-¿P-Pasa algo? -sonrió nerviosa.

El chico se acomodó de nuevo en su asiento y la miró de reojo.

Arge- ¿No querés.. Hablar de eso? -movió una piedra cerca de ellos.

Ella observó cómo la piedra rodaba hasta salir de la zona de juegos y se acomodó en su asiento también.

No.

No quería hablar de eso.

Arge-..Si no, no pasa nada -le sonrió pequeño, no pretendía obligarla.

Ella no quería..

..¿Verdad?

¿O sí?.. ¿Quería hablarlo?

Apretó las cuerdas. ¿Si es que no quería hablarlo por qué no dejaba de preguntarse si quería hablarlo?

Arge-..A-Amm, ¿V-Viste las nubes? -sonrió nervioso -¿No te parece que tienen forma de pit-

-No sé -soltó rápido, sintiendo cómo él regresaba la mirada -..N-No sé.. Cómo hablarlo.

Arge se relajó al oír eso y asintió.

Arge- Podes.. Contarme cómo te sentís -dijo tranquilo.

Apretó sus labios indecisa.

Esto sorprendió de cierta forma al país.. ¿Qué pasó con la chica que se desahogaba en cualquier oportunidad que tenía y con quien se le atravesara?

..¿O acaso el problema era él?

-Me siento.. Nerviosa -parpadeó -Hay incomodidad y sentimientos raros que hacen que mis ojos piquen.

El argento se quedó quieto escuchando, mirando cómo jugaba con la tierra en sus zapatos.

-..Creo que quiero culparlo, culparlo de todo lo que pasa -apretó los pies sobre la tierra -Pero no puedo -frunció el ceño -Él no está haciendo nada malo ahora..

Arge- Pensé.. Que habían aclarado las cosas -la miró.

-Lo hicimos.. Creo.

Arge- ¿Crees?

-Bueno, hablamos algunas veces y él siempre dice que no quiere que recuerden los errores que cometió el en pasado.. Que intenta cambiar y mejorar.

Arge- ¿Y lo hace?

-..Sí -hizo una mueca, a lo que él contrario arqueó una ceja confundido por la reacción -Él.. Lo intenta, demasiado, y se siente extraño, aprecio sus acciones y el hecho de que en verdad quiera ser un buen padre, pero.. Para empezar, ni yo sé qué es un buen padre.

Sonrió nerviosa.

-Y no sé qué está esperando de mí -rio -¿Q-Qué quiere que haga?.. ¿Debería darle las gracias por intentarlo?

Arge- Quizás un abrazo -sonrió intentando relajarla -Quizás sea una buena forma de expresar la gratitud o cariño.

-¡Lo abrazo! -volvió a sonreir ansiosa -Yo lo abrazo a veces, p-pero es raro, no es igual.. N-No se siente bien, yo no me siento bien, d-dentro de mí no se siente bien.

Arge frunció levemente el ceño cuando notó cómo su respiración aceleraba.

-N-No entiendo -sonrío apretando los labios -Sarah me sonríe todos los días, sin embargo nunca sabe cómo hablarme, ONU m-me procura y busca que me sienta bien, intenta que nos llevemos como antes, y yo-

La voz le falló, y al instante volteó a otro lado avergonzada.

-..P-Perdón -rio nerviosa tocando su pecho en un intento de relajarse -L-Lo que quise deci-

No pudo excusarse cuando un abrazo la detuvo. Abrió los ojos, notando cómo el argentino estaba frente a ella envolviendola entre sus brazos.

Le costó un poco procesarlo, pero pronto correspondió dudosa, apretando la camisa del contrario. Este se separó después de unos segundos y la miró para ponerse de cuclillas.

Arge- Has sido muy fuerte -dijo en voz baja con una sonrisa -..Eres muy fuerte.

-..¿Qué? -pronunció dudosa, observando cómo su contrario le sonreía -No.. No, yo.. Lo que me pasa no es algo así serio -negó tallando su ojo.

Arge- No minimices tus sentimientos -negó rápido -No importa la situación que sea, es tu sentir.. No lo reprimas.

La miró aún con una pequeña sonrisa, la cual casi flaquea junto con su corazón al ver sus labios temblar.

-¿Tú no crees que soy.. Tonta o ridícula por sentirme así por algo como esto? -bajó la mirada.

Arge- ¿Tonta?.. Amm, quizás sos tontita, pero estoy seguro de que jamás sería por eso -se levantó.

Y casi al instante se quejó por una patada en la pierna que recibió, volteó y rio cuando ella lo miró con una mueca y el entrecejo fruncido. El cual no duró mucho, pues también se levantó y lo abrazó con fuerza.

Su cerebro cargó aquella información y correspondió algo nervioso, pero con una sonrisa boba.

El tontito era él.

Sintió como si por un momento el mundo se desconectara de ellos. Miró levemente hacia abajo, notando los mechones de cabello entre sus dedos; apretó sus labios y miró de reojo a la chica.

¿Qué había sido todo aquello?

No terminaba de entender del todo, ¿No sé suponía todo estaba bien?.. ¿Cuánto tiempo llevaba siendo ignorante de lo que le sucedía?..

..¿Y por qué se veía como si llevara demasiado tiempo así? Frustrada, decaída.

Era claro que le faltaba saber varias cosas, quizás no era momento ahora, pero se encargaría de comprender la situación.

Sin dudas no quería volver a verla así jamás..

Suspiró, pero volvió a la realidad cuando ella se separó.

-Ah, perdón -se apresuró a decir para girar el rostro y limpiar sus mejillas -Disculpa -rio -No pretendía que está salida fuera para.. Esto.

Él parpadeó y la miró.

Arge- No tenés que disculparte -negó y ella lo volvió a ver.

-Ah.. Pero, no quiero que pienses que te quería ver sólo para desahogarme, yo.. -apretó sus labios y después sonrió pequeño -Yo realmente quería volver a verte.

La comisura de sus labios se alzó involuntariamente al oír aquello.

Arge- Gracias por tenerme la confianza para hablarlo -solto bajo -..Yo también quería volver a verte.

Y por fin, después de un rato de tensión, volvió a ver su linda sonrisa.

Los ojos ____, por su parte, buscaron a los verdes, los cuales tenían un brillo que le causó un escalofrío extraño en el estómago, que la hizo quedarse inmóvil por unos segundos.

¿Ubicas cuando sientes movimiento en tus tripitas?

Ese que sientes cuando estás muy nervioso. La sangre se te sube a las orejas, y de pronto hay lombrices moviéndose dentro de ti.

..¿O se les llamaban mariposas?

Lo que sean, una de ellas se le fue por otro lado y ahora se estaba ahogando.

Intentó hablar, pero como si fuera un mal chiste, es ahogó con su propia saliva.. ¿Karma por reírse del argentino cuando le pasó lo mismo?, Muy probablemente.

Arge-¡Pff- Pará, todo bie-

Las risas no pudieron ni empezar bien cuando escuchó un ladrido y justo al instante fue empujado hacia la chica.

Ambos cayeron encima del columpio, soltando una queja al golpearse entre ellos. Le tomó un segundo al país darse cuenta de la situación cuando intentó sujetarse de las cuerdas.

Arge- A-Ah, ¡Perdona! -la miró con pánico al ver la cercanía -Algo me empu-

Volvió a ser empujado, esta vez haciéndolos chocar cabezas.

Otra queja se oyó, esta vez más fuerte y dolorosa, a lo que el chico intentó levantarse de una buena vez y quitarse de encima.. Pues de por sí ya la pose algo curiosa y cuestionable.

Pero sólo eso bastó para que una bola de pelos rubios, con patas y baba, que en este caso no era él, se tirara encima de ____.

Arge-...

-¡O-Oye! -se quejó al sentir los inoportunos lenguetazos sobre su rostro, generandole risas.

Bueno.. Los caninos ya habían llegado.

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-Arge se hizo pupita 🥺

-Canadá, esa no es tu familia mor 🙈

-Verdaderamente Bajos es una guerrera (EstabaBienMiada(referenciahistorica)).

-Hace poco volví a ver Hazbin hotel y el papi lucifer me recordó a cierto rojillo JAKAJAKAJKA cuack- 🦆

-Tardé un poco haciendo este capítulo ya que no estaba satisfecha con cómo estaba expresando lo que ____ sentía.

(LoTeníaListoDesdeHaceUnAño)

Duditas Dudosas??

¿Logrará Third ganar una apuesta por fin en su vida? 🐎

Teorías Curiosas??

Lo descubriremos en el siguiente episodio, EL GRAN TRIUNFO DE WOODY-

Bezosss 💋