Murmullos //Yoonmin.

Sin duda, esta si que no la veían venir, hasta que llegó y les sorprendió a todos ver quien era el que estaba en el estrado en ese momento hablando, dando el discurso de parte de todos los universitarios graduados, pues para todos al parecer Min Yoongi tenia en lugar de un cerebro, una bellota.

—El tiempo vuela tan rápido que nosotros aún sentimos que ayer fue nuestro primer año, parpadeamos y ahora estamos aquí, graduandonos, algunos sentados allá abajo y otros como yo, aquí al frente dando un épico discurso —Yoongi dijo, haciendo reír a muchos desde el estrado —. Muchos de nosotros dejamos nuestra vida adolescente al entrar por las puertas de la universidad, otros, encontramos a alguien que nos hizo madurar de golpe y pensar seriamente en algo que hacer y a lo que dedicarnos para el resto de nuestras jodidas vidas y ¿Saben que? ¡Ser maestro es lo máximo! —exclamó lleno de euforia, contagiando a sus compañeros, quienes aplaudieron desde su lugar y sorprendiendo a Jimin que pensó que Min Yoongi había nacido para ser un líder revolucionario—, tal vez llegue el día en el que nos arrepentiremos de las acciones que tomamos siendo jóvenes, ¿Pero saben que?

—¡¿Qué?! —gritaron sus compañeros con expectación, siguiendo la corriente muy entusiasmados.

—¡Ese maldito día no es hoy! —exclamó, y sus compañeros le siguieron con aplausos y silbidos que delataban lo felices y de acuerdo que estaban respecto a las palabras de Yoongi  —,  vivamos el presente y avancemos con convicción hacía adelante, sin dejarnos llevar por el ritmo agitado de todo lo que nos rodea y nos quiere hacer caer —dijo recordando las palabras con las que su padre se había encargado de destrozar su corazón  —, sin importar todo aquello que nos digan, ¡Somos maestros! Avanzamos  y en el futuro, ejerzamos nuestra carrera con la misma pasión con la que el día de hoy como recién graduados, juramos que seremos buenos guías para aquellos chicos que estarán contando con nosotros. Muchas gracias y felicidades a cada uno de nosotros por este gran logro.

Con aplausos por parte de la audiencia, Yoongi finalmente bajo del estrado y fue caminando a su asiento un poco más calmado de la repentina euforia que lo había atacado al dar el pequeño discurso y el enojo que había sentido unos minutos antes, pues el chico al que le tocaba hablar frente a todos había enfermado y al ser él el segundo lugar en mejores calificaciones le dijeron que debía dar tan siquiera unas cortas palabras de despedida, pero, ¿Cómo Min Yoongi iba a hacer algo tan poco épico para personas que probablemente no volvería a ver en su vida? Con esa pregunta en mente, elaboró un pequeño discurso en menos de 5 minutos y subió para animar a todos sus compañeros.

—Estoy orgulloso de ti —susurró una voz ronca en su oído que en otras ocasiones bien lo hubieran puesto a gemir de puro placer, pero que en esta sólo le lleno de diversión al escucharla.

—Nada mal para ser algo imprevisto, ¿Cierto? —sonrió de lado.

—Eres un presumido, Min Yoongi.

—Soy tu presumido, Park Jimin.

Ambos rieron, mientras algunos compañeros a su alrededor les miraban con ojos de sospecha juzgando algo de lo que ellos no sabían y murmurando cosas de las que nunca se arrepentirian al ser esa probablemente la última vez que los verían.

—Park, se ve como todo un Omega.

—Está tan junto a Yoongi, ¿Será que ha sido él quien a convertido en un suaveton a Min?

—No lo sé, pero al verlos así de juntos, sólo puedo pensar en una palabra.

—¿Es la misma en la que estoy pensando?

—¡Maricas! —dijeron al unísono los que hablaban a sus espaldas, pero no estaban conscientes de que Yoongi  podía escucharlos claramente, haciendo que aquel hueco se hiciera cada vez más grande por cada palabra dicha.

¿Podrían guardar silencio? — Yoongi se sorprendió al escuchar la potente voz alfa de su leoncito  y tal vez en otra ocasión estaría feliz porque le estaba defendiendo, pero en esta, se sentía tan vulnerable y lleno de temor como nunca lo había estado en su vida y pensó que era la primera vez que se sentía de aquella manera —. Estamos prestando atención a lo que dice el decano.

Jimin le guiñó un ojo y se sintió estremecer, sin duda era todo un alfa su compañero y disfrutaba de esa sensación de amor y protección, su alfita desprendía un fuerte aroma que le abrazaba y le hacía sentir fuerte en aquella situación tan desolada en la que su animal interno y él mismo como humano estaban.

—Gracias —susurró Yoongi y Jimin volteo a ver en su dirección con una linda sonrisa, sus ojos ocultos bajo sus párpados unidos en una fina línea en dos medias lunas que le volvían loco y estaba muy consciente de ello por la mirada tan dulce que su lobo depositaba en él.

—No hay de que.

Después de lo que parecía ser una eternidad, los diplomas les fueron entregados y finalmente podían marcharse de ese lugar hacía el local en donde harían una fiesta en el honor a los graduados.

Al salir, se encontró con una gran y grata sorpresa.

Su papi omega y su hermano estaban esperándolo afuera.

—Felicidades por este gran logro en tu vida, hyung —le dijo Hueningkai y él solo pudo estrecharlo entre sus brazos con mucho cariño.

—Tu hermano mayor es muy genial —le dijo sintiendose tan feliz porque su hermano estuviera ahí para él.

—Sí, sigues siendo genial como antes, cuando éramos niños —le dijo con una linda sonrisa.

Y Yoongi recordó como antes de que fueran mayores y tuvieran responsabilidades, Hueningkai le seguía a todas partes y jugaban de todo y tenían sana diversión.

—Es bueno que te hayas graduado, mi niño —pronto el que se encontraba entre sus brazos era su papi —. Felicidades, mi cachorro ya es todo un profesional.

Su padre volteó a ver a Jimin y le sonrió y eso aunque le impacto a ambos, vio a Jimin sonreirle de vuelta a  su padre y su corazón latía sintiendose muy cálido.

—Gracias papi —contestó con una sonrisa en su rostro, mientras daba una vuelta completa con su padre entre sus brazos, pero aunque se sintiera muy feliz, había algo muy importante que faltaba —. ¿Y papá?

—Sabes que es un alfa muy cabezota y le costará mucho acostumbrarse a tu elección de vida y de pareja—dijo su papi con una sonrisa entre apena y divertida —. No vino, pero te envía sus felicitaciones.

Yoongi sonrió aunque doliera aún el como fue tratado por su padre, su corazón se alegro mucho de que parte de su familia lo aceptara.

Luego, a todos se les invito a la fiesta de graduados, su papi y hermano se fueron y el fue obligado a quedarse.

Yoongi no quería quedarse, pero Taehyung, Hoseok, Jimin, Namjoon y otros de sus amigos, habían insistido en que debían quedarse a celebrar de que por fin habían salido del infierno que representaba estudiar en la universidad, antes de empezar el siguiente que sería el de trabajar de lo que tanto habían estudiado.

La fiesta la habían organizado los chicos de años inferiores para ellos y se veía que se esforzaron en conseguir un restaurante que valía la pena, al ser uno de los restaurantes cuyo dueño era Min Daehyung, el padre de Min Yoongi considerado el emperador de todo un imperio hotelero y de restaurantes de fama mundial enorgulleciendo así a toda Corea. Todos estaban muy felices, pero Yoongi no podía siquiera contagiarse del espíritu festivo de los demás y Jimin podía verlo claramente, su lobo estaba triste y de alguna forma él podía sentir ese pesar y no le gustaba, Yoongi hubiese sido feliz si su padre le hubiese felicitado en persona.

Todos bebían, comían, hacían bromas y se reían de ellas, bailaban, se besaban discretamente (los que pareja eran) y se divertían, pero su Yoongi no. Su Yoongi estaba triste, no bebía, comía, no hacía bromas ni se reía de las que contaban los demás, no le besaba ni se divertía y por un momento pensó que no quería pasar toda su vida de esa forma y luego, los recuerdos de Yoongi amandole, respetandole y sobre todo protegiendo de él cuando más lo necesitó llegaron a su mente; no dejaría a su compañero sólo y sintiéndose de esa forma tan angustiante, él estaría ahí para su persona especial y le haría fuerte tanto como su lobo le había hecho, porque ese era el verdadero significado de Compañeros.

—No te dejaré solo, Yoonnie —le dijo al oído y obtuvo una radiante sonrisa de su parte.

—Gracias cariño.

Aunque el dolor por las palabras de su padre no hubieran pasado, Yoongi sabía que no estaba solo y que su padre alfa algun día tendría que aceptarle por ser tan cual era y por amar a una persona tan grandiosa como Jimin.


NOTA.

Estaba pensando en hacer un Lunes, Martes, Miércoles de Stream compañeros jajsjjsjsjaja casi nadie la lee  ni comenta 😢👉👈

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