8.Caótica.

Narrador Omnisciente

Izuku estaba en la cocina preparando su desayuno con completa calma, sus días ya no solían ser tan enérgicos como antes. Una semana desde que vio a Ochaco había pasado, tres días desde que vio a Tsuyu por la calle y hoy sólo no saldría de casa. Su jefe le notifico que tendría veinte días libres mientras tras él se iba de viaje, Izuku tomó esto como su descanso, después de preparar su desayuno se dirigió a la ducha para luego perderse entre lo cálido del agua.

El tiempo pasó sin anestesia, los pensamientos de Izuku sólo eran vacío, ya no mantenía su mente en ningún lado, cual robot eran sus movimientos y sin gracia sus pensamientos, al salir de la ducha algo en su cabeza dio tic y su cuerpo se tenso, había algo que no era normal, una presencia descomunal e imponente, estaba muy lejos pero aún así volvía loco su quirk de Sensor de peligro, solo una idea llegó a la cabeza de Izuku.

Izuku: -Que problemáticos...-

La noche llegó con un silencio inevitable, Izuku por primera vez en todo el día encendio el televisor en el cual sólo pasaban temas heroicos, lo normal, se preparaba un café mientras tenía la televisión encendida, el olor al café cargado era muy adictivo. El timbre de su departamento sonó y este utilizó su Quirk de látigo negro para abrir.

Izuku: -¿Quién es?. -

Mirio y Aizawa asomaron la cabeza hacia dentro del departamento pasando al escuchar la voz sin responder por varios segundos,

Izuku: -Hola, Maestro, Mirio, Ochaco. Cuanto tiempo - Izuku arrastró con su Quirk de látigo negro a Ochaco quien estaba esperando fuera escondida.

Mirio: -Hola Izuku, disculpa el molestarte, huele delicioso.-

Izuku se acerco a ellos y tomó una mejilla de Ochaco apretandola algo fuerte.

Izuku: -Les dijiste, ¿verdad?.-

Ochaco: -Perdón, perdón, ellos lo pidieron- Uraraka le daba palmaditas en la mano de Izuku para que la soltara lo cual hizo después de unos segundos.

Aizawa: -Creí que debías saber lo que ha sucedido.-

Izuku volvió a la cocina apagando la hornilla del café mientras Aizawa seguía contando.

Aizawa: -Eri no está en la UA - Por un segundo Izuku se detuvo mientras seguía sirviendo su cafe. -Desde hace unos días limitar sus poderes se estaba volviendo un caos, su quirk, podía limitarlo pero yo no podía estar siempre con ella. La aislamos para que pudiera estar mejor y sin miedo de tocar nada, pero ayer desapareció de una habitación que estaba en estado de cuarentena en la UA.-

Mirio: -Revisaron las cámaras, habitaciones, cuadras y casi la ciudad completa intentando no alarmar a las personas. Parece que... Desapareció. -

Izuku: -Debería ser un asunto de héroes. Agradezco que me hayan avisado ya que es mi amiga pero. Yo no puedo hacer nada para ayudarlos.-

Aizawa: -Nadie te esta negando tu placa, si lo decidieras podrías ser el Símbolo de Paz y todos los héroes estarían de acuerdo.-

Izuku: -No tengo dudas de eso.-

Ochaco: -Entonces, ¿por qué no... ? - Ella no pudo terminar de hablar ya que fue interrimpida.

Izuku: -No confundan las cosas, un héroe no mata, no miente y no intercambia vidas, su manera de ver a los héroes es muy diferente y lo note hace tiempo. Si los políticos pueden aceptar mis condiciones yo no tendré problema en trabajar con ellos, pero no lo aceptarán, porque ellos necesitan marionetas y no héroes, "Salvar a Tomura fue un error", eso fue lo que todos dijeron. Pura mierda.- las manos de Izuku empezaron a hacer algunos gestos enojado por todo, y su mirada se volvía firme. -Si fuera sido Kurogiri usted habría hecho lo que yo hice-Izuku toco el pecho de Aizawa de manera firme pero este solo lo miraba a los ojos casi igual de enojado.

Aizawa: -Shirakumo no hizo cosas como las que hizo y podrá hacer Tomura ahora que está libre.-

Izuku: -Y aún así, ¿con cuantas personas muertas carga?, ¿cree de verdad que Tomura es diferente?, solo fueron personas que se vieron en mitad de un montón de sucesos y malas influencias, cargan con la mismas responsabilidades. ¿O es que acaso las vidas en los hombros de Tomura tienen más peso?.-

Aizawa: -No hay vidas más importantes que otras, no saques cosas de las que no estamos hablando.-

Mirio: -Vamos, ya deberían calmarse. Venimos por Eri.-

Mirio intento calmar las mareas, pero unas simples manos no podrían detener las corrientes del mar, Izuku se alejo de Aizawa pero su mirada seguía igual de firme.

Izuku: -Dices eso, pero aún asi deseas a Tomura dos metros bajo el suelo y a Shirakumo en una cárcel de condado. Eso es preferencia, pensé que los héroes no la tenían.-

Aizawa: Aizawa camino a la puerta sin cuidado. -¡Nos vamos!.- Aizawa salió de aquel lugar sin cuidado alguno, Mirio con completo cuidado salió algo incómodo, Ochaco por otro lado se quedó unos segundos para luego seguir a su maestro cerrando la puerta tras de ella y con una completa carga de culpabilidad en su mente y pecho.

Izuku tomó su taza de café y camino al baño, abrió la llave de la tina y se metió dentro sacando su celular de sus bolsillos, tomaba de su taza de café mientras la fría agua lo cubría, se sentía fantástico pero era poco natural, solo quería relajarse, un minuto de paz era lo que quería, adoro aquel silencio aturdido y pensamientos vagos.

Izuku: -Ya no me gustan las visitas. Soy como un anciano.-

No fue mucho tiempo el que pasó ahí, después de sumergirse en el agua sintió una tranquilidad indescriptible pero una vez más un tic dio en su cabeza obligándole a salir de la tina y cerrando la llave del agua, su taza de café ya estaba vacía y sólo un pensamiento recorría su mente en aquel momento,

Izuku: -(¿Dónde esta Eri?)- Empezaba a preguntarse aquello, mientras se cambio de ropa colocándose una más abrigada pero no en exceso sintió nuevamente aquella presencia la cual desde temprano no era calmada, era tan constante como el tiempo, miró por la ventana y la indefinida distancia lo hacia sentirse aturdido tocandose el cuello con un ligero tic -esto ya sale de mis límites, ¿Porqué tenía que ser ella?, solo es una niña. ¡Maldición! - Izuku golpeó la pared rompiendo parte de la misma que daba a la cocina .

Ochaco por otro lado estaba junto a su maestro y a Mirio en el carro de Endeavor quien les hizo de chófer solo para saber el estado de Izuku.

Endeavor: -Y... ¿Qué tal esta?.-

Mirio fue quien tuvo que hablar ya que Ochaco no parecía tan animada y Aizawa estaba evidentemente molesto.

Mirio: -Parece sano, aunque no quiere saber nada de nosotros.-

Aizawa: _Es increíble, ya ha pasado mucho tiempo y sigue estando así, de esta manera sólo perderá la compostura. Lo mejor para todos será que él herede el One For All y siga su vida.-

Todos quedaron en silencio ante aquello, eso era una acusación y petición fuera de lo normal hasta para Aizawa.

Endeavor: -No creo que él esté mal por querer vivir bien. Sólo a conocido bien y mal, villanos y héroes, caos y paz, si algo en lo que crees fervientemente se derrumba tu conciencia se quiebra al menos un poco, él solo conoce una vida como héroe o como aficionado a ser uno, dime ¿qué fue lo que pensó cuando todos le decían que debía matar para ser un héroe?. Rompieron sus ideales y abandono un sueño, pero yo no sé mucho de esto... Deberían hablar con Toshinori, él es igual de cabeza dura que Izuku.-

Endeavor dejó que el silencio se apoderara del lugar. Ochaco al escuchar esto tomó una decisión inerte y espero a que llegara a su casa para despedirse de todos y entrar a su departamento pero antes de alejarse del carro de Endeavor Mirio la llamo desde dentro del mismo.

Mirio: -¡Uraraka!.- Ella volteo y el chico solo espero unos segundos para hablar. -Disculpa por involucrarte en esto. Eras la única que había visto a Izuku, si que se fue lejos.-

Ochaco: - Él también es mi compañero. No voy dejarlo solo.- Inexplicablemente las mejillas de ella se tornaron un poco rosa, su corazón sintió unos tres grandes latidos antes de que estos fueran calmados y terminó su charla caminando hacia su departamento en el cual su compañera la esperaba dejando que los tres hombres se retirarán.

Por otro lado Izuku ya estaba en el aire debatiendo su avance con el frío intenso de una noche de invierno, fue un largo tiempo hasta para su velocidad volando con impulsos de aire, había llegado a las afueras de otra ciudad donde ya se veía muy tranquila desde los cielos, pocas personas en las calles y mucho silencio.

Izuku: -Sólo debo saber, ¿qué es eso?.-

Aquella presencia le dejaba asqueado, no era algo narutal en sus días, no sabía si tenía que ver con Eri pero su mente ya no podía estar en paz con aquella presencia ahí, su quirk de alerta de peligro se mantenía al máximo. Un bosque alejado de aquella ciudad era en donde residía aquella presencia, Izuku se acercó a este bosque sin cuidado, luces en este se mantenían presentes por todos lados y personas paseaban por aquel lugar cual campamento, no eran muchas personas, alrededor de diez, pero eso no era lo más importante a notar, varios niños estaban en aquel lugar, algunos eran sujetados por los adultos y otros por sogas.

Izuku: -Que demonios...- Los niños son los que desprenden ese abrumador sentido de inquietud en Izuku, no sólo por sus ancias de salvarlos sino por una presencia la cual estos no podían controlar -Que imbéciles...-

Los látigos negros se extendieron desde los dedos de Izuku y arremetieron rápidamente contra los niños sujetando a todos y dejándolos lejos de aquellos sujetos mientras él sólo bajo con calma y camino hacia aquellos sujetos quienes estaban más que alertados de su presencia.

__________________

Imagen creada por Fataladicto


Gracias por leer.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top