capitulo 37

Esas grandes manos suavemente levanta la camisa celeste, le indica al de ojos color lila, que la sostenga con sus dientes. El Omega lo hace sin refutar. Está demasiado caliente como para decir que no, él solo quería navegar por cuerpo del alfa y ser rozado con su fino piel.

El de ojos dorados se queda idiotizado observado la posee seductora de su Omega, esposa. Con nerviosismo pasa su lengua por sus sedientos labios, jadea emocionado. A los segundos, el alfa se arrodilló en el piso. Baja lentamente los pantalones del Omega, solo para ver cuán emocionado se encontraba.

¿Me hará una felación? Eso....eso será demasiado bueno, ¿que tan caliente está su boca? ¿Será amable o brusco? Estoy muy seguro que, es su primera vez haciendo algo como esto...mi corazón está por explotar, esa mirada dorada me está poniendo de los nervios.

Los nervios lo golpearon severamente a Mael, es la primera vez que espera algo tan emocionado aparte del dinero. Y ver la manera en la que Karl, lo ve mientras frota el erecto miembro, con las manos. Pone aún más alterado a su agitado corazón.

—...Es mi primera vez haciendo esto....—Comenta un tanto sonrojado—Hazme saber si te lastimó para yo, poder detenerme.—Mael asintió rápidamente.—Bien—Sonrío dulcemente al verlo tan emocionado, esas mejillas están rojas.

—Tu celular está sonando.

—Deja...que suene, eventualmente se cansarán dellamar—Habla con dificulta por sostener la camisa con los dientes.

Y así fue, el celular dejo de sonar. Karl iba a seguir con lo suyo pero ese momento el celular nuevamente volvió a sonar y ya no podía ignorarlo.

—¡Es en serio, justo ahora!—Exclamó molesto.

—Contesta puede ser importante.—Sus manos siguen en el erecto miembro de Mael.

—¡No te levantes!—Advierte con una mirada penetrate, Karl solo sonríe.

Esperó que la llamada sea lo suficientemente importante, ¿Por qué sino lo es? Voy a matar a quien sea que haya interrumpido este majestuoso momento.

—No lo haré—Besa y muerde los muslos de su esposa.

Mael se estremeció al sentir la lengua de Karl, pasar por sus muslos y la forma en que sus dientes acaricia su piel desnuda.

—¿Qué sucede Camilo?—¿Por qué me llamaría? ¿Se equivocó de número? ¿Claudio no contesta?—Claudio debe de estar en....

—¡Hay unas personas que intentan llevarse a Claudio!

—¿Que?—Se baja del escritorio, sube lo suficientemente rápido su pantalón y ropa interior—¿Que no estaba en la mansión Quinn? ¿Dónde demonios están?

—¿Que pasa?—Pregunta Karl.

Deja de estar arrodillado en el piso, mira con preocupación a su Omega. Sus acomoda la camisa y cierra el cierre del pantalón de su esposa, como un fiel mayordomo, que atiende a su amo

—Claudios esta en problemas—Susurra con preocupación y muy molesto.

—Sí....Pero, después de almorzar, fui por él.....Teníamos planeado ir a jugar a la sala de videojuegos—Camilo se escucha cansado.

Ambos salieron huyendo de esas personas. Camilo, se arrepintió de no a ver llevado a su guardaespaldas. Pero, él quería estar a solas con Claudio. Un momento en amigos, sin ningún hombre de casi dos metros con rostro nada amigable, vigilandolos.

—Enviame la dirección, iré por ustedes. Encuentren un lugar donde esconderse, ¿Claudio dónde se encuentra?

—Él esta bien, te enviaré la dirección—Finalizo la llamada.

—¿Te acompaño?

—Estare bien—Apoya su frente en la de Karl—Con Nahomi basta, tienes mucho trabajo.—Puedo solucionar este problema fácilmente— Tienes que seguir ganando mucho dinero—Besa los labios de su esposo.

—¿Seguro?—Está muy preocupado.—Temo por tu seguridad.

—Estare bien. No dudaré en llamarte si no puedo solucionarlo, ¿sí?

—Bien—Lo ve marcharse, su corazón se siente inquieto.

Karl busca su celular en el bolsillo, presiona un número en específico. Está planeado en enviar un mensaje a ciertas personas que trabajan para él.

"Mi esposa está saliendo, cuidarlo. No permitas que le pasé nado o terminarán con más de una extremidad rota. Quiero que vuelva a casa justo como se fue. Luciendo hermoso y con su cabello intacto" Dejo el celular en el escritorio.

Quería ir con Mael, pero tambien sabía que su esposa es los suficientemente fuerte, valiente. Que podría defenderse sin necesidad de ayuda.

La tormenta de nieve no estaba ayudando mucho en esta situación, el tráfico también es un fastidio. Nahomi no puedo ir más rápido porque eso podría ser contraproducente. Tengo que ser paciente, pero cada minuto cuenta, los chicos pueden estar en peligro.

¿Quienes serán esos malnacidos que quieren llevarse a Claudio? ¿Son esos bastardos que dicen ser nuestra familia? ¿Cuál de las dos familias son? ¿Por parte paterna o materna?

No tengo recuerdos sobre la familia por parte de mi difunto padre, desde el momento en que murió jamás los volvimos a ver, más bien, ellos jamás aceptaron que se haya casado con Alin. ¿Oh será obra de Cade? Quién sea que sea, está deseado querer tocar el cielo.

Mael salió del auto mucho antes que, Nahomi logra estacionarse. Ella como pudo aseguro el auto y siguió a su señor. El Omega no iba corriendo pero sus grandes pasos eran como si lo estuviera.

Fuí directamente a la dirección envidia por Camilo, pude ver a cinco tipos con vestimenta extraña. No parecían ser personas comunes, ¿quiénes son? ¿Por qué quieren llevarse a Claudio?....¿Que hacen esos dos tipos aquí también?

—¡¿Por qué persiguen a unos niños?!....pervertidos—Solto un golpe.

—¡Se metieron con las personas equivocadas, pedazos de mierda!—Se lanzó sobre ellos, golpeado a diestra y siniestra.

Mael solo veía la pelea sin comprender que diablos estaba pasando. Su consternación se volvió más severa cada vez que escucha a Donovan, maldecir tan correctamente.

Entendía el porque Donovan, estaba aquí. Camilo debió de llamarle. Pero, ¿Alden? Él no tendría porqué estar en este lugar, ¿Claudio le llamó en vez de a mí?

—¡Dejen a uno vivo, necesito saber quiénes son y que quieren!—Exclamó e irritado.

—¿Mael?—La mirada de Alden, se iluminó al ver esos ojos color lila—Claudio está con Ciara—Lanzo otro golpe en la cara del tipo que tenía en el piso, medio muerto.

Por lo menos oculta esa estúpida felicidad, es tan obvió con sus expresiones en su arrogante rostro, pero frente de Mael, esa arrogancia se esfuma....¿Mael lo sabe? ¿Sabe que este alfa estúpido está enamorado de él?

Donovan dejo de golpear a los tiempos, pasó junto a Alden, casi le disloca el hombro por el gran golpe que le dió cuando paso a la par de él.

—Ellos dos están bien.

—¿Por qué no avisaron que estaban aquí?—De esa manera no hubiera venido, estaría disfrutando de dicha felación.

Puede que suene insensible y un mal hermano por mi pensar, pero asi soy. En mi vida he dado demasiado por los demás, nunca me había puesto en primer lugar por toda la culpa acumulada en mi, eso me llevó a un punto donde no podría reconocerme.

En esta vida, por el tiempo que me queda, quiero dedicarlo solamente a mí....tal vez está sea mi última vida y jamás vuelva a reencarnar. Por lo que, si alguien más ayuda a Claudio, mientras estoy ocupado, lo aceptaré. Porque confío en Donovan y Alden.

—De todas maneras, gracias—Les agradeció sinceramente—Pero, ¿Que hacen aquí? ¿Los dos?—Los ve fijamente, esa mirada les dió una sensación extraña a ambos alfas.

—¿Acaso ustedes dos....?

—¡Hermano Mayor!—Corre abrazarlo—Estas aquí—Expresa aliviado—Fue aterrador.

Puedo sentir un pequeño temblor proveniente de su cuerpo, debió o sigue demasiado asustado. Después de todo solo es un adolescente.

—Ya estoy aquí—Corresponde el abrazo—Todo está bien, ya estoy aquí—Besa la coronilla de Claudio.

Mael se siento un tanto mal, desagradable, molesto. Ver a Claudio en este estado, fue como verse así mismo en esas vidas donde tenía que luchar por un poco de comida para poder sobrevivir. Dónde lloraba del porqué era un huérfano, y al recordar sus demás vidas era aún más peor. Porque seguía reencarnado en una persona que ni siquiera tenía un lugar al cuál llamar casa.

Donovan siento una envidia y una enorme incomodidad en su pecho, no quería sentir así, pero no logra contralor esa sensación. Ver de esa manera a Mael, tan cariñoso, preocupado por Claudio, es complicado de ver.

Está vez fue el Alden, quién no comprendía esa reacción en el rostro de Donovan, era una de envidia pero a la vez triste. Esos ojos azules muestran un profundo anhelo.

—Me disculpo, Mael—Camilo baja su mirada—Él no quería salir y yo le insistí.

—No es tu culpa—Expresa ambos hermanos.

—Pero, tendrás que invitarme a una bebida por toda una semana...Y gracias.—Sigue escondido su rostro en el pecho de Mael.

Claudio recordó ese momento cuando Camilo, saco toda su valentía y le dió un severo puñetazo a una de esas personas tiradas en el suelo. Evitando que se lo llevarán.

—¡Tantas como quieras!—Sonrió ampliamente.

¡Huh! Esa expresión es rara, sus ojos brillan al ver a Claudio.....¿Está interesado en Claudio y no seda cuenta de ello? Cómo sea, un día lo va a descubrir.

—Nahomi, encargarte que todo esto no llegue a los medios...

—Ya me encargue de eso. Ciara despejó todo esté lugar y fue a tomar las cintas de las cámaras de seguridad.—Le da una sonrisa de; "Darme un elogió"

—Que no se te olvide que este centro comercial es de mi familia, yo le di el permiso de que fuera por las cámaras de seguridad—Aclara Donovan.

—Gracias por su eficiencia—Hablo con sarcasmo.

—¡Karl!.

Abraza por detrás a Mael, sus manos son posicionadas en la espalda de Claudio. Le da unas palmaditas en esa pequeña espalda temblorosa.

—¡Te dije que podía solo!—Gira un poco su rostro para poder ver ese color dorado de su alfa—Eres muy desobediente—Muerde el cuello de Karl.

No negaré que estoy feliz de que haya venido, ser su prioridad en vez del trabajo, eso causa una sensación difícil de explicar. Se a ganado unas cuantas muestras de cariño.

Karl ve directamente a, Alden. Le da una mirada y una sonrisa extremadamente arrogante y llena de superioridad que dicen; "Lo vez, le pertenezco a él y él me pertenece a mí, es mío. Ni siquiera lo intentes, no tienes ni la más mínima oportunidad" Descubre un poco el cuello de Mael, dejado ver esa mordida.

Alden sintió que su corazón fue perforadora con la cruel realidad, Mael no podrá verlo de diferente manera. Para el Omega, solo es el buen jefe y amigo confiable.

—Les prestaré una sala de este lugar, para que puedan interrogarlos—Donovan se paró enfrente de Alden, cubrido al lamentable alfa y evita que siga viendo las muestras de afecto del par de esposos.

—¿No abra problemas con tus padres?—No quiero verlos.

—No. Pueden usar la sala tres de este piso.

—Bien—Mira a su esposo—¿Quieres acompañarme?

—Ire a dónde vayas—Besa la mejilla de Mael.

—Claudio—Aleja a su hermano de sus brazos—Regresa a casa—Mira a Donovan y a Alden—¿Pueden llevarlo?

—Por supuesto—Hablan al unísono.

—Bien, luego los invitó a una bebida. Claudio, ve con ellos.

—¿Estarás bien?

Por mi culpa mi hermano mayor esta en aprietos. ¿Hasta cuando le seguiré causado problemas? Soy tan inútil, se supone que soy un alfa, pero eso no quieta el echo de que solo soy un adolescente en crecimiento.

—Sí, aparté tengo a mi esposo—Golpea suavemente, el pecho de Karl.—Él va a protegerme.

—Asi es—Su expresión se volvió sería—Nunca permitiré que salga lastimado, ni él y ni las personas que son importantes para él.

—¿Lo promete?

—Lo juró—Responde sin titubear—Amo a tu hermano, su seguridad y bienestar estarán primero, siempre....y no, no estoy fingiendo, estoy perdidamente enamorado de mi Omega, loco por el dinero—Susurró eso último, pero Mael lo escucho a la perfección.

No puedo notar ninguna mentira, ni en sus voz y tampoco en esos ojos dorados. Todo lo que dijo es verdad, está enamorado de mi hermano mayor. ¿Mael también lo está? Su sonrisa es mucho mas brillante al igual que su mirada al tener cerca al cuñado.

El matrimonio paso de falso a uno real, quién podría imaginarlo. Estoy seguro que ni Mael se esperaba tal desenlace, pero estoy feliz por los dos. Mi hermano está recibido la felicidad que se merece.

—Bien. Te enviaré un mensaje cuando esté en casa.

—Eso suena bien.

—Don—Mael pone sus manos sobre los hombros de este—Gracias—Sonrío—Muchas gracias....hermano—Susurró para si mismo, Donovan no logró escuchar, fue demasiado suave.

Pero podía leer los labios, a descifrar lo que había dicho Mael. Su mente salió de órbita, estaba sorprendido por saber que le había dicho hermano y se preguntaba del porqué lo susurró con esa expresión melancolía.

—Puedes pedir mi ayuda cuando lo necesites.

Queria abrazarlo, hacerlo lo mismos que hizo con Claudio, hace unos momentos  Preguntarle del porqué me llamó así y no se atrevió decirlo en voz alta.

—Lo tendré en cuenta—¿Por qué tiene esa mirada? Cómo sea—Gracias a ti también, Alden. Dile a los chicos que un día de estos iré al club.

—Bien, les diré.

—Vamonos—Expresa Donovan.

Mael los vio marcharse, al ya no verlos, su semblante cambia por completo. Karl también logro ver esa diferente aura a su alrededor. Eso encendió al alfa, ver tan dominate a Mael, lo hizo estremecer.

—Nahomi, Francis, llevar a eso tipos a esa sala.

—Como ordené—Ni siquiera intentaron cargarlos, ellos los arrastran de los brazos con brusquedad, más de alguno fue estrellado contra la pared en el transcurso del camino.

—Tranquiliza esa cosa entre tus piernas—La agarra con sus manos—Eres un pervertido—Sonríe—¿Oh te has vuelto un maníaco sexual?—Froto suavemente ese emocionado miembro.

—No lo sé—Responde honestamente—.Me excite al verte con esa mirada fría, extremadamente dominate. Te vez tan malditamente seductor. ¿Me estás seduciendo a propósito?

—Yo, ¿Cómo puedes pensar eso?

—¡Uhg!

Mael movió más rápido sus manos, Karl está siendo torturado. Deseaba no tener esos entrometidos pantalones.

—Terminemos con esto y terminar lo que empezamos en al oficina.—Karl solo asintió.—Vamos.

Ambos arrastran los últimos dos, en sus ojos solo se puede ver una mirada fríamente y muy sanguinaria, se desquitaran con ellos, por ver causado tal alboroto e interrumpir su momento caliente.

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