ABURRIDA, ESA ERA LA PALABRA QUE DESCRIBIA A MIA CADA MAÑANA por qué bueno su rutina solo consistía en levantarse, vestirse, desayunar e irse a la escuela y esa mañana no fue la excepción.

Para su atuendo esa mañana decidió robarle una camisa de vestir a su madre de color azul y ponerse unos pants de color gris con sus tenis color blanco, Seabrook tenia que conformarse con eso por qué ni en sueños volvería a usar algo tan corto.

Sin ganas de desayunar y sin su madre en casa decidió solamente tostar un pan e irse inmediatamente a la escuela, pues estaba ansiosa de encontrarse con su hermano y si fuese honesta también a Zed, pero sobre todo quería encarar a Addison por lo de anoche.

Y tal parecía que la suerte estaba de su lado ya que en cuanto ella salió, Addison también lo hacía, haci que se acercó hacia ella.

—Hola. . .— saludo tímidamente hacia la rubia.

—Hola, ¿quieres venir conmigo? — pregunto Addison ilusionada

—No la verdad es que no, ayer vine a buscarte pero tu madre me dijo que estaba dormida, no quise molestarte, pero ahora quiero preguntarte. . .si Bucky no hubiera arrancado presa del miedo y se hubiera quedado dime. . .¿en verdad tu y Bree le hubieran tirado huevos a esa casa? — pregunto Mía incrédula hacia Addison.

—Mía, déjame explicarte — comenzó a excusarse Addison.

—Solo respóndeme, ¿quieres? ¿Lo habrías hecho si o no? — pregunto Mía impaciente ante la situación.

—No, por supuesto que no — respondió finalmente Addison firme.

Mía soltó una carcajada

—¿Encerio? ¿Lo hubieras hecho si eso significaba ser animadora? Repítelo hasta que te lo creas — le respondió burlona mientras comenzaba a caminar

—A todo esto, ¿cómo es que sabes que fuimos a ciudad zombie? — pregunto Addison incrédula.

¡Mierda! Penso para si misma Mía, ahora estaba obligada a decirle la verdad.

—Escuche en la practica de ayer como Bucky hablaba de una iniciación, y vamos, viniendo de él nada bueno se espera, así que los segui y vi como te daba esa charola de huevos a ti y a Bree, si te soy honesta en verdad creí que lo harían — admitió Mía sin mirar a Addison.

—Lo lamento Mía, de verdad, no sabía que era el hogar de tu hermano — se disculpó la rubia con la menor de los Crookets.

—No es conmigo con quien deberías disculparte, Addi — respondió burlona Mía hacia Addison.

—Me dijiste Addi, ya es un avance ¿me acompañarás a los sótanos? — pregunto esperanzada Wells

—Talvez. . .— respondió vagamente la rubia

HABIAN LLEGADO BASTANTE TEMPRANO, POR LO QUE SE DISPUSIERON A HACER UNAS CUANTAS TRAVESURAS COMO EN LOS VIEJOS TIEMPOS.

—Encerio extrañaba esto — admitió Mía mientras se recargaba en uno de los casilleros

—También yo — le secundo Addison con una sonrisa — ¿ya estamos listas para esa conversación?

—Talvez, pero un poco más adelante quizá — respondió Mía sin tomarle importancia.

Addison reviso la hora en su celular notificandole que pronto comenzarían a llegar los demás estudiantes y también el hermano de Mía.

Por suerte ese día, ambas compartían clase de español, así que se dirigieron al salón a dejar sus cosas y luego bajaron al sótano, hasta que en medio camino a Mía le llegó a la mente lo que Zed le había dicho la noche anterior.

—Sabes lo irónico de esto, es que olvide hacer la tarea de español y bueno ya sabes como es esa profesora así que será mejor que regrese a hacerla o si no. . .— trataba de excusarse la menor de las Crookets para evitar ir al sótano

—Mía. . .— la detuvo Addison antes de que se fuera — no hay tarea de español, ¿no quieres acompañarme?

—Si, si quiero — respondió rápidamente — es solo que, bueno, pasó algo anoche que. . .

—Te dijeron algún cumplido ¿no es así? — pregunto divertida Addison

—Si, odio no saber responder cuando me dicen algo lindo — admitió Mía comenzando a caminar a un lado de Addison.

—Muy pronto lo sabrás — respondió Addison al mismo tiempo que llegaban al salón donde estaban los zombies

—Bien, vamos, tú eres la que tiene que disculparse, abre la puerta — alentó Mía, Addison simplemente rodo los ojos divertida, por lo que sin quedarle de otra habrío la puerta entrando ambas silenciosamente.

Hasta que desgraciadamente se dieron cuenta de su presencia

—Hey, ningún estudiante humano puede estar aquí — les hablo quien aparentemente era el conserje y también el profesor

Fue cuando todas las miradas se posaron sobre ellas

Mía le dio un codazo a Addison para que hablara

—Am. . .alguien vomito en la cafetería — mintió, aunque se escuchó bastante convincente.

—Es cierto sigo siendo el conserje — respondió el profesor, por lo que tomó sus productos de aseo y salio del salón

—Lo siento — se disculparon ambas chicas mientras se hacían a un lado y abrían más la puerta.

—Esta bien — contestó el conserje sin ganas llendose del lugar

Hasta que Steven se acercó a ambas

—Hola Evie — saludo a su hermana — Addison ¿qué haces aquí?

—Disculpandome, anoche era una iniciación, se que no es una gran excusa — admitió apenada la chica

Mía sintió que en verdad hacía mal tercio en aquella conversación, por lo que se alejó de ambos lentamente, encontrándose con la última persona que quería ver

—Hola Mía — saludo Zed

Ella simplemente lo miró perpleja, sin saber que decir, solo lo saludo con un gesto de su mano

—Oye Mía, los que te dije ayer, yo no quería incomodarte, lo lamento — se disculpó Zed, acercándose a la chica

—No hiciste nada malo, es solo que no estoy acostumbrada a que las personas me digan cosas lindas, es todo — admitió la menor de los Crookets con algo de pena

—Pues acostumbrate, por qué no dejaré de decirte que encerio eres linda — comento divertido Zed

Las mejillas de Mía no pudieron evitar ponerse de un color rojizo

—Por favor no lo hagas — pidió tapándose la cara debido a su sonrojo

—Mía, solo hablo con la verdad, es todo — respondió Zed, mientras tomaba sus manos y las apartaba de su rostro

—Supongo que ¿gracias? No se como reaccionar ante los elogios — confeso con una mueca

—Con una sonrisa tuya es más que suficiente — respondió Zed observándola — por cierto ven, te presentaré a Bonzo y Eliza

La tomo de la mano y la llevo con dos zombies más, ella les sonrió a ambos

—Chicos, ella es Mía, es de quien les hablé — presento Zed a ambos

—Hola, un gusto — respondió Mía hacia Bonzo, mientras le extendía su mano para que la tomara, el lo hizo y la sacudió muy fuerte.

—Ok, no más de eso — los detuvo Zed, separando sus manos, luego se dirigieron a Eliza

—Hol, ¿qué tal? — se presentó Mía con una sonrisa, mientras la observaba de arriba a abajo, amaba su ropa — me encantan tus aretes ¿los hiciste tú? Y tus guantes, deberías de enseñarme a hacer unos así

Eliza simplemente la miro perpleja, y sin quedarle de otra ella también le sonrió.

—Claro, si tu me enseñas a hacer pines así — respondió Eliza apuntando a los pines que tenia en su camisa de vestir

—Trato echo — acepto Mía estrechando su mano gustosa.

Luego se alejó de ambos y regresó con Zed.

—Creo que si les agrado — anuncio Mía observándolos a ambos

—Te dije que les agradarías, eso es lo que provocas Mía, le agradas a cualquiera — le hablo Zed con una sonrisa.

—Eso quiero creer — respondió vagamente mientras observaba como Addison se hiba —tengo que irme por cierto habra un evento esta tarde, iré a ver a Addison, así que espero verte. . .verlos — se corriguio rápidamente apenada y con las mejillas sonrosadas — a ustedes cuatro

—Los Zombies no van a eventos — intervino Eliza con una sonrisa, lo que provocó que Mía borrara su sonrisa y Zed la mirada mal

—Vamos a pensarlo — respondió Zed antes de que Mía se fuera

Lo que ocasionó que volviera a sonreír

—Bien, los veré luego supongo — se despidió de los tres, pero antes de que pudiera atravesar el umbral de la puerta regresó a donde Zed dándo un salto para darle un beso en su mejilla — velo como un agradecimiento a lo que me dijiste, te veo luego.

Fue lo único que dijo antes de irse de ahí con una sonrisa en su rostro, dejando a un Zed que, debido a su palidez, se había puesto sumamente rojo lo cual le era notorio.

—¡NI LO PIENSES ADDISON NO VOY A HACER ESO! — se quejó Mía por milésima vez ese día.

—Por favor, vamos, solo tienes que hacer lo mismo que yo, y te lanzaremos en el aire pero tranquila, te prometo que te atraparán — le suplico Addison, a lo que Mía solo hizo un puchero.

La razón por la cual Addison se encontraba suplicándole a Mía se debía a que suplantara a una de las animadoras ya que una de ellas se había enfermado y no podría asistir al evento.

—No y no y mil veces no, te lo digo encerio Addison — respondió finalmente haciendo un mueca

—Por favor, prometo compensarlo — suplico Addison por última vez esperanzada a que Mía dijera que si.

Mía finalmente aceptó disgustada y los gritos frenéticos de Addison no tardaron en ser escuchados

—Genial, tenemos que ir por tu uniforme — respondió Addison mientras la arrastraba hasta donde los animadores se preparaban

—Mientras no sea algo muy corto. . .— comenzó a comentar Mía mientras se dejaba ser arrastrada.

—Bueno, no está tan corto — admitió Mía observándose en el espejo

—Te lo dije, ahora solo falta ponerte un moño y no hay quejas es oficialmente requerido — le hablo Addison mientras se acercaba y comenzaba a peinar su cabello, cuando finalizó le puso un moño rosa como toda animadora

—Ya estas lista, te ves hermosa — anuncio Addison observándola de arriba a abajo.

—Supongo, aunque sinceramente no es mi estilo — admitió aún observándose en el espejo — tengo que irme, vere si Zed. . .quiero decir mi hermano y los demás ya están aquí — se excusó saliendo rápidamente de ahí con las mejillas sonrosadas y dejando a una Addison sonriendo de oreja a oreja.

Cuando por fin se había calmado, vio como su hermano, Zed, Eliza, Bonzo y otros Zombies estaban ahí subiendo a las gradas, decidió acercarse a ellos para darle el gusto a su hermano de verla con su uniforme de animadora.

Se acercó hasta ellos con una sonrisa pícara en su rostro.

—Hey, bola de sesos, espero darte el gusto ahora si por qué créeme no va a volver a verme con algo tan horrendo — le hablo a su hermano para que le prestara atención a ella e inmediatamente todas las miradas se fueron hacia ella.

—Pudieron venir, creo que eso es avance, ¿no es así? — pregunto divertida hacia Zed, Eliza y Bonzo.

Ambos le respondieron con una sonrisa, mientras que Eliza simplemente hacia una mueca.

—Esos supongo, ¿la próxima vez que nos veamos no me golpearás? — pregunto divertido Zed acercándose a Mía.

Ella sonrió divertida

—Depende la situación — respondió de la misma forma, miró hacia un lado y vio como Addison le hacia una seña para que bajara — tengo que irme, espero verlos luego.

Tanto Zed, Steven y Bonzo se despidieron de ella con una sonrisa y sin que nadie lo notara Eliza también.

Cuando Mía bajó inmediatamente se pocisiono como Addison le había indicado y simplemente siguió lo que las demás hacían, le dieron la "fabulosa" entrada de siempre a Bucky y comenzaron con la coreografía.  Mía simplemente hacia lo que las demás, pues no sabia absolutamente nada de porristas, solo esperaba que desde donde la veian su hermano y amigos fuera creible que deverdad se sabia la coreografía.

El evento siguió tal y como Addison le habia dicho, hasta que vio como Bucky y otros mas sacaban bastones que desprendian fuego, esto enfado a Mía pues sabia que su hermano y los demás zombies temian al fuego, pero desgraciadamente no pudo hacer nada ya que en ese momento tenian que arrojarla al aire a ella y Addison, literalmente, por lo que simplemente siguió con la coreografía.

Mientras estaba en el aire podia escuchar los gritos de la gente, algo había pasado, por supuesto que algo había pasado, pero se alarmo al ver que nadie estaria abajo para atraparlas, asi que reprochandose por haber aceptado esa estupida propuesta se regaño tontamente al haber sido tan ilusa y justo cuando veia cerca como se estrellaria en el suelo, sintio cómo unos brazos la atrapaban, Mía abrio los ojos sorprendida y sonrio al ver a Zed qien la habia atrapado.

—Hola — le saludo con una sonrisa

Mia inmediatamente lo abrazó, pues pensó que esa vez en verdad no hiba a contarla, miro de reojo como su hermano habia atrapado a Addison, sonrió y arrugó la nariz al verlos, hasta que el grito del entrenador los hizo separarse.

—¡Ustedes dos, tenemos que hablar! — les gritó

Los cuatro se miraron preocupados, pero no les quedaba de otra más que ir, asi que dejaron que las chicas se levantaran primero y luego ellas los ayudaron a hacerlo también.

Zed y Steven se despidieron de ambas con una sonrisa, aunque Mía los veia preocupada por lo que pudiera pasarles, asi que ignorando las palabras de Addison decidio seguirlos a una distancia considerable.

El entrenador se los llevaba a la oficina de la directora Lee, y cuando entraron no le quedo mas remedio que esperar afuera, pasaron unos 5 minutos aproximadamente hasta que su hermano salio de ahi con una sonrisa en su rostro, Mía lo miro confundida.

Hasta que Steven se dio cuenta de que ella estaba ahi, no dudo ni por un segundo en abrazarla.

—Evie, deberias de ser animadora más seguido, ¡mira lo que nos consiguió! Tengo que presumirle a Eliza — le hablo su hermano aún mientras la abrazaba, hasta que se separo abruptamente de ella y salio corriendo.

Mia solto una leve risa y luego miro a Zed.

—Bien, creo que me perdi de algo ¿que fue lo que paso? — pregunto entre risas al recordar la reacción de su hermano.

—Estaremos en el equipo de fútbol — admitió Zed emocionado, a Mía inmediatamente se le agrando la sonrisa.

—¿¡De verdad?! Zed, eso es genial — lo felicito Mía mientras le daba un abrazo — estas avanzando bastante, por cierto gracias por salvarme ahi en el evento, senti que no la contaba. — le agradeció con una sonrisa mientras se separaban

—No fue nada Mía, todo eso tuvo algo nuevo, si ganamos los partidos los zombies empezaran a ser incluidos y ya no tendremos clases en el sótano —

—Eso es genial, hasta talvez podamos compartir clase, pero. . .¿obtuviste una garantia no es asi? — pregunto obvia al saber como era la gente de Seabrook

—La directora Lee dejara que los zombies entren a la cafetería, asi que. . .te veo en el almuerzo — se despido de ella dandole un fugaz beso en su mejilla dejando a una Mía bastante sonrojada.